Partida Rol por web

¡Que desconfiada se ha vuelto aquí la gente! Comentó Taurnil al ver como el guardia metía la lanza en el barreño.

Al ver como el guardia introducia gruño y le miro:

Mas te vale que no se haya estropeado mi cerveza... Digo mientras vuelvo el barril sobre mi boca llenandome la barba de cerveza pero tambien la gargante. Tras un sonoro eructo en la cara del guardia Es aceptable, pero sigo enfadado Y hecho a reir cuandoe escucho la llegada de nuestros compañeros.

Bueno, continuemos con la aventura Taurnil. Espero que te hayas divertido con los enanos ahi abajo, beber es mas divertido en compañia.

El guardia vuelve con su compañero y le susurra algo al oido, que ni Taurnil puede oir por su lejania, estos dos luego esbozan una pequeña sonrisa.

Ya veo que has conseguido cerveza, que suerte.- dijo en direccion a Arzarin y luego mirando a Taurnil.- ¿qué tal el reencuentro con tu padre?

Bien, hacía mucho tiempo que no los veía. También mi hermano estaba allí. Aunque la seguridad es tremenda, uno de los guardias no nos quitaba el ojo de encima. Dijo mirando de reojo hacía ellos.

-vaya... es extraña tanta seguridad... ¿Puedo preguntar si hay una razon especifica?

Pues supongo que seria para que llegasemos a nuestro destino sin perdernos ya que habia varias bifurcaciones ahi abajo, y para asegurarse que no robabamos ninguna materia prima valiosa.

Despues dijo- Bueno, vamos para mi casa.

Llegais hasta la casa de Taurnil despues de haber tomado varias bifurcaciones, la puerta es de madera bien tallada con unas medidas aproximadas de 200 cm de ancho por 250 cm de alto. Taurnil llamo a la puerta y despues de unos pocos segundos, que a Taurnil se le hicieron como horas, esta fue abierta por una elfa rubia vestida con un traje largo de seda.

Serindë se quedo muy sorprendida y a la vez muy alegre de ver a su hijo, tanto que se abalanzo sobre Taurnil dandole un fuerte abrazo mientras que le daba un beso en cada mejilla.

Me alegro tanto de verte ..., ¿que te trae de nuevo hasta tu hogar?, hijo, y ¿quienes son los que te acompañan?

¡Hola madre! Exclamó con entusiasmo y alegría recibiendola en sus brazos y correspondiendo su abrazo con otro. ¡Qué alegria volver a verte!

Hemos venido aquí por una misión. Dijo tras reponerse un poco. Estos que me acompañan son mis compañeros de viaje y de aventuras. Necesitamos un sitio donde comer y hospedarnos y pense que no había mejor hostal que la casa de una madre. Bromeó sin borrar su eterna sonrisa de la cara.

Claro, pasad, pasad todos.

Cuando todos ya estaban sentados alrededor de la mesa dijo para el grupo mientras se movia de un lado para otro cogiendo los ingredientes y las especias- habeis tenido suerte de que halla suficientes sillas, ya que mi marido y mi otro hijo comeran en el descanso de su trabajo y mi hija y yo ya hemos comido. Por cierto, ¿os gustara el pollo asado?. Y en direccion a su hijo formulo la siguiente pregunta- ¿te has encontrado con Rilia? o ¿Taurwë? o ¿tu padre? ya.

Estando sentados en la mesa mientras que esperais la comida observais que la casa de Taurnil seguramente se divida en cuatro estancias: en la que os encontrais ahora estan el comedor y la cocina juntos, y las otras tres que seran las habitaciones.

En la estancia que os encontrais ahora hay unos cuantos muebles, unas cuantas plantas, otros tantos cuadros con retratos de elfos, un lavadero y una gran chimenea en la cual ya esta encendido el fuego listo para empezar a cocinar.

A la única que no he visto es a Rilia. A mi hermano y mi padre los vi en las herrerias y estuve hablando con ellos. Dijo después de tomar asiento junto al fuego y acercar las palmas de las manos.

¿Dónde está Rilia? cuentame que es de ti y de ella.

Al llegar a la casa y ver a la Madre de Taurnil no puedo hacer otra cosa que casi arrodillarme y presentarme:

-Yo soy Arzarin hijo de Dordin señora, para servirle y compañero de fatigas de su hijo.

Luego de esto me siento en la mesa en la que nos invitan a comer y amablemente acepto todo lo que me den. Croe que hoy voy a explotar.

Tu hermana esta bien, como  casi siempre debe de estar dando un paseo por la ciudad o  sentada pensando en sus cosas en alguna de las plazas. Yo tambien estoy bien, y sobre todo despues de ver que no te ha sucedido nada malo y que vas bien acompañado.- dijo esto mientras ponia en la mesa las copas y dos botellas de vino de Dorwinion.

La comida ya os ha sido servida y os la habeis tomado mientras hablabais de lo que pensais cada uno de Taurnil y de alguna que otra aventura, habiendos acabado tambien toda la bebida.

Quince minutos despues de comer. Deben de quedar unas tres horas para ir a la puerta de la ciudad.

Gracias señora por la comida y su hospitalidad ..., creo que es la hora de dejaros a ti y Taurnil solos para que hableis de asuntos familiares, ¿no pensais lo mismo?- hizo la pregunta mirando a todos sus compañeros menos al elfo del bosque.- Pero antes me gustaria haceros una pregunta, ¿hay algo interesante en la ciudad que pudieramos hacer mientras que esperamos a partir para realizar el cumplimiento de nuestra mision?

Pues no se, deja que piense unos instantes ..., podriais ir al mercado, o a la plaza principal para relajaros o simplemente ir recorriendo los diferentes caminos de la ciudad e ir mirando los tapices que narran la historia de Valinor y Beleriand.