Partida Rol por web

La última de los vuestros

Castillo: Blbioteca

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29/05/2015, 15:31
Elizabeth Freeman

Notas de juego

Entro. (¿Situación o algo que deba saber?)

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29/05/2015, 15:50
Director

Notas de juego

las dos gemelas y Kurt estan en el fondo miranod un libro.

Makoto acaba de entrar poco antes que Liz

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29/05/2015, 16:17
Elizabeth Freeman

Abrí la puerta de la biblioteca con cuidado, comprobando que había varias personas dentro.  Al fondo pude a ver a Kurt y las hermanas consultando un libro, así que sin querer interrumpirles me acerqué únicamente a Makoto, que se encontraba más cerca de la entrada.

-Hola… - le susurré, tratando de molestar lo mínimo posible. – Tengo que buscar algo, es importante. – maticé, consciente de que aún teníamos algo pendiente. – No te molesto más, después te busco. ¿Vale?– le dije con una sonrisa y me acerqué a los ordenadores.

Traté de encender uno de estos, pero no prendía. Lo intenté con otro más, y al ver que tampoco se ponía en marcha desistí. Me dirigí a las estanterías y comencé a buscar libros acerca de los tres seres que me interesaban

Notas de juego

Dire, ¿Cómo hacemos para la búsqueda?

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29/05/2015, 16:41
Director

Notas de juego

Para buscar tira buscar no pongais dificutlad y os digo que encontrais

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29/05/2015, 16:50
Elizabeth Freeman

Me decidí a buscar sobre las hadas en primer lugar, ya que me parecía que las brujas abarcaban muchas más cosas y ni siquiera estaba segura de lo que era una banshee.

Mejor busco sobre eso con Ben.

Empecé a mirar las estanterías, buscando algo referido a las hadas, esperando obtener nueva información.

- Tiradas (1)

Motivo: Buscar (Libro Hadas)

Dificultad: 0

Habilidad: 0+9

Tirada: 1 8 10

Total: 8 +9 = 17 Éxito

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29/05/2015, 18:41
Kyara Rosseau

Kyara iba a abrir la boca para contesatar a Kurt cuando entró Makoto y, poco después, Elizabeth, ambos directos a buscar cosas por allí- ¿de pronto la biblioteca es un popurrí? -pensó mientras miraba a los que estaban con ella de inicio.

-Bueno, tengo que ir a buscar a Chris, ¿alguna idea de donde puede estar?, aunque siendo ya la hora que es supongo que estará por las habitaciones. Voy a pegar unos berridos por allí y si no contesta le busco mañana por la mañana, ¿mm? -miró a su hermana y Kurt- ¿venís o váis a estar por ahí a lo vuestro? ¿eh? -alzó las cejas un par de veces antes de irse.

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29/05/2015, 18:50
Nyara Rosseau

Casi había terminado de crear la puerta de la cámara acorazada cuando escuchó a Kurt saludar y, una vez hubo acabado, vio que Makoto estaba ahí y sl poco entraba la pelirroja.

Miró a su hermana como queriendo decir que ahí sobraban descaradamente pero ella se adelantó para ir por su lado a buscar a Chris. Típico de Kyara, una vez había conseguido lo que necesitaba de uno se largaba con viento fresco así que ella no se lo pensó dos veces buscó con su mano la de Kurt y, guiñándole un ojo, salieron de la biblioteca siguiendo los pasos de Kyara. Si esa peluquera de barrio pensaba escaquearse lo tendría muy difícil.

Notas de juego

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29/05/2015, 19:14
Kurt Rainer

Al abrirse de nuevo la puerta volví a mirar pero Kyara empezó a hablar.

-A, pues...-Pero entonces no té como Nya me cogía la mano. La miré, sonreí y callé dejando que volviese a tirar de mi.

Notas de juego

Os dejo ya que salgais y vayais donde queráis XD

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29/05/2015, 19:42
Makoto Yuchi

Miro a izquierda y derecha. Al fondo, tres siluetas. Fuerzo la mirada y veo que se trata de las hermanas y Kurt y aprieto los labios levantando la cabeza, en silencio, a modo de saludo. No esperaba encontrar a nadie ahí.

La puerta se abre de nuevo tras de mi cuando iba a moverme.

- ¿Liz? - abrí los ojos con sorpresa y susurré con la inercia del estudiante que habla en una Biblioteca. Tras sus palabras muevo la cabeza rápidamente de lado a lado - no molestas, ¿por qué ibas a hacerlo? - mi gesto de sorpresa ha desaparecido ya - aquí estaré - sonrío levemente mientras inclino la cabeza.

- Tiradas (2)

Motivo: Buscar - libro de Yamamoto

Dificultad: 0

Habilidad: 1+6

Tirada: 5 6 6

Total: 6 +1 +6 = 13 Éxito

Motivo: Buscar - libro sobre Oni

Dificultad: 0

Habilidad: 1+6

Tirada: 2 3 8

Total: 3 +1 +6 = 10 Éxito

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29/05/2015, 20:58
Kyara Rosseau

Notas de juego

Kya, Nya y Kurt salen

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30/05/2015, 03:41
Benjamin Foster

Notas de juego

Entro

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30/05/2015, 03:41
Benjamin Foster

El camino desde el cuarto de Himiko hasta la biblioteca es errático y envuelto en la bruma de tantas y tantas preocupaciones que me dan vueltas en la cabeza. Un par de veces incluso he tenido que detenerme junto a las ventanas del corredor, observando sin ver la tormenta del exterior mientras trato de sosegar mi respiración acelerada. Todo esto es demasiado para asimilarlo en tan poco tiempo.

Pero finalmente abro la puerta de la biblioteca, entrando con rostro descompuesto y la mirada perdida. Lucho por enfocar, por buscarla. Mi faro en la oscuridad, mi fuerza para seguir adelante. Y la veo allí, junto a la estantería, consultando en viejos tomos. Tan hermosa. Sólo quiero ir hasta ella y abrazarla, olvidar todo lo que me ha dicho Himiko.

Eso hago, avanzo a paso ligero entre las mesas, hasta que veo también a Makoto, consultando también al otro lado de la sala. Me detengo bruscamente al verle, sintiendo que se ne hiela la sangre. Todo vuelve otra vez a mi cabeza, las preocupaciones, la carga sobre mis hombros. ¿Por qué? ¿Por que todo esto? No se si voy a poder con todo, no soy bastante...

Me giro de nuevo, cruzando mi mirada con la de Elizabeth, que se percata de mi presencia finalmente. Y mis ojos, luchando por no llorar, la buscan e imploran, como lo hace todo mi cuerpo.

Te necesito...

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30/05/2015, 12:43
Director

Informacion que encuentras:

Un hada (del latín fatum: hado, destino) es una criatura fantástica y sutil. En la mitología griega y romana las llamanHados, pero generalmente en forma de mujer hermosa con alas; que según la tradición son protectoras de la naturaleza, producto de la imaginación, la tradición o las creencias y perteneciente a ese fabuloso mundo de los elfos, gnomos,duendes, sirenas y gigantes que da color a las leyendas y mitologías de todos los pueblos antiguos. Se puede provocar el contacto con ellas desarrollando la visión etérea según las leyendas. La mayoría de ellas se representan con alas. Se conoce de un caso en el que Sir Arthur Conan Doyle, creador de Sherlock Holmes, fue engañado por unas niñas que se fotografiaron con figuras de papel en forma de hadas, a las que el consagrado escritor atribuyó autenticidad.

Características[editar]

Las leyendas celtas hablan del reino de los Áes Sídhe (pronunciado Os Shi) también conocido en idioma inglés comoFairy Folk, y donde la mejor traducción a nuestro idioma sería Hadas, si bien es importante recalcar que no se habla de la concepción victoriana de la Hadas, esos seres diminutos con alas de mariposa, las cuales son en realidad pixies. Los Áes Sídhe, son seres semidivinos que viven entre este y el otro mundo, con conexiones importantes con la naturaleza y las deidades, la mayoría de los relatos los representan como gente no muy alta, pero de aspecto y altura humana, de tez blanca, ojos claros y pelo muy negro.

En los relatos medievales, las hadas (a veces llamadas «El Buen Pueblo» o «La Buena Gente») aparecen relacionadas con encantamientos y hechizos, conocedoras del poder y las virtudes de las palabras, las leyendas y las hierbas, que les permitían mantenerse jóvenes y bellas, y acumular grandes riquezas.

En algunos libros, se menciona que las hadas hacen todas las cosas inocentemente, aunque su comportamiento pueda llegar a ser perverso. En muchos escudos heráldicos de esta época se refleja el mundo de las hadas. Muchos aristócratas querían hacer ver que provenían de un linaje de las hadas.

En la mitología cántabra se las llama anjanas, entre las que están las Ijanas del Valle de Aras, cuya característica es que tienen pechos descomunales y son feas, pero pueden cambiar de apariencia a voluntad. Este mismo tipo de hadas se encuentra en la isla de Gotland, en Suecia. En Galicia se llaman mouras , en Asturiasreciben el nombre de xanas, en Cataluña además de fada, se le llaman goljas y en Baleares Dames d'aigua.

La mitología nórdica y la griega -encarnada en las ninfas y dríades de Homero y Ovidio- influyeron en el concepto que los primeros bardos se formaron de las hadas, pero andando el tiempo los escoceses, irlandeses, galeses y otros pueblos europeos llegaron a poseer un cuerpo lleno vivo de tradiciones, fundado principalmente en las leyendas celtas.

Baile de las hadas, por Nils Blommér(1816-1853).

Inicialmente se atribuyeron a las hadas proporciones humanas, pero las diminutas y etéreas criaturas de Shakespeareinfluyeron poderosamente en las concepciones posteriores de los poetas ingleses.

Varios rasgos comunes caracterizan a estos habitantes del ultramundo en todos los países: se clasifican en benéficas y perversas, precisan ocasionalmente de apoyo humano, sus órdenes deben cumplirse estrictamente so pena de terribles castigos, etc.

Algunas de ellas son hadas convertidas en tales pero que antes habían sido mujeres humanas. Estas se convirtieron en hadas a causa de alguna infracción contra la naturaleza (ya que es el sitio en donde viven), siendo castigadas por ello a tener tal apariencia, incluso a vivir en el mundo de las hadas. Pueden ser desencantadas de diversas maneras en fechas concretas del año, como en La noche de San Juan y por ejemplo cuando se asoman a las aguas cristalinas y piden ser desencantadas. Para las que se convertían en hadas o cruzaban el límite existente entre el mundo humano y el de las hadas, el tiempo en el espacio cambiaba ya que un día o un mes podía ser un año o un siglo.

Hay varias hadas con poderes nocivos que lo llegan a utilizar contra los humanos, la mayoría de las veces por maltratar la naturaleza (talar un bosque sería una auténtica catástrofe para su mundo). Llegaban a raptar a niños para cambiarlos por seres feéricos totalmente iguales a los niños raptados. Así intentaban crear una estirpe entre humanos y hadas, aunque los niños morían al poco tiempo, ya que eran pálidos y enclenques. En la Edad Media a todos aquellos niños que estaban pálidos y delgados se les consideraba que eran hijos de las hadas y habían ocupado el lugar del verdadero hijo.

Otras veces engatusaban a un hombre de noble estirpe transformándose en mujeres de belleza inigualable para quedarse embarazadas de estos y dar a luz un ser mitad humano y mitad feérico. Para que el ser sobreviviera el marido no debía de rezar nunca y jamás deberían ver a las hadas desnudas por completo.

Este conjunto de supersticiones, derivadas de las creencias anímicas de todos los pueblos antiguos, ha inspirado a notables literatos sus fabulosos «cuentos de hadas».

La variedad de labores que llevan a cabo las hadas es casi infinita además de cantar y bailar, ayudan a los hombres en el campo, ejercen su control sobre el tiempo protegiendo las cosechas. Durante muchos meses ellas esperan impacientes la llegada de la primavera. También saben el día exacto en que brotaran las primeras flores pero prefieren mantener el secreto.

También hablan las leyendas del mundo que las hadas suelen tener poderes psíquicos o mágicos que, podían hacer felices a los seres humanos, también se creía que eran hechizadas por las brujas de los siglos XVII y XVIII para que vigilaran a sus víctimas, por otro lado, también se decía que eran ángeles en su forma femenina, aunque a veces se veían hadas macho.

Según la mitología Celta, las hadas gustan de los árboles del Tilo o Sauces.

Clases de hadas[editar]

Hay muchas clases de hadas, pero todas ellas independientes de la mitología celta en la que tienen origen, siendo todas ellas especulaciones y mezclas de distintas mitología. Estas clasificaciones y asociaciones con los elementos son contemporáneas, creadas por los creyentes de esoterismo y espiritismo. Algunas de estas clasificaciones son:

Lamias, hadas de la mitología vasca. Poseen largos cabellos que peinan con peines de oro que son muy preciados. Sus pies son palmeados, como los de un pato, exceptuando a las Itxaslamiak, las lamias marinas, semejantes a sirenas.
Ninfas, hadas de la mitología griega que pueden ser:

Náyades: ninfas que pueblan los ríos, a veces son hijas de éstos, por ejemplo, Eurídice;
Nereidas: ninfas del mar Mediterráneo, hijas de Nereo. A veces son descritas como mujeres con cola de pez. Destacan Anfitrite y Tetis;
Oceánides: ninfas del océano, hijas de éste. Destacan Metis (madre de Atenea) y Doris (madre de las nereidas);
Dríades: ninfas de los bosques, a veces asociadas a los robles;
Hamadríades: ninfas ligadas a un árbol concreto de tal modo que si éste era cortado, la ninfa moría con él;
Melíades: ninfas de los fresnos, nacen de la sangre de Urano (dios del Cielo). Son las ninfas más antiguas.

Sílfides, hadas de los vientos; Paracelso es el primero en citarlas, y son, según él, los seres elementales del aire.
Salamandras, hadas del fuego.
Drinfas, hadas de la tierra.

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30/05/2015, 12:46
Director

Tras un rato buscando Makoto encuentra un libro que le recuerda al que estaba mirando el profesor, el libro está escrito en Japonés y puede ver que es un libro sobre mitología europea, por lo que puede imaginar que el profesor lo que estaba haciendo era informarse un poco sobre la mitología occidental.

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30/05/2015, 13:41
Christopher Smith

Notas de juego

Entro. ¿Algo raro?

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30/05/2015, 15:49
Director

Cuando Chris entra puede ver como Makoto esta mirando un libro antiguo que parece escrito en japones y Liz tiene un libro en las manos, junto a ella se encuentra Ben

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30/05/2015, 15:55
Makoto Yuchi

Es un libro interesante, sí lo es.

Tras seguir el índice para conocer su contenido, le doy una rápida hojeada, por si viera alguna nota manuscrita por Yamamoto en algún y punto del libro.

En eso estoy cuando escucho la puerta abrirse de nuevo y veo entrar a Benjamin.

Veo cómo se para de repente al entrar y que, desde donde se encuentra, empieza a otear entre los pasillos, sin duda en busca de Liz.

Le veo pálido, taciturno, preocupado y no soporto verle así. Cierro el libro que tengo entre las manos y lo dejo en la misma estantería llena de polvo donde lo encontré, para acercarme luego hacia Benjamin, parece realmente afectado por algo.

- Ey Ben - le doy un suave toque en el hombro, intentando relajar su tensión. Miro hacia Liz de refilón, me da la impresión que está absorta en alguna lectura.

En ese momento pienso que igual Benjamin necesita cambiar radicalmente sea cual sea el foco del pensamiento que en ese momento parece atormentarle, así que lo intento.

- Estoy buscando un libro sobre Oni, pero es la primera vez que entro a la Biblioteca y me está costando encontrarlo... ¿Quizá puedas ayudarme?

Le invito a distraer su pensamiento.

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30/05/2015, 17:33
Elizabeth Freeman

Finalmente di con él, con el libro que podía darme más información sobre las hadas y su mundo. Apoyé este sobre una mesa, y aún de pie comencé a leerlo, haciendo una primera lectura rápida pero completamente concentrada. Había varios datos que podrían ser importantes, pero necesitaría estudiar el texto con más detenimiento. Al terminarlo, miré al frente, de forma instintiva, sin saber por qué, y allí estaba él. Makoto y Christopher también se encontraban en la sala, pero sólo tenía ojos para Benjamin.

A algunos metros, Ben me miraba con rostro descompuesto, taciturno, mientras Makoto permanecía a su lado. Aún así, mi novio no parecía prestar atención a nuestro amigo, simplemente miraba en mi dirección. Nada más verle cerré el libro de repente, acercándome a paso rápido hasta él, dándome cuenta a medida que me acercaba que su cara era peor de lo que parecía en un principio. Sus ojos incluso brillaban, como si estuviera resistiendo por no derrumbarse.

¿Qué ha pasado?

-Ben, ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? – dije tomándole por los antebrazos, preocupada - ¿Te ha hecho algo Himiko? – pregunté entonces, pasando de la pesadumbre al enfado. - Como se haya atrevido…

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30/05/2015, 18:00
Benjamin Foster

Con la vista perdida, suplicante, enfocada únicamente en ella, en Elizabeth, busco las fuerzas para seguir avanzando, para ir a ella. Porque la necesito, a pesar de todo. Pero temo por ella. Por todos, pero sobre todo por ella.

Y entonces, una mano en mi hombro. Me giro, dando un respingo, y encuentro ante mí ese rostro que despierta una guerra de sentimientos en mi interior. De la confianza y el compañerismo a la amistad, al enfado, la decepción, la rabia, y ahora... ¿Qué siento ahora? Un vacío, al pensar en todo lo que supone aquello que he descubierto. ¿Qué significa ahora este chico para mí? ¿Qué debería sentir ahora mismo?

No lo se. Me quedo conmocionado al mirarle a la cara, sin reaccionar. Me habla de buscar un libro, pidiéndome ayuda, y ni siquiera me doy cuenta de que doy un pequeño paso atrás, alejándome de él mientras mi cabeza niega de forma casi imperceptible.

La voz de mi novia me saca de ese estado, haciendo que me gire para mirarla. Me toma por los antebrazos, preocupada. Se ha dado cuenta, ¿cómo no iba a hacerlo? Es tan lista, tan sensible... Esto le dolerá más que a mí, le romperá el corazón. ¿Debería contarle todo? ¿Debería ocultarle las partes más dolorosas, darle solamente una parte de la historia, y ahorrarle sufrimiento? No, no puedo, no soy nadie para tomar esa decisión. No puedo mentirle, no puedo...

N-no... -Niego con la cabeza, apresurándome a tranquilizarla, al menos en ese sentido- E-ella no me h-ha hecho nada. Al contrario, ella... -Cierro los ojos, recordando la dolorosa imagen que me mostró, su cuerpo, y los motivos de padecer ese estado- Es un monstruo. -Sentencio dolorosamente, recordando el modo en que mató a Erik sin despeinarse, su frialdad, su aparente falta de sentimientos- Ha tenido que convertirse en uno, por nosotros, por cuidarnos y protegernos. Y ha pagado un altísimo precio. -Apenas la vi un instante, lo que tardé en apartar la mirada tras el horror inicial, pero ahora mismo podría dibujar con gran dolor cada una de las marcas de su piel, destrozada por las muchas batallas libradas. Y todo por nosotros, por proteger la esperanza que le brindábamos a ella y a los muchos que han muerto- T-tiene el cuerpo surcado de cicatrices. Disparos, cortes, quemaduras, de todo. De todo. Por nosotros. Para que hagamos lo que se supone que debíamos hacer.

Lo que debemos hacer. Pese al precio a pagar, pese al sacrificio. Pese al dolor que deberemos sufrir por ello. Tiemblo al pensar en ello, sin poder evitarlo, y me lanzo a los brazos de Elizabeth sin poder contenerme, apretándome con fuerza contra su cuerpo, hundiendo mi rostro en el cabello que cae sobre su hombro.

Mi faro en la oscuridad, mi fuerza. Juntos, siempre juntos.

T-tengo algo que contaros... -Les digo a ambos, al liberar el abrazo, con la vista en el suelo, luchando nuevamente por no llorar, por no temblar, por alejar el miedo de mi cuerpo y mi mente. Se un dragón. No una gacela, un dragón. Se fuerte. Miro al fondo de la biblioteca, donde hay una mesa apartada. A mi espalda oigo pasos, alguien más que entra en la biblioteca. Me giro ligeramente y veo a Chris. Aún no estoy preparado para que esto sea tan de dominio público. No tengo nada contra él, pero no tenemos tanta confianza- ¿V-vamos a esa mesa del fondo? Me gustaría sentarme...

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30/05/2015, 19:52
Elizabeth Freeman

Ben se apresuró a negarme que Himiko le hubiera hecho algo, pero estaba claro que algo había pasado. Puede que la vampiresa no se hubiera adelantado en sus amenazas, pero algo había hecho para trastornar a Ben de aquella manera.

Comenzó a explicarse con dificultad, visiblemente nervioso y afectado, y al verle cerrar los ojos y reflejar aquel gesto de sufrimiento, me dio un vuelco el corazón.

¿Se puede saber qué está pasando?

Comenzaba a ponerme nerviosa también, y sus palabras acerca de lo que Himiko había tenido que hacer por nosotros no ayudaron a que ello cesara. La descripción de las marcas en su cuerpo incuso me causó un intenso escalofrío.

Las marcas no sólo estaban en sus piernas…

Entonces volví a encontrarme en aquella lúgubre habitación, rodeada de armas, extraños objetos, colores fríos y oscuros, y sobre la cama la ropa de Himiko. Cubriéndola únicamente aquel kimono…

¿Por qué ha tenido que hacer a Ben pasar por eso? ¿Y sólo?

Desde que volviéramos al castillo había sentido que algo se ocultaba bajo el impasible rostro de la ya no tan niña Himiko. Mis palabras para con ella habían sido completamente sinceras, no pensaba dejar que su sacrificio fuera en vano, a pesar de no estar segura de qué era lo que la chica había tenido que sufrir, así que ahora, con más motivo debería dar peso a mis palabras. Sin embargo, aquello no impedía que le guardara rencor y miedo. Nosotros no éramos responsables de lo que había pasado, vinimos a ciegas, como ella aceptaría a ciegas tener que cuidarnos. Me dolía en el alma pensar que aquella niña dulce y traviesa se hubiera convertido en lo que hoy es, pero no terminaba de comprender por qué esa hostilidad hacia nosotros. Éramos igual que ella.

En más de una ocasión durante su relato, quise abrazar a Benjamin con fuerza, pero simplemente no podía, no quería interrumpirle, bastante parecía estar costándole decirnos aquello. Pero finalmente fue él quien se echó en mis brazos y le rodeé con estos, dejando que su cabeza reposara en mi hombro, acariciando su nuca hasta que nuevamente quiso volver a hablarnos.

Entonces llegó lo que más temía. Su reacción, su malestar, me habían hecho pensar que aquello no era todo, pero en el fondo tenía la esperanza de que no hubiera más. Ben nos ofreció entonces retirarnos a una mesa del fondo, para contarnos aquello que le estaba atormentando tanto.

-Claro, mi amor… Vamos. – le respondí, agarrándome a uno de sus brazos y emprendiendo el camino a la mesa, no sin antes mirar a Makoto para que nos siguiera.