Partida Rol por web

La ruina del Hombre

El principio de la madeja (Nactas, 2 de Numa del 471 d.T.)

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30/06/2007, 09:59

...cuando regresó el viejo de rojo y barba cuidada, con la amplia frente perlada de sudor y jadeando. De vez en cuando tropezaba con el faldón de su túnica larga, con lo que su andar se hacía patoso y cómico.

Llegó a la altura del llamado Meridiar y llamó su atención. Se acercó a él y le habló en voz baja...

Rhiannon no pudo escuchar las palabras, pero sí escuchó un carraspeo que le hizo mirar en su dirección.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d10+3
Motivo: ...
Dificultad: 12
Resultado: 8+3=11

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09/07/2007, 15:43

- Tranquilizaos, padre - pidió una voz joven aunque llena de fuerza.

- Y un huevo me tranquilizo, Mydôyrn. Estos putos aldeanos se atreven a matar a Laggrôss, ¡a mi hijo! ¿y esperan que no lo tome por un insulto? Valiente hatajo de chupadores de pollas. Me cago en todos sus padres, hijos de bastardos, ¡de animales! Insultar al señor de Nyrr...

- Padre, ¡por favor! - la voz sonaba ahora quebrada, entre desconsolada y hastiada - Yo trataré con el Donner. Vos dejadme hacer, os lo ruego. Hacedme caso, que yo conozco sus costumbres.

- Demasiado, diría yo. A ver si por darte buena educación acabé por convertirte en uno de estos habitantes del Puudh. Marranos en celo.

En ese momento, las dos personas llegaron a la altura de Rikke, quien hizo un esfuerzo mayor por permanecer oculta. Se colocó tras un arbusto alto, y al agacharse el suelo inestable le hizo desequilibrarse levemente, y tuvo que poner una mano en la tierra para no caer. No hizo mucho ruido, pero tuvo que quedarse quieta en esa posición incómoda, aterrada, segura de que le habían escuchado.

Sin embargo, ambos siguieron adelante sin percatarse de nada, absortos en sus palabras. Por lo que ella pudo ver de ambos, ya de espaldas, a través de las ramas más abiertas del arbusto, uno mayor con melena cana vestía de negro y oro, mientras otro, más joven y no tan alto pero sí ancho de hombros como el primero, de melena rubia oscura, vestía de rojo apagado y oro, y gesticulaba bastante mientras hablaba.

- Tiradas (2)

Tirada: 1d10+10
Motivo: esconderse
Resultado: 1+10=11

Tirada: 1d10+3
Motivo: ...
Resultado: 1+3=4

Notas de juego

Jarl con los dados.

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13/07/2007, 10:16

Había sido tan sencillo que casi parecía un juego de esos de esconderse y buscar. Rikke había jugado mucho a ellos más de niña, y sólo ahora había empezado a darse cuenta de que parecía una preparación para lo que estaba por llegar...los secretos, las esquinas, los susurros y jadeos.

La sacó de su ensoñación algo que se salía de lo esperado. La cama estaba hecha, pero de forma precipitada. No había sido el servicio. En el caso del señor Rannedh tampoco era algo extraño. No solía permitir que el servicio entrara en sus aposentos, excepto de forma puntual y con permiso expreso.

Lo que sí era más extraño era la mancha que asomaba en el blanco de la manta interior y de la almohada de pluma. Desde donde estaba podía ver que era muy oscuro, algo rojizo, y estaba casi seco, por la falta de brillo. Era del tamaño de una cabeza, sobre la almohada, y se extendía obscenamente por la manta y se perdía en un hilo seguramente hasta el suelo de piedra.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d10+2
Motivo: ...
Resultado: 8+2=10

Notas de juego

Supones bien :D

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16/07/2007, 18:11

Tras la puerta, la escalera prometida, sobria y no muy segura ya que estaba pensada para los soldados y no para los señores, pero era de peldaños largos, al menos, y sólo hacía falta bajar con algo de cuidado y tino para no tener un accidente fortuito. Rikke bajó dos de esos escalones y se colocó contra la pared al lado de la puerta. La tuvo que dejar cerrada, lo que atenuó bastante el sonido, pero por el golpeteo de metal, como un campanilleo y un clanc clanc supo que serían sin duda varios guardias siguiendo a alguien que hablaba con voz algo espesa y apremiante.

- No quiero una palabra de esto u os cuelgo por las pelotas, ¿entendéis? Además, da igual, si ese maldito alquimista cualquier día nos iba a quemar vivo con sus prebitas o como se llamen esos ... artilugios. Avisad a Northeed y a Taâlk. Los quiero aquí ya, que limpien todo y sólo hablen conmigo, ¿eh? Como a alguien se le vaya la lengua...

El final de la conversación, o su intermedio, se fue perdiendo mientras se alejaban hacia la habitación de ese hombre que Rikke nunca conoció bien. Era curioso, a él no le parecía un alquimista, sólo alguien interesado en leer más que en hablar. Alguien que nunca se portó mal con él, y que le sonreía al verla cuando normalmente estaba serio y con los ojos negros perdidos más allá de las paredes.

Pero le había conocido muy poco. Un hombre enjuto, siempre de negro, por más amable que fuera, su imagen hacía difícil buscar su compañía.

La voz del pasillo, por cierto, gangosa, era inconfundible. Sólo podía ser Eddick, el mayordomo de cámara y "asuntos sucios". Un tipo detestable.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 1d10+2
Motivo: Escuchar
Resultado: 10+2=12

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25/07/2007, 20:31
Yyridda

Yyridda se llevó una mano a la boca y abrió mucho los ojos oscuros, como si atajara un grito. Su respiración se entrecortó y se hizo dificultosa. Perlas de sudor aparecieron en la poca frente que su larga melena sin peinar mostraban entre la oscuridad de la casa cerrada.

- Por la Voz, prima. Esa sombra...hay un demonio en el palacio. Hay un demonio y me ha visto.

Ay, ay...estoy segura. Yo no vi nada. Yo no sé nada. Prima, ¡prima!¡Qué puedo hacer yo!

Sus ojos se fueron a uno y otro lado, y Rikke notó el temblor en sus manos.

- Oh...si tan sólo...si tan sólo...

Ella susurró algo más, pero habló tan bajo que Rikke no fue capaz de escucharlo. Yyridda cerró los ojos y los apretó como si no quisiera estar allí ni en ningún otro sitio, nunca más.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 1d10+2
Motivo: Escuchar
Dificultad: 8
Resultado: 5+2=7

Notas de juego

He visto que en tu ficha falta que te pongas una característica especial. Es una especie de regalo...algo que tu pj hace especialmente bien...simplemente te dará +1 a algo...una habilidad o parte de ella...ejemplo oído agudo, maña al bordar, coser y reconocer telares...bailar, cantar...etc.

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30/07/2007, 19:16
Yyridda

Yyridda pareció tranquilizarse con aquella respuesta. Cedió ante la mano de su prima y sonrió cansada. Rikke abrió la puerta y ella le apretó la muñeca, pero salió. A la luz del Sol de la mañana, con los ojos cerrados como si el Sol le dañara, su aspecto era deplorable.

Yyridda era una joven hermosa que cuidaba su imagen. Le gustaba estar hermosa, y por su ocupación además era algo que su señor fomentaba, y en ocasiones le permitía vestir algún vestido bonito para que se acercase al castillo.

Rikke la ayudó a desplazarse y la llevó a una zona de la calle más a la sombra. Allí ella pareció estar más cómoda, aunque aún temblaba y se veía nerviosa, con los ojos yendo de un lado a otro, insegura de sus pasos.

Repentinamente, a medida que los pasos la alejaron de la casa pareció estar más segura de sí, y se animó a hablar.

- Mi señor tuvo que hacer un trato extraño o arriesgado, prima, no me preguntes cual. En ocasiones lo hace, no conozco por qué, pero está más serio, y hay un fuego en su mirada que no acierto a distinguir si es miedo o rabia hacia nosotros. Nos exige un buen trabajo incluso aunque eso no esté en nuestras manos, y si fallamos...lo pagamos caro.

Pero mi padre es bueno, muy bueno. Suelo ser yo quien...recibe los castigos cuando algo no está a su gusto.

Esta vez sabía que algo malo sucedería...pero tanto debe ser su miedo que casi no me ha tocado. Está en su guarida, como una...alimaña...rumiando qué hacer. Sólo sé que el cliente es un individuo solitario en la corte, y del que hablan que lee libros prohibidos y que estudia la antigua magia, aunque ningún preste le ha prendido nunca, ni siquiera lo han vigilado.

Dicen que tiene poderosos aliados...quizá...no lo sé. Creo que verse implicado en este asunto ha podido ser para mi Señor más un mal que un beneficio.

La calle que rodeaba la muralla era mudo testigo de las palabras de Yyridda. Sin embargo, hablaba muy bajo, con prudencia y mirando a uno y otro lado, y aún el Sol era bastante para deshacer cualquier sombra densa, de modo que, excepto por los guardias que paseaban sobre el alto adarve, y que las miraban, sí, pero con otro tipo de interés más evidente, nadie más parecía estar allí con ellas.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 1d10+3
Motivo:
Dificultad: 12
Resultado: 10+3=13

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01/08/2007, 12:54
Rikke

La visión del castillo me devuelve a mi realidad, se que debo volver, puede que me necesiten…mi madre y mi hermano, a lo mejor están preocupados…pero Yyridda..

Claro que todo ira bien, tienes que creer a tu padre, él no te mentiría mientras hablo enfilo el camino de vuelta a su casa, no quiero que la visión del castillo vuelva a perturbarla…

Yo te ayudaré Yyridda, intentará enterarme de algo, pero tu no te preocupes, que ciertamente necesitas descansar… simplemente intentando mantener a mi prima distraída regresamos a la residencia del señor de Gyll, a la pequeña habitación anexa donde mi prima habitaba con mi tío, al entrar en ella abro la ventana, permitiendo que la luz entre y el aire libere el opresivo ambiente…acomodo a mi prima para que descanse y preparo algo de comer…debía regresar al castillo, pero la idea de ver a mi tío y averiguar algo más me atraía a la vez que me preocupaba…

Notas de juego

No se si he avanzado demasiado...se donde esta la habitacion de trabajo de mi tio?? si es asi cuando mi prima quede descansado ire a echar un vistazo, si no lo se regresaré al castillo..

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01/08/2007, 19:10
Director

Rikke se llegó a su prima de vuelta a descansar, ya algo más animada, o al menos más tranquila. La mirada de los guardianes de la muralla era todavía incómoda, pero siempre había sido así. En general, excepto durante la noche, una no debía preocuparse. El Donner era muy duro con esos casos. Muy, muy duro.

Yyridda se tumbó en su jergón y se quedó dormida al instante. Rikke empezó a tener hambre de verdad. Sobre la mesa había algo de queso y unas cerezas. En la familia había confianza de sobra, así que cogió un poco de cada y lo engulló con ganas.

Luego, tras tomar una decisión, salió asegurándose de dejar la puerta cerrada. Se dio la vuelta y rodeó la casa hasta llegar al jardín. Allí su corazón comenzó a latir con más fuerza. Anduvo muy despacio preocupada por no hacer ningún ruido. En la calle pasaba la gente ignorante de sus intenciones, completamente abstraídos en sus propias cavilaciones. Cerca de la entrada el jardín mostraba tres hermosos cerezos, ya con fruto maduro, unos matorrales y muchas flores aromáticas. Entre ellas, como siempre, los capullos de la flor de luz, la promesa del verano para todos.

Y mientras se ocultaba, una voz se elevaba sobre las demás, difícil de escuchar, apenas un susurro a esa distancia. No era la voz de su tío, y hablaba con autoridad.

- Tuve que haberlo devuelto. Sabía que hacer negocios con ese estudioso me traería complicaciones. Ahora la estúpida de tu hija no quiere salir y hacer lo que tiene que hacer. Te juro que si no lo perdemos de vista hoy mismo... En fin...tú sigue trabajando. Voy a ultimar unos detalles. Joder...el tiempo es crucial.

Unos pasos y un portazo fueron lo último que se escuchó. Luego, sólo una respiración pesarosa y algo parecido a un llanto contenido antes de que unos leves martillazos anunciaran la vuelta al trabajo de un artesano magistral.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 1d10+2
Motivo: Escuchar
Dificultad: 12
Resultado: 10+2=12

Notas de juego

Sí, conoces todo lo que te he dicho. De hecho, has pasado alguna vez a ver a tu tío trabajar. Eso sí, nunca has entrado en la vivienda del de Gyll.

Cuando digo "cerrada" digo sin cerradura. No sé si ya te lo he comentado, pero normalmente las casas que no tienen nada de valor no se cierran más que desde el interior, con algún mueble para guardar el sueño.

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01/08/2007, 22:20
Rikke

Tras atravesar el bonito jardín la voz me hizo encogerme un poco más...tras acallarse doy un tiempo prudencial y me voy acercando...el llanto contenido hace que me acelere en mis pasos...

Recorro la distancia que me separa del taller de mi tio con cuidado, evitando tener un encuentro no deseado...al llegar a donde el se encuentra, fascinada aun por el sonido de los golpes que deben estar moldeando algún objeto maravilloso, como todos los que hacia mi tio...me relajo un poco y hablo...

Tio, soy Rikke...¿como estás?... pregunto cautelosamente en previsión de que el fuera el autor del llanto contenido...

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02/08/2007, 17:58
Herond

Herond se sobresaltó. Sus ojos oscuros estaban algo enrojecidos, y su piel morena parecía más arrugada que otras veces. Aún conservaba la buena cantidad de pelo negro, recogida en una coleta. Su hija se parecía mucho a él, desde luego.

Tenía barba de pocos días, canosa como si fuera marcas de varicela diseminadas por su cara. Amagó una sonrisa de mentira y recogió el martillo que casi había dejado caer.

- Maldita sean las tetas de mi madre, Rikke, qué susto me has dado. Puff...ya no tengo el corazón para estas cosas...no, no lo tengo...bufffffffff.

¿Qué te trae por aquí? Eh...no has pasado a ver a tu prima, ¿verdad? Creo que estará dormida a ahora...no se sentía bien.

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02/08/2007, 23:43
Rikke

Sonrió a mi tio hasta mientras me acerco a él, le doy un suave beso en la mejilla, su aspecto me preocupa, pero mas sus palabras...

No tenia sentido ocultarle lo que sabia... Tío, he estado con Yyridda durante un buen rato bajo mi tono de voz hasta convertirlo en un susurro me ha contado muchas cosas tio, estoy preocupada por ella, por vosotros, he devuelto el anillo que me dio, nadie me ha visto suspiro profundamente y mi respiración se acelera al recordar el impactante descubrimiento...

Sigo hablando en voz en baja He oido que antes hablabas con el señor de Gyll, prima esta muy asustada, por favor, deja que te ayude en lo que pueda, no quiero que os suceda nada malo mi voz suena sincera y preocupada, aunque trago saliva mientras pronuncio las palabras...

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06/08/2007, 18:20
Herond

- ¡¡¿¿Qué??!! ¡¿Que tú has...?!

El hombre se detuvo en seco con un esfuerzo tal que debió dolerle. Miró a la puerta, cerrada no hacía mucho, y luego a su sobrina, sin odio, pero con los ojos más abiertos que una luna a punto de engullir la Tierra.

Se levantó sin hacer ruido en la mesa y cogió en silencio pero con fuerza a Rikke de un brazo. La hizo andar por el jardín y la detuvo en la pared más alejada, la que estaba junto a la puerta de su humilde casa de artesano.

- ¡Hija mía! Insensata. Loca...¡locas las dos! - Herond abrazó a su sobrina con fuerza -. No... yo no quería que mi niña hiciera eso. Cualquiera menos vosotras. Ella se sentía culpable, pero no debía...no lo era...no lo es...aaaaaay.

El hombre se separó ligeramente y miró alrededor, con ojos tristes. De repente pareció anciano y cansado, sin la fuerza de sus grandes brazos y su no menos voluminosa panza para sostenerle. Cruzó esos brazos y hundió la cabeza hasta encontrar las palabras.

- Cuéntame todo lo que ha pasado, Rikke...por favor. Tienes que decirme si pudiste hacer esa locura y nadie te ha visto...nadie...en ningún lugar.

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06/08/2007, 21:00
Rikke

Un pequeño respingo como respuesta a la reacción de mi tío…yo...yo… apenas balbuceo esas palabras cuando soy arrastrada al extremo opuesto del jardín…devuelvo el abrazo del asustado y nervioso hombre…sin saber porque, incluso algunas lagrimas afloran a mis ojos…siento como si hubiera cometido un terrible delito…

Vamos tío, no ha sido para tanto tomo su mano entre las mías y sonrío con ternura estoy cansada de moverme todos los días por el castillo sin que se fijen en mi…además, ¿por qué tanto lió con ese anillo? pregunto con extrañeza… No ha sido difícil, aquella zona del castillo no la conozco demasiado bien, pero pude orientarme con facilidad…y no, nadie me ha visto… dudo mientras pienso si contarle o no lo de la horrible lengua cortada…lo noto cansado, no quiero preocuparle más…pero no soy capaz de mentirle…

Solo una cosa que me inquietó tío, cuando entre en la habitación de ese hombre…vi algo muy desagradable…una len..lengua cortada, con rastros de sangre…pero no había nada más, fue después de dejar el anillo donde me indico prima… intento no ponerme nerviosa, aunque me cuesta controlarme al recordar el macabro detalle… Pero luego llego Eddick, el mayordomo, y dijo que Rannedh hacía cosas extrañas…pero nadie me vio, te lo aseguro tío no puedo evitar que alguna lagrima caiga por mi mejilla…un sollozo contenido…

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08/08/2007, 20:53
Herond

El cansado orfebre puso un dedo en sus labios y otro en los de Rikke, mientras cerraba los ojos y negaba con la cabeza.

- No, todo tiene que acabar aquí. No hagas preguntas, niña. ¿Nadie te vio? Entonces olvídalo sin más. Por la Voz...si Eddick se entera...claro que Rannedh hacía cosas...y eso ha sido sin duda su fin...

Jugamos con verdades que no podemos controlar, Rikke, mi pequeña. Nuestro papel en esto sólo puede ser el de marioneta...y marioneta muerta. Déjalo...olvídalo. Vuelve con tu madre y deja que el día pase. Y esta noche...si puedes...guarda un ojo abierto. Hay sombras que observan con maldad.

Miró a uno y otro lado, casi como un demente, esperando que llegara la fatalidad y le sorprendiera. Se encogía por puro miedo, y parecía mayor a cada momento mientras hablaba.

- Prométeme que no volverás a saber de esto, Rikke. Que huirás de todo lo que no conozcas en ese palacio. Que no volverás nunca a esa habitación.

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09/08/2007, 09:33
Rikke

Mi tío estaba consiguiendo asustarme de verdad…él siempre había sido otro tipo de hombre, nunca lo había visto tan cansado y tan mayor… Te prometo que no volveré a acercarme a esa habitación, y que tendré cuidado… casi prometería cualquier cosa con tal de aliviar el estado de ánimo de mi tío…pero mis promesas era sinceras, sólo deseaba regresar a palacio y obviar todo este terrible día…

Muchas preguntas sobre esas palabras que hablan de inquietantes sombras confluyen en mi mente…pero prefiero morderme la lengua a ocasionar algún disgusto al hombre que parece envejecer ante mis ojos… Cuidaré de huir de aquello que desconozco, y no hablaré de esto con nadie…te lo prometo tío palabras que buscan tranquilizarlo…

Fácil de decir pero difícil de hacer, la sombría imagen…la palabras de Yyridda, todo vuelve a mi mente provocando mi inquietud, pero no conseguiré nada con esto, sólo desasosiego…Está bien tío, regresaré a palacio y lo olvidaré todo… sin mucho más que decir y deseando salir de allí, coloco mis labios en su mejilla y abandono en silencio la estancia, como siempre, como un fantasma entre los muros de las mansiones y los castillos, que son los únicos que no entienden de clase o condición y cobijan y protegen, e incluso a veces encierran, a todos por igual….

La vuelta al castillo es una camino de luz y sombras…al mirar la mole de piedra, sentimientos de alegría y temor se cruzan entre sí, la familiaridad y seguridad ahora compiten en mi corazón con el conocimiento de saber que hay cosas ocultas que es mejor no llegar a encontrar…

Intento no pensar en nada más y busco a mi madre, de la que he permanecido alejada demasiado rato, quizás mis obligaciones pronto me hagan olvidar este mal sueño…

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16/08/2007, 16:34

Rikke entró en el palacio tras atravesar las murallas. Abrió la pequeña puerta de la servidumbre y notó de nuevo el frío húmedo de la oscuridad de la gran sala sin nada...sólo gente aquí y allí y pequeñas mantas en el suelo, alguna mesa, restos de comida cogida precipitadamente...nada más.

En el suelo reposaban algunos, como Horkke, Tamyss, que siempre roncaba como un cabrito y le tenían olvidado al fondo del todo, para que no molestara. Incluso su propia mujer, Suura, cuando estaba muy cansada se levantaba y se iba a otra parte...había quien decía que le había cogido gusto a dormir cerca de Obbyrr, un chico que podría ser su hijo.

Unos pasos más y unos recuerdos menos, la pequeña apertura de la sala que servía de "dormitorio" a Rikke y a su madre seguía vacío. Sólo Annyrr continuaba allí, sonriente, son sus ojos verdes visibles y brillantes a pesar de la oscuridad, remendando con esmero una pieza de tela oscura.

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18/08/2007, 01:08
Rikke

La familiaridad de la sala me conforta y me arranca algunas sonrisas mientras saludo a algunos de los presentes...a pesar de las tiranteces y los enfados, son la gente con la convivo a diario, y la rutina siempre es tranquilizadora...

Atravieso la estancia buscando a mi madre en nuestra pequeña "habitación"...pero nuevamente la encuentro ausente y solo a Annyrr encuentro allí...le sonrio yo también, contenta de sentirme segura...

¿Y mi madre?, llevo todo el dia fuera, descuidando mis obligaciones...debo ayudarla... digo con gesto algo avergonzado por haber faltado a mis deberes... y sino sabes donde esta, dime en que puedo ayudarte... ahora mismo necesitaba hacer algo, no dejarme arrastrar por oscuros pensamientos que tarde o temprano volvería a asaltar mi mente...

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20/08/2007, 16:32
Annyrr

Annyrr levantó sus ojos verdes del trabajo y sonrió, aunque pareció pensativa.

- Pues si te digo la verdad, tampoco la he visto desde la mañana. Debe de estar muy ocupada.

Se encogió de hombros y dio una puntada más con la maestría propia de los años.

- Si quieres ayudar creo que hace falta alguien para lavar ropa. Encontrarás un buen montón en la lavandería. Ve a hablar con Fleêr, si quieres, ella te dirá.

La vieja y gorda Fleêr. Rikke no tenía muy buena relación con ella desde que uno de sus nietos malcriados estropeara un buen vestido del señor Yymarr de Hessh y le echase la culpa a ella. Fleêr creyó a su nieto, por supuesto, y desde entonces la ha tratado con cierto desprecio, ya que si algo valoraba esa mujer bizca y ya algo ciega, además de a esos retoños malnacidos, era cualquier tipo de tela de calidad.

Pero claro, Annyrr no tenía porqué saberlo. Ella nunca lo había contado a nadie, y tampoco parecía haber hablado la vieja Fleêr, por otro lado. Era una especie de silencio que, sobre todo a ella misma, le convenía mantener. No se ganaba nada con ciertas verdades.

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21/08/2007, 11:59
Rikke

A pesar del disgusto que me supone ir a ver a Fleêr, no tengo más remedio que hacerlo, y más si mi madre está tan ocupado como dice Annyrr...

Está bien, ire a verla, puede que necesite ayuda asiento a sus palabras y le hago un gesto de despedida a con la mano, saliendo nuevamente a la sala común en dirección a la lavandería, ya podían haberme asignado otra cosa, después de todo esto vermelas con la vieja gorda no era lo que más deseaba...

Algo cabizbaja recorro el camino que me separa hasta la lavandería para buscar con la mirada a Fleêr, para preguntarle que es lo que hay que hacer...

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22/08/2007, 19:17
Director

Rikke se dirigió a su pesar camino de la lavandería. Para ello tenía que dar la vuelta al patio de armas y entrar por otra puerta pequeña de servicio cerca de donde estaban las cocinas. Era el lugar desde donde dos buenos pozos proveían se abrían. La joven pasó junto a uno de ellos. Notó en él algo extraño. Había una mancha de sangre bastante visible sobre una de las piedras, y lo que parecía un reguero seco de pequeñas gotitas que terminaban en la arena removida del suelo.

Sabía que era sangre porque había visto mucha, de animales descuartizados, allí mismo, junto a la cocina, de las matanzas de cerdos y la preparación de cuartos enteros de venado y cabras. Tenía ella misma tanta sangre en sus manos como cualquier guerrero.

La puerta de la lavandería estaba abierta. Era un lugar oscuro y frío, no como allí, al aire cálido del verano más reciente. El día era desde luego largo...el más largo...habían ocurrido muchas cosas.

Dentro de la estancia vio a la vieja Fleêr.