Partida Rol por web

El tipo parecía no tener prisas y yo ya me imaginaba un largo rato siguiendo a este tipo sin descanso. Pegarse a alguien más nunca era de lo mas entretenido, pero este tipo parecía de los que se toman todo con mucha calma.

"Porque no eligió un bar... bueno al menos aqui pude conseguir algo de café, pero mataría por un vodka..."

Cheque el móvil tras sentir que vibraba en el bolsillo de la cazadora. Solté un suspiro leve para liberar mis frustraciones. ¡Los otros dos ya se habían subido al metro a pesar de que les dí las llaves del Camaro! ¿Podría ser que ninguno de los dos supiera conducir?

"Ahora encima del terriblemente largo día que me espera, tendré que pasar a buscar el carro por mi cuenta."

Tecle con pericia las teclas del celular y tras terminar de responderles lo cerré a tiempo para ver a la tal Mara acercarse con cara de pocos amigos. Una lastima que las cuatro fueran lindas chicas, pero unas perras. Me concentre en mi café mientras dirigí una mirada de reojo a la chica, atento a que no fuera a armar un escándalo y me terminara involucrando de rebote y sin razón.

"женщины...Mujeres."

Mara mira de reojo a Arkady mientras dice al camarero:

• Perdone, cóbreme.

Tras pagar la chica se queda unos momentos mirando su móvil, parecía que le habían mandado un mensaje, se quedó ahí unos minutos mientras las otras chicas la miraban extrañada, Mara mira al grupo y dice:

• Nos vemos mañana… tengo cosas urgentes que hacer.

Tras esto la chica sale del local bastante apresurada.

Mientras tanto el tipo extraño cierra su libro y se pone de pie en camino hacia la barra, se sienta junto a Arkady y con una amplia sonrisa dice con un marcado acento alemán:

• Parece que es más tímido de lo que aparenta… le veo con ganas de conversar conmigo, pero sin terminar de decidirse a ello.

La pareja tomo el metro hasta Brooklyn, allí se bajaron y comenzaron a caminar hacia donde les había dicho su compañero, giraron la esquina y Jon siente un golpe, se choca con una chica joven que estaba apurada mirando su móvil, sorprendida la chica casi se cae, aunque su móvil sí que se cae al suelo.

La chica mira asustada hacia delante cuando comprueba que es lo que ha pasado parece que se suaviza un poco su mirada de susto, pero cuando mira al lado y ve a Celine pone mirada más sorprendida aun:

• Celine Walker? ¿Eres tú?

Jon al leer el mensaje instó a Céline... con buenas maneras y su eterna sonrisa, que era un caballero de pies a cabeza... a acelerar el paso.

- Parece ser que Arkady ha averiguado algo... ¿te imaginas que sea un vam...? PUM- el inglés al ir hablando con su joven compañera no pudo darse cuenta de la muchacha que venía a su encuentro por lo que no pudo evitar el choque que a punto estuvo de hacerlo caer de nalgas...- ¡Oh!- dijo recuperando el equilibrio- ¿Se encuentra bien?- se disculpó con la joven- no la he visto, le ruego que me perdone- le dijo azorado

Al ver como la muchacha hablaba con Céline miró a ambas con curiosidad

- ¿Es amiga tuya?- sonrió a las dos muchachas

Por fin habían tenido noticias de Arkady, lo que alegró y alivió a Céline. Jon y ella tomaron el metro rumbo a Brooklyn, todo iba bien, Cel estaba de buen humor, pero el destino es cabrón a veces, muy cabrón de hecho... ¿Qué posibilidades había de que en su camino pudieran toparse nada menos que con la misma persona que Cel se esforzaba diariamente por evitar a toda costa? ¿Es que aquella jodida ciudad no era lo suficientemente grande para las dos que tenían que ir a darse de bruces con ella?

Mientras Jon se ocupaba de que la chica con la que había tropezado, no cayese al suelo, Cel miró el teléfono que había caído y resbalado por el asfalto, se agachó para recogerlo y devolvérselo a su dueño, y nada más ver el aparato, sin necesidad de girarse hacia la chica, supo de quién se trataba. Había visto ese mismo móvil muchas veces. Más de las que le gustaría.

¿Céline Walker? ¿Eres tú?

"No guapa, soy Celine Dion, ¿A ti qué te parece? ¿Acaso no me has jodido la vida suficientes veces como para haberte aprendido de memoria mi nombre y mi cara?"

Cel se giró para encarar a Mara y le tendió el teléfono mirándola a la cara, la expresión de la chica reflejaba una sorpresa inocente y algo incrédula, emociones que Céline sabía completamente falsas, debajo de aquella máscara de niña buena y medio tonta, se escondía alguien muy diferente, Cel solía pensar en ella como "La torturadora".

Y sin embargo, nadie nunca sospecharía de que aquella persona pudiese tramar algo malo jamás, tal era su destreza interpretativa y el nivel de su disfraz. Nadie sospecharía nunca de Mara Lampert, imagen de perfección y bondad ante cualquiera que no la hubiese sufrido como lo había hecho la propia Cel.

La respuesta de Mara quedó flotando en el aire, Céline no dijo ni una sola palabra tras entregarle el teléfono, como si no la hubiese oído, se limitó a permanecer en silencio a la espera de que Jon y ella retomasen su camino en dirección a la cafetería. En ese momento, Jon preguntó:

"¿Es amiga tuya?"

La expresión seria y la respuesta fría de Cel contrastó diametralmente con la sonrisa cálida de Jon.

- Joder, puedes apostar a que no.- Inmediatamente miró a su colega y añadió- ¿Nos vamos?

Le devolví la mirada de reojo a la chica con una leve sonrisa en los labios y le di un sorbo a mi café volviendo a mis asuntos. Poco me importaban los problemas de estas chicas pero las apariencias son apariencias y fingir una sonrisa nunca lastimo a nadie.

Pero no tuve que mantener la fachada mucho tiempo. La chica se fue luego de revisar su móvil... pero otro se acerco a la barra. -Parece que me estoy oxidando... me atrapo.-

Sonreí tranquilamente y le hable con un leve acento ruso a pesar de que podía ocultarlo totalmente. -Disculpe si lo moleste, es que se parece a un personaje de la tele.- No pude evitar recordar la extravagante imagen que Celine nos paso a Jon y a mi. -El parecido es asombroso de verdad...-

Le di otro sorbo al café antes de volver a hablar. -Aunque pensándolo bien creo que lo he visto en otra parte.... ¿puede ser que usted trabaje en una santería aquí en Brooklyn?- La más inocente sonrisa cruzaba mi rostro pero por alguna razón estaba algo tenso. Solo al sentir el cuchillo en su funda me tranquilice un poco. El tipo ya me tenía calado asi que ya no importaba hablar.

Cuando Mara escucho a Jon asiente dulcemente y dice en un tono bastante amable:

• Si, ¿estoy bien y usted? Estaba demasiado distraída con mi móvil, lo siento.

Cuando Celine cogió el móvil pudo ver que la pantalla tenía una conversación de Wassap

John

Mara, tenemos que hablar

Déjame

John

Venga que sé que no puedes estar en mi competición, no pasa nada no hace falta que te enfades por eso ni que me evites, no me enfado

No estoy enfadad ni evitándote por eso

John

Entonces, que te pasa, llevas unos días muy rara

Déjame en paz, hemos cambiado, las cosas no son como antes

John

¿Que te pasa? Me preocupas

Nada

Celine conocía a John, era un chico que estudiaba en la universidad con una beca por natación, de él decían que era el próximo gran nadador de EEUU, era un chico simpático y amable, que no se metía normalmente en ningún problema y que estaba muy concentrado en su carrera deportiva. Al parecer él y Mara se habían criado desde pequeños y eran amigos desde la infancia. Cuando Celine miro directamente a los ojos a Mara esta le sonrió levemente mientras recogía el móvil y tras el comentario dice:

• Bueno señor, amigas no, somos compañeras en la universidad… pero parece que tienen prisa

La chica se dispone a marcharse, pero se detiene justo delante de Celine, con una mirada algo más seria le mira directamente a los ojos y dice:

• Por cierto, Celine, te echaremos de menos en la excursión, te traeremos un recuerdo no te preocupes

La chica se volvió a disculpar con Jon amablemente y siguió su camino cogiendo su móvil mientras este sonaba con una llamada y lo colgaba.

El hombre sonríe ampliamente para después decir:

• No se preocupe… no es que no sepa hacer su trabajo señor Arkady Borisovich Iulianov, de hecho, de su equipo de tres diría que usted es el que mejor lo ha hecho… la chica joven en el momento en el que nos cruzamos se le notaba demasiado que estaba nerviosa y bueno el caballero ingles… tal vez demasiado llamativo.

El hombre dio un sorbo a su taza de café mientras miraba hacia delante, tras unos segundos dice:

• Sí, he oído de ese personaje de dibujos, lo cierto es que es divertido hacer cosas que recuerdan a un personaje de unos dibujos… eso despista mucho a la policía, pero me temo que no soy un vampiro como ese personaje… aunque, si tenemos algunas cosas en común, no se lo voy a negar.

El hombre mira hacia la calle y Arkady puede ver que fuera están sus compañeros que están parados en la calle, el hombre ofrece su mano como saludo y añade:

• Mi nombre es Carsten Bertolt, un placer y créame cuando le digo que su investigación terminara pronto y le sorprenderá.

Al oírlo, de inmediato deje la taza de café en la barra y entrecerré los ojos. Torcí el cuerpo de manera imperceptible preparándome para saltar de la silla y golpearlo en cualquier momento. ¿Como había hecho para saber mi nombre? Podía ser que llamáramos la atención cuando fuimos ayer a esa santería, pero que reuniera información nuestra tan rápido...

No pude evitar el curvar levemente los labios hacia arriba al escuchar su cumplido y las descripciones de los otros dos. -Supongo que me tomare eso como un halago...- Le dije mientras miraba de reojo al mismo lugar que el y vi a Celine y a Jon. Saque el móvil y les escribí sin mirar una sola palabra en el móvil.

-¿Que actuar como un dibujo animado despista a la policía?. La verdadera pregunta es por qué quiere despistar a la policía......-

Le ofrezco mi mano para tomar la suya y devolver el saludo, sumamente despacio y muy atento a sus movimientos. -Al parecer no necesito presentarme; pero si usted puede aportarme información del caso tendrá mi más profundo agradecimiento.- 

Céline no respondió al comentario de Mara, ni siquiera la miró. Allí, al lado de Jon, se sentía más fuerte que habitualmente, lo suficiente para sencillamente ignorar a aquel demonio con cara de ángel. 

"... Te traeremos un recuerdo."

Otra vez aquella mierda. Cel imaginó que, a su regreso, le esperarían más jugarretas, bromas pesadas, burlas o algún que otro empujón acompañado de originales insultos. "Algún día van a cambiar las tornas, Mara, y entonces vas a saber lo que es bueno." Pensó Céline  sin tomarse la molestia de dirigir ni una sola mirada a la otra chica mientras tomaba a Jon del brazo para seguir caminando. Sin embargo, en su cabeza continuó grabada la conversación de Wassap que había leído en el teléfono de Lampert. Al parecer Jhon y ella ya no eran tan amigos... ¿Y a ella qué coño le importaba? Aquella tía despreciaba al nadador por mucho que hubieran crecido juntos, no era de extrañar tratándose de una maldita cabrona como era.

Mientras, en su propio móvil, Arkady les urgía a entrar a la cafetería, así que no pensó más en la torturadora, y dirigió sus pasos, su atención y su interés a su nuevo objetivo. Cruzaron la calle hasta la puerta del local y fue Jon quien abrió para después dejarla pasar amablemente. Una vez dentro, buscó al ruso con la mirada.

Jon miró a una chica y a otra alternativamente, no... no eran amigas y por lo que parecía a Céline no le caía especialmente bien aquella muchacha, pues parecía tensa y estaba claro que no deseaba hablar con ella.

- Un placer señorita- se despididó amablemente de la chica mientras se dejaba arrastar por la señorita Walker.

Jon también había visto el mensaje y tenía mucha curiosidad por conocer los avances del ruso, de manera que ambos aceleraron el paso hasta la cafetería indicada por Arkady, al llegar Jon abrió la puerta para cederle el paso a Céline.

- Después de tí, querida- la invitó con su habitual sonrisa y buen carácter.

Una vez dentro buscó con la mirada a su compañero.

La puerta de la cafetería volvió a abrirse, en su interior había un grupo de tres chicas muy conocidas para Celine, Amanda, Thea y Rose que parecían estar terminando lo que estaban tomando y cuchicheaban entre ellas con cierta preocupación. Además, Arkady estaba sentado con el hombre que habían visto en el callejón hablando con él.

Amanda parecía preocupada y extrañada, mira a sus compañeras y dice:

• Esta súper rara, lleva unos días que no se, parece que algo le preocupa, ya sabéis que no es especialmente simpática, pero estar rarísima.

Thea asiente, la chica parecía que, si se había dado cuenta de que Celine y Jon habían entrado, pero no dijo nada, en lugar de eso dijo a sus compañeras:

• No sé, en verdad nunca ha estado así… para mí que le pasa algo, pero no es que este así siempre, solo en ciertos momentos… y siempre después de coger el móvil, me da que tiene que recibir llamadas o mensajes que la mosquean.

Rose fue la última en hablar:

• Bueno… supongo que se le pasara, seguro que es que ha discutido con John o algo, el otro día el me pregunto si le pasaba algo, pero bueno, seguro que la excursión nos viene bien a todas para terminar de despejarnos.

Jon y Celine llegaron y se acercaron a la barra, allí Arkady hablaba con el hombre, este al verles sonríe y con un fuerte acento alemán dice:

• Buenas tardes caballero y señorita… me alegra que estén ustedes también aquí para poder hablar con ustedes al mismo tiempo que con su compañero

Decía mientras el camarero se acercaba.

El camarero les mira con una sonrisa amable, era un chico joven, por lo que sabían esa cafetería se había puesto bastante de moda sobre todo entre la gente joven por la variedad de bebidas y cafés que tenía. En la carta que el chico les dejo en la parte de cafés pudieron ver que había una gran variedad, tenían que escoger tanto el grano de café como la leche si lo querían con leche, si querían te o alguna infusión también había una gran variedad, al igual que toda clase de batidos, zumos y granizadas, el chico les dice:

• Aquí tienen las cartas, cuando sepan que es lo que desean me avisan

El extraño hombre espero a que el camarero se marchara y dice:

• Bueno, como iba diciendo al señor Arkady… ustedes son de la Agencia S ¿Cierto?... permitan que me presente mi nombre es Carsten Bertolt y… supongo que tienen ciertas sospechas sobre la pareja que ha desaparecido misteriosamente

El hombre les observa de arriba abajo como examinándoles durante unos segundos.

Jon sonrió al ver a Arkady sentado junto al hombre de las gafas... para ser franco no pudo evitar sentir cierta desilusión, aquel caballero no podía ser un vampiro... con la de preguntas que le hubiera encantado hacerle, en especial por el tema del cambio de capa a abrigo. Pero, no como vulgarmente se decía... al esperanza es lo único que se pierde y si hay vampiros en el mundo, nada impediría Jon conocer a uno.

- Buenas trades señor...- saludó extendiendo la mano- yo soy Jon Pertwee, encantado y ella es nuestra compañera Céline Walker- una vez echas las presentaciones, se sentó junto a Céline en la mesa del ruso y el extraño del callejón.

- Yo tomaré un te con leche... y si tiene pastas de mantequilla se lo agradecería mucho- le dijo al camarero- Sospechas...- comenzó cuando el camarero se hubo marchado- lo cierto es que todo es bastante extraño, pero creo que nos hacemos una idea...- de sopetón y hasta que no conociera mejor al extraño no pensaba soltar prenda de lo que había descubierto.