Partida Rol por web

La cazadora de demonios... era evidente que teníamos muy poca información. Cada vez que Celine soltaba una frase parecía que sus pensamientos iban por buen camino. Con la simple descripción que teníamos parecía que las cosas y los hechos podrían coincidir bien.

-No creo que sea buena idea que vayas sola Celine. Hemos sido muy abiertos con nuestra investigación y hemos hecho todo a plena luz del día y a la vista de todos. Si el "invocador" no quiere ser descubierto, es posible que ya sepa de nosotros. Creo que es mejor que Jon te acompañe.-

Que fuese una víctima que actuó en defensa propia invocando a la cazadora era una posibilidad. La otra que me parecía más probable era que fuese una persona como Bertolt, que lo hiciera como su oficio, y por la impresión que este me dejo, el que mato a la pareja podía ser más peligroso de lo que podríamos imaginar.

Ante las palabras de Arkady, los ojos de Cél parecieron crecer tras los cristales de sus grandes gafas de pasta y ponerse llorosos y brillantes como los de los dibujos animados japo que solía ver. Su expresión era un completo puchero de emoción al ver que el ruso se preocupaba por ella hasta ese punto, y fue esa actitud protectora y peluchil, la que la obligó a levantarse de su silla e ir a colocarse entre ambos hombres, pasó cada uno de sus brazos sobre los hombros de ellos, abarcándolos y atrayéndolos hacia sí como para abrazarlos, su cara quedó entre las de ellos antes de hablar:

- Chicos, chicos... Son un verdadero encanto los dos, pero sin duda ya saben que, antes de conocernos, yo andaba moviéndome por ahí siempre solita ¿Verdad? Sin compañía de ningún tipo que me protegiese de los males horribles de este mundo... - Cel frotó su cabecita suavemente primero contra la de Arkady, luego contra la de Jon, deseando poder ver las expresiones en el rostro de cada uno, la de Jon se la imaginaba incluso sonriente, pero la cara de Arkady debía merecer sin duda una foto y un marco para ponerla en la pared- ... Y bueno, a no ser que quieran venirse conmigo cuando la jornada termine, arroparme y darme un besito de buenas noches, para después montar guardia en la puerta de mi piso, yo tendré que ir a dormir a casa y pasar la noche sin más compañía que la de mis libros y mi triste comida recalentada en el microondas... - Suspiró, dio un suave beso en la mejilla de cada uno y se separó para volver a ir a sentarse delante de ellos en la mesa.- Así pues, mis estimados, si alguien desea hacerme daño, le sobrarán las oportunidades, de eso no me cabe duda, vaya o no sola a la biblioteca. Por otro lado, nosotros no hemos hecho nada malo contra nadie, de momento solo sabemos que una pareja de vampiros ha desaparecido, pero no sabemos si el responsable es culpable de algo, quizá solo actuó en defensa propia. ¿Quién nos dice que la persona que invocó a la cazadora no quiera ser descubierta? A lo mejor ni siquiera está preocupado por haber hecho algo malo... Quizá ni siquiera haya hecho nada malo y no merezca condena alguna... Por mi parte, no juzgo, yo solo quiero saber. Soy curiosa, no lo puedo evitar.

Volvió a suspirar y se puso de pie resueltamente con expresión de fingida seriedad.

- No perdamos más tiempo, muchachos. Yo me voy a la biblioteca, iré en bus y llevaré mi móvil encima por si me necesitáis para algo o yo os necesito. Cualquier cosa os llamo ¿Estamos? 

La biblioteca era un edificio realmente grande e impresionante como ya todos sabían. Cuando Celine llego al edificio había prácticamente dejado de llover, por lo que podía verse más gente caminando por la calle e incluso empezaba a verse algunos ciclistas yendo de un lado para otro. El edificio era bastante conocido para la chica, por lo que no tuvo demasiados problemas para acceder al lugar, e incluso la bibliotecaria le saludo con la mano al entrar y el hombre de seguridad con un ligero asentimiento de cabeza.

El silencio en el recinto era abrumador como siempre, pese a que había bastante gente, quizás algo menos que un día normal, pero aun así había bastantes personas en las grandes mesas leyendo, estudiando o incluso investigando. La hemeroteca no estaba muy lejos y Celina la encontró sin demasiados problemas.

La pareja se dirigió hacia el hogar de la pareja, no tardaron mucho en llegar ya que no vivían demasiado lejos de allí, además que el día había empezado a clarear y aunque aún estaba nublado ya no llovía, por lo que podían caminar sin demasiados problemas por la calle. La casa estaba en un barrio en donde gente de clase media alquilaba pisos, era una típica casa neoyorkina situada en la típica calle.

El lugar parecía tranquilo, pudieron entrar sin problemas al edificio que parecía bastante agradable, con el suelo limpio, una moqueta decoraba el suelo y llevaba por los pasillos hasta la primera planta que era donde estaba el apartamento de la pareja, identificaron pronto la puerta ya que tenía una cinta policial.

Cuando la vi pararse y rodear la mesa supe que algo se venía, pero fue demasiado rápido para reaccionar sin hacer una escena. Una vez que el pseudo abrazo me tuvo atrapado, todos mis músculos se tensaron visiblemente. Solo cuando estaba borracho y desnudo las mujeres podían tomar estas libertades; o al menos generalmente era asi.

-Mierda, por abrir esta bocaza...-

Con estos pensamientos en mi cabeza, pero aún asi sonriendo levemente gire la cabeza un poco hacia la gran abrazadora.

-Cuando quieras puedo arroparte Celine.- dije con falsa picardia para sacudirme la incomodidad. -Pero en esto tienes razón. Si no es las veinticuatro horas no tiene sentido. Aún asi puedes ser cuidadosa, seleccionar calles y lugares siempre con público y tener siempre el celular a mano.- Por un momento mi cara se torno seria antes de continuar, lo que era gracioso pues aún la tenía a ella colgando del cuello. -Pero cuidado con lo que encuentres... Si es algo peligroso o importante recuerda avisarnos. Eso de que "la curiosidad mato al gato" se aplica atados los animales, y sobre todo a las personas y no se me ocurre un tema más espinoso sobre el que investigar que este.- Experiencia propia obviamente. Demasiados curiosos muertos en mi oficio.

Deje un par de billetes para pagar por la comida de los tres y me pare tras Celine. -Bien. Nos vemos mas tarde para hacer un resumen de lo que encontremos. Suerte.- Le hice una seña a Jon y me dirigí a la salida.

El edificio parecía agradable y me imaginaba muchas "familias felices" como vecinos de estos monstruos. Nada mejor para mezclarse con la multitud que una casa normal y una fachada normal.

Entrar no parecía un problema y la puerta tan visiblemente marcada parecía un faro en el pasillo. Examine la cerradura un segundo y Luego mire al pasillo un segundo buscando actividad. Mire a Jon como para que me hiciera de vigía un segundo y saque dos guantes de látex del bolsillo de la cazadora y trate de abrir la puerta. En el probable caso de que la puerta estuviera cerrada habría que forzarla con ganzúas.

-¿Que mierda tendrán escondido estos monstruos aquí adentro?-

Jon se quedó plantado en el sitio cuando Céline le dijo que iba a ir sola a la biblioteca, él por nada del mundo quería separarse de su compañera... teniendo en cuenta los peligros a los que se estaban enfrentando podía pasar cualquier cosa en cualquier sitio.

- Por supuesto que sabemos que eres inteligente y muy capaz Céline... pero dadas las circunstancias no aconsejo que vayas a investigar sola- protestó

Sin embargo ante las palabras de la muchacha y del propio Arkady, no el quedó más remedio que suspirar.

- Prométeme que nos avisarás a la más mínima, estate atenta a todo y no dudes en llamar- le recomendó en plan padre, no estan él muy convencido de que aquello hubiera sido una buena idea...

- Bonito sitio- dijo Jon al llegar mientras miraba a su alrededor con los brazos en jarras inspeccionando el lugar- de momento parece que todo normal- comentó mientras accedía al interior tras Arkady.

Al llegar a la puerta se aproximó al cerco policial y examinño la cerradura.

- Deberíamos tratar de entrar- susurró echando una mirada a la planta por si había algún vecino o algún ojo indiscreto.

Céline asintió a sus dos papás (Lo que era la vida, nunca había tenido un padre en condiciones y ahora le salían dos de golpe) con una sonrisa de oreja a oreja, antes de asegurarles que sería cuidadosa y que les avisaría en cuanto tuviese algo de lo que mereciese la pena informar. 

Acto seguido se despidió con un "Hasta luego" y se marchó envuelta en sus ropas una talla más grandes de lo que debía usar la chica, o tal vez dos tallas. Rumbo a la parada del autobús. 

Cel siempre se sentía bien en la biblioteca. Nada más traspasar las grandes puertas y poner un pie en sus enormes salas, se sentía como en casa, como si en ese lugar estuviese a salvo del mundo y de todo lo que habitase en él. Aquel silencio llenaba de paz, y eso a pesar de no haber ni un solo hueco libre en las largas mesas. La gente leía, estudiaba, escribía, cada uno inmerso en sus propios asuntos. 

La muchacha avanzó por el pasillo central dejándose inundar por aquel ambiente y su característico olor a libros, a madera, a conocimiento, cómo le hubiera gustado buscar  un sitio apartado y sentarse a leer, pero no era para eso para lo que había ido allí, lo primero era lo primero, así que Céline no se distrajo y dirigió sus silenciosos pasos hacia la hemeroteca. No era la primera vez que la pisaba, ya había ido otras veces para buscar información para algún trabajo, así que conocía el método de búsqueda y el material. 

Comenzó por una búsqueda en los periódicos locales sobre desapariciones más o menos recientes  y parecidas a la que se dio en la zona del callejón, luego iría ampliando la búsqueda al barrio o a la ciudad entera. Estaba segura de que no podía haber demasiadas personas que se hubieran volatilizado como, aparentemente, lo había hecho aquella pareja.

La pareja de investigadores llego a la puerta, aparentemente no había nadie por allí lo cual era bastante bueno para ellos ya que el hecho de tener unas cintas policiales no era especialmente bueno si querían entrar. El ruso movió el pomo y se sorprendió cuando noto como este estaba abierto, lo cual era bastante extraño.

Al entrar en la casa con cuidado pudieron ver que se trataba de una casa aparentemente normal y corriente, algo oscura ya que tenían todas las ventanas bajadas. La casa era un gran salón con una cocina que parecía nueva y sin usar y un par de puertas, una que llevaba a un servicio con bañera y la otra a la única habitación, la principal de la casa.

La chica busco durante un buen rato. En la ciudad se producían desapariciones con bastante frecuencia y asesinatos prácticamente a diario, pero ella no se detuvo en eso, busco entre toda la información asesinatos similares, uso lo que había descubierto, con cuidado pudo observar que había un par de noticias que le llamaron la atención. Una de ellas hablaba de una desaparición en Central Park un día antes de la desaparición de la pareja

Desaparición misteriosa en el parque

La pasada noche desapareció una chica en el parque, según fuentes policiales fue como si la chica hubiera desaparecido sin dejar rastro, dejando únicamente en la escena de los hechos sus zapatillas deportivas. La desaparecida de la que no ha trascendido el nombre se trata de una chica joven de nacionalidad norteamericana.

Pero también encontró un artículo que le llamo la atención, aunque no era de una desaparición de la misma noche de la desaparición de la pareja

Misteriosa muerte en una residencia estudiantil

La pasa noche se informó a la policía de la muerte de una chica universitaria, fue encontrada en su habitación en una residencia universitaria para chicas totalmente calcinada, según fuentes policiales en el momento del asesinato no había nadie más en la residencia salvo una de las chicas que en ella se hospeda que no fue testigo de nada.

La chcia asesinada murió por una combustión masiva de todo su cuerpo, según información de los bomberos, si la alarma de incendios y el sistema antincendios no se hubieran activado la chica habría sido totalmente calcinada en pocos segundos debido a la potencia de las llamas.

La puerta abierta... pues no daba buena espina. Le dirigí una mirada significativa a Jon y entre al departamento con una mano en la empuñadura del cuchillo, intentando evitar que las bisagras nos delataran inoportunamente con algún chirrido.

Pero fue innecesario. Nadie dentro y todo parecía muy normal, sin vistazos aparentes de que alguien hubiera revuelto el lugar en absoluto.

Retire la mano de la empuñadura y le hable en voz baja a mi compañero tras cerrar la puerta. -Me parece que si encontramos algo sera gracias a instinto y suerte. Busca donde te parezca más apropiado... con suerte daremos con algo.-

-Con mucha suerte... La puerta abierta me da mala espina.-

Enseguida me dirigí a la biblioteca y revise los libros, los dvd, cajones, alacenas e incluso detrás de los cuadros. Si había algo en esta habitación estaba determinado a encontrarlo.

Arkady empieza a buscar por la casa, aparentemente no encuentra nada que le llame la atención ni parece que haya nadie en el lugar, está realmente tranquilo, parece que la policía ya ha estado allí y que está cerrado el lugar a la espera de que el juez o los investigadores vuelvan a entrar allí a investigar.

Tras un par de minutos mirando por la pequeña biblioteca encuentra algo que le llama la atención, en un escritorio una carpetilla, que al abrirla puede ver como hay varias direcciones apuntadas, todas estas direcciones son en Nueva York y en los alrededores, tras obsérvalas puede ver que hay 3 lugares aunque no les suena los lugares.

Mientras Arkady buscaba entre las pertencias del salón, Jon deicidió revisar la única habitación del piso. Quizás encontrara algo más, aunque no estaba muy seguro que en un dormitorio pudiese haber algo y más después de que la policía hubiera estado revolviendo, pero ya puestos a lo mejor encontraba algo en el armario de la ropa o en la mesita de noche...

- Que lástima esto de los apartamentos, carecen de personalidad y... ouch- exclamó al golpearse la pierna con la esquina de un mueble- espacio...- dijo masajeandose la zona afectada.

Céline se preguntó si la desaparición de la chica del parque sería obra de la misma persona que invocó a la cazadora...En cuanto a la chica asesinada en la residencia, parecía el mismo caso que precisamente investigaba otro grupo de compañeros en la agencia, menuda casualidad... O no. 

Cel se guardó la información para enseñársela a los chicos cuando volviera a verlos. Verdaderamente le llamaba la atención el autor de todo aquello, quizá estuviera llevando a cabo algún tipo de venganza... Era difícil saberlo, pero si se valía de un ser sobrenatural para atentar contra otros, quizá fuese porque él mismo no debía tener demasiado poder... ¿Quizá fuese humano? ¿Un simple humano como ella?

Caray, la curiosidad la mataba, ¡Quería saber! Tendría que hablar con los compañeros que llevaban el caso de la chica universitaria a ver si podían establecer puntos en común entre ambos casos, tal vez tuviesen un origen común. 
Hizo memoria... ¿Quién se había encargado de aquel caso en la agencia? No tardó en recordar que uno de ellos era el chico guapo: Jackson Wright. Tal vez pudiesen hablar con él más tarde.

En cuanto a la chica del parque no supo bien qué hacer o dónde acudir, aunque el caso parecía idéntico al que ellos tenían entre manos, esperaría a ver qué decidían los chicos al respecto. 

Miró la hora y pensó que quizá podía comunicarse vía wassap con Jon y Arkady a ver qué tal les iba.

Tras un rato investigando Jon encuentra una agenda de esas antiguas que ya no se usan, al abrirla puede ver como la letra tiene un estilo bastante arcaico, una forma de escribir que ya hoy en día no se usa, en ella aparecen varias fechas, pero las que más destacan son una del día del asesinato en donde indican que se dirigirán a la tienda, tras mirar Jon puede ver como hay una anotación para mañana

Muerte de la pequeña bastarda