Partida Rol por web

Bienvenidos de vuelta a vuestra amada ciudad.

Os dejo un bonito mapa a coleres para que os podais ir situando.

La parte amarilla es el distrito financiero, el lugar donde habita el principe. El Eliseo se encuentra la calle de la playa. En la zona verte, en nort Beach.

En Nob hill se encuentra la universidad y en el barrio ruso el bar de Ivanna.

Para iros metiendo en hambiente os dejo una pequeña escena de prologo.

Los cinco os encontrais en una reunion secreta, en un almacen abandonado cerca de los muelles. Washington a caido en manos del sabbat, es cuestion de dias que el sabbat trate de hacer lo mismo con vosotros. Preparar una extrategia comun sera clave para ello.

Nadie debia saber de la reunion. La prepare con el maximo secreto, reuniendo en ella solo a aquellos que crei dignos de confianza.

San francisco es una ciudad que solia evitar, preferia New York, amaba el caos de una ciudad tan frecuentemente atacada por el sabbat. La lucha era mi pasion, casi agradecia a esos estupidos sabbat que entrarn en mi ciudad por la diversion que me suponia persegirlos y darles caza.

Odiaba a esos pequeños bastardos casi tanto como mi sire.

Haciamos un equipo extraordinario... hasta que fue nombrado justicar y sus obligaciones le apartaron de nuestro amado deber. Aun asi logre que no se notara su falta en la ciudad, ningun sabbat logro sentar su mugriento culo en el trono de mi ciudad y estaba orgullosa de ello.

Proteger New York era mi vida hasta que me informaron de la muerte de mi sire. Fue por ello que me movi hasta San francisco, mis informaciones decian que seria el proximo punto en atacar y yo les estaria esperando.

- Bien señores.- dije entrando, abriendo la puerta de par en par para dejar que cerrara de un portazo sola.- Se que es divertido jugar con la ciudad como si fuera una casita de muñecas pero es hora de tomarselo en serio o va a arder por los cuatro costados. Whasington a caido. El principe esta muerto y sus chiquillos lucieron empalados al sol- dije consciente de que la noticia aun no habia llegado a sus oidos.- Somos los siguientes de la lista. ¿Van a hacer algo o me he equivocado al llamarles?

Lavenko alzo la mirada para observar a la mujer que ingresaba recitando las palabras que secundaban la desgracia, quizás la caída de la ciudad de Washington era un anuncio poco alentador para los allí presentes pero había que hacer aun demasiadas cosas.

Escucho lo último que los labios de la Mujer presentaron como una sentencia Antes que nada Bienvenida a al ciudad, creo que aun no nos han presentado, Phillip Lavenko del Clan de la bestia  Comento en una presentación escueta ya que el tiempo apremiaba Hemos recibido noticias sobre la caída de la ciudad de Washington en manos de los cabeza de pala, estamos trabajando en evitar que ingresen a la ciudad alejándolos y fortaleciendo lazos agrego con el carisma de siempre y la serenidad de un vástago que había alcanzado la Golconda.

Ahora podría decirnos su nombre? Inquirió con maestría, mientras apartaba la vista de los alli presentes haciendo sonar el cuero de su chaqueta.

Mis ojos se dirigen a aquel que habla primero y una sonrisa sarcastica se marca entre mis labios.- Judit Lirsem es mi nombre, clan Brujah. Le agradezco la bienvenida pero me gustaria hacerle notar que entre en esta ciudad sin encontrar el menor problema. Sus compañeros, los del clan de la bestia, debian estar viendo el final de algun partido entre cervezas esta noche, es un milagro que el sabbat no se este dando un baño con la sangre de todos ustedes.

Tomo aire antes de continuar.- Supongo que han hecho lo que han podido por aqui pero ahora haremos las cosas de otro modo, las haremos bien.

Desde un rincón Lexi escuchaba, las noticias de la recién llegada, como ella eran inquietantes, las bestias del Sabbat llegarían pronto, siempre lo hacían y esta sin duda no sería la excepción.

Salió de las sombras-Es cierto lo que la señorita Lirsen dice, las medidas de seguridad de la ciudad son por lo bajo inapropiadas.-dice mientras se acerca a la mesa, aún en pie

Mi nombre es Lexi, chiquilla de Art Morgan, Gangrel-comenta finalmente con calma

No diría nada acerca de como hacer las cosas en la ciudad, al menos de momento sabía quien era la chiquilla aunque sus aires de líder le escocían profundamente.

Dejaría que los locales jugasen sus cartas no era momento para competencias de ese tipo

Si algo se aprende al ser inmortal es que la vida es una jodida serpiente que se muerde la cola. Pareciese ayer cuando en otra reunión Blaise había salido elegido como principe...Gracias a su voto y al de otros capullos. Aun a día de hoy, Romanov se preguntaba si el mandato había sido bueno o malo...

Como hace quince años, volvía a haber una reunión, y para ello se había vuelto a excluir a algunos clanes. Hace quince años aquello fue un error, muchas vivas (o no vidas) se podrían haber salvado con una mejor coordinación entre todos. Fruto de los errores cometidos hace quince años, ahora apenas se podía mantener la ciudad a salvo. El Orgullo de Trakia le impedía reconocerlo, pero era así...

Para los que no me conozcan...Romanov Trakia, brujah-Dijo con decisión-Dinos primero por que te crees con el poder de llamarnos a reunión. Es decir, ¿Quién eres?

-Podria deciros que os convoco con el poder que me da ser chiquilla de un justicar pero faltaria a la verdad hacerlo, pues el no me manda... de echo ya no manda a nadie, nisiquiera al viento que esparcio sus cenizas por la capital de estado. Aunque lo que sorprende es que no fuerais vosotros quienes la organizarais. Trakia, no es digno de ti la dejadez en la seguridad, tu nombre infundia respeto en el sabbat, ahora hacen chistes con el ¿Te quedaras de brazos cruzados o se podra contar contigo?

- He llamado solo a aquellos de cuya lealtad no dudo, teneis ratas hasta en la cocina, tenerlo en cuenta cuando abrais la boca fuera de esta reunion.

Vaya no sabía que ser la chiquilla de un Justicar diese ese poder, podría haberlo usado antes-responde con ironía aunque luego su voz se suaviza, no quería ni imaginar lo que pasaría cuando Art muriese
Siento tu perdida

Se mantenía de pie mientras observaba al resto de la mesa-que planteas?-respondió finalmente para hacer avanzar la conversación

- No da poder ni derechos pero si una gran responsabilidad.- Afirmo sin entender la ironia.- Gracias por inecesarias condolencias, ahora ¿Podemos dejar los melodramas y centrarnos en esto? Segun veo tenemos dos opciones. Convertir la ciudad en un bunquer por el cual no pase un alfiler o dejar que entren y cerrar la trampa con ellos dentro. Personalmente me decanto por la segunda, es la mas arriesgada pero es la unica que asegura el exterminio de todos los sabbat. Seria un duro golpe para ellos y ademas no sospecharian nada porque entrar en esta ciudad es pan comido.

El, Sabbat tampoco es inocente, si no encuentran dificultades para entrar van a sospechar, son suspicaces y no debemos subestimarlos, aunque su idea es plausible.

Creo que lo mejor es hacer ambas cosas, reforzar las medidas de seguridad para la entrada a la ciudad, cámaras termales en los puestos de peaje para ingresar a la ciudad, asi como en las aduanas y los muelles de la ciudad, pero destinar la mayor fuerza a "cerrar la trampa" como ha señalado.

Además de eso es necesario un catastro de todos los vástagos de la Camarilla y organizar cuadrillas de vigilancia los primeros días que se adopten las medidas preventivas, mezcladas con vástagos de probada lealtad, los que podrán sernos informados por los residentes más antiguos, de los aqui presentes y otros de menor confianza-añade finalmente mientras observa a los presentes

La Bestia estaba en calma en la planificación y aunque su especialidad fuese otra, en el clamor de la batalla no había diferencias entre lupinos y Sabbat, un descuido sería fatal

El sabbat no sospechara que la seguridad sea penosa porque realmente lleba años siendolo.- puntuo haciendo una breve pausa.- Esta bien lo de las camaras pero bastagos de confianza somos los presentes, puede haber alguno mas pero creo que si decimos que el sabbat esta en la puerta la mayoria saldra corriendo... Recuerda que hasta hace poco la ciudad era un refugio de nenazas toreador.

La primera parte fue espectacular y la segunda no bajo el nivel, la tercera la monto con animo de ser apoteosica ^^

El príncipe se apartó de las cámaras con el ceño fruncido. Suspiró ruidosamente. Le invadió el tedio de la repetición... Podía comprender la soberbia, pero nunca dejaba de molestarle. Se levantó y se acercó a la puerta. Bajó a la sala de reuiniones, pintando su mejor sonrisa diplomática y con un New York Times bajo el brazo.

Entró con suavidad, pero sin perder altura ni dignidad. Antes de decir una palabra, apoyó el periódico sobre la mesa. Miró a los presentes, y habló.

- Ante todo, bienvenidas ambas a San Francisco. Soy Blaise Sanford, Príncipe de la ciudad. Como veo, ya habéis conocido a Phillip Lavenko, mi Senescal, y a Romanov Traika, el Sherif. Ahora... pongamonos en marcha con los asuntos que nos ocupan, de forma ordenada y civilizada. - Señaló al periódico - Esto que tenéis ante vuestros ojos, es una prueba de muchas cosas. La primera, para dejar la cuestión ya zanjada, es la fecha. Hace quince años que no gobierna un Toreador en San Francisco. Quince años en que esta ciudad se ha mantenido en pie, a psear de los múltiples ataques del Sabbat, de los Lupinos y de la mismísima Sociedad de Leopoldo. Hemos sobrevivido contra viento y marea, en condiciones mucho más duras que las que hay en Washington o en Nueva York... creedme, conozco bien esos lugares. Todo eso ha sido posible gracias a la coalición formada entre nosotros, los Gangrel, los Brujah y los Ventrue. Y también gracias a la inestimable colaboración de nuestros hermanos Nosferatu y Malkavian. ¿Sorprendente? Creedme, los Toreador aquí no tienen ningún poder, menos después de la probada traición del anterior príncipe, Leonard, y su chiquilla, Amanda... en paz descansen ambos.

Tomó aire, y miró a los presentes con aire divertido.

- Respecto a nuestras medidas de seguridad... Todos los recién llegados empezáis igual. Creéis que una defensa sólida y estable funciona aquí. Creéis que mantener un censo fijo, realizar patrullas, crear trampas agresivas va a hacer algo contra nuestros enemigos... Pensad lo que queráis, pero no olvidéis quién es el príncipe. Los anteriores primogénitos Tremere y Toreador pagaron muy caro el no acordarse de dónde estaba la autoridad. En San Francisco, las estrategias frontales no sirven de nada. Nuestra mejor arma contra el Sabbat, son los Cazadores. Y nuestra mejor arma contra los Cazadores, es el Sabbat. Tenemos a nuestra disposición una herramienta que ninguno de estos grupos sabe utilizar: los Mortales. Gracias a ellos, hemos sobrevivido quince años de paz y prosperidad... Ya sé que fuera de la ciudad nos miran como si estuviéramos locos, piensan que descuidamos la seguridad... nada más lejos. Respecto a los Lupinos... Nuestro camarada Lavenko tiene sus propias formas de mantener la paz entre las especies.

Sin apenas parpadear, abrió su archivo mental, buscando toda la información que tuviera acerca de las dos recién llegadas. Sobre Judit Lirsem, particularmente, debía tener información... Neuva York era como el segundo hogar de Blaise.

- Nuestra seguridad, y el mismo gobierno, se basa en la confianza y la discrección. Si esta confianza se rompe, tomamos medidas. Somos todos hermanos. Podemos tener nuestras diferencias, pero el objetivo es siempre el mismo. Lavenko y Traika, aquí presentes, os lo pueden confirmar.

Se sentó en una silla y cruzó sus manos, jugueteando con su anillo de casado.

- Pero creo que me estoy adelantando... si no me equivoco, estabais tratando de impartirnos un curso de iniciación en materias de seguridad. Debo aclarar que esto no es un centro de día pero, mientras tengáis el poder de entretenernos... seguid.

Trakia piensa que igual se lo come un garou pero no dejare que pase eso ^^ seguira de sherif, tu tranqui, le necesito XD

- Agradezco la bienvenida pero que hubiera desado no poner los pies en su... me ahorro el adjetivo de "mierda" y simplemente digo.- Ciudad.- tras una pausa apenas perceptible.

- Hizo un buen trabajo manteniendo a manadas de neonatos sabbat fuera de su territorio.. menos esa vez que se metieron hasta la cocina, claro esta, pero por lo general no lo ha hecho demasiado mal para ser un vastago sin ninguna preparacion para el cargo. Si, esta genial que Gangrel y Brujah sean muy amigos suyos y le protejan el culo pero ahora hablamos de SABBAT digo recalcandolo mucho.- No de neonatos destetandose, de tipos duros de verdad y sus defensas son una puta porqueria, asi que deje de tirarse florecitas, ponga a todo cristo en alerta y comience a desplegar todas medidas de seguridad de las que disponga como si su culo le fuera en ello porque ¿Sabe que? Su culo depende de ello.