Partida Rol por web

La Guerra de los Padres

II - La primera noche

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20/10/2014, 00:12
Ursu

Ursu, repuesto del ataque de tos, está irritado por la sensación de una araña correteando por su espalda. Resopla al ver el nuevo escenario. Este lugar da una nueva dimensión a la palabra cochambre. Parece demasiado tranquilo como para no ocultar amenaza alguna a los tres inconscientes que se han arriesgado a indagar qué hay aquí abajo. Tras un apresurado examen de la estancia, deteniéndose en las cajas malolientes y pútridas, y mientras se frota la nariz escocida por el puñetero polvo verde, Ursu llega a la conclusión de que este sitio da demasiada mala espina y no está muy seguro de querer adivinar cuál es el contenido de los recipientes.

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20/10/2014, 18:52
Director

Cuando la antorcha de Ursu desapareció escaleras abajo y la habitación quedó casi en completa oscuridad, Hobbard se maldijo por no haber previsto la necesidad de antorchas. Debieran haber traído más, muchas más y más pensando que iban a pasar una o, el sol y el agua no lo quisieran, varias noches en el exterior. La falta de costumbre había hecho que se descuidara, pues los leñadores sólo salían de día y se cuidaban bien de estar en el recinto amurallado al atardecer. Podría echarle la culpa a la premura con la que su hermano los había despachado, pero a fin de cuentas, como jefe de la expedición debería haber pedido más antorchas, amén de las provisiones de agua y comida.

Miró a su hijo Iunus, que estaba esperando a que su padre actuara, sentado en el suelo, con la espalda apoyada contra el mostrador, descansando, agotado como estaba, tras la pelea con los perros. Eso hizo que Hobbard recordara el hacha rota de su hijo, que, sin utilidad ahora mismo, bien podía servirles de antorcha pues el mango era de madera resistente. Después de que él y Iunus trajeran del carro todas las provisiones, en éste sólo debían quedar las grebas y espinilleras del propio Hobbard, que sí que se había colocado su peto tras el encuentro con los perros, y las herramientas, la gigantesca sierra, un hacha a dos manos y el hacha de Iunus con la cabeza partida.

Mientras pensaba así, Velocatus decidió salir de la edificación, abrió la puerta doble y se acercó a Bill que empezaba a relinchar intranquilo, era posible que estuviera nervioso por estar a la intemperie y solo, quizás fuera por la edificación o puede que los siervos del Nigromante estuvieran cada vez más cerca. En el exterior no había apenas luz, ni siquiera el resplandor que salía por la trampilla. Pero cuando los ojos de Velocatus y de Hobbard se adaptaron a la oscuridad, pudieron ver como el caballo se agitaba, moviendo la cabeza a un lado y al otro sacudiendo las riendas, quizás como queja, quizás pretendiendo soltarse de la columna o del carro que aún llevaba enganchado.

Iunus, que se había quedado solo y a oscuras, se levantó del suelo y se colocó detrás de su padre sin dejar de empuñar hacha y escudo.

Notas de juego

NOTAS:

- Hobbard e Iunus como PNJs.

- Velocatus, Hobbard, entiendo que estáis en la puerta de entrada.

- Oscuridad, eso de que la luz de las estrellas ilumina es pura falacia, no veís más allá de unos poquísimos metros.

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20/10/2014, 19:19
Director

NOTAS.

- Entiendo que tras lo de los perros, todos llevaís vuestra armadura a pesar de no haberlo especificado necesariamente, pues no supone penalizaciones. Como excepción Hobbard, que llevaría su armadura (sin malus) y quedaría pendiente (puedes hacerlo si quieres) de ponerse grebas y espinilleras (con malus al sumar armadura+grebas+espinilleras).

- Velcatus está Malherido

- Iunus y Normoh estaís Fatigados.

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23/10/2014, 00:08
Velocatus de los Culprit

Velocatus estaba asustado. No había mucha luz, y tenía miedo de que alguno de aquellos "siervos del nigromante" de los que la gente del pueblo tanto hablaba saliera de entre las sombras de la noche para hacerle... quién sabe qué.

Aunque los conocía de las habladurías. En realidad, nunca había visto a uno... ni ganas tenía.

Pero aun así, el animal le daba cierta lástima, allí atado. ¿Y si aparecían aquellos siervos y le hacían daño? Velocatus siempre había sido un chico muy sensible y preocupado por los demás.

Enfrentándose a su miedo, se aproximó a Bill.

Bueno. Parte de su valor venía del hecho que los Wits habían salido con él al exterior, hacha en ristre. Vete a saber si hubiera ido más allá del umbral él sólo y sin luz, a pesar del nervioso pifiar de de la pobre criatura.

Sabiendo que Hobbard e Iunus estaban allí para "apoyarle", echó un vistazo al interior del carro, y no tardó en darse cuenta que allí no había nada de lo que necesitaban para hacer una buena antorcha.

Mecachis.

Sin embargo, empezar a culparse de si debían haber traído esto o aquello a la búsqueda no servía de nada. Así que volvió a la parte delantera de la carroza y empezó a desatar al animal, al mismo tiempo que susurraba palabras tranquilizadoras.

Usaría parte del correaje al carro del que le estaba soltando para hacerle un lazo al cuello y llevarlo hacia el interior de la construcción. Por nada del mundo iba a dejar a aquella criatura allí fuera, sabiendo que cualquier cosa podía andar rondado por allí de noche.

Además, a Velocatus no se le daban nada mal los caballos. Al fin y al cabo, sus horas se había tirado de "veterinario" con su abuela, y siempre le tocaba a él la parte de andar moviendo a las bestias de un lado a otro cada vez que se hacían daño, iban a parir o se ponían enfermas.

Realizó el proceso despacio y sin prisa, tomándose el tiempo que hiciera falta. Aún le dolía el vientre, y no quería que Bill se desbocara y saliera corriendo o de un golpetazo le agravara la herida.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Por si hace falta, tiro con Trato con Animales. Bono de +8 en la habilidad, que se convierte en +6 por el -2 del estado Malherido.

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25/10/2014, 02:06
Normoh

Seguía rezongando mientras apuntaba con su nariz a uno de los frascos más altos. -Yo no pienso tocar nada de todo esto. No puede ser bueno. Además, estoy reventao -continúa, estirándose. Se da la vuelta, dirigiéndose a sus compañeros: -Si queréis quedaros rebuscando me parece bien, pero por mí podemos salir de aquí, cerrar la trampilla, ponerle una piedra y una campanilla encima y dormir de una maldita vez.

Y lo dijo sin apenas mover un músculo de la cara, sin ninguna inflexión expresiva en su voz. Y se dirigió a las escaleras, retomando el camino de vuelta, murmurando algo acerca de unas gachas.
 

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25/10/2014, 12:26
Director

Velocatus tranquilizó a Bill con un tono suave y tranquilo, el animal, reconoció al muchacho y bajó la estuz para que éste pudiera coger las riendas tras soltarlo del carro. Mientras tanto Iunus Wits, vigilaba la escena, armado, intentando escrudriñar los alrededores de la casa sin apenas poder ver nada. Hobbard había cogido el mango del hacha rota de su hijo con la intención de hacer una antorcha, pues aunque el edificio tenía madera en cantidad, ésta estaba en mal estado y Hobbard además, no había querido estropear las ya precarias defensas potenciales.

Cuando Velocatus puso el pie en el primer escalón de la entrada pudieron oir una horrisona serie de chillidos provenientes del interior del edificio. Aunque alguno de ellos ya habían oido algo parecido, o creían haberlo hecho, no estaban preparados para lo que escucharon en ese momento, si lo anterior no había parecido más que una sospecha, esto era claramente audible e incluso temible. Como si miles de pequeñas voces agudas chillaran o gritaban dentro de la habitación en la que estaban a punto de volver a entrar y que estaba completamente a oscuras.

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25/10/2014, 12:41
Director

Normoh se quejó una vez más por el hecho de estar allí abajo y una vez más había puesto mala cara, como cuando se vió impulsado a entrar porque nadie lo hacía, como cuando Jace le dió indicaciones de como proceder o ahora que se negaba a tocar nada.

Cuando el cazador se disponía a poner el pie en el primer escalón de la escalera, los aventureros pudieron oir una horrisona serie de chillidos provenientes de la planta superior del edificio. Aunque alguno de ellos ya habían oido algo parecido, o creían haberlo hecho, no estaban preparados para lo que escucharon en ese momento, si lo anterior no había parecido más que una sospecha, esto era claramente audible e incluso temible. Como si miles de pequeñas voces agudas chillaran o gritaban dentro de la habitación a la que estaban a punto de volver y que parecía estar completamente a oscuras.

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26/10/2014, 18:18
Jace

Jace debe hacer todo un esfuerzo de contención para no saltar ante las contínuas provocaciones del cazador, no se considera especialmente susceptible, pero es que primero ha creído oírle rezongar en tono de falsete cuando le daba instrucciones... y ahora decide por su cuenta que se marcha sin haber acabado de explorar esto. O más concretamente, sin que él haya dicho que se da por satisfecho con la inspección. Pero bueno, tiempo al tiempo, ya se las pagará...

Sin embargo, de pronto oyen un girigay de chillidos y gruñidos agudos allá arriba.

¡Lo que faltaba! Puede que sean ratas, o algún otro tipo de pequeña alimaña similar... y eso no debería suponer ningún problema real... pero más vale que suban y lo comprueben.

- ¡Vamos arriba, rápido!

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27/10/2014, 00:51
Ursu

La horrible algarabía sacude con un nuevo escalofrío la mole corporal de Ursu. Y ahora qué sucede, tiene tiempo de preguntarse el noble tonto, pero no se entrega a cavilaciones intempestivas ni a temores paralizantes. Al escuchar el grito de Jace, corre hacia los escalones, dispuesto a descubrir qué provoca tal pandemómium y a plantarle cara si resulta necesario. Siente cómo la sangre le hierve y se impone al estremecimiento de su carne. Un grito semejante al mugido de un toro brota de su boca abierta en un rictus desencajado. Así es como el buen tonto de Ursu se enfrenta al pánico...

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27/10/2014, 01:17
Normoh

Normoh se detiene, bajando la cabeza atento para escuchar. Apenas tiene tiempo de reconocer los chilliditos que había oído antes antes de que Jace lance su apremiante grito. Normoh alcanza a sujetarle por el brazo, musitando como para sí que igual no corre tanta prisa subir... El bramido de Ursu interrumpe sus palabras y casi le tira la antorcha cuando se lanza hacia las escaleras. El cazador se encoge un poco instintivamente. Está claramente más interesado en volver la cabeza alrededor como buscando algo, frenéticamente, mirando hacia el techo.

-Deben de ser murciélagos...

Notas de juego

Y de hecho busco algo, algo así como un palo largo, de una estantería por ejemplo, y un trapo grande, como para hacer un montón de llamas y humo. Ya supongo que será mucho pedir sin remover mucho polvo verde de ese... Mi habilidad esa de "herramientas improvisadas" me serviría para algo?

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28/10/2014, 19:38
Director

Los primeros en entrar en la vivienda fueron los Wits. Iunus, de hecho, apenas se había separado de ésta. Ambos entraron hacha en mano, como un resorte al escuchar los feroces ruidos del interior. Tras ellos, Velocatus se aproximó más despacio llevando a Bill de las riendas. El caballo al escuchar los chillidos volvió a cabecear, piafar y a mordisquear el bocado nervioso.

Como no habían encendido aún la antorcha improvisada de Hobbard no pudieron casi nada. Pero algo se movía. Algo muy grande se movía en el mostrador. Algo removía con violencia y buscaba entre las cosas que allí habían dejado. Los aventureros se quedaron parados junto a la puerta, sin saber qué hacer a oscuras o a qué se enfrentaban.

En ese momento pudieron oir un grito semejante al mugido de un toro proveniente de la trampilla y el ruido de pasos que subían a la carrera por la misma.

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28/10/2014, 19:53
Director

Jace había empezado a subir las escaleras con apremio al ver que Normoh se quedaba parado. Ursu sin embargo respondió con un rugido enorme y apartó a Jace de un empeñón y se abalanzó sobre la escalera subiendo los escalones de dos en dos a pesar de su enorme volúmen y su peso. Con la prisa, Ursu abandonó la antorcha que, prácticamente consumida, se apagó al caer al suelo y rodar escaleras abajo.

Jace enseguida recuperó la compostura y subió a la carrera detrás de Ursu empuñando, tal como había bajado, lanza y antorcha. Los pasos de ambos aventureros nada cuidadosos provocaron una enorme vaharada de polvo que llenó la escalera y empezó a asenterse dentro de la sala-sótano.

Bajo esta nube de polvo, Normoh se volvió de nuevo hacia las estanterías sin disponerse a subir, al menos no por el momento.

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28/10/2014, 20:13
Director

Normoh maldijo entre dientes cuando la carrera de sus dos compañeros provocó que acabar cubierto de pies a cabeza del asqueroso polvo verde que tanta molestia se había tomado en evitar. Musitando maldiciones entre dientes empezó a tirar de uno de los palos largos que hacía de soporte lateral de una de las estanterías. Tras un par de esfuerzos sin éxito dejó la antorcha encendida en el suelo y tiró con las dos manos. Apoyó los pies con firmeza y dió un tirón con todo el peso de su cuerpo. Se sorprendió cuando el palo del que tiraba se partió por la mitad en sus manos y la estantería se hundió por el lado roto esparciendo por el suelo cajas de madera y recipientes de metal provocando un gran estruendo. Una nueva nube de polvo inundó la sala. Sin embargo Normoh, aguantó la espiración en el momento justo, como ya había hecho las veces anteriores y no llegó a tener más que un par de toses. Además afortunadamente para él, otro de los largos listones de la estantería como el que había partido, se había soltado de ésta y había quedado indemne.

Volvió la vista en derredor en busca de una pieza de tela. Encontró una sábana vieja que al parecer nunca había visto tiempos mejores cubriendo alguna de las cajas de aspecto más corroido y que se apoyaban junto a una de las paredes.

Podría envolver con ella el palo largo y emplearlo, si es que la tela prendía como esperaba, una especie de antorcha muy grande y larga, aunque visto lo visto, la madera del estrecho el listón era muy frágil.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Uso un tanto libre de la habilidad Herramientas improvisadas.

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28/10/2014, 21:59
Normoh
Sólo para el director

Normoh es un tipo bastante aprensivo, y maldice entre dientes la "polvareda" levantada por sus "compañeros". Bueno, también él la ha liado fina con tanto meneo de palos y sábanas, pero Normoh (en esto es como casi todo el mundo) tiende a ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Intenta con todo su esfuerzo encender la sábana, y espera, con el oído atento a lo que ocurre en el piso de arriba... Su idea es espantar posibles criaturas pequeñas y repelentes, pero al primero que baje, le atiza con la lanzantorcha. Prometido.

Notas de juego

Sí, bastante libre, no? ;)

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28/10/2014, 22:29
Velocatus de los Culprit

¿Y ahora que demontres pasa? Se preguntó Velocatus para sí.

A duras penas podía ver nada en al oscuridad. Una silueta a todas luces esbozada en el mostrador donde habían dejado algunos miembros del grupo sus pertenencias.

Todo aquello estaba crispando a Velocatus. Chirridos de criaturas pequeñas  moviéndose a escondidas  por el interior de la construcción, siluetas lejanas en el horizonte posiblemente de los seguidores del Nigromante no muy lejanos, y ahora la presencia de algo o alguien en el interior de la construcción de la que acababan de salir, algo que revolvía en las pertenencias de sus camaradas. En un lugar que, ominosamente, mostraba escritos con preocupantes señales de advertencia sobre algún horrible peligro.

Y ahora, encima, parecía que sus compañeros se habían topado con algo abajo, algo que ¿mugía?.

Velocatus era un chico tranquilo y sensible. Quizás eso aparentaba a alguien incapaz de una locura o de perder los estribos, pero se sentía con los nervios a flor de piel, y toda aquella tensión acumulada empezaba a pasarle factura, y acabó por estallar de una forma tan  inesperada como inapropiada para alguien de su carácter:

—¡¡A VER, OSTIA PUTA...!!! ¡¡¿¿QUIÉN COÑO ANDA POR AHÍ??!! ¡¡COMO NO RESPONDAS AHORA MISMO, TE VAMOS A REVENTAR LA CABEZA A OSTIAS!!! (.......) ¡¡JO-DER!!—

Velocatus soltó las riendas de Bill un segundo, y echó mano de  su honda, poniendo un proyectil en la misma con sus manos tan temblorosas como asustadas...

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29/10/2014, 16:56
Director

Ursu alcanzó a la carrera el piso de arriba y allí se detuvo su súbito arrebato, pues la sala estaba totalmente a oscuras y no podía ver apenas nada. Frente a él pudo oir el nervioso piafar de Bill y al joven Culprits gritando lo que parecía una amenaza hacia el propio Ursu.

- ¡¡¡TE VAMOS A REVENTAR LA CABEZA A OSTIAS!!!

Delante, entre Ursu y Velocatus algo se movía. Algo muy grande se movía en el mostrador. Algo removía con violencia como si buscara entre las cosas que allí habían dejado.

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29/10/2014, 17:00
Director

Los pasos a la carrera que se acercaban hacia ellos cesaron bruscamente, muy cerca de ellos. A no más de un par de metros

Velocatus gritaba más enfurecido que asustado, y eso, o algo que ocurrió al mismo tiempo, hizo que cesara el mugido rabioso.

Sin poder ver nada aún, lo que fuera que estuviera allí chilló aún con más fuerza y se agitó con más violencia, respondiendo a la amenaza.

Por encima de los chillidos, los Wits y Velocatus pudieron escuchar lo que parecía la respiración jadeante de un enorme animal. Delante, justo delante.

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29/10/2014, 17:05
Director

Jace subió la escalera jadenado, recuperándose del empeñón de Ursu, con toda la velocidad que le permitían las piernas. Aún portaba la antorcha casi consumida y su mortecina luz iluminó pobremente la estancia. Cuando asomó la cabeza por la trampilla pudo ver, con más sombras que luces la escena.

Junto a él, de pie junto a la trampilla, Ursu jadeaba empuñando con las dos manos su enorme espada, sin saber qué hacer o dónde lanzar sus mortíferos golpes.

En la puerta de la vivienda los Wits empuñaban sus hachas, entre ellos Velocatus gritaba con la cara congestionada de furia y hacía girar su honda. Tras ellos Bill, el caballo piafaba nervioso sin que nadie sujetara su brida.

En ese instante Jace, que ya salía de la trampilla pudo ver lo que todos los demás miraban y su antorcha moribunda iluminaba. Sobre el mostrador, había montones de ratas, docenas, que arrañaban, mordían y se arremolinaban sobre las provisiones que allí habían dejado. Parte del contenido de la bolsa que les diera Kal se había derramado por el suelo, cerca del centro de la sala. Allí más ratas luchaban entre sí y lanzando mordiscos a las provisiones y las demás ratas, sin dejar de chillar en una terrible barahúnda*.

Notas de juego

*Curiosa palabra, hoy he aprendido con ella una irregularidad gramatical. Toma ya

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29/10/2014, 17:33
Director

Notas de juego

Nota: Normoh no está presente. Vigilad los destinatarios.

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29/10/2014, 17:50
Jace

La reacción del guardia es inmediata, esas bestiezuelas inmundas, esas alimañas, están dejándoles sin provisiones. Si no lo impiden pueden convertir esta misión en una situación casi desesperada, deambulando por ahí sin nada que llevarse a la boca más allá de lo que recolecten o ese cazador, en el que no acaba de confiar, pueda capturar.

Así que Jace se lanza a por las ratas agitanto tanto la lanza como la antorcha, en amplios arcos, intentando espantarlas. No deberían haberse atrevido a salir habiendo gente por aquí, pero aún así no las considera una verdadera amenaza para un hombre adulto y en buenas condiciones físicas. El peligro es para sus pertenencias...