Partida Rol por web

- Muchas gracias compañeros ... cuando llegueis a la ciudad entregar los suministros a Suministros Barthen ... os daran 10 piezas de oro por el trabajo ... y ya alli os contare todo ..., asi que me desìdo y nos vemos en unos cuantos dias ... -

Gundren termina de despedirse de ustedes dando la mano o con un abrazo de enano rudo y aspero, como dirian, y saliendo por la puerta de la taberna junto a Sildar, desaparece de la taberna dejandoos los dos con el misterio de su mision. 

Cuando Gundren se fue Dalya se dejó caer en la silla.

-¿Dos días?-dijo- pensaba que saldríamos ya mismo. Y encima tenemos que pagarnos nosotros el alojamiento en la posada...-se quejó mientras hacía un gesto al tabernero para que le llenara la jarra otra vez.

-Bueno, espero que la recompensa al final esté a la altura...-le dijo a su compañero.

Pasando los 2 dias indicados y al mediodia el dia el soleado al igual que el dia que se Gundren hacia el Norte, sin embargo, algo es diferente ... no sabeis porque pero hay mayor humedad en el ambiente ... tal vez sea la lluvia que se acercara proximamente, o solo una sensacion extraña, pero el dia de la recogida de material habia llegado.

En puerta de la taberna, un carro lleno de mercancias conducido por un joven chico para de golpe, mientras que un chico con aspecto nervioso alza la mirada como si buscara a alquien entre la gente y mercaderes que van llevando y trayendo mercancias.

Auric, que está esperando diligentemente en la taberna la llegada de las mercancias de Gundren, le señala a Dalya el carro mientras dice:

"Ah, esas deben ser las mercancias de Gundren. ¡Justo a tiempo! Como era de esperar de un enano."

Acercándose al carro, esboza una sonrisa al chico y se dirige a el diciendo amablemente:

"¡Saludos! ¿Vienes de parte de Gundren?"

El chica tan solo apoyando su mirada sobre el enorme y armado semiorco, esbozo una sonrisa de satisfaccion, y dirigio el carro hacia la posición de Auric.

- santo cielo, con las indicaciones que me dieron pense que estaria semanas buscando algo tan singular, pero para nada ... nada mas llegar, un enorme semiorco armado hasta los dientes, es sin duda usted señor - dijo mientras miraba detenidamente la armadura y el espadón de Auric.

- Aqui estan todas las mercancías señor ... ademas hay algo que me dijeron que era para vos ..., esta ahi detras, si deseis cogerla inmediatamente, de seguro que le gustara - dijo con voz jovial y animada

Auric recibió al amable mercader con la mejor de sus sonrisas. Plenamente consciente de cuanto resaltaba entre el resto, incluso en una taberna donde se mezclaban todo tipo de gentes, se acercó al carro a examinar las mercancías y el... Bueno, lo que fuera que el chico había dicho que Gundren había dejado para él. Extraño. El enano no lo había mencionado.

"Muchas gracias por tu trabajo joven. Aprovecha y tómate algo en la taberna, el camino es largo y polvoriento." — dijo mientras colocaba una moneda en su mano — "Y que Tyr guíe tus pasos. Por cierto, ¿podría tener tu nombre?"

Tras examinar las mercancías, Auric echa una mirada de vuelta al pescante y, si el chico aún está ahí, le comenta:

"Ahora que caigo... ¿El carro va incluido con las mercancías? Se supone que debemos llevarlas a otro sitio aún y nos iría muy bien. Puedo ofrecerte algo de oro por él aunque no tengo mucho..."

-Gundren se encargará del pago-le interrumpió Dalya con una sonrisa pícara- por lo que entendí nos hacemos cargo del carro y del cargamento. Seguro que el enano te pagará lo acordado-le dijo adelantandose hacia el carro sin hacer mucho caso de los gestos del cochero.

-Muy buen trabajo, pensaba que todavía tendríamos que esperarte un día o dos pero has sido muy rápido. Le hablaré bien a Gundren de ti-le dijo con una sonrisa mientras se encaramaba al pescante del carro.

"Muchas gracias por tu trabajo joven. Aprovecha y tómate algo en la taberna, el camino es largo y polvoriento." — dijo mientras colocaba una moneda en su mano — "Y que Tyr guíe tus pasos. Por cierto, ¿podría tener tu nombre?"

- Gracias señor ...claro señor me vendria bien una cerveza .... y mi nombre es Timi ... Timi el zagal ... - dice mientras se baja del carromato y se limpia la cara con su manga antes de entrara en la taberna.

 Gundren se encargará del pago-le interrumpió Dalya con una sonrisa pícara- por lo que entendí nos hacemos cargo del carro y del cargamento. Seguro que el enano te pagará lo acordado-le dijo adelantandose hacia el carro sin hacer mucho caso de los gestos del cochero.

- Si todo esta pagado y incluye los animales y el carromato, yo solo tenia la orden de traerlo aqui y decirle sobre el regalo de para vos ...,  disculpen ire a beber algo ya ... el viaje ha sido largo ... -

Cuando revisas el carromato ves que son equipo , armas y armaduras forjadas, y del regalo que se referia el chico es una reluciente y trabajada armadura de Bandas que parece de tu talla, con el simbolo de Tyr grabado en el pecho y el las hombreras de la armadura y piezas grandes.

Dalya se dio la vuelta en el pescante y agilmente trepó por las cajas y piezas metalicas como si fuera una niña pequeña buscando el "regalo" que les había dejado el enano. Le gustaban mucho las sorpresas y no sabía que esperar de aquel viejo gruñon.

El regalo era una armadura de Bandas grande, con el simbolo grabado en el pecho, las hombreras de la armadura y piezas grandes, parece el de Tyr

-Boh!-exclamó la mediana decepcionada- el regalo es para ti Auric. Te quedará bien- le dijo a su compañero mientras volvía a trepar por las cajas y materiales para volver al pescante del carro y coger las riendas.

-Pontelo y sube al carro, cuanto antes salgamos antes llegaremos- le dijo con ánimo

Auric sacude la cabeza en resignación. Le sabe mal que Gundren no haya dejado nada para Dalya y, aunque agradece muchísimo el generoso regalo del enano, se siente un poco culpable.

Tomando la armadura, la examina antes de proceder a colocarsela y esboza una leve sonrisa al observar cómo le queda en su antigua pechera.

"Generoso patrón tenemos. Más le vale al enano que tenga una buena recompensa preparada para ti."  — dice medio bromeando — "Bueno, si lo tenemos todo, pongámonos en marcha!"

El chico al escuchar las palabras de la mediana, se extraña ... - No ... son dos regalos los que habia detras ... -

En ese momento, cuando Auric levanta la armadura, aparece debajo de ella una armadura de cuero tachonado, con hermosos dibujos y decoración, eso si algo pequeño para un humano, tal vez para un niño ... o un mediano .... 

A la mediana se le iluminó la cara. Rápidamente se quitó su armadura de cuero y se colocó la nueva sobre la blusa.

- No es tan bonita como la mía pero con un par de arreglos y un poco de decoración será perfecta-dijo sonriendo- sabía que ese viejo no se olvidaría de regalarme algo, por la cuenta que le trae-dijo riendo y de nuevo se volvió a sentar en el sitio.

-Venga, ahora si que si, ¡Nos vamos!

Sentándose en el pescante al lado de Dalya, Auric toma las riendas de los animales que tiraban de él. Asegurándose de que están en buena condición y han sido debidamente alimentados y abrevados, el paladín hace chasquear las riendas con un movimiento seco y se pone en camino. Por suerte se le daban bien los animales, después de haber vivido tanto entre ellos.

Como compañero de viaje el semiorco no es especialmente animado, por lo menos no sin alcohol de por medio, pero con una mirada atenta, se mantiene en guardia mientras atraviesan los caminos, siempre buscando amenazas, escudriñando el horizonte y sonriendo amablemente a quienes se cruzan por el camino.

Comenzais el camino y mientras que vais al norte os cruzais con muchos comerciantes, asi como ir acompañado por ellos en direccion norte, unos dias haceis carabana con otros comerciantes, otras noches acampais solo, pero el camino es bastante seguro, hay muchos mercenarios con los comerciantes y guardias de las ciduades del Norte y el Sur, es un camino comercial de gran importancia y desean protegerlo.

Cuando pasaron unos 4 dias o asi, teneis que tomar el camino de Triboar, nada más coger ese camino, os encontrais completamente solos , lo cual os sorprende, debe ser Phandalin una ciudad con poco comercio o interes. Otros 2 o 3 dias en el camino sin encontraros nada, hasta que al medio dia del 4 dia, veis a lo lejos un carromato, parece que está parado a una distancia considerable, unos 500 metros o algo asi, pero se ve gracias a que estais en una recta.