Mientras avanzas solo, observas varios campesinos que se dirigen a las montañas, pero son demasiados para hacer algo, también observas varios pescadores que vienen y van del río. Finalmente observas a lo que parece ser un cazador que se adentra en el bosque.
Observas claramente a Magnus que se mantiene escondido entre las sombras algo adentrado en el bosque; esta vigilando el paso de los humanos; mientras están allí ven pasar campesinos que se dirigen a las montañas, pescadores que van al río y un cazador que se esta adentrando mucho en el bosque.
En cuanto el ogro se acerca al lugar el hombre se asusta demasiado, no sabe como reaccionar. Al ver la moneda que el Ogro, el carnicero se seca el sudor, se había llevado un susto muy grande.
-Solo tengo pan, pescado en salazón y carne salada- te puedo dar suficientes para una semana para un humano pero no para alguien de tu tamaño, dejarías al pueblo en hambruna. Por la moneda de oro te doy a la vaca que desollamos esta mañana, es todo tuyo-
Algo más lejos varias personas se reunían a las afueras del templo y hablaban con un hombre de túnica, probablemente un sacerdote. Señalaban reiteradas veces en dirección a los aventureros.
La vaca esta colgada a un lado del mostrador, es la clásica imagen de una vaca recién desollada que cuelga de un gancho en una carnicería.
Gruño contrariado y pongo mis brazos en jarras, mientras con el ceño fruncido examino a la vaca.
Estar bien. Mur´han se llevará la vaca y una semana de comida para canijos por ésta moneda... Y la señalo con uno de mis dedos.
¿Parecerte bien?
EDITO: Ups, lo siento
Dufniall, miró con preocupación las escaleras del templo, pensó que sería mejor acercarse y calmar a los aldeanos a que se montara alguna especie de turba que quisiese lincharlos.
-Seguid comprando, a ver qué podemos sacar en claro de todo esto, voy a ver qué se cuece en el templo, no me gusta la pinta que tiene esta situación.
El nórdico, se echó a andar en dirección al templo, le aclararía a los aldeanos que en cuanto tuviesen la comida que habían venido a buscar, se marcharían para no volver y no causarían ningun mal a los habitantes de la aldea. Fue a mitad de camino cuando recordó que faltaban alguno de sus nuevos compañeros "Mierda, seguro que esa elfa estúpida acaba matando a alguien de manera innecesaria..."
Agarró uno de sus amuletos, tratando de mantener sus manos lejos de sus armas. -Buenos días, buenas gentes...!!- comenzó su saludo...
Mur'han esos destinatarios xD
Y encima es un vulgar ladrón pensó la elfa con desprecio al ver como su presa acechaba a su vez a los patéticos humanos, al parecer sin el valor suficiente como para mostrarse ante ellos ¿Es tan débil que tiene que esperar a que uno sólo de ellos se separe los demás para pillarle por sorpresa? ¿Tan bajo se arrastra para conseguir un puñado de monedas de cobre?
El odio de Khaela iba aumentando cada vez más, pero decidió esperar el momento oportuno: aquel cazador seguramente sería la víctima perfecta para el cobarde portador de la guadaña Tendré mi oportunidad se dijo mientras continuaba siguiendo a su compañero, esperando a ver cual sería su próxima acción.
Sonrió para mis adentros al ver al cazador solitario. Una presa fácil. Pienso con regocijo mientras lo sigo sigilosamente, a una distancia prudencial.
Pienso en mis compañeros, los cuales ahora debían estar comprando, ¿habrán matado ya a alguno? Si, era lo mas probable.
Tira movimiento silencioso.
Observas como tu compañero escondido en las sombras parece haber elegido como objetivo al Cazador y avanza sigilosamente tras él a una distancia prudente.
El hombre algo asustado aun te responde que si, te entrega las cosas en un saco viejo y toma la moneda velozmente mientras retrocede.
No he agregado el accionar respecto a lo que ha hecho Dufnial por que aun espero la participación de los otros 2 personajes que llevan rato sin participar.
Si le atacase ahora seguramente me sería imposible evitar que gritase, y entonces ese cazador se alarmaría por el ruido y sin duda correría a avisar a la guardia... La bruja tuvo cuidado de no pisar ninguna ramita mientras continuaba siguiendo al odiado hechicero Será mejor que le deje acabar con él en lo profundo de la espesura: una vez esté muerto el humano, nadie le oirá gritar Una sonrisa apareció en el rostro de Khaela, que no perdía de vista al portador de la guadaña.
Agarro el saco y me lo hecho a la espalda sobre el hombro donde no está la rebanadora y, mientras salgo de la carnicería giro la cabeza por encima del hombro. Gracias.
Al salir y ver la que se está montando cerca del templo me encojo de hombros y me encamino hacia la salida, pero lentamente, por si le pasa algo al canijo de Dufniall.
Mientras nadie se interponga en mi camino, nadie morirá hoy...
Tira movimiento silencioso.
Tirada: 1d100
Motivo: Movimiento silencioso (Agilidad/2)
Dificultad: 24-
Resultado: 29 (Fracaso)
¡Agh! ¿Pero como que movimiento silencioso? nunca tengo las habilidades necesarias... U.U
En fin, como es básica te hago la tirada con la característica a la mitad... Por los pelos ^^ ya era demasiado bonito superar esta tambien
Cuando escucha al tendero hablar de la hambruna que pasaría el pueblo si diera a mi acompañante la comida que necesitaría para una semana, dandole al final una vaca, Ergot ríe mientras comenta:
- Tienes suerte, tendero. Los demás también venimos a por comida - agita su monedero, para que quede claro que sólo la comprará - pero somos menos exigentes. Dame pan para una semana, así como carne. Y rápido, cuanto antes nos sirvas, antes nos iremos del pueblo.
Sin moverse de la tienda, ignorando la actividad del tendero mientras le servía lo que había pedido, se gira hacia el templo para ver cómo se desarrollan los acontecimientos.
- ¿Tendremos al final que cortar alguna que otra cabeza? ¿O serán listos y nos dejarán en paz? - Se pregunta sonriéndose, esperando que le den alguna excusa para matar.
Siento la tardanza >.<
Mientras espero tras una esquina de una casa cercana a la entrada, veo como se produce un gran revuelo en el templo con muchos aldeanos acumulandose en la escalinata de la entrada, los cuales hablaban con el que parecia el sacerdote, mientras señalaban en direccion a la tienda donde se encontraban mis compañeros..., y para colmo el estupido barbaro se habia acercado a ellos, que pretende hacer este tonto, que lo linchen...
Me mantengo expectante para ver que es lo que sucede a continuación, y me preparo para lo peor, mientras observo cuantos guardias vigilan la puerta..., en la posicion en la que me encuentro puedo pillar por sorpresa a varios de ellos, pero luego deberia aguantar a otros tantos en la puerta de la sala de guardia donde se encontraba el mecanismo de la puerta y la verja, para darle tiempo a mis compañeros a salir de alli....
Continuas avanzando en sigilo; escuchas claramente tus pisadas y has producido alguno que otro ruidillo, pero al parecer tu compañero de la guadaña esta demasiado concentrado en su presa/objetivo y no se percata de tu presencia.
Observas campesinos, leñadores y cosas así, algunos incluso de fisonomía imponente para los estándares de un pueblerino; sin embargo, de guardias no ves nada.
El hombre empezó a guardar varias piezas de Pan (6) en un saco viejo además de colocar allí algo de carne en salazón. –Serian 7 chelines por todo- le respondió el carnicero tras extenderle el saco, su cara de miedo y dudas seguía firme.
A lo lejos, en el centro de la pequeña aldea Dufniall había llegado hasta donde se agrupaban mas de una docenas de pobladores de aquel lugar entorno a un templo; parecían hablar con sacerdote vestido de negro que los miraba tranquilo. En cuando Dufniall los saludo estos voltearon a verlo y empezaron señalarlo.
-Bestias, son bestias, han venido a robarnos de nuevo señor; debes ayudarnos, han traído a un ogro con ellos- Dijo un campecino algo asustado.
-Han hecho algún acto vandálico hasta el momento?- Pregunto el sacerdote
-No…- respondieron varios pueblerinos
-Pero míralos, mira como visten, deben ser salvajes, si no actuamos pronto arrasaran y quemaran nuestra aldea-
El sacerdote avanzó hacia Dufniall sin prestar atención a las protestas de los campesinos.
-Soy Mentos, Sacerdote de Morr; que hace a un habitante del norte vagar por estas tierras y acompañado de tan peculiar grupo- El sacerdote señalaba al resto del grupo o al menos a lo que el creía era el resto del grupo.