Partida Rol por web

William saca las llaves y abre la puerta de la oficina. Pasen por favor. Una vez han entrado todos, entra él en ultimo lugar. Pues esta es mi pequeña oficina, justo la puerta del lado es la que conduce a mi pequeño apartamento.

Se quita la gabardina y la cuelga en el perchero, luego se quita la sobaquera con el revolver y la cuelga también. Pónganse cómodos por favor. Dice mientras se acerca a su escritorio, que parece extremadamente caótico. Papeles por todos los lados, libros, un cenicero, la maquina de escribir... No se asusten, jeje parece caótico, pero yo se donde esta cada cosa dentro de este caos. Mi pobre secretaria, Marlilyn siempre me da la bronca de como lo tengo todo e intenta ordenarlo, pero al finalizar el día...vuelve a estar igual. El detective sonríe, mientras que de un armario con puerta de cristal que tiene detrás, saca cuatro vasos. Luego abre uno de los cajones de su escritorio y saca una botella de Whisky Maker's Mark, con la botella en la mano, se queda mirando a la señorita Lisa y al señor Alan.

Espero que no les moleste, algunos no podemos huir de los pequeños placeres de la vida, y en este trabajo...pues a veces un buen trago ayuda a pasar el día.

Sirve dos vasos, uno para él y otro para Stuart. Ya veras como te gusta, Stuart, ya que no hay granero, al menos un buen trago no nos lo quita nadie, dice sonriendole, luego se dirige a los otros dos invitados. Gustan ustedes?

- Yo si tomaré una copa. Los últimos acontecimientos no han hecho más que subirnos las pulsaciones. Creo que un trago ayudará a tranquilizarme. Ahora, veamos qué tenemos.

Observo el desorden de la oficina de William sin sorpresa.

- Bueno hermano, esto no está nada mal... desde luego que hemos estado en sitios mucho peores - digo haciendo alusión a los horrores que vivimos en la guerra. Me sirvo un vaso abundante de whisky y apuro más de la mitad de un trago. - Bien, ahora ya podemos empezar a pensar

Miro al resto de mis compañeros Alan y Lisa con curiosidad.

- Y bien, ¿qué es lo que ha hecho que alguien como vosotros esté embarcado en la búsqueda de una persona desaparecis?

-Me escama mucho que todo esto haya empezado por unos libros tirados en la biblioteca. Me da la sensación de que hay algo que no sabemos y por eso andamos a ciegas. Creó que por hoy deberíamos descansar y mañana intentar establecer conexiones con todo lo que de momento sabemos.-

(Lisa suspira y de repente abre los ojos, como sorprendida por sus propios pensamientos).

-Y creo que de momento por nuestro bien, no convendría separarnos. No sé contra qué nos movemos, pero no se anda con chiquitas y sabe que algo andamos buscando-

(Mira a sus compañeros)

William apura su vaso de Whisky mientras deja a Alan y Lisa que le expliquen a su amigo como han acabado metidos en esta investigación.

Una vez acaban, William se llena otro vaso de whisky. Usted no quiere, señorita Lisa?

Lisa mira a William y sonriendo le contesta : - No, gracias, por el momento prefiero tener la mente totalmente despejada....aunque quien sabe si más adelante no seré yo quien le pida esa copa.-

Lisa se giró hacia Stuart Wilson:

-Señor Stuart, mi amistad con la señorita Ellen, la bibliotecaria de la biblioteca pública de Arkham , me ha traído hasta aquí. Verá, yo soy tan solo una estudiante y paso mucho tiempo allí, ya que no me puedo permitir el comprar todo el material de consulta que desearía. Nos llamó hace poco por un altercado ocurrido en su lugar de trabajo, el cuál al principio nos pareció una chiquillada... Pero está claro que nos hemos metido en algo más-.

Asintiendo a las palabras de Lisa.

- Ciertamente. La señorita Warren tiene razón. El hallazgo del libro con las anotaciones y los hechos acaecidos esta noche, desvelan que nos enfrentamos a fuerzas de las que estamos lejos de comprender. Por mi parte, tengo buena relación con la bibliotecaria ya que hemos trabajado juntos en diversos trabajos de campo sobre libros de que disponen allí. Por mi licenciatura en Historia y al ser experto en ocultismo y parapsicología, creyeron conveniente avisarme a mí también para que echase un vistazo al extraño suceso de la biblioteca. Y ahora, caballeros, creo que va siendo hora de que nos separemos. Es tarde y deberíamos descansar para continuar con nuestra investigación por la mañana. ¿Dónde deberíamos vernos? Y, más importante aún. ¿Podrían acercarnos en coche?

Los dos le explican su breve historia a Stuart mientras William le da un sorbo a su vaso. Una vez terminan, Alan añade que seria la hora de ir a dormir.

Un momento señor Monroe, antes tendríamos que poner los puntos en común de lo que llevamos hasta ahora. Alguien revuelve los libros de la biblioteca, luego descubrimos que ese tal Blanc esta muerto, el cual “misteriosamente” tenia el libro que el señor con cara de boxeador había robado en la biblioteca. No creen que es demasiada coincidencia que al ladrón se le caiga el libro y lo encuentre justamente el señor Blanc? Y si fuera el caso, en vez de devolverlo directamente se lo queda y dice que ya lo devolverá? No se, a mi me suena a que los dos se conocían o estaban compinchados, y por lo que fuera el hombre con cara de boxeador acabo matando al señor Blanc.

Por ultimo tenemos la surrealista muerte en el bar. Armas alienigenas? En serio creen en esas cosas? Mira a Alan y a la señorita Lisa. A mi me suena a alguna arma experimental de gobierno, el nuestro u otro...

Por cierto, señorita Warren, que es lo que leyó en las notas? No llego a explicármelo. Algo sobre alienigenas por lo que entiendo?

Mientras le dio otro sorbo al vaso, espero su respuesta.

Permanezco en silencio bebiendo de mi vaso mientras William hace un resumen de la situación y espera a que Lisa y Alan respondan...

Miro a William mientras estamos en su oficina y le hago una seña con disimulo indicándole que tenemos que hablar a solas cuando Lisa y Alan se vayan a sus casas.

Después del tiempo pasado juntos en la guerra, eramos capaces de comunicarnos sin palabras, sólo con pequeños gestos y espero que a William no se le haya olvidado...

William asiente ante la señal de su amigo, sabia que quería decir, hacia años que se conocían. Luego, cuando marchasen sus invitados, tendrían tiempo para hablar...