Sales y un pensamiento te cruza la mente. La niña tenia entre 5 y 6 años, hace 5 años que no ves a Hundra... recuerdas vuestra ultima noche juntos y te asalta una duda brutal.
Kalthorin ignoró por el momento la pregunta del bárbaro, y posó suavemente el guantelete acorazado en el hombro de Hundra.
-¿Vas a irte sin saludarme si quiera? -dijo sonriendo, aunque sin soltarle el hombro.
Dirijo mis pasos a toda prisa hacia mi forja. No hace falta que despierte a ninguno de mis aprendices, pero necesito trabajar. Trabajar hasta estar tan agotado que no pueda pensar en nada y al final me alcance el sueño. Un sueño agotado que no traiga ni a los sueños, ni a las pesadillas.
Tranquila que eso ya se me había pasado por la cabeza hace un buen rato...como que desde que comentaste que la niña parecía tener 6 años xDDD.
La niña no comprende tu gesto, solo ve que eres un extraño parando a su mami, se revuelve y te suelta una patada en plena espinilla con toda su alma, despues te saca la lengua. Garek tapa la boca de la niña con la mano impidiendole que continue con su groseria y le susurra algo riñiendola por su comportamiento.
- No yadra.- le recrimino a la pequeña apartandola de Kal. La niña era un cielo pero era rebelde e impulsiva, me costaba controlarla aveces.- Lo siento.- me disculpo por ella.- Creyo que ibas a atacarme, no te conoce y yo que se quien eres no pienso fingir que somos grandes amigos cuando es evidente que me odias, con solo mirarte a los ojos. Entonces ¿Para que quieres que me quede?
Si, lo se, eres un chico listo (lo cual no es frecuente) pero esto es narracion tipo libro y tenia que decirlo ^^
Mirando de reojo veo a Hundra y a Kalthorin, ¡estaban vivos!, no podía creermelo. No quise ir adonde estaba ellos porque...estaba siendo vigilada, todavía, por esas extrañas personas emcapuchadas que, posiblemente, sean esbirros del nuevo rey, que quieren matarme...
Cita:
Y tremendamente inseguro...ahora no se si te has molestado...si es así lo siento, en serio...
Enfadada contigo??? ¡NUNCA! Si roleas de miedo, a ver que se me ocurre ahora para meterte algo de tema en la fragua... umm....
Me dejas mas tranquilo...precisamente no comente nada sobre la ninia por si metía la pata o daba en el clavo...mis amigos me odian en el cine xDD
Gracias por decir que roleo bien...creo que es la única cosa que hago bien xDD
-No te disculpes por tu hija, ella es una criatura inocente que no tiene nada que ver en esto. ¿No es así? -Kalthorin esbozó una sonrisa carente de alegría. Después enarcó ambas cejas en un gesto inquisitivo -Entonces, Hundra, ¿no te ocurre nada que pueda querer de ti? ¿hmmm?
Aquellos que te vigilan desaparecen al ver entrar al paladin ¿Por miedo?¿Por que es peor que ellos?
El viejo rey todavia resiste en su trono pero el principe es un mal bicho que buscara cualquier escusa para acabar con su padre y tomar el trono. El poder de una maga blanca es un dulce que quiere probar, piensa que seria una baza a favor y sabes que tantea el momento de poner sus manos sobre ti, mas ahora que eres princesa.
Notas que te miran con fijeza, para la pequeña no pasas desapercibida. Sientes poder en ella, heredado de su madre pero dormido en su interior, posiblemente hasta que llege a la adolescencia. Sabes que ella tambien siente lo mismo en ti.
En cuanto veo la expresión inquisitiva de Kalthorin que le hechaba a Hundra, no me parecieron buenas sus intenciones.
Kalthorin...¿Tú...también nos traicionarás...?
Pensé tristemente, evitando que volviese a llorar y me delatasen...Entonces veo a aquella dulce niña, mi sobrina, entonces me siento un poco apurada y nerviosa. Notaba que no dejaba de mirarme.
No...por favor...no mires hacia aqui...
No quería poner en peligro ni a mis amigos ni a mi sobrina.
- Se a que te refieres y que no me creeras pero yo no la tengo. Te la quite por tu propio bien, para protegerte y se perdio en las ruinas del palacete.- le confieso mirandole a los ojos pero sin soltar a la niña de mi mano, hay algo en el distinto, algo que me alerta de que es peligroso.
¿De que estais hablando?.- gruñe el hombre del norte mirando a Hundra y Kal. Despues sus ojos bajan mirando a la pequeña.
Yadra tiene la mirada fija en una mujer sentada en la barra, con una capuña puesta pese a estar dentro y a cubierto.
-Tienes razón -asintió Kalthorin mientras soltaba a Hundra-. No creo ni una sola palabra de lo que me digas. ¿Por qué debería, a fin de cuentas? No es la primera vez que me mientes y me traicionas ¿verdad? Quizá podamos tener una pequeña charla, tú y yo. Pero primero deja que te acompañe a acostar a esta autentica preciosidad.
El paladín sonrío a la niña, y por un instante, el acero se ausentó de su mirada. Volvió a ser el mismo risueño joven de siempre, con la inocencia intacta. El joven que aún no había sido traicionado por sus mejores amigas de la infancia, una y otra vez, de forma inmisericorde. Sin que le importaran un ardite los sentimientos del paladín.
Kalthorin alzó a la niña en volandas.
-Te sigo, amiga.
La niña tuerce el gesto- ¡No llames a mi mama traidora!¡Ella no es una traidora!.- te grita revolviendose como una pequeña fiera.- ¡Sueltame, tonto!
La cria hace un autentico escandalo, todo el mundo os mira.
No le gusta que la cojan.- digo negando con la cabeza, quitandosela a Kal de las manos.- Ni ella ni a mi me agrada asi que, por favor, no vuelvas a tocarla.- digo con tono firme, sin querer formular una amenaza.
-Y yo que pensaba que no conocías el idioma imperial -sonrió Kalthorin mientras dejaba a la niña en el suelo con tranquilidad-. ¿O fue "traición" la primera palabra que te enseñó tu mami?
El barbaro se levanta de la mesa.- Muchacho, no se que tendras que discutir con ella pero mide tus palabras. Es la tercera vez que la acusas de traicion ante mi y no tolerare una cuarta. Asi que piensa lo que dices, si no es por la niña por mantener los dientes dentro de tu boca y piensa bien que sera lo siguiente que digas pues si esta es la forma en la que el imperio busca la paz esta errando el camino.