Partida Rol por web

White observa a Rodriguez un instante con cara de abstracción antes de decir muy despacio y en voz baja, ésta vez sin tartamudear ni siquiera un poquito...."Rodriguez....¿qué parte de "usted cava, yo vigilo" no entendió?"

- En ninguna señor, ahora me pongo a ello. Digo mientras saco el material para hacer pozos de tirador y empiezo a hacerlos

Como los pardillos y los lesionados que se quedaban en los banquillos durante los partidos de fútbol, me tocaba esta vez ver el combate desde la distancia. Teníamos ordenes de entrar en uno de los Gecko y alejarnos de la línea del frente, pocas posibilidades teníamos de ser tratados y menos aun de volver próximamente al combate.

- Maldita sea mi estampa.... musito mientras trastabillando entro en el transporte.

-Maldito cacharro- masculló entre el ir y venir del gecko recogiendo a aquellos que necesitaban ayuda médica de forma urgente- Baron, estás hecho un pupas, tío, ¿cuántas veces tengo que atenderte hoy?- repartió entre Caín, Baron y Bill todo tipo de amenazas mientras les examinaba lo mejor que podía pero el estado de los tres solo daba lugar a una solución- Sargento- le sonaba rara la palabra en la boca para referirse a Miller. Miller era Sargento. Sargento Miller. No, de ninguna de las maneras era una palabra que concordase con el apellido del hombre- no puedo hacer nada- hizo una mueca de resignación- no tengo con qué... y no tenemos tiempo.

Miró al trío y negó con la cabeza.

-Lo siento chicos, me faltan manos, recursos y tiempo- se mordió el labio inferior y por unos instantes se quedó ahí paralizada, aguardando la bronca o al menos los tacos que seguirían a aquella noticia- solo podéis descansar, moveos lo menos posible y sin brusquedad para no dejaros las tripas antes de que volvamos y os pueda atender alguien mejor.

-No consigo comunicar, jefe -contestó el CT- voy a ver si puedo acercarme a ellos y enterarme de lo que está pasando. En cuanto sepa algo, le informo -y sin esperar mucho más, McAllen se dirigió hacia donde estaba el Comand Carrier y enterarse de qué pasaba y, si era necesario, ayudar a Frost en lo que fuera.

...y sin esperar mucho más, McAllen se dirigió hacia donde estaba el Comand Carrier y enterarse de qué pasaba y, si era necesario, ayudar a Frost en lo que fuera.

El gélido viento que bañaba el amanecer de Galdonia VI, traía consigo una densa neblina matinal que aunque daba un hermoso panorama del valle que se presentaba bajo la colina de fuego, justo sobre la zona de batalla B, traía también la problemática de como poder observar la llegada del enemigo si no podían verlo. Si la neblina se tornaba densa, tendrían que pensar en algo. Al menos por suerte, prácticamente no nevaba.

Mientras algunos infantes de los escuadrones de infantería pesado vigilaban los alrededores (incluyendo a los escuadrones Alfa y Beta ya con muchas bajas), la mayor parte de los infantes se mantenía trabajando en diversas labores. Por un lado algunos recuperaban munición y la repartían, los infantes médicos iban curando a cualquier herido, y un grueso grupo se había reunido entorno al siniestrado Gecko Commander en un intento desesperado por abrir la compuerta de acceso y poder no solo rescatar a los posibles supervivientes sino a su vez poner en operativo a los indispensables TAV UAV.

McAllen se acercó al grupo de la Gatling y en ese momento le habló Frost- Siento venir yo, señor, pero nuestros Técnicos están malheridos, y soy de los pocos que tienen algo de conocimiento en reparaciones -explicó mientras ponía en funcionamiento la fuerza aumentada de su traje para seguir las órdenes dadas.

Se situó junto a Stukov y comenzó a intentar abrir esa lata para ver qué ocurría. Cuando tuviera algo de qué informar, lo haría, mientras tanto ahora ayudaría a la Gatling.

Acatando las instrucciones del cabo el soldado se mueve a la zona desiganda y comienza a trabajar en la dichosa trinchera. sin saber que esperar de la ofensiva arácnida, escuche que los bichos usaron la niebla para acercarse al fuerte helado, no pude estar en esa pero supe que la pasaron mal dice a su compañero tratando de hacer conversa para calmar la ansiedad, la tierra estaba dura por la nieve y y notaba como las unidades comenzaba a tomar posiciones.

deberíamos prepara una manera de establecer un perímetro de granadas o explosivos que detonaremos al avance de la carga dice mientras señala la extensa pendiente por la que había que tenido que escalar, por alguna razon ahora parecia mas corta que antes, menos imponente, ¿quien dijo que hacíamos esto por la paga? piensa, mientras para un momento y toma agua para refrescare*

"Rodriguez, Macreidi...el S...s...sargento quiere las tt..t...trincheras unos metros más allá de la r..rr..rrrrampa...alrededor de las co..coordenadas N4 y H12. D...dense pr..prisa", contestó Ethan, sin dejar de vigilar lontananza, o al menos todo lo lejos que le permitía la niebla que se estaba formado. Desconectó la fuerza suplementaria del traje, pues ahora mismo no le hacía falta y no hacía más que gastar batería extra. Poco a poco, iba cambiando de "modo de visión" y observaba la rampa y alrededores.

Sus manos, mientras tanto, se movían solas. Se entretuvo desencasquillando su morita pacientemente, para luego, coger y poner el aditamento de lanzagranadas en el lugar correspondiente de su morita TW203. "Buf...ahora pesa más...espero acertar con éste cacharro..." pensó mientras sopesaba el arma, ahora un poco más pesada que antes.

Previamente, le había alcanzado a Brocheta un cargador de aditamento de escopeta, tachándolo de su lista mental...*

Contempló el Heavy Gecko y el MLRS...parecían necesitar una puesta a punto urgente...ciertamente, les habían ayudado en la toma de la colina y seguramente necesitaran recargar su munición. Quizás los cuatro supervivientes de la Alfa podrían recargar uno, mientras ellos se encargaban del otro. Tenía que comentárselo al Sargento.

"¿Alguien más necesita munición o la voy repartiendo como me plazca?" dijo, alzando la voz por el canal de la escuadra.

Miller colocó con sumo cuidado las chapas de Garth alrededor del mástil del estandarte. Estaba algo maltrecho por el plasma, el fuego y el ácido, pero aún se veían los intensos colores del escudo de la Federación, cruzados a franjas por la sangre de la Sargento.

Cabizbajo, se dirigió hacia donde estaba el grupo donde Sam trabajaba sin descanso y junto al Cabo White que atesoraba las municiones. Dejó caer las pertenecias de Garth.

Buen trabajo Cabo, lo tienes bajo control.

Dijo con una sonrisa forzada. De pronto la veteranía se aferraba a su espalda como una pesada carga y se sentía enormemente viejo y cansado. White le paró un momento para llamar la atención sobre el descargado Heavy Gecko y el sargento asintió despacio tras el visor de su casco. Sin dudarlo buscó a los integrantes de la escuadra Alpha.

¡Infantes! debido a la merma de su escuadra y hasta que algún oficial superior reclame el mando, trabajarán en conjunto con la Eco. Si necesitan atención médica, la médico de combate García les atenderá. Su misión ahora es la de recargar el Heavy Gecko con la munición que llevan los otros transportes, ¿entendido?

No les dio tiempo a responder, no quería siquiera confraternizar con ellos. Cada nombre era una historia a recordar en las noches veladas con alcohol. No quería más Odonells, ni Garths en su cabeza. No quería más muertos.

Se separó buscando un lugar aislado donde trabajar, tenía que armar un par de cargas y no quería poner a nadie en peligro. Aprovecharía también para recargar su Shredder. Trabajó con manos torpes y cansadas, pero consiguió colocar los detonadores en las dos cargas de demolición que le quedaban. Ahora debía buscar un buen sitio para colocarlas.

Mientras las manos temblorosas trabajaban armando los explosivos, Miller abrió el canal 3 para contestar al Sargento Frost e informar de los trabajos.

[Frost, siento lo de tus chicos, esperemos que no caiga nadie más. Yo estoy preparando un par de cargas de demolición. También vamos a cavar algunos pozos de tirador por si traen bichos con artillería de plasma, usaremos los geckos para bloquear los accesos a la colina y les hemos pedido a los supervivientes de la Alpha que lleven munición al Heavy Gecko. ¿Se te ocurre alguna cosa más para hacer?] 

Samantha tenía trabajo que hacer, mucho trabajo que hacer, demasiado quizás, pero teniendo a los más heridos estabilizados ahora debía centrarse en dejar a los demás lo más sanos posibles para el combate- Vale, empezamos por ti, Sargento -dijo al acercarse y comenzó a tratarle las heridas- Tartaja, luego voy a por ti -dijo mientras terminaba con el nuevo sargento y, después se acercó al nuevo cabo- abre la boca para quejarte y te daré motivos para hacerlo.

Viendo que la cosa está tranquila y podemos seguir organizándonos hasta que vuelvan a por nosotros todos los bichos de esta jodida roca me pongo a revisar del resto de los caídos más municiones y así no terminar con un cuchillo queriendo cortarles las uñas largas a los arácnidos.

Si, señor, dijo al cabo White mientras se movía a la especificación designada por el mismo, y sin mas dilación empezó a cavar, mientras de vez en cuando miraba a la niebla por si veía algo.
Cuando el cabo White menciono si alguno mas quería munición digo sin reparos:- me interesaría 2 o 3 cargadores de morita, y quizás alguna granada, si sobra alguna.

"N....no se preocupe R..r...ro...Rodriguez...si nadie más m..mm..me solicita munición, la rr...repartiré lo más equitativamente po..pooo..posible"

"Gracias "Un Ojo"" le dijo a Sam, al alejarse de él. No se atrevería a quejarse con ella tan cerca...tenía los puños tan duros como los de Miller, así que mejor no meterse con ella.

[Entendido Frost. Si sobra algún pepino tras reabastecer al Heavy Gecko intentaré hacer una mina con él. De momento voy a colocar estas dos cargas de demolición, cuando terminen de municionar al tanque lo vemos, pero puede ser peligroso.]

De alguna manera habían tenido la misma idea, parecía como si hubiera telepatía entre las escuadras.

Una vez subido a uno de los gecko aun funcionales ya poco podía hacer mas que esperar hasta que nos colocaran en posición y fuéramos la barrera que cubriera el flanco de nuestros compañeros. Sería como estar de nuevo en el fuerte helado, cambiando unos altos muros por una ligera capa de blindaje.

- Bueno compañeros nos ha tocado la china, igual los bichos deciden ir por otro lado y no nos abren como una lata de sardinas.

Dándome la vuelta y mirando hacia arriba, lanzó un suspiro esto es una puta mierda. Estamos jodidos. Esta misión es una mierda absoluta y alguien la ha vuelto a cagar. No se que tienen de inteligencia nuestro hombres de inteligencia, pero esta claro que los bichos son más listos.

y ese cabron de Rodríguez casi acaba conmigo. Casi mejor es estar en esta lata que ahí fuera digo sonriendo pensando en que, lo más posible era que cayera un proyectil y los fundiera a todos, sin apenas dolor.

Todo parecía estar tranquilo en la colina de fuego, los infantes trabajaban arduamente en un intento para estar preparados ante cualquier eventual ataque. Hasta ahora no se había avanzando mucho, los contingentes se habían repartido municiones y habían sido atendidos por los especialistas médicos; pero mas allá de eso no se había hecho mucho. Algunos pocos infantes vigilaban los alrededores, un grupo grande trabajaba en el Gecko Comander, los miembros del escuadrón Alfa se apuraban a recargar el Heavy Gecko que tenían mas cerca con los proyectiles almacenados en los Gecko Armoreds; y con ello en general, quedaba aun mucho por preparar. Si los bichos les atacasen ahora, no estarían listos; aunque muchos dirían que al menos habían recuperado las energías y tenían suficiente munición como para pelear hasta la muerte.