El Mago frunció el ceño
-Esta claro que no eres la típica Vampira. ¿Secuestrada? ¿Hubieras preferido que te dejara a merced de esos chapuceros traidores?
Se encogió de hombros.
-Tengo experiencia en librarme de ellos, no me hubieran cogido -dijo con indiferencia antes de tenderle la mano, demasiado cálida para un Vampiro-. Me llamo Rosalía -sonrió-. Hemos empezado con mal pie, pero creo que podemos llevarnos bien. Incluso colaborar -buscó entre los pliegues del manto y sacó el vial. Se lo mostró, pero no a la suficiente distancia como para que pudiera arrebatárselo-. No lo quiero. Lo único que quiero de él es saber por qué lo buscan los Tremere. ¿Qué es?
Giacco le dio la mano sin quitarse el guante.
-Es una poción de seguridad que hará que mi grimorio sólo pueda se abierto por mi propia persona.
Motivo: Manipulación+Subterfugio (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (7 dados): 3, 1, 9, 9, 10, 4, 1
Éxitos: 1
Tira Percepción+Empatía.
Motivo: Percepción+Empatía (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (7 dados): 8, 7, 5, 4, 8, 4, 9
Éxitos: 4
Rosalía ignoraba los fundamentos de la Magia, pero el tono y las formas de Giacco sonaban a burda mentira.
Su gesto hasta entonces amable se volvió ceñudo, y su mano volvió a ocultar el vial entre sus ropas.
-No soy la típica Vampira, signore Vinieri, pero no me gustan las ofensas ni las mentiras. Harías mal tomándome por tonta -miró hacia la salida-. Por última vez, dime qué es lo que contiene si quieres recuperarlo.
-¿Y si te obligara a devolvérmelo? -dijo mientras sus ojos refulgieron un instante-. ¿Y si tuviera más poder del que imaginas?
-¿De veras quieres hacerlo así? -preguntó armándose de paciencia. El vial le importaba poco, más allá de la simple curiosidad, y no tenía ganas de enfrentarse también a él, pero no iba a dejarse avasallar por un mortal, por muy magus que fuera. Lo miró a los ojos-. ¿De veras prefieres convertirme en tu enemiga, cuando te ofrezco la posibilidad de entablar una fructífera amistad? -dijo con voz aterciopelada, al mismo tiempo sensual y maternal-. No conozco tu poder pero sí el mío, y créeme, no te tengo miedo. Piénsalo un instante antes de decidir qué vas a hacer -le sugirió sin apartar su mirada de la de él.
Motivo: Carisma+Empatía (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (8 dados): 1, 5, 4, 9, 5, 5, 5, 1
Éxitos: -1 Fallo
Motivo: Carisma+Expresión (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (9 dados): 9, 2, 8, 9, 1, 8, 6, 3, 4
Éxitos: 4
Motivo: Manipulación+Expresión (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (9 dados): 3, 3, 1, 4, 4, 6, 3, 9, 4
Éxitos: 1
Motivo: Manipulación+Empatía (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (8 dados): 3, 8, 10, 8, 2, 5, 2, 5
Dados repetidos: 5
Éxitos: 3
He tirado todas esas cosas para que elijas tú la que más convenga.
-Bien -se conformó el Magus-. Se trata de un prototipo... una poción que obliga a decir la verdad. Los Tremere no la buscan, porque no saben de su existencia, pero si lo supieran sin duda la querrían. Se la di a mi criada para que... para que sirviera a mis intereses. ¿Me la devuelves ya?
Motivo: Percepción+Empatía (Especialidad)
Dificultad: 6
Tirada (7 dados): 4, 10, 6, 1, 9, 3, 7
Éxitos: 3
No pudo evitar una leve sonrisa. Darle tanta importancia a una simple poción... Ella podría haberle obligado a decir la verdad sin hacerle beber nada, pero había preferido llegar a un acuerdo sin trampas de por medio. Sacó de nuevo el vial y se lo tendió.
-¿Y qué intereses son ésos, Giacco? -preguntó con el tono inocente de una niña curiosa.
-Eres un ser de gran curiosidad -dijo con significativa sonrisa. Entonces sacó un fragmento de cristal verde y la observó a través de él-. Interesante -murmuró-. ¿Me darías unas gotas de tu Sangre? Sólo por motivos de estudio, claro. A cambio yo satisfaría toda tu curiosidad.
Rosalía sonrió a su vez.
-Y tú un mortal muy osado... -dijo divertida-. Nuestra sangre es poderosa. La llamamos Vitae, pues contiene una parte de nuestra esencia. Es como si te diera unas gotas de mi alma. Si quieres estudiarla, antes tendrás que probarla, hoy, mañana y pasado mañana. Sólo así podré asegurarme de que no la usarás en mi contra. Es... una especie de pacto.
El Mago rió de buena gana
-¿Y por qué iba a querer beber de una Sangre sobre la que pesa un encantamiento?
-Bueno, tiene unas cuantas ventajas... -respondió ladeando el rostro-. No te hará ningún mal, y mientras sus efectos permanezcan en ti no envejecerás, por poner un ejemplo. Pero en fin, es tu decisión... Y mi condición -alzó las manos-, si quieres estudiarla.
-No envejecer tienes sus ventajas. Pero que los Tremere puedan localizarme en cualquier momento a través de tu Sangre... la verdad, no sale a cuenta.
-¿Cómo sabes tú eso? -preguntó, ceñuda de pronto.
-Porque puedo verlo. Ya te he dicho que los Tremere son meros aficionados. Su talento para la Magia es levemente superior al de un bufón de palacio pero igual de estridente -explicó satisfecho-. Los atraes como la miel a las moscas -añadió jugando con los sustantivos en su boca-. No tardarán en volver a dar contigo.
-Estoy aprendiendo a vivir con ello -respondió cruzándose de brazos en un gesto entre el enfado y la resignación-. De acuerdo, eres un magus notable. Pero mortal. No tienes ni idea de lo que mi Sangre te haría sentir, ni de lo que podrías descubrir sobre ella... No creas que muchos Vampiros te la ofrecerían. ¿Qué decides?
El mortal sonrió y negó con la cabeza
-No voy a poner voluntariamente la espada Tremere en mi cuello. Si bebo de tu Sangre seré tan evidente para ellos como lo eres tú e imagino que sabrás lo que me harían. Sin embargo, yo puedo librarte de su eterno escrutinio sin mucha dificultad. A cambio de tu Sangre y mi poción, claro.