Partida Rol por web

La Edad de los Héroes

CAPÍTULO PRIMERO: LA CAZA DEL ÉQUIDO (Aestos y Néstor)

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25/04/2013, 14:07
Calístrato

- ¡¡Los custodiaremos hasta que volváis y punto!!! - Termina la conversación tajante. - No somos una panda de inútiles para no poder vigilar a individuos heridos, desarmados y maniatados. En una mañana habremos cavado un foso fresco en el que meterlos. -

Concluye diciendo: - ¡¡Marcháos de una vez!! Vuestros amigos corren peligro con esa Bestia fuera. -

Notas de juego

Lleváis dos semanas con este rollo de si los vigilan en el pueblo o si los custodian a Tenas. No es algo que considere importante, LEÑE.

Carpetazo del Master, y a tomar por cul, que a veces hace falta para que la historia siga adelante.

Y disculpen los modos. :P

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29/04/2013, 17:21
Aetos

Aetos asiente con la cabeza. Consciente de que a Néstor no le va a hacer ninguna gracia la forma de decidir de Calístrato, intenta evitar otra discusión aferrándose al hecho de que sus compañeros necesitan su ayuda.

-Debemos encontrarles, vayamos.

Comprueba con la mirada que el noble y los soldados siguen atados y se pone en camino lentamente, confiando en que el noble haga lo mismo.

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30/04/2013, 00:38
Néstor

Pese a que las palabras del tuerto no eran lo correctas que podían esperarse, la reacción del Noble fue positiva y pareció quitarse el peso de encima sobre aquella decisión. Nunca le había gustado decidir, no le iba la responsabilidad...y aquello le libraba.

Así pues, asintió ante las palabras de su compañero y enfundó su espada. 

- Salgamos enseguida - dijo mientras se dirigía a la salida en busca de su caballo.

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30/04/2013, 02:11
Maze Master

Los dos héroes recibieron las bendiciones y una cordial despedida de los campesinos cuando se alejaron de la aldea. Les acompañaba el bello animal que habían obtenido en la liza.

Se apartaban del olivar y las cabañas mientras se adentraban en los trigales que rodeaban la aldea.

Vieron zonas calcinadas dentro del trigal. Pero aquello no había sido provocado por las antorchas de los asaltantes. Según la versión de los campesinos, aquella desolación había sido causada por el paso de La Bestia y su manada. Aquél rastro era fácil de seguir, pues parecía un reguero calcinado, y aplastado por un grupo numeroso de seres. Un rastro evidente que atravesaba el trigal como un surco hacia el nordeste.

Aquella era la dirección de donde los aldeanos le habían dicho que venía la bestia y su prole. La misma que señalaba el evidente rastro calcinado, aunque tras terminar los campos cultivados, se divisaba una amplia pradera.

Más allá de la pradera, en la distancia, los héroes divisaban unas alta cordillera montañosa. En la base de las montañas crecía un frondoso bosque.

Si sus compañeros habían salido en pos de La Bestia y su manada, sin duda habrían seguido aquella dirección.

También creyeron recordar que, por otro lado, seguramente Lycaios y sus hombres vinieron del oeste, a unos dos días de la costa, donde posiblemente una embarcación les esperaba.


Sea como fuere, era ya media tarde cuando emprendieron camino...

Notas de juego

Mapa recordatorio:

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30/04/2013, 20:52
Maze Master

Notas de juego

Por si acaso, pregunto:

¿Hacia la costa o hacia el bosque? ¿Por donde vinieron los heraklyanos o por donde vino La Bestia?

¿Hacéis algo especial antes de partir o durante el viaje?

¿Monta uno a caballo y el otro va a pie, os sigue el semental por detrás mientras camináis los dos, montáis los dos en él...?

Cualquier cosa que se os ocurra.

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01/05/2013, 19:46
Néstor

El joven noble y su compañero salieron del pueblo. Néstor decidió no montar al caballo mientras su compañero tuviese que ir a pie, pues no le gustaba mostrarse altivo con Aetos, al que consideraba un amigo, no un vasallo. Así pues salieron del pueblo y varias posibilidades se les presentaban ante sus ojos. Pero, sin duda, el joven tenía claro hacía donde deseaba ir.

- Alcancemos a esa bestia - dijo en voz alta mientras miraba al bosque. Sin embargo, sus tripas rugieron en aquél momento- Pero necesitaremos vino y comida para el camino...

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02/05/2013, 15:31
Aetos

Antes de partir definitivamente, Aetos pregunta a Calístrato por última vez sobre hacia dónde se dirigieron sus compañeros, intentando hacerse una idea clara de qué dirección deben tomar.

-La comida de los campesinos no fue demasiado copiosa, pero deberíamos intentar aguantar con ella y darnos prisa. La llegada de la noche aterraba a las gentes del pueblo.- contesta a Néstor, mientras se pone en camino en la dirección que le hayan señalado. -Además, seguro que ellos mismos no tienen demasiados alimentos, si están hostigados por esa "bestia".

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02/05/2013, 16:22
Néstor

La idea de pasar "hambre" no hacía mucha gracia al Noble, que estaba acostumbrado a alimentarse tanto como solía alimentar su espíritu. Sin embargo, era un hombre de acción y quería encontrarse, por fin, con la temida Bestia de la que todos hablaban. Así pues, sin que sirviera de precedente, hizo caso a su compañero y asintió ante sus palabras emprendiendo el camino que los separaba del bosque. Se hacía de noche y la temida criatura salía cuando el sol se había ido..así que, con un poco de suerte, quizás se la encontrasen más pronto que tarde.

Néstor pensó en el banquete que el Rey le concedería, el buen vino que correría por su garganta para celebrar su hazaña y en las mujeres que se lanzarían a sus brazos en pos de conocer al gran hombre. Sus ojos brillaron y una mueca risueña se dibujó en su cara, era un soñador...y estaba soñando despierto.

- ¿Crees que cantarán alabando nuestras gestas? - preguntó en su ensoñación sin detener la marcha. Como hombre orgulloso, uno de sus deseos era conseguir que cantaran sus aventuras y proezas, para que todo el mundo pudiese conocerlas. Sería un orgullo tener canciones con su nombre.

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04/05/2013, 23:45
Maze Master

Los amigos continuaron adelante entre las prisas de Aetos y las ensoñaciones de Néstor.

Antes de iniciar camino, la pradera que les separaba del bosque no se les había antojado tan extensa, pero la vista engaña ante una llanura sin apenas puntos de referencia. En algún momento, tras casi dos horas de patear, miraron atrás, y les pareció que habían caminado tanto como distancia les quedaba por recorrer.

Más que cansado, el viaje se les tornaba aburrido, salvo las frases que ambos guerreros se cruzaran de vez en cuando. El animal que les acompañaba se comportaba, empero, felíz de recorrer la llanura, moviendo la cabeza y la cola a un lado u otro en señal de alegría. El semental miraba a un lado y a otro impaciente, pareciendo deseoso de soltarse de sus riendas y galopar libre a los cuatro vientos recorriendo los infinitos pastos. Néstor y Aetos, a pesar del tedio, eran hombre de mar, el cuál se mostraba más insondable e interminable que cualquier llanura que conocieran.

Finálmente, el rastro les llevó al bosque. Cuando llegaron a los árboles no acababan de creérselo.

Por suerte, el bosque era fácil de atravesar, sin apenas arbustos o vegetación baja que impidiera el movimiento, y había espacio entre los troncos de los árboles. Se dieron cuenta que ahora caminaban cuesta arriba, en dirección a las montañas, a medida que la luz del día declinaba.

Cuando el sol de puso, se percataron lo difícil que les resultaba seguir el rastro sin luz, incluso en un bosque tan despejado. Crearon antorchas para intentar continuar, pero era inútil, pues no eran hombres montaraces, si no marinos, y pronto se encontraron perdidos.

Parecieron encontrar un nuevo rastro, y los siguieron un rato, pero al poco comprobaron que habían caminado en círculo, y que aquél rastro era el suyo propio.

Así pues, derrotados por las circunstancias, se detuvieron a descansar, a su pesar. Pues no habían encontrado rastro de sus compañeros, y se preguntaban qué había podido ser de ellos.

Se turnaron para dormir y vigilar que La Bestia no les sorprendiera por la noche, pero la velada trascurrió tranquila, sin sobresaltos. Hubieran empezado a pensar que la historia que los campesinos les habían contado sobre el engendro no era más que una gran fantasía, si no hubieran visto por sí mismos el rastro que el ser y su prole dejaba a su paso.


A la luz del amanecer, retomaron la búsqueda. Encontraron de nuevo el rastro de la manada de La Bestia, pero cada vez les resultaba más difícil de seguir, pues el paisaje empezó a ascender y a hacerse más rocoso, a medida que el bosque se despejaba. Ya no había huellas, y apenas unas marcas calcinadas sobre piedras y tocones, allí por donde parecía que la Bestía había pasado.

[[Descripción retocada a posteriori, para ajustarse mejor al escenario]]

<< Dieron muchas vueltas y revueltas, hasta que salieron del bosque para llegaro a una laguna, situada en el fondo de una hondonada a los pies de las montañas. La laguna estaba totálmente rodeada de altos riscos, y se alimentaba de una hermosa cascada que caía desde un escarpado a gran altura. El arroyo que proporcionaba agua a la cascada parecía serpentear y venir desde las lejanas montañas al nordeste. Había algún pino en lo alto de los riscos que rodeaban al lago, no demasiados.

La laguna está rodeada por altos riscos, y desde las alturas se divisa que sólo una pequeña zona del fondo de la hondonada, junto a la laguna, cuenta con una especie de playa de guijarros. Pero el camino de descenso desde lo alto de los riscos hasta la playa parecía difícil, más aún para un cuadrúpedo, aunque no imposible.

Además de por ese camino descendente, alguien podría descender trepando por cualesquiera los otros riscos que rodeaban la laguna, pero debería ser alguien ágil y atlético... >>

<< ... La rocosidad del terreno hacía imposible seguir el rastro a partir de aquí. El paisaje es hermoso, y el aire es frío. Más arriba de la laguna, hacia las elevadas montañas al nordeste, se divisaba un rocoso camino que parecía dar a un laberinto de desfiladeros entre las montañas. >>

Notas de juego

Tiradas de Evadir Peligros (1d20 + bono de Evadir Peligros), y narrad cómo os aproximais.

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07/05/2013, 01:58
Maze Master

Notas de juego

Por si no os ha quedado claro:

Aunque no es visible en el mapa, el arroyo gira luego hacia la derecha, y proviene también de las montañas, situadas al nordeste.

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07/05/2013, 03:28
Aetos

Durante el primer día de búsqueda Aetos deja que Néstor continúe imaginando las canciones que cantarán en su honor. Por momentos improvisa alguna estrofa de esos futuros relatos o bromea con su compañero; pero a ninguno de los dos se le da bien seguir rastros, así que principalmente mantiene la vista atenta a todos los signos.

Al caer la noche, cuando finalmente se dan por vencidos, se ofrece a hacer la primera guardia.

-¿Se habrá enfrentado la bestia al sabio y a la cazadora? Es extraño que no les hayamos encontrado.- Señala al equino que obtuvieron del noble heracliano. -¿Has pensado un nombre para él?-

El día siguiente transcurre de forma parecida hasta que ambos llegan a la laguna escondida. No parece haber más alternativa que descender hasta la cala de guijarros, y desde allí continuar por el desfiladero, aunque la imagen mental que se ha formado de "La Bestia" a partir de las vagas y contradictorias indicaciones de las gentes del lugar no cuadra con este sendero de cabras entre riscos empinados.

-Un buen lugar para perderse entre los encantos de alguna jovenzuela, ¿verdad? Si te parece bien, me adelantaré para ir comprobando cómo de complicada está la bajada para el caballo, y puedes ir descendiendo detrás con él.-

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07/05/2013, 15:26
Néstor

El noble se acercó con prudencia al borde donde empezaba la cascada y miró con deleite hacía el vacío. Sin duda aquél lugar era especial y tenía una belleza magnética, además de encontrarse en un lugar recóndito y nada fácil de encontrar. Observó el agua que se acumulaba a sus pies y comenzó a cavilar sobre un posible salto al agua para ahorrarse el descenso. Miró varias veces e intentó adivinar la profundidad de aquella improvisada laguna, tratando de vislumbrar posibles rocas, etc.

Entonces su compañero Aetos, que parecía en ocasiones la voz de su conciencia, le propuso un plan alternativo. Lo miró con ciertas dudas en su rostro y volvió a posar sus ojos sobre el agua que tenía a sus pies...¿saltaría?

- Tiradas (1)
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07/05/2013, 23:49
Aetos

Adivinando las imprudentes intenciones de Néstor, Aetos le sonríe y le quita la idea de la cabeza.

-Yo no saltaría. Al margen de lo fría que debe estar el agua, no sabes si acabarás rompiéndote la crisma contra las rocas del fondo. Pensándolo mejor, no es necesario hacer bajar al caballo. Me acercaré hasta la orilla por si la cazadora y el sabio hicieron noche ahí; parece un lugar apropiado. Y si no continuaremos hacia las montañas.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No me deja editar tampoco, así que lo "arreglo" aquí y ya está.

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08/05/2013, 00:53
Maze Master

Os aproximáis al borde de los riscos. Algún árbol pequeño y retorcido hunde sus raices en la poca tierra que hay en el rocoso suelo, para luego asomar su copa al abismo. Desde esta altura tenéis a bastante distancia justo hacia abajo la laguna, que desde aquí se ve con un profundo color azúl turquesa. Este color parece indicar una gran profundidad de la poza (salvo cerca de la playa).

Ahora divisáis mejor el camino que desciende zigzagueante desde la parte superior de los riscos hasta llegar a la playa de pequeños cantos rodados situada a la altura del agua. Si los ojos no os engañan, desde esta misma altitud te parece distinguir en ese misma playa una especie de tocón vertical, levemente inclinado o, quizás los restos de una columna rota.

En ese momento, descubrís en la distancia a una figura acercándose a vosotros andando. Parece haber salido del desfiladero que lleva a las montañas.

 

Es un hombre mayor, vestido con las ropas propias de un ciudadano de las Polis. Lo reconocéis como vuestro compañero Aristocles.

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08/05/2013, 01:01
Salvajes de la Tribu de la Roca Viva

Aetos también descubre a unas cuantas figuras humanas ocultándose tras unas rocas, cerca de la salida del desfiladero por donde ha venido Aristocles. Parece claro que estos individuos venían con él, y se han ocultado al descubriros.

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08/05/2013, 01:04
Maze Master

Notas de juego

Esta escena acaba aquí. No posteéis más en ella. Os enlazo a la siguiente escena, en la que se produce el "reencuentro" entre todos los PJs.

ENLACE.