Orden | Personaje | Iniciativa |
---|---|---|
1º | Escolta 6 | 22 |
2º | Melanctha | 20 |
3º | Aristocles | 17 (+14) |
4º | Escolta 5 | 17 (+13) |
5º | Escolta 3 | 15 |
Aristocles corría entre los árboles, y el dáctilo herido intentaba seguirle infuctuosamente. Cargado como estaba con tan pesada armadura y con esas patitas tan cortas, a pesar de la edad del anciano, seguir su paso era tarea de titanes.
Por el Escolta 3 no os tenéis que preocupar aún que tardará un par de turnos en llegar.
El Escolta 6 sale tras Aristocles y no le alcanza este turno (patas cortas, herido, armadura). Si quieres, puedes lanzar conjuro este turno sin peligro. Ahora, eso sí, si te quedas para lanzar conjuro y el próximo turno, si el gana iniciativa, te va a endiñar. Si no la gana, tal vez te libres.
Pero antes, turno de Melanctha (que sigue trabada en combate frente al Escolta 5)
Vale, no pillo muy bien la regla de destrabarse. ¿Para destrabarme tengo que esperar a que él falle sus ataques, o al haberle ganado la iniciativa puedo salir corriendo sin más?
¿Tiradas de percepción o elegimos sin más?
Está completamente a oscuras y no veis nada que os permita saber qué camino han tomado. Debéis elegir vosotros por donde ir.
La regla es clara. Uno no escapa del combate cuerpo a cuerpo hasta el final de un asalto en la que su única acción en ese asalto es escapar del combate cuerpo a cuerpo. Durante ese asalto, los enemigos cuerpo a cuerpo realizarán los ataques que les toque al personaje que intenta escapar.
Si te fijas, he hecho lo mismo con Aristocles el asalto anterior. Morapio (llevando a Asristocles) me ha dicho que escapaba corriendo y a la vez intentaba lanzar un hechizo. Pero no podía hacer ambas cosas. Decidí por él que su opción era escapar (destrabarse) que es lo único que su personaje ha hecho el asalto anterior. Además, ha escapado después de que todos los enemigos que le pegaban a él en ese asalto (el Escolta 6) realizaran sus ataques.
Así que tú decides. Declaras salir del cuerpo a cuerpo o sigues combatiendo.
Haciendo caso del sabio consejo del filósofo, Melanctha decidió que era prudente retirarse y salió corriendo tras él.
OK, ok, sólo era por aclararlo. :-)
Yo mantengo el plan, salvo que Néstor tenga alguna idea mejor.
Y el plan es ir hacia donde ?
Mi plan era ir al palacio, dado que me parece más probable que la ceremonia sea allí que en las minas. Debería haber sido más específico.
Aún no me queda muy claro si ambos estáis de acuerdo en esto de tomar la dirección de Palacio.
Dadilaer. Si me puedes confirmar si estás de acuerdo o por contar opinas que deberíais tomar otra dirección.
A ver, Morapio. Que te toca con Aristocles.
La decisión estaba tomada. Sólo quedaba alejarse de esos pequeños bastardos que estaban haciendo trizas a los pocos salvajes que restaban...
Como no habías dicho que me tocaba, estaba a la espera.
Sigo huyendo.
Mientras Melanctha intentaba zafarse de él, el escolta que había llegado a la posición de ella intentó golpearla.
Motivo: Escolta 5 atacando a Melanctha
Tirada: 1d20
Dificultad: 14+
Resultado: 1(+4)=5 (Fracaso)
— El escolta 4 ataca a Melanctha y falla su ataque.
[PENEJOTIZADA por asó decirlo: EXPLICACIÖN]
Tras evitar con facilidad el ataque del gnomo caverníacola, Melanctha tuvo campo libre para poner pies en polvorosa yd ejar una buena distancia entre ella y el dáctilo.
Aunque ganó la iniciativa, ahora es cuando Melanctha huye y se aleja del Escolta 5. Después de que se hayan resuelto todos los ataques de los PNJs que estaban trabados cuerpo a cuerpo con ella. Además, deja una buena distancia entre ella y el gnomo.
A lo lejos, casi una treintena de metros, Aetos y Melanctha veían acercarse a otro dáctilo. El resto había desparecido en pos del salvaje que había quedado vivo, atravesando el bosque en dirección al túnel cavernoso por elq ue habían llegado a la Gran Caverna.
El Escolta 3 sigue corriendo en esta dirección, pero aún está bastante lejos de la posición donde están los otros dos dáctilos, y aún más lejos si cave de vosotros.
Melanctha y Aristocles corrían a través del bosque de hongos gigantes escapando de los dáctilos.
Dos de los gnomos de las rocas iban por delante y uno más iba mucho atrasado, a lo lejos. Los pequeños humanoides sudaban profusamente, enfundados en sus pesadas armaduras, intentando alcanzar infructuosamente a los dos héroes. Por cada paso los dáctilos, los héroes daban otros dos.
Al poco, el sabio y la cazadora perdieron de vista a los pequeños humanoides. Parecía que estaban a salvo.
Ahora en teoría, si os ponéis a correr sin mas, los dáctilos no tienen manera de alcanzaros. Sus pesadas armaduras sumadas a su reducida tasa de movimiento hacen que siquiera necesitéis hacer tiradas de Proeza Atlética para escapar (posiblemente el otro salvaje también logre dejar atrás a sus perseguidores).
Ahora la cuestión es hacia donde huis, porque la mayoría de dáctilos de la guardia han corrido hacia el lugar del qué vinistéis, siguiendo al salvaje. Así que si huís hacia allí, posiblemente os topéis con ellos (el salvaje y los dáctilos que el siguen).
No tengo claro nada, pero voy donde Aetos. Perdón !
Mi idea es seguir corriendo hasta dar con Néstor y Aetos, que son los guerreros, para enseñarles a los dáctilos que se han metido con los héroes equivocados.
Cruzarme con los gnomos mientras corro no me importa mucho, porque sigo corriendo más que ellos...
Coincido. Mejor no perdernos por aquí abajo, vamos en dirección a donde se han ido los salvajes y quizá encontremos a Aetos y Néstor. Si nos cruzamos con algún gnomo, en carrera debería ser fácil rodearlos y esquivarlos.