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Juramentos de la Marca de los Jinetes - Amanecen días rojos

Capítulo 4: Incursores del Río

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10/06/2019, 12:57
Narieth Linduin

Bien, Eothred, después de lo que has soportado por nosotros, sería bien merecido que te ofreciera mi hombro para apoyarte en él. 

Digo al jinete con una sonrisa, tranquilizada al ver que sus heridas no se lo han llevado, y que puede sostenerse en pie, aunque sea con dificultad. Lo tomo por debajo de los brazos para incorporarlo, y me paso su brazo izquierdo por encima de mis hombros. Su cuerpo es recio y pesado, pero no estoy en posición de quejarme en absoluto y lo ayudo a caminar con paciencia.

Cuando emprendemos nuestro camino hacia el campamento de Eógar, hablo con la dama Esfled, que me había reconocido como séquito del Rey.

- Mi nombre es Narieth Linduin, dama Esfled. Y aunque mi hogar se halla en el Bosque Dorado a muchas millas al norte, ahora sirve en la corte de Meduseld al Rey de Rohan. En efecto, fueron Thengel y Morwen quienes nos enviaron con tal tarea. Por ahora hemos podido contar con el beneplácito de Cenric para la tregua. O, al menos, no se ha opuesto frontalmente. Esperemos que su esposo preste oídos a lo que tenemos que decir, y que también de una oportunidad a esta nueva intención de paz y calma en la Marca. 

 

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16/06/2019, 20:19
Barald Viento de Lanza

-Bueno, creo que deberiamos ponernos en marcha. Comenta el beornida mientras monta trabajosamente en su montura a causa de la herida.

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25/06/2019, 06:00
Director

Luego de que Esfled le dice a Narieth que convencer a Cenric no es una hazaña menor, emprendéis la lenta marcha hacia el campamento dunlendino, que es donde dejasteis a vuestras monturas. A pesar de tardar más tiempo que el que habíais gastado durante la persecución de Caswelun debido a las heridas y al cansancio sufrido, finalmente regresáis junto a vuestros caballos y tras montar en ellos, con Lady Esfled subiendo a la grupa del palafrén de Narieth, os encamináis hacia el exterior del bosque avanzando con rumbo norte.

Tras salir del Bosque de Derne justo cuando el sol empieza a acercarse al horizonte, comenzáis a galopar por el llano terreno cubierto de hierba en dirección oeste sabiendo que llegaréis al campamento del Mariscal poco antes del anochecher. Sin embargo, no hacéis el viaje solos ya que no tardáis en toparos con una patrulla cuyos tres jinetes abren los ojos con sorpresa al ver a Esfled, se llevan el puño al pecho mientras se inclinan hacia ella a modo de reverencia y se unen a vuestra comitiva para así brindaros protección adicional y aseguraros de que lleguéis a salvo.

Cuando el sol está a punto de ocultarse tras el horizonte y lanza sus últimos rayos de luz, avistáis a la distancia el campamento de Éogar, el cual comienza a iluminarse debido a las diversas fogatas que encienden los guerreros. Al llegar a éste, justo cuando la noche comienza a caer, avanzáis hacia la tienda del Mariscal mientras que tanto centinelas como jinetes os miran con respeto y se inclinan ante la presencia de la Señora del Folde Oeste. Una vez frente a la tienda, bajáis de vuestras monturas y mientras que un par de hombres se las llevan para alimentarlas y darles de beber, vosotros ingresáis en el pabellón.

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25/06/2019, 06:01
Éogar, hijo de Halwin

Gracias a la iluminación que brindan media docena de candelabros de varios brazos, veis que en torno a la mesa central se encuentran Éogar, Mildryd y tres hombres cuyo aspecto denota que son guerreros veteranos y personas de confianza del Mariscal. Al notar vuestra presencia, todos levantan la mirada y esta pasa rápidamente de vosotros hacia Lady Esfled.

-Todos excepto mi esposa, fuera -dice Éogar con tono autoritario aunque podéis notar cierto brillo en sus ojos, incluso os arriesgaríais a decir que está intentando contener el llanto- Mildryd, ordena que toquen los cuernos y encárgate de que todas las patrullas regresen -luego de hablarle a la escudera, se gira hacia uno de los guerreros- El resto ocuparos de que los enviados de Meduseld coman y tengan un lugar adecuado donde dormir, también buscad a alguien que trate sus heridas -por último, Éogar centra su mirada en vosotros- Id a descansar, mañana hablaremos.

Mientras que el Mariscal mantiene su semblante estoico, Mildryd se marcha a paso rápido al mismo tiempo que uno de los capitanes os pide que le sigáis. Una vez fuera de la tienda, escucháis que Esfled lanza el grito ahogado de sorpresa seguido de un sollozo y poco después por una alegre risa, desde el rabillo del ojo alcanzáis a ver como Éogar y su esposa están entrelazados en un profundo y apasionado abrazo.

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25/06/2019, 06:02
Director

Mientras que los cuernos resuenan en varias partes del campamento y estos son respondidos con toques que provienen de lugares más lejanos en torno al bosque de Derne, vosotros seguís al hombre de Éogar llegando luego de una breve caminata a una tienda lo suficientemente grande como para que todos vosotros podáis descansar juntos. Una vez allí, os libráis del peso de vuestras armaduras y os tomáis un tiempo para descansar aunque no tardáis en ser interrumpidos por una escudera de poco más de treinta años, quien os dice que uno de los capitanes la ha enviado para revisar vuestras heridas y que no tarda en ponerse manos a la obra, empezando por Eothred y Barald y siguiendo con el resto. Al cabo de un tiempo, la escudera termina con su tarea y se marcha.

Notas de juego

Todos: Este turno es más que nada para que habléis entre vosotros ya que la charla con Éogar y Mildryd será mañana. A menos que queráis hablar y/o preguntarle algo a los jinetes del campamento (en ese caso hacedlo ahora), en el próximo turno haré que cenéis, os retiréis a dormir y pasaremos al día siguiente.
También aclaro que Dengal, Eothred y Heruwyn siguen cansados y que la herida de Barald ha sido tratada (durante el descanso recuperará más puntos de Aguante).

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25/06/2019, 10:18
Barald Viento de Lanza

Después de acompañar a la dama hasta el abellón principal, Barald se siente muy cansado las heridas y los días a caballo han hecho mella en su recia constitución.

Una vez de limpias y tratadas las heridas, el beornida se siente lo bastante reconfortado como para ir en busca de sus compañeros, -Amigos mios hoy hemos hecho algo bueno por la Marca, tomemos una jarra de cerveza para brindar por la vida ya que milagrosamente todos hemos salido más o menos indemnes y con un poco de suerte mañana el señor del Folde Oeste nos mirará con mejores ojos.

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26/06/2019, 22:48
Aldor

Con el agotamiento del combate y la lentitud de los heridos, volvemos a los caballos que se encontraban en el campamento dunledino. Ayudo a Eothred y Heruwyn primero a subir a sus monturas, pues eran los más heridos y, luego ayudo a Dengal a subir a su caballo. Acto seguido me acerco a Orlin y le acaricio el cuello y apoyo mi frente a la suya:-Hoy no ha sido un buen día.-le digo en voz baja para no asustar a la montura. De un impulso subo a la silla y guío a Orlín para salir del bosque y volver al campamento de Éogar. 

Al llegar allí los hombres de Éogar nos saludan con respeto y se inclinan ante la señora del Folde Oeste. Desmontamos frente a la tienda del Mariscal y un par de soldados ayudan a bajar a Lady Esfled del jamelgo de Narieth. Una vez todos hemos desmontado unos hombres se llevan a las monturas para darles de comer y beber y entramos en la tienda. Allí estaba el estoico Éogar con Mildryd y su guardia personal. A la orden del Marsical los hombres salen fuera y ordena el regreso de las patrullas, que nos preparen una tienda con comida y bebida y que atiendan nuestras heridas. Una vez descansemos al día siguiente hablaríamos. No había mucho más que decir he hice una reverencia ante las órdenes del Mariscal y seguimos al soldado hasta nuestra tienda, donde pudimos quitarnos nuestras armaduras y al cabo de un rato vino una joven escudera para tratar las heridas. 

Tras irse la joven Barald empezó a hablar y estaba optimista por que nuestro éxito favorecería que Éogar nos escucharía, al menos:-Si Lady Esfled intercede puede que tenga una mejor postura a la hora de escuchar la propuesta del Rey.-dije sentado en un camastro de paja:-Tendremos que exponer muy bien la propuesta de Thengel y que el Mariscal Cenric ha dado su aprobación. Esperemos que al ver la predisposición de su supuesto "rival" al cese del conflicto, Éogar tenga las mismas intenciones. Pero todo eso lo veremos por la mañana, por ahora descansemos.-terminé pesadumbrado:-Todos lo necesitamos.-y me tumbé en el camastro. 

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27/06/2019, 12:16
Narieth Linduin

Contra todo pronóstico, todo había salido bien. O, al menos, tan bien como se podía esperar dada la situación. 

Eogar se había reunido con Myldrid, y la lógica dictaba que Eogar estaría agradecido a la compañía enviada por Thengel, y que se sentiría inclinado a acceder la petición que portaban. Además, Esfled seguramente también sería partidaria de complacer a los compañeros.

¿Pero qué había de Myldrid? ¿Sentiría ella amor por Esmund? Y si no era así ¿vería con buenos ojos unirse a él en matrimonio para ayudar a la paz de la Marca? Lo que Eogar permitiera o no se vería mañana, pero estaría bien saber cuál era la opinión de Myldrid sobre su papel en todo esto. A fin de cuentas, si ella se negaba, todo podía estar perdido.

Narieth pasea por el campamento, viendo el estado de los jinetes, que a simple vista parecen más relajados tras haber recobrado a la Dama Esfled de manos de los dunledinos. Busca con la mirada a Myldrid, y la encuentra en el círculo exterior mirando al horizonte, oteando en busca de las patrullas que van retornando poco a poco debido a su llamada. 

Es de noche, pero veo que las gentes de Rohan tenéis una mirada capaz de penetrar la oscuridad. No sé si amáis las estrellas tanto como lo hacemos los elfos, pero en este tiempo entre vosotros he aprendido que odiáis a los sirviente de la Sombra como nosotros.  Es buen asunto que vuestra destreza no se vea mermada por la noche, cuando los trasgos y otras criaturas innombrables se arrastran en las fronteras. 

Espero unos segundos junto a Myldrid, observando una de las últimas parejas de exploradores acercarse a las hogueras del campamento. 

Quizás me adelanto a los acontecimientos, pero mañana discutiremos el encargo que nos asignó el Rey Thengel, y os concierne a vos y vuestro corazón, y el papel que podéis jugar en fortalecer a Rohan. Donde los Mariscales pelean por asuntos del pasado, vos y Esmund podéis ofrecer esperanza para el futuro. 

Observo su rostro al nombrar a Esmund, viendo si los colores acuden a sus mejillas, o alguna sorpresa ilumina sus ojos profundos.

¿Recordáis al capitán del Folde Este? ¿Es ese recuerdo amable y cálido, o distante y frío como un pasado dejado atrás?

 

 

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01/07/2019, 14:59
Dengal

La voz dura de Eogar al dar las órdenes a sus hombres escondía cierta mella en su espíritu al ver a su esposa, había pasado tanto tiempo alejado de ella y sin saber cual pudiera ser su destino y era entendible que tratara de disimular su congoja, pero al dejarlos solos, pudimos darnos cuenta de la mezcla de sentimientos cuando rompieron en llanto. No podía caminar demasiado, estaba bastante agotado por la pelea y la persecución, por lo que esperaba que el trecho hasta las curaciones sea corto y nos esperase algo de comer y beber, y un lugar donde dormir claro.
Al sentarme de forma desgarbada para que no traten las heridas no noto que quien será la curandera es una escudera, no puedo dejar pasar la oportunidad, de tantas vicisitudes que pasamos, creo que puedo inflar el pecho en alguna que otra ocasión, por ejemplo en esta.

-Te aseguro que a pesar de las heridas, soy un diestro peleador, deberías ver cómo quedaron los enemigos, je. Pero mejor que espadachín, soy un trovador, si quieres a modo de pago por las curaciones puedo cantarte una deliciosa canción- le digo a la escudera.

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02/07/2019, 14:20
Eothred

Eothred paso la pierna por encima del caballo, lentamente. La herida, que ya dolia con fuerza, se terminó de reabir. Palpitaban las sienes, el sudor frio perlaba la frente y terminó perdiendo el equilibrio y dandose de bruces con el suelo, más por la fatiga que por el dolor. Empezó a maldecir mentalemente a los nobles, y la maldita eficacia de su grupo. ¿Porqué, de entre todos los grupos, solo ellos habian encontrado a la mujer? ¿Porqué los nobles no se ponian de acuerdo y luchaban todos juntos?

Lo acostaron en una camilla y le dieron sopas de cebolla.

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11/07/2019, 04:54
Mildryd, hija de Galwin

Mildryd permanece con los ojos clavados en el horizonte aunque cuando llega una patrulla, los examina con la mirada y se toma un instante para pensar, seguramente haciendo un recuento de quienes todavía no hay regresado.

-Los orcos y los huargos siempre son una amenaza pero no la más importante -te responde sin desviar la mirada- Aquí el verdadero peligro son los saqueadores de las Tierras Brunas, y a pesar de nuestros mejor esfuerzos cada año tenemos que lamentar la pérdida de las buenas personas que mueren en esos ataques -agrega con un tono de voz que denota ira pero no hacia ti sino hacia los dunlendinos, algo entendible ya que hace años ella perdió a su familia en uno de esos saqueos.

Sin embargo, cuando mencionas a Esmund y que ella tiene algo que ver con el encargo del Rey, la escudera se gira rápidamente y clava sus ojos en ti. En su mirada notas sorpresa y cierta confusión aunque también llegas a percibir una fugaz y sutil sonrisa que desaparece enseguida y un brillo en sus ojos, como si tus palabras le hubieran hecho rememorar un viejo recuerdo.

-Si, recuerdo a Esmund pero ¿Qué tenemos que ver él y yo en todo esto?

Antes de que puedas responder, un jinete llega al galope.

-¡Mildryd! Eofan ha tenido problemas -le dice el rohirrim- Su grupo se topó con unos huargos y aunque lograron sobrevivir, dos de ellos están heridos y además perdieron dos caballos.

-Déjame adivinar, ese maldito terco entró en el bosque sin tomar las precauciones necesarias y le atacaron por sorpresa -dice la escudera y el jinete le responde con una silenciosa afirmación- Bah, da igual, hay que traerlos de regreso antes de que la sangre atraiga más depredadores. Vosotros tres -le ordena al último grupo que regresó- Volved a montar y venid con nosotros, hay que buscar a esos idiotas.

Mientras los jinetes vuelven a subir a sus caballos, Mildryd se gira hacia ti

-Ya hablaremos mañana, todavía tienes que decirme de que va todo eso.

Sin nada más que agregar, la escudera sube de un salto en su yegua de pelaje castaño y se marcha al galope con el resto de los jinetes, alejándose poco a poco de tu vista.

Notas de juego

En esta ocasión no pasa nada pero para la próxima recuerda no tomarte tantas libertades ya que los PNJs están exclusivamente bajo mi mando xDD. O sea, tranquilamente no podrías haber encontrado a Mildryd o que esta esté bastante ocupada como para dedicarte tiempo.

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11/07/2019, 05:32
Director

-Ya tendrás tiempo para cantar cuando no estés tan agujereado y hayas podido descansar. No queremos que falles una nota y des una mala actuación por una súbita punzada de dolor -le dice la escudera a Dengal con una sonrisa y un ligero tono jocoso.

Después de un breve tiempo, un grupo de rohirrim se acerca a vosotros y os entrega a cada uno una escudilla de estofado y una jarra, además dejan junto a vosotros un pequeño barril de cerveza y una botella de hidromiel, esta última no solo para que la disfrutéis sino también para adormecer un poco el dolor de los heridos. Aunque la cena no es tan buena como la que os darían en una posada, es bastante aceptable para un campamento militar y está más que claro que os dejaron las mejores porciones como recompensa por vuestra actuación, tal y como atestiguan las tiernas porciones de carne y las abundantes hortalizas.
Luego de disfrutar la comida y la bebida y pasar un tiempo charlando entre vosotros, os recostáis e intentáis conciliar el sueño, el cual no tarda en llegar debido a la ajetreada jornada.

A la mañana siguiente os despertáis poco después del amanecer e inmediatamente unos jinetes os traen un frugal desayuno que no tardáis en devorar. Poco después de terminar de comer, un guerrero bien equipado al que reconocéis como uno de los capitanes de Éogar ya que lo habéis visto el día anterior se acerca a vosotros y os escolta hacia la tienda del Mariscal aunque no ingresa sino que se queda fuera.
Al ingresar al pabellón, veis que Éogar se encuentra de pie en el lado opuesto de la mesa central, ahora despejada de mapas pero ocupada por siete voluminosas bolsas de cuero, a su izquierda se ubica Mildryd también de pie y a su derecha pero un poco más alejadas de la mesa hay dos sillas, una ocupada por Esfled y otra por un muchacho de unos diez años, de cabello rubio, ojos claros y bastante alto y ancho de hombros para su edad, incluso diríais que cuando llegue a la madurez será más imponente que el Mariscal. Todos menos Barald, Galadan y Narieth os dais cuenta de que el joven es Erkenbrand, el primogénito de Éogar y Esfled y el heredero del Folde Oeste.

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11/07/2019, 05:34
Éogar, hijo de Halwin

Una vez que os ubicáis junto a la mesa, Éogar os habla.

-Espero que hayáis descansado bien ya que por lo que me ha comentado mi esposa, tenemos asuntos serios que tratar -a pesar de estar mucho más relajado que cuando lo visteis por primera vez, el tono del Mariscal sigue siendo directo, tajante y algo hosco- Sin embargo, antes os merecéis una recompensa por haberla rescatado -agrega señalando con la mano abierta hacia las siete bolsas que hay sobre la mesa.

Cada uno de vosotros tomáis una de las pesadas bolsas y al abrirlas veis que están llenas de monedas de oro y plata, además de anillos y brazaletes de oro. Sin lugar a duda, una recompensa más que acorde con vuestras proezas.

-Bien, se que traéis una propuesta del Rey Thengel y que ésta involucra la paz con Cenric ¿pero porque debería hacer una tregua con ese traicionera serpiente de lengua bífida cuando lo que realmente se merece es una espada en las entrañas? -la voz del Señor del Folde Oeste se va cargando cada vez con más furia pero luego de una rápida mirada hacia su esposa y un suspiro, su tono se relaja- Aunque en otro momento os hubiera echado de inmediato, Esfled me ha pedido que os escuche así que hablad sin omitir ningún detalle ¿Qué propone el Rey?

Notas de juego

Resumen del Encuentro:
-Objetivo: Al igual que con Cenric, vuestra misión no es llegar a un acuerdo definitivo sino convencer a Éogar para que acepte la propuesta del Rey y que con ello acceda a negociar un cese de hostilidades.
-Ventajas: Todos debéis hacer una tirada de Perspicacia a NO 14 (12 en el caso de Aldor) para determinar cuántos dados adicionales ganáis (con un fallo no pasa nada, con un éxito ganáis uno, con un gran éxito dos y con un éxito extraordinario tres). Estos dados pueden usarse para aumentar la puntuación de una habilidad aunque solo un dado por tirada.
-Presentación: Al ya haber sido presentados, esta fase se omite.
-Interacción: Todos podéis hacer como máximo una tirada de una habilidad social por turno. Las habilidades disponibles son Impresionar (para convencer mediante el carisma o usar argumentos directos), Inspirar (para usar argumentos emocionales), Persuadir (para exponer argumentos racionales) y Cantar (para citar canciones o historias que refuercen vuestras opiniones), Acertijos y Cortesía no servirán en este Encuentro. Tened presente que cada tirada fallida que consigáis reducirá la Tolerancia del Encuentro y que una vez que esta llegue a cero se terminarán abruptamente las negociaciones y que tendréis que lidiar con el resultado que hayáis sacado hacia ese momento.
-Esfled: Al contar con la ayuda de la Señora del Folde Oeste, las tiradas de la parte de Interacción (o sea todas menos las que determinan las Ventajas) son a NO 12 en vez de NO 14.
-Personajes cansados: Eothred y Heruwyn todavía siguen Cansados, lo que significa que al hacer las tiradas deben marcar la casilla “Fatigado” (la que está debajo del NO).

Todos: La recompensa de Éogar equivale a 4 puntos de Tesoro para cada uno de vosotros.

Erekose y Elreychapa: Para que lo tengáis en cuenta a la hora de la interpretación, Barald está vendado y se mueve con normalidad pero cada tanto (dependiendo del movimiento que haga) siente una ligera punzada de dolor en las costillas, que es donde le había alcanzado la lanza de uno de los dunlendinos. Por otra parte, Eothred ya no tiene dolor pero se siente algo débil, sobre todo en la pierna (no está cojo ni necesita ayuda o apoyo pero tampoco camina con total normalidad).

Grupo:
Aldor: 24/24
Barald: 23/31 // Herida tratada
Dengal: 17/26
Eothred: 7/26 // Cansado
Galadan: 27/27
Heruwyn: 7/26 // Cansada
Narieth: 25/25

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11/07/2019, 08:14
Aldor
- Tiradas (2)

Notas de juego

Puedo mantener la boca cerrada para que no me corten la lengua al hablar ? XD Por que si abro la bocaza la liamos parda

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11/07/2019, 08:49
Director

Notas de juego

Ya la liaste parda al sacar un fallo xDD

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12/07/2019, 08:09
Aldor

Tras un merecido descanso, el alba rompe con un sonido dulce y nos empezamos a despertar todos al mismo tiempo y a medida que nos equipamos con nuestras armaduras, cojo el gran hacha de los bosques y salgo fuera de la tienda para que me acaricie el frío de la mañana. Saludo a un par de hombres del Mariscal con la cabeza y cuando uno de ellos viene a traernos un desayuno y a buscarnos, más tarde, para hablar con el Mariscal Éogar. 

Una vez en su tienda, nos agradece la ayuda prestada ofreciéndonos una bolsa de oro a cada uno de nosotros. Agradezco con una reverencia y recojo la bolsa y acto seguido nos pregunta lo que propone el Rey Thengel:-Mariscal Éogar. Lady Esfled. El Rey Thengel propone, con el fin del cese de las hostilidades entre hermanos, el matrimonio entre la dama Mildryd y Esmund, hijo de Edwin, del Folde Este. Cuando realizamos la propuesta al Mariscal Cenric, tal vez la acogió con la misma poca predisposicón que vos, pero al final fue convencido de enviar a un punto intermedio entre ambos Foldes a Esmund, donde espera una respuesta hace seis días.-dije a pesar de lo poco hablador que suelo ser y entonces me arrodillé ante el Mariscal y tendí mi hacha en el suelo:-Todos los hombres y mujeres, niños y niñas que viven en Rohan pueden entender la enemistad entre ambos Mariscales pero Rohan necesita a todos los que viven en ella unidos para hacer frente a la Sombra.-casi derramo una lágrima al recordar la noche anterior pero era necesario que viera que a todos nos afecta la enemistad entre los Mariscales. 

Cuando terminé de hablar recogí el hacha del suelo, me levanté, realicé una reverencia ante los presentes y mantuve el silencio para dar pie a mis compañeros. 

Notas de juego

Pues nada intentaré hablar con sinceridad y esperar que lo que diga no sea tan grave como para hacer que me corten la cabeza.

Posteo esta noche

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12/07/2019, 19:18
Narieth Linduin

Dama Esfled, Mariscal, mis respetos. Me alegra que el conflicto en que nos conocimos se haya solucionado. Parece que no fue mala la hora en que el Rey Thengel nos envió a encontraros, aunque sus motivos fuesen otros. En todo caso, nadie podría decir que nuestro encuentro haya sido desafortunado. Cuando tales casualidades suceden, si es que de una casualidad se ha tratado, sabios son los que abren sus corazones mutuamente. Tal y como nosotros os ayudamos sin ser de vuestro Folde, el Rey desea que los Jinetes se apoyen entre sí ante las amenazas de más allá de vuestras Marcas. Quizás no como hermanos, si los agravios han sido muy grandes, pero al menos como aliados en tiempos de necesidad, que entienden que el mal de uno es mal de todos en Rohan. 

- Tiradas (2)
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18/07/2019, 07:55
Éogar, hijo de Halwin

Al escuchar vuestras palabras, el Mariscal resopla con una mezcla de sorpresa y de indignación.

-Vaya, el Rey no solo quiere una tregua sino también una boda… imagino que como garantía del acuerdo -os dice Éogar con su característico tono brusco- ¿Por qué debería permitir que mi mejor capitana se comprometa con uno de los parientes de Cenric? Ese tonto de Esmund no solo no pudo defender su derecho como heredero del Señor Folde Este sino que luego de perderlo decidió servir como un perro faldero al gusano de su tío.

- Tiradas (6)
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18/07/2019, 08:19
Esfled

-Esposo mío ¿Qué habrías hecho tu si el Rey Fengel hubiese nombrado Señor a tu tío en vez de a ti? ¿Habrías liderado una rebelión sumiendo al Folde Oeste y a Oestemnet en una guerra civil? ¿O habrías decidido abandonar la Marca y convertirte en un forajido? Como a toda persona, se le puede criticar a Esmund sus decisiones pero también hay que reconocerle que tuvo la sabiduría y la humildad suficiente para no dividir aún más a su gente -interviene Esfled con un voz dulce aunque con un velado tono de reprimenda.

Luego de hacer una breve pausa para que Éogar medite sus palabras, la Señora del Folde Oeste se gira hacia la escudera.

-Mildryd ¿Qué opinión tienes del enlace que propone el Rey? -le pregunta amablemente Esfled a la capitana- Te conozco y sé que sigues sufriendo por la trágica muerte de tu esposo y tus hijos, esa es una pérdida que nunca se superará… y aunque está bien que siempre los tengas en tu memoria, eso no significa que debas sacrificar tu futuro en el caos de la batalla. El destino siempre quiso que tu y Esmund estén juntos y aunque habéis tomado decisiones que os han apartado, otorgándoos tanto gozo como amargura, está es una segunda oportunidad que no deberías desaprovechar. Además, Esmund también ha conocido la pérdida de alguien amado y puede que la unión entre ambos no solo sane la división entre los rohirrim sino que os ayude a sobrellevar la vuestra.

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18/07/2019, 08:21
Mildryd, hija de Galwin

-Yo… eehh… estoy dispuesta a aceptar -dice Mildryd titubeando aunque inmediatamente carraspea para aclararse la voz- Pero independientemente de mi voluntad, no soy una simple escudera sino la capitana del éored del Segundo Mariscal de la Marca y mi deber y lealtad es hacia mi señor, y por juramento es él quien debe darme su venia.