Partida Rol por web

Pues no nos quedan puertas por abrir... mierda. Dice Wulf mientras niega con la cabeza.

Pues chicas, o pensamos un plan sutil, o simplemente comenzamos a poner las cosas patas para arriba.

Lo cual me apetece mucho en este momento.

Aun quedan puertas por comprobar. Tengo un plan, Wulf, tienes ganas de juerga, ¿no? Pues empieza a meter caña, ya que yo no lo he conseguido... hazlo tú. Nessa y yo nos encargaremos de abrir todas las puertas, incluso las de emergencia, podríamos encontrarnos con una sorpresa...

Parece totalmente decidida a encontrar a Talon.

Nessa no puede ocultar su cara de susto al escuchar a Megan. Alza una mano para retenerlos a los dos a su lado, pero sin encontrar una idea mejor, cierra la boca y los suelta, suspirando resignada y negando con la cabeza.

Al final vamos a morir todos, verás...

Wulf enarca una ceja y suspira, para después, encogerse de hombros y negar con la cabeza.

Bueno. Si queréis fiesta, creo que tendréis fiesta al fin y al cabo, ¿no? Dice con una sonrisa diabólica mientras os mira.

Ahora, preparaos. Elegid una puerta, y cuando estéis en frente de ella, me hacéis una señal y me pongo al lio, ¿ok?

¿Sólo podremos revisar dos puertas más entonces?

Frunce el ceño y mira a Megan. Bueno... era mejor eso que nada. Y con suerte, podrían revisar más puertas después de las primeras sin que llegase a acabarse la "fiesta".

Suspirando, se apoya en la barra, de espaldas a esta, delante de la puerta de la izquierda (la de la parte superior), esperando a que los camareros estén lo suficientemente distraídos como para subirse a la barra y colarse dentro con una voltereta hacia atrás sobre la barra.

Espera a que Megan esté preparada y asiente con la cabeza a Wulf.

Megan se pone en la puerta situada a la derecha que ya abrió... si no ve nada irá corriendo a la otra puerta. Pero espera que tengan suerte.

Se coge el móbil del bolsillo de la cazadora y se lo enseña a Nessa: Si encuentras algo hazme una perdida, yo haré lo mismo.

Mira a Wulf entonces y asiente con la cabeza... preparándose para saltar la barra en cuanto empiece la juerga.

Wulf hace una leve señal con la cabeza cuando estáis frente a las puertas y os sonrie.

Después, veis como marca un número de móvil, o envia un rápido mensaje, no podéis verlo bien desde donde os encontráis, pero tras unos segundos, la hecatombe, la debacle total.

Vuestros dos amigos, los cuales estaban bastante entretenidos con dos chicas, comienzan a levantar el tono de voz. Un poco, después un poco más, hasta que al final, comienzan una especie de pelea, a la cual se unen, no sabéis por que, tres o cuatro personas más.

Los de seguridad corren hacia ellos y los camareros, salen de la barra para intentar frenar la lucha que cada vez se haría más grande si no la detenían.

Y ese ha sido vuestro momento. Ambas saltáis por la barra y os metéis en las puertas que estabáis custodiando...

Pero allí no hay nada.

Salis rápidamente de allí y veis que la pelea está controlada.

Wulf os mira y niega con la cabeza mientras que los de seguridad se llevan a los dos chicos para afuera, por la puerta de seguridad. Al cabo de unos minutos, dos de los seguratas regresan a la sala.

Mierda.

Dirigió la mirada a la última puerta... la última esperanza. O eso o Talon no estaba allí. Chasquea la lengua y se dirige delante de aquella puerta con Nessa.

Ábrela con tu poder telequinético molón... y veamos desde aquí qué hay, ¿no? Si hay algo nos colamos, aunque sea mandando a los camareros a tomar por culo.

Nessa asiente, apoyandose con la espalda en el trozo de pared que hay entre las dos puertas de emergencia, apartando en su camino a un par de tíos que observaban el panorama apoyados en esa pared.

Perdón, estoy cansada.

Sonríe con amabilidad inusitada en ella y se apoya en la pared. Espera a que Megan se ponga en posición para poder ver qué hay dentro de la puerta de emergencia por la que no han entrado ni saludo seguratas aquella noche y cierra los ojos, concentrándose para abrir el pestillo de la puerta con su poder "telequinético molón".

La puerta se abre de par en par al mismo tiempo que una alarma suena dentro de una de las oficinas donde habían revisado.

Miráis por la puerta y podéis ver un callejón oscuro, donde un par de parejas se están dando el lote y las cuales se quedan asombradas cuando la música estridente les llega a sus oídos como un rayo.

Uno de los seguratas se acerca a la puerta y mira hacia todos lados, descolocado.

Después, la vuelve a cerrar y la alarma se apaga.

Nessa mira a Megan, confundida, sin entender. ¿Porqué había sonado una alarma? ¿Y porqué no había sonado allí mismo? Niega con la cabeza y se encoge de hombros. También mira a Wulf, para tenerlo localizado. Al final, lanza un rápido vistazo a Megan y le indica con la mirada la otra puerta de emergencia. Acto seguido, concentra su poder en intentar abrir la cerradura de la última puerta que les queda por mirar.

¿Sería posible que guardaran a Talon en la última puerta en la que iban a mirar?

¿¡Para qué coño meten una alarma allí!? - pregunta entrecerrando los ojos, pensando. - ¿Y por qué suena allí? - pregunta mirando a la puerta que sonó.

Mira al guarda con una ceja alzada, ¿descolocado por la alarma o por qué la puerta se abriera por qué sí?

Si aquella puerta da al callejón podemos salir del local e ir a dar la vuelta, ¿no? Quizás hay unas escaleras de emergencia o algo. - comenta mirando a Nessa, pero lo de la alarma dentro de una de las salas revisadas la tenía mosca.

Nessa intenta abrir la puerta con su mente mientras Megan intenta entender lo de la alarma.

La chica se concentra como siempre, sin embargo, parece que sus ondas kinéticas rebotan contra una especie de barrera protectora, la cual le impide utilizar sus poderes contra esa puerta.

Wulf se da cuenta enseguida de lo que está sucediendo y se acerca a ellas con semblante serio. Parece que al lobo tampoco le ha gustado lo que ha pasado.

Cinco puertas y en la última es donde probablemente esté Talon.

La ley de Murphy vuelve a hacer su aparición.

Frunce el ceño.

A la mierda. Vamos a entrar a saco, abrimos la puerta y entramos, y quien nos toque le damos una ostia que lo mandamos al otro barrio, y se acabó.

Suelta sin más, señalando la puerta que queda.

Nessa traga saliva y mira alrededor. ¿Entrar a saco? Quizá podrían entrar... pero... ¿no entrarían todos los seguratas detrás después? Eso si no se les une algún que otro daimon más... Además... eso de que hubiera alguien que bloqueara sus poderes estaba empezando a molestar. Primero no puede leer mentes y ahora esto...

Frunce el ceño y se aparta un poco, dando la espalda a Wulf y Megan para observar si viene algún miembro del personal del pub mientras ellos hacen lo que tengan que hacer. Si abrir la puerta era cuestión de fuerza bruta, era mejor dejarles el trabajo a ellos.

Tengo una idea. Dice el lobo sonriente. Pero es chunguilla.

Bueno, no es difícil de hacer, pero el problema es que tras realizarla, estaréis solas ante el peligro. Yo puedo intentar abrir la puerta de golpe y...

Un momento...

¡Un momento! Exclama Wulf mientras os detiene con sus manos. En esa puerta... los de seguridad han metido a los que causaron problemas y estaban borrachos... ¿no? ¿No?

Ahora el chucho sonríe.

Espero que seáis buenas actrices.

Megan se queda mirando a Wulf y arquea una ceja.

No te sigo...

No tenía ni idea de lo que estaba proponiendo.

Nessa mira a Wulf con cara de "ni muerta". Luego mira a Megan que parece no pillarlo. Mira después a la puerta de nuevo... mira nuevamente a Wulf. Suspira, coge a Megan de la mano y la lleva hasta la barra.

Es sencillo... tú, haz como que bebes y te emborrachas y después... nos peleamos.

Cuando el camarero se acerca, le pide un vodka negro con limón. Luego se dará prisa en encontrar una planta cerca para ir derramando el líquido poco a poco. Si tenían que hacerse pasar por borrachas para que su pelea estuviera justificada, mejor no levantar sospechas.

¿Porqué me meto siempre en estos lios?

Aaah... ya lo pillo... - arquea una ceja y mira a Nessa - ¿¡Qué!? ¡No voy a pelearme contigo! - sentencia de repente.

Ya me he peleado suficiente con ella...

Y en este momento la mejilla le dio un punchazo... pero al ver que ella se dirige a la barra a pedir, Megan la mira de reojo y se pide para ella un tequila con naranja... no está segura del todo.

Pero empiezas tú.

Wulf se posiciona junto a la barra, sin dejar de mirar a los seguratas que van y vienen por el local.

Las dos podéis ver como se coloca sus gafas de sol, seguramente, sus ojos no serán visibles para la gente normal en este momento. También lo veis olisquear el aire, buscando algún tipo de aroma que le de alguna pista, pero parece que nada descubre.

En ese momento, Wulf gira su cabeza hacia vosotras, y sonríe.

Cuando queráis, chicas.