Partida Rol por web

La caída en la oscuridad (Harry Potter)

Sombrero pensante

Cargando editor
28/09/2018, 00:08
S2 - Asenath Larkin

Me levanto al oír mi nombre y me acerco temerosa hasta el sombrero, todos me miran y odio ser el centro de atención, me siento muy mal, tengo un gran dolor de estómago y estoy a punto de vomitar. Cuando estoy llegando a las escaleras no me doy cuenta de que hay una pequeña doblez en la alfombra y caigo al suelo de bruces, todo el mundo se ríe y las lágrimas me brotan de los ojos mientras me agarro la muñeca y subo las escaleras cabizbaja. El sombrero resopla y me dice que me siente de una vez en la silla, tarda unos segundos en deliberar y al final dice... SLYTHERIN. Todo el comedor se queda en silencio, todos me miran pensando lo mismo, ¿Esa idiota una Slytherin? El sombrero ha cumplido y me levanto de nuevo de la silla, bajo las escaleras y me dirijo hacia mi nueva casa, todos me miran con cara de preocupación. No me gusta ser el centro de atención, oh no, mi estómago... Oh no, ahora no... Vomito en la túnica de una chica que se levanta como si tuviera un resorte y se va corriendo al baño a limpiarse. Esto no podría haber sido más humillante.

Cargando editor
28/09/2018, 23:58

Escucho que me llaman... llegó el momento, sabía que iba a llegar pero aún así no me siento preparado.

Avanzo lo más firmemente que puedo, mostrando la seguridad que sé que no tengo y dando pasos certeros hacia el sombrero.

 

Al menos sé que solo es ponerme el sombrero...algo es algo. Una vez llego y me colocan el sombrero en la cabeza, titubeo. 

Parece que murmura cosas en el interior de mi cabeza, le escucho con total claridad, es como si leyera mis pensamientos.

 

"¡RAVENCLAW!" - Escucho que grita para toda la sala. Siento cierto alivio por haber tenido a mi madre en la misma casa, me quito el sombrero con celeridad y me voy a la mesa que me vitorea y aplaude con mi reciente llegada.

 

Sonrío y me acerco a mis nuevos compañeros de casa. No necesito preocuparme más; la aventura solamente acaba de iniciarse.

Notas de juego

Cargando editor
29/09/2018, 00:56

Veo a mi alrededor la gran celebración que se lleva a cabo en nombre del nuevo ingreso rodeado de tantas personas con semejantes aspiraciones me cuesta pensar que a ella no le hubiese gustado pertenecer a este lugar… mientras estamos aquí celebrando el mundo se viene abajo… pero nada de eso importa ya.

 

El siguiente ¡Cal Whitaker!

Parece que es hora de saber en qué casa pertenezco, la verdad en cualquier casa me vendría bien… la travesía ha sido larga para llegar a donde estoy y no pienso detenerme por nada.

 

Levantándome de la gran mesa camino lentamente hacia la silla y el sombrero, una vez sentado allí con estudiantes de todos los años mirándome espero el veredicto del sombrero.

Sombrero: Mmm… ya veo ya veo, eres un joven de recursos y con fuertes ideales, tu cabeza es interesante,

¡YA SE... SLYTHERIN¡ exclama el sombrero

La casa de la serpiente… tan buena opción como cualquiera.

Me levanto mostrando una leve sonrisa y camino hacia la mesa de los Slytherin

Buenas, es un gusto pertenecer a su casa. (Les digo a todos antes de sentarme calmadamente).

Cargando editor
29/09/2018, 02:59

Oí mi nombre a lo lejos, quizá dejé que sonase una segunda vez antes de volver del mundo del libro que estaba leyendo, al menos para cerciorarme que me estaban llamando. Cerré el libro, lo guardé en mi túnica y me puse a andar en dirección a dónde estaba el sombrero seleccionador.

Me sabía la ceremonia al dedillo, mis padres me la habían explicado muchas veces.

Me detuve frente a el y me lo pusieron para que me asignase una casa. Lo sentía moverse, hablaba conmigo e incluso me dejaba contestarle como ya había hecho con otros alumnos. No parecía tenerlo del todo claro. Por supuesto el sabía en qué casa estaba pensando yo. Aunque tuviera que convivir con aquellos pedantes me gustaría pertenecer a la casa que vi a mis padres crecer.

- GRIFF... SLYTHERIN - dijo al fin el sombrero.

Una gran ovación se oyó desde la mesa de los verdes, los miré con cara de indiferencia, forcé una sonrisa y, cuando me hubieron quitado el sombrero, caminé en dirección a la mesa de mi casa.

Anduve allí donde se congregaban los primeros novatos de Slytherin, una chica que parece querer pasar desapercibida, y otro chico.

- ¿Puedo sentarme aquí? - le pregunté a la chica aunque no esperé para tomar asiento, sacar el libro y continuar leyendo.

Cargando editor
29/09/2018, 17:29
G3 - Henry Alson

Al oír mi nombre me acerco poco a poco, con los hombros encogidos y la mirada baja.

Me ponen el sombrero y lo único que puedo pensar es por dios que se acabe este suplicio, cuando el sombrero después de un rato de deliberación grita: Ravenclaw.

Rápidamente me levanto y me dirijo a los bancos Ravenclaw y me siento en un sitio que esta libre.

Cargando editor
29/09/2018, 19:49

¡Vamos, siéntate aquí!

Notas de juego

Aplaudo al nuevo miembro y compañero de casa, Alson, y le hago un sitio a mi lado.

Cargando editor
30/09/2018, 08:46
G3 - Henry Alson

Gracias.

Notas de juego

Lo digo en un tono bastante bajo.

Cargando editor
01/10/2018, 15:18
Asrai

Escucháis algo parecido a un aullido que resuena en vuestros tímpanos, al cabo de unos segundos se abre la puerta de la gran sala y aparecen cinco figuras en el umbral, los profesores se ponen en pié al instante, parecen asustados y tensos al igual que los alumnos de cursos superiores al vuestro, muchos se meten bajo las mesas o echan a correr hacia las salidas y otros se ocultan donde pueden, todas las puertas excepto las que tienen a su espalda las cinco figuras se cierran con sonoros portazos y las figuras avanzan unos pasos. Túnicas negras y un aura aún más negra que casi puede verse. Parecen los mortífagos de los que hablan los periódicos y los anuncios del ministerio de magia.

La figura que se encuentra en el medio dice algo y mueve su varita con un movimiento rápido y horizontal. Al principio no pasa nada, luego se oyen algunos grititos de alumnos y luego se le unen todos los demás, todos los alumnos tienen ahora un runa brillante encima de la cabeza, algunos tienen una "S verde", otros poseen una "B amarilla" y otros, los menos, tienen una "Ñ roja", podeis ver la de todos vuestros compañeros, sin embargo cuando lo intentáis no conseguís ver la vuestra.

El profesor Francias Martone salta por encima de la mesa y corre hacia las figuras negras, grita algo que no entendéis y las figuras hacen movimientos de varita casi al unísono, rayos escarlata salen de ellas y se dirigen hacia el profesor, los alumnos contienen la respiración mientras una barrera azulada aparece entre los rayos y Francias Martone. 

Mike Travis Redford, el profesor de vuelo y antigua estrella de Quiditch se lanza contra las figuras también, cuando está a la par del profesor Martone hace un movimiento de varita rápido y lanza una ráfaga de viento como un huracán hacia las figuras negras, cuatro de ellas la esquivan con un movimiento lateral, la figura central hace un movimiento con la mano y la varita, al instante el tornado desaparece y se convierte en una brisa. 

- HA HA HA HA, por favor, haced algo máss, o por lo menoss haced algo no tan obvio, oss lo ruegooo...

La voz os hiela la sangre y es lo más terrorífico que habéis oído jamás.

- No sois bienvenidos en la escuela - La voz de Martone suena dura y autoritaria.

La figura que ha hablado hace un giro de muñeca y grita algo que es impronunciable para vosotros, parece una lengua gutural y salvaje. Al momento el profesor Martone suelta su varita la cual cae al suelo unos segundos después de que él haga lo mismo, un aura verde le rodea y el profesor Mike travis Redford se echa a un lado horrorizado.

- Todoss loss ssangre ssucia fuera ahora missmo, vosotross ya sabéiss quieness soiss...

 El director no está en la mesa, parece que ha huido. 

- Los alumnos con la "Ñ roja" encima de la cabeza, fuera de aquí - Exclama un alumno de segundo año.

- Muy bien muchacho, parecess un chico lissto. creo que tieness un gran potencial. ¿Slytherin supongo?

El chico asiente mientras un compañero de su edad le mira con cara inquisidora.

Uno de los alumnos con una "Ñ roja" encima de la cabeza sale de debajo de una de las mesas y se dirige hacia las puertas, al salir se gira y las lágrimas caen por sus mejillas, después sigue alejándose hasta que desaparece de la vista. Otros chicos y chicas le siguen y pronto ya solamente quedan unos pocos con la runa señalada. Una de ellas es la Slytherin que había tropezado al ir hacia el sombrero, el chico de segundo año de su casa la agarra por el brazo y la saca de debajo de la mesa, unos instantes y forcejeos después está en el suelo, el chico la ha lanzado como si fuera basura a los pies de la figura negra. La chica no deja de llorar de miedo, está a punto de colapsar, de repente un rayo blanco golpea a la figura siniestra y rueda por el suelo, el director aparece y detrás de él lo que parecen cinco Aurores. Las figuras negras lanzan un aullido extraño como cuando llegaron y desaparecen en la fría noche. La chica todavía tirada en el suelo no deja de temblar, al cabo de unos segundos cae al suelo desmayada.

Cargando editor
02/10/2018, 06:01

La escena que se desenvolvió ante mis ojos, impactante, atemorizante… pero no nueva, no, ya esto había ocurrido antes en mi propia casa, pero ese día no había luz blanca que nos salvara lo perdí todo… y todo por ser tan débil, ya veo que aquí las cosas son distintas, si bien el mal existe hay una fuerza todavía capaz de rechazarlo, observó a la pobre desmayada en mitad del salón todavía con lágrimas cayendo de sus ojos… incluso inconsciente su trauma no ha pasado, es un recuerdo muy vivido para mí todavía.

Me levantó y acudo a la pobre chica en el suelo, con una mirada de preocupación observo al Director y a las 5 figuras junto a él.

¿A dónde puedo llevarla para que alguien la ayude?

Si bien no conozco a esta chica, no puedo quedarme sentado y verla sufrir de esta manera, no cuando puedo ayudarla de alguna manera.

Mientras intento sostenerla observo con una mirada de seriedad y quizás hasta odio al chico de segundo año de mi propia casa que la coloco en tal situación, más no dirijo mi palabra a el.

Cargando editor
02/10/2018, 08:54

No pude evitar alzar la vista ante la escena que se había creado en el salón principal. Unas figuras eran las que estaban creando tal alboroto. Con un movimiento de varita de una de las figuras comienzan a aparecer runas de colores sobre nuestras cabezas. No me costó nada entender que, aunque no la pudiera ver, también yo la tenía sobrevolando la cabeza. Parecía una forma de identificación de los tres tipos de sangre de mago.

Un par de profesores intentaron en vano atacar a las figuras, que esquivaron son problemas sus ataques, y respondieron atacando al profesor Martone con un encantamiento que todavía no conocía.

Justo después ordenaron a los sangre sucia irse del salón. Y un compañero de casa anima a los alumnos de la "Ñ" de color rojo que salgan de ahí.

- Que gilipollas, no podemos ver nuestra propia runa - digo en voz baja externalizando mi pensamiento, no puedo son los tontos Un chico listo dice, que vergüenza para Slytherin haber tenido a ese y tener a este pensé para mis adentros.

Instantes después los alumnos con la "Ñ" comenzaron a desfilar hacia fuera del salón. Chicos y chicas que todavía no habían sido seleccionados y otros de las diversas casas, incluso algunos Slytherin. No puedo con las discriminaciones por sangre. En aquel momento chicos y chicas que posiblemente fueran mucho más capaces que aquel que había ordenado que los de la "Ñ" salieran, estaban siendo obligados a renunciar a ese colegio, pero en cambio el patán continuaba en la sala ufano, pensando en que era muy inteligente, la figura que le había alagado también había tenido su oportunidad, pero estaba claro que no merecía ni haber pisado un jardín de infancia.

Un compañero de Slytherin arrancó de mi lado a la chica que había tropezado durante su selección, y pretendía que también se fuera, ya que también llevaba sobre su cabeza la "Ñ" de color rojo. Bastante cansada de toda esa pantomima y quizá por pena o por empatizar con una compañera de casa, me levanté y agarré el brazo del chaval de segundo año.

- ¡Déjala en paz! - exclamé mientras le golpeaba sin resultado satisfactorio.

Al final la soltó, pero no porque me hubiera hecho caso, más bien me ignoró durante todo el tiempo. Tiró a la chica a los pies de la figura negra. Dejé al chico en el momento en el que la tiró y corrí hacia ella para ayudarla a levantarla justo después que el rayo blanco que parecía haber tirado el director, que acababa de aparecer en la sala con lo que parecían ser cinco aurores. En ese momento un alumno recién seleccionado se levantó también para socorrer a nuestra compañera y preguntó donde podían llevarla.

- Venga, vamos a levantarla y a apartarla de aquí - le dije -. Intentemos que se tranquilice - añadí.

Agarré del brazo a nuestra compañera y tiré hacia arriba.

- ¿Cómo te llamas? - le pregunté - Yo soy Ariana, vamos levántate, vamos a apartarte de aquí - le dije.

Cargando editor
02/10/2018, 13:01
S2 - Asenath Larkin

Notas de juego

Supongo que sigo inconsciente así que no hago nada.

Cargando editor
02/10/2018, 13:50
Asrai

La ceremonia sigue pero el ambiente es muy diferente, ya no hay tantos aplausos que llenen la sala cada vez que se dice el nombre de una casa, no hay alegría en los corazones, la muerte del profesor y el miedo que todavía sentís es una losa muy pesada. Cal Whitaker, Ariana Midgeon y la inconsciente Asenath Larkin se han ido con el profesor Mike Travis Redford que lleva como puede a la profesora Francias Martone a la enfermería.

El alumno que lanzó a la chica ha sido marginado por todos sus compañeros, los profesores siguen en la mesa que preside la ceremonia, sin embargo el semblante serio se ha impuesto y ya no sonríen, el director sigue hablando con los aurores en un tono más relajado pero sin cambiar su cara de enfado.

Cargando editor
02/10/2018, 14:22
G3 - Henry Alson

Notas de juego

Cuando toda la conmoción pasa salgo de debajo de la mesa y me vuelvo a sentar.

Cargando editor
02/10/2018, 16:54

Sin saber bien bien que es lo que acaba de pasar intento encontrar a los alumnos de mi casa y sentarme cerca de ellos. Escucho y callo

Cargando editor
03/10/2018, 11:15

...hola, espero que nos llevemos bien. Esforcémonos juntos.

Notas de juego

Saludo a mis nuevos compañeros de forma triste, la situación ha cambiado demasiado en un periodo de tiempo extremadamente corto, no estoy con la misma vitalidad que tenía antes.

Intento recomponerme pero no puedo ocultar la preocupación que se refleja claramente en mi cara.

Cargando editor
03/10/2018, 13:49

Recuerdo que mis padres me informaron de lo serio, duro y satisfactorio que resulta estar en ésta escuela...

No voy a defraudarles.

Cuándo llega mi turno me dirijo con tranquilidad al asiento, al rozarme el sombrero la frente empezó a reír

Hahahahaha! Andrés Atlas! ¡Ravenclaw! ¿¡Dónde si no!? 

Me siento al lado de mis nuevos compañeros.

 

Cargando editor
03/10/2018, 16:33
G3 - Henry Alson

Si espero que nos llevemos bien.

Notas de juego

Lo digo con una mirada perdida en el horizonte.

 

Cargando editor
08/10/2018, 23:00
G3 - Diana Atwood

La felicidad y el entusiasmo que compartía con todos de estar allí, se esfumo en un instante. Fulmine con la mirada a las figuras de negro, paralizada, sintiendo el corazón en la garganta. Los profesores intentaron detenerlos, sentí una falsa sensación de seguridad que se esfumo cuando uno de ellos cayó en medio de una luz verde. Me cubrí la boca con las manos horrorizada, ahogando un grito. Metí la mano dentro de mi túnica y aferre con fuerza la varita, manteniendola oculta en la tela, aunque si dos brujos expertos no eran rivales, que podíamos hacer un montón de niños sin instrucción magica?

Las runas se instauraron en nuestras cabezas y sentí ganas de vomitar, no sabía cual me había tocado, pero lo suponía. Observe con desprecio al chico que los aplaudía, no pensaba irme de allí, ese imbecil podía salir por su propia cuenta si le molestaba nuestra presencia. Todo acabo casi tan rapido como había empezado cuando el director regresó con un grupo de aurors. Pero parecía que alguien había apagado una radio, dejando un tetrico silencio. La ceremonia continuo y pequeños murmullos fueron surgiendo.

-¡Diana Atwood!

Me sobresalte cuando al fin escuche mi nombre. ¿Que tal si no me mandaban a ninguna casa? ¿Si todo había sido un error? Aunque ahora quiero aún más estar aquí. Camine con paso resuelto hacia el taburete observando las mesas de las casas al pasar sintiendo todos los ojos sobre mí. Dios, la cara me ardía, enfoque la vista en el sombrero para quitarme el hormigueo que me generaban las miradas, y trague saliva. Observe a la bruja que me esperaba junto a la tarima y me sente con las manos cerradas firmemente sobre las rodillas. El sombrero me calló sobre los ojos.

-¡Otra Atwood! Hacia mucho desde la última... Bien... bien... donde podrías ir? ...Mm... Un fuerte sentido de la justicia, Gryffindor te recibiría bien... aunque esa mente... sí, definitivamente, ¡esa curiosidad es igual a la de tu madre! ¡RAVENCLAW!

Exhale bruscamente de alivio pero lo que hubieran sido sin duda saltos de alegría quedaron reducidos a una sombría caminata hacia la mesa de la casa. Me deje caer en el primer asiento libre que encontre y observé a mis compañeros saludandolos con un gesto de la mano.

Cargando editor
11/10/2018, 22:01
S3 - Wynnona Sorrow

Los Sorrow, portentosa familia, dignos herederos de una larga historia de pureza, nadie puede poner en duda su sangre ni su origen, pues, siendo miembro de los Sagrados 28, se han encargado siempre de mantener su estirpe alejada de los sangre sucia y aquellos que han traicionado sus orígenes. O eso es lo que Melinda Sorrow, su madre, decía, y sus hermanos repetían.

Sus hermanos, eran tres, Alecto, Amycus y Ophelia, todos mayores que ellos por mucho, pero lejos de tener la gracia de ser criada como hija única, su madre no mostraba mucho interés en ella, más allá que en su educación y que supiera cual era su lugar.

Su padre le decía que el humor de su madre se había agriado por que sus hijos mayores estaban lejos de ella y porque su otra hija, siempre estaba apenada, Wynnona no entendía mucho esto, menos las razones por las que Alecto y Amycus nunca los había visto, ellos se habían ido hacia años y sólo los conocía por fotografías. De ahí es que no es extraño que en el anden, la joven estuviese sola, acompañada sólo por una de las doncellas de su madre, esperando el tren que la llevaría a su primer año en Hogwarts.

Estaba muy nerviosa, se encontraría con muchos otros niños, no tenía mucho contacto con otras personas que no fuesen las del servicio de la Mansión Sorrow, su madre estaba ocupada y no tenía tiempo para ella, su padre, siempre estaba de viaje pero cuando llegaba, le dedicaba algunas horas que la chica aprovechaba al máximo y su anciano padre también, era el único que mostraba verdadero aprecio por ella o eso sentía la niña. El otro familiar presente en la mansión era su hermana mayor, Ophelia, pero ella también la evitaba o parecía que debía contarle algo, porque cuando se veían los ojos de aquella mujer preciosa se ponían tristes y llorosos.

Pero de vuelta al anden, no pocos repararon en la joven que despedía una belleza que si bien aún no florecía del todo, estaba latente, propio de la sangre mágica que corría por sus venas; no fueron pocos los ojos que se posaron en ella antes de subir al tren en donde viajaría en un compartimiento sola, aún recordaba la discusión de hacia una semana entre sus padres cuando llegó la carta de Hogwarts, su madre no quería que fuera a la escuela, estaba dispuesta ella misma educarla, pero su padre no, él insistió en que debía ir a la escuela y dejar en alto el nombre de los Sorrow como todos los miembros de esta familia lo habían hecho.

Wynnona se ocultó para escucharlos, y una frase que no entendió de su padre : "así será menos sospechoso", y con eso, su madre accedió. Obviamente Wynnona intuyó que había algo más, pero no tenía ni el valor ni la fuerza para preguntar y cuando ya estaba arriba del tren, disfrutando del paisaje, ella sólo pudo sentirse contenta, sonriendo y olvidando lo que pasaba en la mansión.

La llegada a la escuela fue ruidosa, caótica, con todos yendo de un lado a otro hasta que los prefectos los guiaron, sobre todo a los de primer año, y ella decidió ir adelante, sus ojos ligeramente rasgados destellaban en ingenio, pues, el haber vivido tan apartada de las personas la había olvidado a tener que adaptarse a las situaciones, a fingir a la perfección y a siempre demostrar aquello que se esperaba por medio de una sonrisa perfectamente ejecutada.

La entrada al salón fue otra sorpresa que Wynnona disimuló perfectamente, aunque de todas formas los ojos se le fueron al cielo repleto de velas y estrellas que bailaban sobre sus cabezas, por unos instantes antes de entrar en el salón a paso firme y con mucha seguridad. Buscó un lugar adelante y aguardó a que su nombre fuese llamado.

"Wynnona Sorrow", se escuchó, la chica subió los peldaños hacia donde estaba ese roñoso sombrero que no había dejado de hablar durante toda la jornada, mandando a tantos alumnos que ella debía ser una de las últimas. Ahora si sintió miedo y apretó su puño con fuerza hasta sentarse en el sitial y la profesora colocó aquel sombrero sobre su cabeza. La mujer mantuvo su semblante serio, ya se habían levantado algunos comentarios cuando se escuchó aquel apellido. Wynnona sabía perfectamente cuales eran las razones por las que sus hermanos mayores desaparecieron hacia 10 años. Algo que su familia no comentaba pero que Wynnona había descubierto. Varios de los vástagos de los sagrados 28 empezarían ese año, algo curioso que tantos se estuvieran congregando.

"Una Sorrow... pero una Sorrow muy particular" le comentó el sombrero "Siento en ti el valor de los Gryffindor, deberías ir a esa casa, pequeña, serías mucho más feliz ahí, pero también siento la sagacidad de Slytherin pero ahí, no será lo mismo que en Gryffindor, sin embargo, la verdad estará mas cerca de ti" Sentenció el sombrero, lo que asustó a Wynnona quien comenzó a suplicar que la mandara a Slytherin, si iba a otra casa, defraudaría a sus padres, todos los Sorrow de la historia habían sido parte de esa casa, y ella debía serlo también. Debía, y rogó que la mandara a esa casa, sin saber a qué se refería con eso de la verdad. Wynnona apretó los ojos cuando el sombrero pareció rumiar la decisión...

¡¡ Slytherin !!

Los aplausos reventaron cuando el sombrero indicó que la niña rubia iría a la casa de la serpiente, aliviada, Wynnona dejó que le sacaran el sombrero y fue hacia el resto de sus compañeros que la felicitaron, no esperaba que la felicitaran, pero le gustó su aceptación que agradeció con una tímida sonrisa y mejillas sonrojadas.

 

Cargando editor
12/10/2018, 15:35

Su primer día fuera de la protección de su casa y de sus padres ha pasado por atravesar una pared mágica, montar en un tren mágico y descubrir dulces mágicos como las ranas de chocolate que están encantadas y pueden saltar... Aunque solo una vez. Y al hacerse de noche y llegar a su destino, no puede ser menos emocionante. El nerviosismo de haber subido a una barca que se mueve mágicamente y atravesar un lago en el que habitan criaturas extrañas, pero interesantes, no ha acabado de desaparecer cuando se disponen a entrar en el Gran Comedor.

-Qué nervios... - murmura.

Las puertas se abren y entran en una sala supergrande y llena de velas que se sostienen en el aire. Y el techo... es impresionante.

-Guau... qué impresionante...

Uno a uno los alumnos se sientan en un taburete y se ponen un sombrero que parece haber pasado por mejores momentos que ese. ¡Y encima habla!

-Alenia Stone.

Y llega su turno. Se dirige con nerviosismo hacia el taburete y se sienta para, acto seguido, nota el sobrero sobre su cabeza.

-Veamos, mmm... ¿Dónde te ponemos a ti? No te importa el trabajo duro... Quizá Hufflepuff...

Mientras va hablando el Sombrero Seleccionador, va pensando que no tiene ni idea de nada de las casas que el Sombrero va citando. ¿Encajará en alguna de ellas? Parece que para eso está el Sombrero Seleccionador, para ver en que sitio encajan más. Pero le parece un tanto injusto tener que separar a los alumnos en casas. Eso hace que se enfrenten entre ellos y esas cosas, ¿No?

Y después de haberse perdido en sus pensamientos, por un segundo, el sombrero grita su casa.

SLYTHERIN!

Da un respingo al ver que el sombrero grita y se levanta del taburete para correr a lo que parece su mesa.

-Hola...

Sonríe, tímidamente, a sus compañeros.