Partida Rol por web

-Grigore... he venido a hablar contigo porque eres la única persona con cabeza que hay entre este grupo de gente, todos sabemos que tendremos que vivir con esta maldicion, y que deberíamos tener unos mentores pero no me fio un pelo.- Dice mientras se acerca a tomar asiento.
Luego gira la cabeza a ambos lados haciendo entender a Grigore que probablemente les esten vigilando.
A continuación suspira y continúa hablando.
-Hardestadt debe saber que estamos aquí, y no solo eso sinó que si no tubo ningun problema para asaltar el castillo de Giovanni no se que inconveniente tendra en acabar con una posaducha del tres al cuarto, además ya nos dejaron salvandoles las espaldas una vez no...el Ser humano tropieza dos veces con la misma piedra, pero hemos de reconocer que hemos dejado de ser humanos hace bastante tiempo....

-Entonces crees que atacarán hoy, ¿no es cierto? Yo también me he temido eso, pero no sé cómo arreglarlo. Si Hardestadt trae hombres de día, ni nos enteraremos cuando la posada se pegue fuego... Pero necesitamos un lugar donde refugiarnos y ya no nos da tiempo a buscarlo. Hoy parece que estamos condenados a lo que dicte el destino. ¿Alguna idea? -añade sombrío Grigore.

Irina no dice mas y permanece expectante mientras escucha a los demas hablar con giovani y los otros..

-Sinceramente creo que tenemos solo dos oportunidades,una es fiarnos de giovanni y contarselo todo, aunque conociendole seguro que esta prevenido...
La segunda es acatar las ordenes que dio Hardestadt, aunque no creo que nuestros "compañeros" esten muy en pos de ello.-Dice Hans en actitud pensativa.
No tenían mucho tiempo para hacer nada la verdad aunque parecía demasiado arriesgado Hans había estado barajando otra opción pero no era muy aconsejable.
-Claro qué... también podríamos escondernos en el carruaje que dejamos en las caballerizas, apostaría un brazo que ahi no mirarían, además allí podriamos barajar otras opciones, supongo.

-Lo pensé pero tampoco me pareció seguro. Cualquiera podría abrir más fácilmente el carruaje, o peor, prenderlo, que la propia habitación. Por otro lado, el plan de Giovanni incluye convertirnos de nuevo en mensajeros y eso no me hace ninguna gracia. ¿Nos considera sus hijos? ¿Entonces qué hace usándonos como peones prescindibles? Bien podría enviar a un lacayo mortal cualquiera. Estamos atrapados entre dos grandes poderes y sólo somos peones. No pinta nada bien. Será mejor que nadie nos escuche más, vuelve a tu habitación... -dijo Grigore pegando la oreja a la puerta para asegurarse de que nadie se diera cuenta de la salida de Hans de nuevo al pasillo y a continuación abrió silenciosamente la puerta para él.

Hans salió al pasillo, Grigore había sido sensato, sin embargo eso no les iba a quitar del peligro de ninguna de las maneras.
Así que Hans volvió a su habitación cogió sus afectos personales y se dirigió a las caballerizas esperando buscar al mozo que antes estaba atando a los caballos.

No encuentras al mozo... es tarde asi que està durmiendo

Bueno llega la nueva noche, cuando bajáis de nuevo a la sala común Claudius os está esperando sentado a una mesa sobre la que hay una gran jarra y un juego de copas, Claudius tiene una de las copas en la mano.

Espero que hayáis descansado este día... pues esta noche deberéis partir sin falta hasta el Monasterio de San Timoteo a media noche de viaje hacia el sur. Esta sangre es para vosotros, un presente, y aquí está la carta que habéis de llevar. dice dejándola en la mesa.

Una vez ha terminado de hablar, se levanta y sale por la puerta de la posada.

Espero a que alguien mas beba a sangre. Aun es difícil acostumbrarse a eso, y además no confío aún en Giovanni.

Grigore escucha con atención las palabras de Giovanni y a pesar de su expresión seria, asiente escuetamente. Luego observa cómo se va en silencio, con los brazos cruzados. A continuación observa a sus compañeros, esperando su reacción si decir palabra alguna.

Francesco mira a la victima dandose cuenta que ninguno de sus compañeros no hacia nada Bien.. alguien se servira??.. es decir...quien es esta persona?? se acerca al cuerpo para observar quienes la victima

Medio adormilado, o por lo menos medio atontado de salir un estado parecido a dormir pero totalmente distinto si alguien se fijaba bien, bajo a la sala comun. Donde oigo las nuevas ordenes de Giovanni y como este desaparece sin mas.

Lo curioso, es que lo que realmente desperto mi atencion, fueron las palabras de Franceso. No parecia la clase de hombre que pudiera confundir una jarra llena de sangre por una persona, y sin embargo lo estaba haciendo. Me acerco con cautela, y cojo la jarra de la mesa, intentando atraer la atencion de mi confuso compañero.

-Francesco, tranquilizate, esto es una jarra llena de sangre.- Digo mostrandosela, intentando que se centrara y viera que ni siquiera tenia forma de hombre.- No tienen sentimientos, no piensan, y por supuesto...- Me llevo la jarra a los labios, saboreando de una manera bastante ruda y poco señorial. Cuando termino, la dejo en la mesa y me seco con la mano la sangre restante que mancha mis labios.- No... ¿Habla?

De repente mi mirada se desenfoca y mis oidos dejan de oir los ruidos de mi alrededor, algo estaba tomando toda mi atencion, una voz. La voz de la sangre que habia bebido y manchaba mis manos que ahora hablaba en un dialecto solo para mis oidos.