Partida Rol por web

Con maestria vaciaste el contenido en su copa sin que nadie te viera.

Lord Bragost se encogio de hombros y asintio a tus palabras levantando la copa y bebiendo hasta la ultima gota. No viste efecto, siguio riendo y bebiendo como si nada.

La musica termino y todo quedo en silencio, solo un segundo.

- Musica.- grito el Lord apurando su copa y la fiesta prosiguio como si nada.

Pestañeó mientras el ambiente volvía a llenarse con las risas de la algarabía general. Se volvió hacia Tiberio con expresión interrogante.- ¿Qué hacemos?

Pensando sobre todo lo ocurrido hoy... rápido repaso todo en mi cabeza y con una alegría inusitada me llega el siguiente pensamiento... Sé que puedo

Sus pensamientos son interrumpidos por la voz de Laurielle... ahora la música parecía tener sentido y la voz de Laurielle era más agradable incluso, como si hasta ahora no hubiera podido apreciarlo con tantas cosas en la cabeza.

- Pasarlo bien, es una fiesta ¿no? - sonriendo

Sonrió a su vez al escuchar las palabras- Estupendo.

No es que hubiera olvidado todas las malas cosas del día... sin embargo, ya habría otros momentos menos gratos para pensar en ellas. Olvidándose de la figura de Lord Bragost se volvió hacia los bailarines, observando sus complicados movimientos, intentando aprenderlos- ¿Cómo es que se baila eso?- preguntó.

- No lo sé, nadie me enseñó nunca a bailar... podemos intentarlo pero parece difícil -

El misterioso hombre aparecio de detras de una columna y por alguna razon os sonrio con agrado. No era como el resto de los presentes, sus ropas no eran nobles aunque estaban limpias y no parecia divertirse con la fiesta, aunque si mas contento que antes.

Interceptó la mirada del curioso hombre, preguntándose quién sería. Poco después iniciaban el baile...

La niña tiene ritmo y aprende pronto los pasas viendo al resto de la gente como lo hace. Tiberio es mas patoso, no se le da demasiado bien y pisa a la niña varias veces. Bailar no es una de sus habilidades.

Aun asi resulta divertido.

- Esto no es lo mío... - algo nervioso

- Nunca lo sera si piensas que no lo es.- dijo el hombre extraño acercandose a vosotros.- Mi Lady, permitame presentarme. Soy el nuevo maestro del señor Tiberio, Morgul Rast para serviros.

 Despues de presentarse miro al niño.- Creo que va siendo hora de dejar la fiesta, mañana sera un dia movido, preveeo y el descanso sera necesario. 

Iba a decirle algo a Tiberio, cuando el hombre misterioso se presentó.- Laurielle- dijo simplemente a modo de presentación, y entonces escuchó las intenciones de abandonar pronto la fiesta. Suspiró ante la idea, era tan pronto... pero ante la autoridad no había nada que hacer.

- Por supuesto maestro... - algo que le sacase del ridículo no estaba de más... ya practicaría para bailar decentemente - ... Laurielle descansa y cuída la herida, hasta mañana- dedicando una última sonrisa

Camino con Morgul en dirección a la habitación

- Gracias, lo mismo te digo... hasta mañana, Tiberio.- se quedó entonces sola en el gran salón lleno de gente y resolvió regresar también a su cuarto "Que por cierto... ¿dónde estaba?", tomó el camino que esperaba recordar le llevase hasta él.

-Seria mas prudente que la señorita nos acompañara, Tiberio.- dijo el hombre con una sonrisa enigmatica.- Ha habido algunos cambios... Ahora tu habitacion estara en la torre, cerca de la mia. La han estado limpiando durante la fiesta y hay mas cuartos vacios alli, podriamos adecentar un cuarto para la señorita. Apartir de hoy van a llover puñales en la fortaleza y sera mejor estar a cubierto.

-Digamos que alguien penso demasiado fuerte cerca de mi... No gusta que ahora lord Bragost tenga un "heredero"....

- Por supuesto, así podrá tener algo más decente, incluso quizá alguna con vistas al exterior... - quizá esa idea agradaría a Laurielle no habían sido demasiado amables con ella en este castillo
 

... Hasta ahora sólo lo pensé por encima... Lord Tiberio dije en broma... no obstante, es cierto... esperemos que no fuese general la idea de odiarme dentro del salón