Partida Rol por web

Llegáis a una nueva sala mientras la puerta se cierra tras vosotros. En ella veis que a vuestra derecha hay una gran puerta que se dirige hacia el interior de los laboratorios y que está completamente cerrada. Sobre ella hay tres luces que permanecen completamente apagadas y la propia puerta tiene en ambos lados tubos de luz sin encender.

En la pared en la que os encontráis, la que daba a la estancia 1, hay una mujer atada con cuerdas contra la pared y con varios cables injertados en su cuerpo. Parece estar completamente dormida.

La zona norte de la estancia está separada por un gran cristal y su interior permanece a oscuras.

Por último veis un interfono como el de la anterior sala y una gran máquina expendedora.

Al entrar en la sala la examino con cuidado, para comprobar todo lo que podemos ver fácilmente. Me quedo unos instantes observando a la mujer atada y con cables injertados en su cuerpo, para a continuación acercarme y comprobar si tiene pulso y realmente está dormida o si está muerta. 

- ¿Alguna idea, Louis?

Una vez comprobado su estado voy a rebuscar en la habitación, a ver si hay algo que sea de utilidad.

Nos hemos quedado solos por lo que creo que lo mejor será asegurar la zona y, por ahora, no pulsar ningún botón. No quiero que nos encontremos con problemas ni rayos como el que impactó en la cría -respondí ante la pregunta de John, mi único compañero en este lugar -cuando acabemos debemos ver si podemos salvar a la mujer, aunque no me fío de nada de lo que hay aquí. Por cierto, tu cara me suena de algo ¿en que trabajabas? 

Tras mi pregunta comencé a buscar por toda la habitación. 

Mientras rebusco en el lugar asiento con un leve gruñido a los comentarios de Louis.

- De todo un poco, aquí y allá. ¿y tú?

Pertenezco a un nuevo grupo de la policía, especialistas en la prevención de delitos y en el uso de nuevas tecnologías. Sin embargo la falta de fondos hizo que me presentara a estos experimentos -respondo pese a la vaga respuesta de John.

Una media sonrisa aparece en mis labios mientras habla. Finalmente me giro hacia ella y digo:

- Yo soy de la vieja guardia, fuerza bruta y esas cosas. Sargento en la Comisaría 13 de Huang. Una de las duras.

Después, sigo a lo mio.

Una voz resuena por toda la sala, una voz que ya conocéis de sobra, esta vez sin ningún tipo de distorsión robótica. Distinguís claramente que quien os habla es una mujer.

Espero que las pocas horas que lleváis en este laboratorio sean de vuestro agrado. Podéis creerme cuando os digo que vosotros estáis aportando más por la ciencia que cualquiera de esos burócratas o engañabobos que reinan en las ciudades. Gracias a vosotros lograré desvelar numerosos enigmas, ascenderé un nuevo escalón en la comprensión de la ciencia. Y la ciencia, como es obvio, lo es todo. Es el cosmos y el vacío, la tierra y el cielo, es lo que explica vuestra necesidad de comer, vuestra agresividad o vuestro impulso para amar. Y también es la causa de que seáis como sois, de que penséis como pensáis, de que actuéis como actuáis. La ciencia es la llave que abre todas las puertas y gracias a vuestra aportación aquí estaré más cerca de completar su construcción.

La voz se detiene, dejando un silencio triunfal para que reflexionéis unos segundos. Dicen que la noche altera las acciones de la gente, que hace que vuestras emociones tiendan a los extremos. Veremos si esto es verdad.

Las palabras del creador del laboratorio me hacen estremecerme -¿Que clase de colgado ha creado esto? ¿que es lo que quiere? Joder, esto es una verdadera locura -me llevo las manos a la cabeza, confundida y asqueada.

Así que la comisaría 13 de Huang, he escuchado que allí el trabajo era bastante arriesgado -respondo tratando de mitigar un poco el efecto del discurso.

Me encojo de hombros mientras una media sonrisa asoma a mis labios ante el primer comentario de Louis.

- Un colgado con poder.

Respondo simplemente, antes de hacer un gesto con la mano para quitar importancia a su comentario sobre Huang.

- Se trabaja a la antigua, nada más.

Después continúo con mi búsqueda por la habitación.

La mujer parece estar viva, aunque inconsciente. Sobre ella se ve una cita "el cuerpo humano es un buen conductor de la electricidad". A su derecha veis una palanca.

John sigue buscando y en una oficina llena de mesas de oficina encuentra dos máscaras de gas, una ración y un hacha. 

Justo en ese instante un agujero se abre bajo sus pies pero, con un ágil salto, logra evitar la caída y el hueco vuelve a cerrarse con la misma velocidad con la que se ha abierto.

Sin embargo, mientras trata de volver hacia Louis, un nuevo agujero surge bajo sus pies y esta vez no es demasiado rápido, cayendo por él con todo lo que acaba de recoger.

Al rebuscar encuentro cosas interesantes, por lo que vuelvo hacia Louis.

- Mira lo que he encon... joder, casi me mato.

Digo mientras me alejo de la zona del suelo que se abrió bajo mis pies, mirando hacia atrás.

- Has visto es.... ¡aaaaaargh!

Es lo último que se oye mientras un nuevo agujero me traga.

Llegáis a una nueva sala mientras la puerta se cierra tras vosotros. En ella veis que a vuestra derecha hay una gran puerta que se dirige hacia el interior de los laboratorios y que está completamente cerrada. Sobre ella hay tres luces que permanecen completamente apagadas y la propia puerta tiene en ambos lados tubos de luz sin encender.

En la pared en la que os encontráis, la que daba a la estancia 1, hay una mujer atada con cuerdas contra la pared y con varios cables injertados en su cuerpo. Parece estar completamente dormida.

La zona norte de la estancia está separada por un gran cristal y su interior permanece a oscuras.

Una mujer se encuentra en la estancia, buscando algo en ella cuando llegáis.

Por último veis un interfono como el de la anterior sala y una gran máquina expendedora.

Un pequeño grito que no llegó a tener sonido intentó salir de la garganta de Lisa, pero se tapó la boca a tiempo para no hacer ruido. Aquella mujer en la pared le había sorprendido y se quedó mirándola un par de segundos antes de girar la cabeza y observar el resto de la estancia. Le hizo un gesto a Xin para que pasara tras ella y entonces se dió cuenta de la presencia de la otra mujer que estaba buscando.

- ¿Hola? - le preguntó con curiosidad desde su posición

Hola, mi nombre es Louis ¿quienes sois vosotras? -digo mirando a las dos mujeres que acaban de entrar -¿que ha ocurrido? Estaba con un compañero pero una trampilla se abrió bajo sus pies y lo he perdido.

Lisa saludó con un gesto de cabeza. - Yo soy Lisa y ella es Xin. Estábamos en la habitación de al lado y fuimos atacados por unas bestias, hemos salido muy mal paradas... - dijo la joven, mostrando una de las heridas que los lobos le habían hecho - No sé qué ha ocurrido aquí, no teníamos contacto con ninguna otra sala. Estábamos con más gente, pero en el ataque huyeron todos a otra sala, dejándonos abandonadas a nuestra suerte. -

- ¿Conoces... conoces a la mujer que está ahi colgada? Me da escalofríos. A parte de eso... ¿podemos ayudarte? -