El mediano permaneció atento a los gestos del enano, esperando que comenzra su obra de demolición y sorprendido de que eso no pasara. Estaba a punto de quejarse por su falta de interés cuando escuchó el ruido de pelea a sus espaldas
- Y quienes serán?... supongo que cualquiera que combata a esos esqueletos debería ser amigo... pero... no lo sé - murmuró antes de dar sus ordenes
- Veamos que pasa allí atrás - cometó mientras con un leve apretón de sus rodillas hacía girar a su perro y lo hacía dirigirse hacia el sonido - Y veamos si debemos intervenir -
Bueno, estaba atrás, así que supongo que ahora quedo "adelante". Moves simples (con el perro son 40' por asalto) con la honda preparada. Me acerco para ver... manteniendome a la defensiva en cuanto vea a alguien.
Silvania dejó que el arco se abriese lentamente, aguantando sin soltar la flecha, para inmediatamente dar media vuelta y caminar hacia el ruido de pelea.
Ambos medianos retrocedieron por el pasillo de las catacumbas. A medida que se acercaban a las escaleras constataban con mayor precisión que el ruído procedía de lo alto, del hall y los pasillos superiores. Repentinamente se escuchó una explosión seguida de un grito:
- ¡AAARGH! Gloranai bendita... ¡Mi brazo!
¡Era la voz de Mosest!
- Ese fue el paladín - comentó el druida, como de costumbre comentando lo obvio. Sin dudarlo aceleró el paso de su fiel montura, sin preocuparse de dejar a sus compañeros atrás y con la honda lista para disparar se preparó para llegar a donde Mosest combatía, seguramente, contra demasiados enemigos.
Tampoco es cuestion de exagerar, el mediano es impulsivo, pero no loco. Me separo, pero la idea es detenerme en cuanto vea a los malos, para poder disparar (a distancia) y esperar a los demás.
-Esto podría ponerse muy feo, será mejor que pase delante. -Bhain observó el pasillo en el que se encontraban, luego echo un vistazo a la pared de piedra negra que había sido creada por obra de la magia.
-voy a subir a ver, el resto será mejor que os quedeis, puede ser peligroso
Algo en este lugar no lo es?+comenta laconicamente el asesino.
Con su arco en la mano, sigue a Bhain y los demas hacia arriba, aunque por su posicion en el pasillo es el ultimo de la fila ahora. No necesita preguntarse por que esta arriba el paladin peleando solo... en absoluto le extraña. Solo, tal vez, que halla tardado tanto.
Cuando Rómulo estaba a punto de ascender por las escaleras se oyó un último golpe. Luego un silencio que no presagiaba nada nuevo. Aquello aceleró el ritmo de ascenso del mediano y el enano, que iban seguidos por Gaius.
En ese momento en lo alto, en el umbral, apareció la figura de Mosest.
El paladín se tambaleaba. Buscó apoyo en el quicio de la puerta mientras enfocaba su vista hacia las escaleras. Por un momento sus músculos se tensaron y su espada se alzó ligeramente. Luego, al ver a Remo galopando con Rómulo encima la espada descendió, aunque su rostro permaneció sombrío. No habían pasado ni un par de horas desde la última vez que lo vieran y sin embargo parecía como si el muchacho se hubiera enfrentado a todo un ejército.
- ¡Arriba reina el caos! ¡Debemos advertir a Moravius! ¡La ciudad está tomada por muertos vivientes!
Se atropellaba en sus palabras. Aunque intentaba aparentar aplomo se notaba que la situación desbordaba al joven paladín. Cuando Rómulo llegó a su altura se apoyó en el hombro del mediano. Bhain estaba a unos pasos por detrás y Gaius no había bajado la guardia con su arco.
- Los muertos... Es una locura... ¡Creo que ni el mismo Taurus controla la situación! Los hombres del Tirano están luchando contra muertos vivientes que salen por doquier... Y los que caen se levantan infectados por una maldición... Muchos de ellos son criaturas heladas... ¡Intenté salir pero no pude! ¡Hay demasiados! ¡Tenemos que llegar hasta el campamento y dar la alarma! ¡Quizás si nuestro ejército se suma al de la ciudad podamos detener esta plaga de muerte!
PNJ.
Davis tuvo que abandonar la partida y Mosest se retiró a buscar ayuda, como bien recordaréis los veteranos. A partir de ahora Mosest es un PNJ.
El primer impulso de Rómulo fue salir del lugar y correr hacia el campamento para cumplir la misión que Mosest no había podido completar. Pero fue solo un instante. Mirando a sus compañeros dio su opinión
- No, lo importante es eliminar la fuente del mal. y eso parece estar aquí - comentó seguro - matar muertos vivientes y que estos se reproduzcan no nos servirá de nada. Debemos acabar con el origen del mal. Si no podemos con esa puerta debemos ir por otro lado -
master, se que no te gustan los planos, pero yo (Matute) estoy totalmente perdido (mucho más de lo que supongo está Romulo) Nos quedaron caminos sin investigar?
Observo con cuidado el estado del paladin que aprece haberlo pasado bastante mal mientras en mi cabeza le voy dando vueltas a la situación.
Cita:
-Estoy de acuerdo... si acabamos con la fuente de los muertos vivientes estos dejaran de ser un problema.digo mientras pienso para mis adentro que fuentes de poder magico pueden ser las que nos encontremos mas adelante y sin poder evitarlo me estremezco presa de un escalofrio.
- Si esa es la situación, estoy seguro que las noticias ya habrán llegado al campamento, al verdadero rey no le habrán de faltar informadores leales en la ciudad, sin tener que abandonar nosotros nuestra misión.
Entre mi gente se suele decir que cuando cortas la cabeza, el cuerpo deja de moverse, asi que yo opto por ir a por el que esta detrás de todo esto, ir a por esos muertos solo nos retrasaría.
Robin, en aquel caso, no compartía la opinión de sus camaradas.
- Si el mismo Mosest, que partió antes del inicio de la invasión con la misión de ir hasta el campamento para informar a nuestros aliados, no ha sido capaz de salir de la ciudad, no es difícil suponer que los demás informadores que puedan quedar en la urbe tampoco habrán tenido mejor suerte; lo más seguro es que en el campamento rebelde no sepan nada de todo esto.
Robin reflexionó entonces sobre la situación en su conjunto.
- Y la verdad, creo que si logramos que las tropas rebeldes entren ahora en la ciudad y ayuden a acabar con la invasión necromántica, nos habremos ganado el apoyo del pueblo, verán a sus libertadores con buenos ojos y la revuelta habrá concluido con éxito nada más empezar.
Por último, el clérigo optó por responder a la florida metáfora del enano.
- Si le cortas la cabeza a uno de estos seres lo más probable es que siga moviéndose: la decapitación detiene a los vivos, pero no a los muertos.
Arthedain estaba ya más que harto de tanta palabrería, y se le notaba en la cara.
-Si llego a saber que este era un círculo de debate en lugar de un grupo aventurero en una misión de rescate, dijo casi escupiendo las palabras, -a buena hora me pillan para venir, dijo con un deje de hastío.
-A ver, garrulos, TENEMOS UNA PUTA MISIÓN, que es ir a por el jefe de estos desgraciados y dejarlo listo de papeles para toda la eternidad. Después podemos dedicarnos a la caza deportiva del muerto viviente, o a la meditación contemplativa, ya sea del ombligo propio o del ajeno, según aptitud e inclinación sexual de cada uno y/o una. Pero ahora mismo vamos a coger espada o hacha, y VAMOS A HACERLE UN TRAJE AL TIRANO, uno de madera, que pueda llevar permanentemente durante el resto de la puta eternidad, ¿ESTAMOS?
El fuego que brillaba en los ojos del alto elfo no invitaba a llevarle la contraria.
-Es un buen resumen de lo que vinimos a hacer, Arthedain...
El asesino habia guardado silencio, concentrandose simplemente en mantenerse alerta al lugar donde estaban. Sus instintos le indicaban algo y el los seguiria, aun solo. Pero ver que al fin alguien intervenia para zanjar el asunto lo llevaba a respaldarlo, siempre era màs facil matar en grupo...
-Ahora, vamos de una vez? +haciendo un gesto hacia el otro camino, preparado para marchar al frente.
La exhaltada intervención del elfo dejó al pequeño druida con la boca abierta. Estaba claro que el elfo tenía claras sus prioridades y Rómulo agradeció para sus adentros que estas coincidieran con las suyas.
- Creo que eso está claro - reconoció - Vamos por el malo y acabemos con el! -
Me repito
Cita:
Bhain asintió ante las palabras de Arthedain, no podía estar más de acuerdo con el .- Pongamos fin a todo esto. - Su tono fué duro, no hacía falta decir más, la hora de las palabras se había acabado
- Pero...- el paladín parecía seriamente confundido - ¿Nuestra misión no era averiguar lo que pasaba aquí e informar? ¡No habéis visto lo que sucede ahí arriba! ¡Si eso es obra del mago al que venimos a matar no sé como lo haremos! ¡Los mismísimos Caballeros de Predemia están sucumbiendo ante sus hordas! ¡Debemos salir a informar!
Cuando escucha las palabras de Robin todavía se enciende más:
- ¡Los héroes del pueblo! ¡Eso es! ¡Debemos traer la libertad y acabar con la horda de no muertos!
Está claro que el paladín herido recupera sus fuerzas ante la idea de una balada que cante sus gestas.
Sí. En vuestra última visita tuvisteis que retroceder cuando estabais frente a una puerta fortificada, donde os atacaron los cangrejos helados. Esa puerta y lo que hay más allá no lo explorasteis. Por cierto que la puerta (a la que sabéis llegar sin problema) podría estar por encima de la extraña piedra negra.
Recordad que mis PNJs son eso: PNJs. No tienen por qué enterarse bien de la trama. Efectivamente vuestra misión era, citando a Moravius:
Cita:
Pero Mosest está muy nervioso como para acordarse de todo ;)
- Mosest, el rey, el verdadero rey, sin duda ya sabe todo esto. No le han de faltar orejas en la ciudad que le informen, todavía conservaba muchos partidarios. Pero desde dentro tenemos una mejor oportunidad de luchar contra ese nigromante que desde fuera, estamos en mejor posición para acabar con el problema que si salimos al exterior.
- Silvania ha sido muy clara - asiente el druida sin descender de su perro - supongo que debemos ir a la puerta esa del otro piso y ver si a esa si la podemos abrir - agregó - Y si alguien prefiere intentar salir de aquí para avisar a quien sea es libre de hacerlo - comentó mientras se encogía de hombros - Pero nuestra misión era acabar con el origen de los no-muertos, no avisarle lo que ya sabe a quien nos envió a acabar con ellos -
El tono mesurado, de Rómulo es una digna contrapartida de la reacción del elfo, pero no por ello deja de ser tan seguro en sus palabras como lo ha sido el guerrero arcano en las suyas