El shirren levantó las manos, mostrando que no estaba armado.
-Soy Buschwick.- la voz de Schwick resonó n la mente de Sgrog y de la misteriosa interlocutora -Segundo oficial al mando de la nave Righteous Indignation.
Bombas... ¡Ay por el amor de Desna, bombas! ¡Acababan de salir de una maldita batalla campal para acabar en una trampa explosiva! Empezaba a notar las piernas flojas. Esperaba no desmayarse de los nervios...
-No somos enemigos. Por favor, baje el arma y no active las bombas. No tenemos intención de hacer daño a nadie.
Esa criatura no parecía un goblin. La cuestión era, ¿sería una amenaza peor que los goblins o sería una potencial aliada suya?
-Ya me he identificado, ¿puedo preguntar quién es usted?
¿Marco a Kerry o no hace falta?
Director: Sí, marcaos a partir de ahora.
Seguía sin arrepentirme de las decisiones tomadas pero desde luego todo apuntaba a que iba a pasar una larga temporada hasta que pudiera volver a tener un día tranquilo para retozar y descansar. Salir disparados de aquel modo implicaba mucho más que haber tragado algo de tierra y un par de moratones, nos habíamos quedado sin medio de transporte para la vuelta, lo que nos iba a forzar a internarnos más en una cueva de la que no sabíamos nada. Para colmo, el bueno de Schwick demostró que el subterfugio no era uno de sus fuertes, delatando de inmediato su posición y por ende la mía propia. Por suerte, esta supuesta guardia no sonaba para nada como un goblin y mucho nos la tenía que tener jurada el destino para que fuese una caballera infernal.
Con el martillo trueno a la espalda avancé un par de pasos hacia el que parecía ser el punto de proveniencia de la voz y me aventuré a responder.
-Mi nombre es Sgrog'Khar, Capitán del navío mentado por mi buen amigo y nuestras intenciones hostiles están acotadas a los goblins que hemos seguido hasta esta guarida, así que las amenazas no son necesarias, pasando por encima el hecho de que las explosiones en una zona como esta serían tan peligrosas para nosotros como para usted a no ser que lo que busque sea terminar sepultada.- Con las palmas de las manos levantadas hasta la altura de la cabeza y proyectadas hacia el frente espere que quien fuese que nos interpelaba se diera cuenta de la falta de interés en entablar contacto con él, ella o ellos. -Me gustaría pediros ahora que como muestra de recíproca cortesía bajaséis ese foco y os identificaséis también pues creo que hemos dejado claro que no somos enemigos.-
Hizo una mueca cuando el shirren se comunicó con telepatía. Le trajo malos recuerdos. Recuerdos que la ponían agresiva. Bien podría caber la posibilidad de que estuvieran engañándola. Que fueran cultistas y que en el momento en que bajara el arma la moliesen a balazos. Bien le decía su instinto de supervivencia de que bajar el arma tan pronto era extremadamente peligroso y que ya había estado tentando a la suerte durante todo el día. Bien le decía el instinto que tenía que permanecer alerta.
Pero a Kerry no le gustaba esta forma de pensar. No le gustaba esa agresividad, ni esa paranoia. Puede que ese tal Buschwick (o sus ancestros) vinieran del Enjambre, pero eso no significaba que este shirren fuera malvado. Y el Vesk... Sgrog'Khar... puede que la Humanidad y el Imperio Veskarium hubieran combatido a muerte años antes.. incluso antes de que ella misma naciera. Pero eso no convertía a todos los Vesk en malvados. Curioso trío de razas se había juntado. Se preguntaba qué pensarían de ella como humana, su raza tampoco es que fuera en su totalidad precisamente la bondad encarnada. Al final, nunca se puede meter en el mismo saco a nadie. ¿Serían por tanto cultistas?... Kerry decidió arriesgarse a pensar que no.
"Humm..." obedeció y bajó el rifle ligeramente, todavía apuntándoles pero dejando que vieran su rostro. "Kimberly Hart. Mercenaria. Están ustedes en zona insegura, este templo ha sido tomado por un culto muy peligroso, los goblins eran solo la avanzadilla. Puedo escoltarles de vuelta a la ciudad si lo necesitan... aunque si fueran de verdad solo turistas, ¿qué hacen aquí siquiera, fuera de los muros de la ciudad, persiguiendo a esas basuras espaciales?" Unos turistas por la jungla y túneles de Castrovel, tan lejos de la seguridad de la ciudad principal... ¿persiguiendo a unos goblins? Estaba claro que había mucho que no le habían contado. "¿Dónde están sus naves y tripulación, capitán?" terminó de bajar el arma. De un salto bajó de la posición en la que estaba, quedando más frente a frente a ellos, ya sin apuntarles con ninguna arma. Además de su imponente rifle de francotirador de la diáspora, ella llevaba una armadura de piel de carbono y grafito, parecía algún tipo de operativo comando. "No es mi intención meter las narices en asuntos ajenos, pero este no es lugar para..." miró al Vesk, y su imponente arma a la espalda, y luego miró al shirren. "...Él." dijo, señalando al insectoide nervioso y desarmado. Ese desde luego sí que parecía un civil indefenso. El Vesk... ...no.
-¿Turistas?- Traté de encontrar la mirada de Schwick mientras luchaba por no sacar a flote lo que sentía por aquel comentario. -Turistas...- Finalmente di con el shirren y de inmediato tuve que apretar la palma de mi mano contra la boca para contener la risotada y evitar delatar así nuestra posición a la par que con la mano libre daba una palmada en la espalda al bueno de Schwik -...nos ha tomado por turistas extraviados, sobre todo a ti.-
Suspiré y me enjugué las lagrimas que habían empezado a aparecer al reprimir mis carcajadas. -Disculpad, no pretendo ofenderos, Kimberly, pero no creo que se os hubiese ocurrido decir algo así de haber observado mejor el equipo de mi amigo.- Esbocé una sonrisa, los lashunta habían hecho un muy buen trabajo al atendernos pero estaba claro que el equipo de Schwick aún lucía más de una, y de dos, de las quemaduras provocadas por la lucha contra los trasgos y yo podía asegurar lo mismo, mi traje de combate estaba a la vista, al igual que el arma ahora sujetada a mi espalda, la cual me constaba que no había pasado por alto. -Al menos me alegra saber que conocéis una manera alternativa de salida de este lugar, pues... perdimos el medio de transporte que nos permitió llegar hasta aquí. A, si, nuestra nave se encuentra en órbita realizando las reparaciones precisas con el resto de nuestra tripulación a bordo. En cualquier caso, antes de señalarnos la vía de escape me gustaría que, ya que parece conocer el lugar, nos señalara donde encontrar la guarida de los goblins, robaron gran parte del equipo de unos amigos y estamos aquí para recuperarlo.- Me encogí de hombros a la espera de su reacción en espera de sacar alguna respuesta. -No es necesario que comprometáis vuestra misión si estáis cubriendo la retaguardia de vuestra unidad o guardar la posición ya que os aseguro que podemos apañarnos por nuestra cuenta, hoy precisamente ya hemos terminado con un buen número de esos indeseables pigmeos verdosos de camino hacia aquí cuando se atrevieron a atacar un puesto de avanzada.-
¿Turistas? ¡Ah, claro, porque estaba desarmado! El shirren atendió en silencio a la explicación que su capitán estaba dando, enseñando su arma cuando Sgrog la mencionó.
-Es como dice el capitán. Nuestra presencia aquí se debe a un favor que estamos haciendo a unos amigos nuestros. Nos solicitaron que acudiéramos aquí a recuperar parte de su equipamiento, robado por los goblins espaciales, ya que ellos no podían acudir.
Lo que le llevó a preguntarse, ¿y ella?
-¿Y usted señorita Kerry? ¿Por qué se encuentra aquí? ¿Está cumpliendo alguna misión concreta? ¿O ha acabado aquí por casualidad? ¿Y qué puede contarnos de ese culto maligno?
Desde luego que no parecía una muchacha indefensa, entre la armadura y las armas que llevaba, estaba equipada para una escaramuza de las buenas.
"Puedo hacer más que señalaros la ruta..." miró su rifle de francotirador bajado, enfatizando de nuevo que ella no era una turista tampoco precisamente. "Puedo acompañaros, vamos al mismo lugar. De hecho esos goblins son el menor de nuestros problemas. Si vais a ir ahi dentro a recuperar vuestras cosas... os vais a topar de frente con el Culto del Devorador. Mi misión en sencilla: entrar allí, neutralizar a los enemigos y recuperar un artefacto llamado La Luz de Weydan. Veréis, este subterráneo pertene a un templo consagrado a Weydan, el Dios de la exploración, la libertad, la vida: el caminar y vivir caminando. Arriba está hecho un desastre por culpa de esos condenados goblins. Pero como he dicho esos son el menor de nuestros problemas."
"Una docena de monjes elfos ancianos muertos, asesinados por el Culto del Devorador, porque buscan el artefacto que yo tengo que recuperar. Son una secta de terroristas apocalípticos, no buscan otra cosa que destruir todo y a todos, la civilización y la existencia misma. El Devorador es... contrario a Weydan. Es un Dios de muerte. Del fin de todos los tiempos, del fin del presente, futuro y pasado. No sé para qué quieren el artefacto pero no puede ser para nada bueno."
Kimberly se sentó en una de las cajas que había alrededor, quitándose la mochila a la espalda un momento, y rebuscando algo en su interior. "Trabajo para un único superviviente de los monjes de este templo. Me dijo que los agresores eran ikeshti, reptilianos de escamas rojas. Su líder es un tecnomante, y va acompañado de otros ikeshti enormes y monstruosos, además de la tribu de goblins que estáis persiguiendo. No es un trabajo de solo dos personas... ni para una sola" por fin, encontró lo que buscaba y lo sacó. Se trataban de sueros de curación, cuatro de ellos. Tomó dos en cada mano y le ofreció un par al Vesk y otro par al Shirren. "Estáis heridos ¿no? Y aunque podáis aguantar, si vais ahi dentro os harán falta igualmente. Consideradlo un pequeño obsequio en disculpa por la mentira." sonrió ligeramente. "No tengo ningún equipo detrás, estoy sola. Ni tampoco hay bombas. Fue un ardid para interrogaros y asegurarme de que no fuerais cultistas."
Tengo 7 sueros curativos mk1, que sanan 1d8.
Le doy 2 a Schiwck y 2 a Sgrog'Khar, pasando a tener yo 3.
Añadioslos a la ficha <3
También tengo baterías, por si os hacen falta. Yo las consumo muy rápido XD
Torcí el rostro en un gesto de desagrado al oír nombrado el culto del Devorador, la huida de los caballeros infernales y el combate contra los goblins ahora parecían haber pasado a ser la antesala de lo que se nos venía encima. No obstante, escuché en silencio hasta que Kimberly terminó de hablar. Acepté uno de los sueros y le di el restante a Schwick, antes de liberar el martillo de guerra de su sujeción magnética y asegurar sus niveles de carga.
-Comprendido y gracias por los sueros de curación pero por el momento no serán necesarios, los soldados lashunta hicieron un buen trabajo tras el combate, aún así, si no te molesta, me quedaré con uno en vista de lo que se nos viene encima, en cuanto a las baterías, voy bien servido y tengo repuestos.- Me giré ligeramente en busca del shirren. -Parece que no salimos de una para vernos metido de bruces en la siguiente, amigo, en fin. Si vamos a hacer esto juntos primero deberíamos de sintonizar un canal de radio seguro para los tres y si puedes guiarnos el paso, sugeriría que me dejases ir en el frente contigo de refuerzo y confiar a Buschwick la retaguardia para que nos sirva de apoyo. Creo que es un plan razonable, pero no tendré problema en aceptar otra opción, eso sí, necesitaré que me permitáis un momento para prepararme.-
Si lo hacemos así me apartaré un minuto para preparar el rasgo que me permite mejorar un chequeo de sigilo.
Oh cielos... Aquello no sonaban en absoluto halagüeño. Que el shirren se alegraba enormemente de tener una nueva compañera de viaje y aliada en aquella misión, pero el hecho de que existiera un peligro mayor acechando más adelante no le gustaba un pelo. Especialmente tras la descripción que había hecho Kerry.
Sin embargo, su capitán ya estaba fraguando un plan en su increíble cerebro de estratega vesk.
-Puedo ocuparme de la retaguardia. No necesito luz para detectar la presencia de otras criaturas en la oscuridad y mis antenas son sensibles. Si algo se nos acerca, tengo una alta probabilidad de detectarlo a tiempo.
Ventajas de pertenecer a una raza de insectoides gigantes, tenías telepatía y capacidades sensoriales superiores a las de muchas otras razas. Pero eso no era lo importante ahora, sino la misión que tenían por delante.
-Entonces, entramos y recuperamos el artefacto que quiere recuperar usted, señorita Kerry, y buscamos las pertenencias de nuestros amigos. Y cuando lo tengamos todo, salimos de aquí. ¿Existe una ruta de escape planificada o tendremos que improvisarla?
Un millón de perdones por el retraso. El fin de semana al final se me complicó más de lo que creía.
"Si puede moverse con sigilo, sin problema." asintió Kimberly ante el plan de formación de Sgrog'Khar. Le sabía mal arrastrar a dos extraños a ayudarla, pero por el lado positivo ella también les estaría ayudando a ellos. Dio gracias a Weydan de que le hubiera enviado ayuda, a través del coincidir en el momento día y momento justos. Kerry no es que no creyera en las casualidades, pero para ella, creyente de Weydan también, era claro que no había sido una casualidad. Intercambiar frecuencias de comunicación y establecer un canal seguro para los tres les tomaría un minuto o dos, pero sin duda les resultaría indispensable. Cuando estuvieran listos, Kimberly encabecaría la marcha junto a Sgrog'Khar, dejando a Schwick un poco más a la retaguardia según el plan.
Ya estoy por aqui. Mensaje cortito pero al menos por fin me desatasqué. Han sido unas semanas malísimas, y muy malas en umbria tambien. Gracias por la espera y gracias también por los mensajes privados de ánimos ;___; <3 <3 <3