Partida Rol por web

Perdonad, estoy todo el finde semana medio out y solo me puedo conestar de uvas a peras

Uno de los cadaveres fingio que caia a la vez de sus compañeros, tratando de conseguir que bajaran la guardia y entonces lanzarse al ataque, pero mientras se levantaba despacio, Aenur, capaz de distinguir los sonidos con su agudizado oido, lo escucho. De un tajo desizo la magia y el cadaver fue arrebatada de su ficticia vida.

Al sur, aquel temible Guerrero del Caos se lanzo a la carga contra el Enano Matador. La embestida seria una gran decepcion para Morcar su hubiera visto lo sucedido, pues el Enano apenas se esforzo para evitar los golpes. 
Entrados en el pasillo, Agamenon pudo descubrir como otro de los Guerreros del Caos se acercaba esgrimiendo el hacha. 

Arramus, que se habia quedado atras, fue quizas, el mas desafortunado, pues a pesar de su insistencia, no logro encontrar nada. 

Ungrim era claramente más diestro que el guerrero, así que no tuvo problemas en parar los golpes iniciales de su contrincante y fue incluso capaz de contraatacar. Sin embargo, la armadura del guerrero fue capaz de detener la mayoria de los golpes por lo que el matador solo fue capaz de causarle una herida superficial a su enemigo.

Me percato del otro guerrero del caos que se está acercando, pero mido la distancia y veo que me da tiempo a atacar primero a este.

Ataco con energía, pero tengo la mente en el peligro que se aproxima y no soy de mucha ayuda para Ungrim.

- Muy bien hecho, amigos -les felicito. Después observo con calma la estancia, me percato de que tiene una puerta cerrada y me acerco a ella.

Quizás podamos investigar en esta dirección. Nuestros amigos sabrán cuidarse solos, ¿qué os parece?

Vuelvo a aprovechar su gran tamaño para echar un vistazo por el ojo de la cerradura.

Pues aprovechemos para buscar un poco de oro...

Siguiendo el ejemplo del maese enano rebusco en la habitación.

Arramus se levanto a medio buscar al escuchar el sonido de la batalla y echo a correr para ayudar a sus amigos.

El segundo Guerrero se lanzó a la carga, obligando a Agamenon a encararse con el y frenando sus hachazos con suma destreza. El otro Guerrero, Cargó nuevamente contra el Enano que demostro ser un rival superior, pues desvio todos sus golpes y ademas logro dañarle.

Arramus, sea acercaba para ayudar como bien pudiera en el combate.

Jandrus, ojeo la sala contigua y descubrio que en su interior habia un Brujo del Caos y que este, estaba usando su magia para invocar nuevas fuerzas malignas.

Durgin y Aenur saqueraon a los muertos, despojandoles de sus riquezas. 25 monedas encontro el Enano y 50 el elfo.  

Durgin entró con ímpetu en la nueva habitación. Combatió con el brujo. Era bueno y consiguió parar un par de golpes, pero uno hirió en su carne.

Espero que sea suficiente para parar su magia

- ¡Aquí dentro hay uno de los malditos hechiceros de Morcar! -les comunico a mis compañeros.

Ahora veremos quién es mejor de los dos... -pienso para darme ánimos.

Estoy todavía cogiendo fuerzas cuando el enano pasa por mi lado como una exhalación, atraído por la perspectiva de una pelea.

Entro tras él en la sala contigua, justo para ver cómo consigue atravesar sus defensas en una ocasión.

- ¡A un lado, maese Durgin! -le pido.

Desde una distancia prudencial pongo la palma de mi mano frente a mi boca y soplo suavemente en dirección al enemigo. El soplido se convierte en breves instantes en un violento remolino de aire del cual aparece un enorme genio que ataca ferozmente, pero el brujo usa sus artes mágicas para defenderse y consigue resistir parcialmente el envite mientras la figura azulada se desvanece.

Agotado por el esfuerzo me quedo resoplando con las manos apoyadas en las rodillas, esperando que el elfo remate la faena.

El guerrero era un luchador diestro, pero no parecía estar muy acostumbrado al peso de su armadura, ya que sus movimientos eran torpes en comparación con los del enano, que luchaba a pecho descubierto.

Aprovechando su mayor velocidad, Ungrim se dedicó a moverse alrededor de su enemigo, haciendo que éste se cansara y desorientara. Al final, consiguió el efecto deseado, el guerrero bajó momentaneamente la guardia. Ese momento fue todo lo que el enano necesitaba para lanzarse contra el punto debil en el cuello de la armadura, degollando a su enemigo.

La amenaza que suponían dos guerreros se desvanece en un instante debido a un golpe bestial de Ungrim que acaba con la vida de uno de ellos.

Intento hacer lo mismo que Ungrim con el otro guerrero, pero está claro que mi nivel es inferior al suyo y aunque mis ataques son buenos y efectivos no consigo acabar con él por completo.

Me muevo a toda velocidad llegando a tiempo de ver como el brujo repele una lluvia de golpes del enano y levemente dañado por un genio invocado por el mago humano.

 Me coloco delante del mago para potegerle y ataco con todo a mi enemigo. Finto con la espada larga atrayendo su atención y mientras vuelca toda su defensa en esquivar el golpe ataco por su desprotegida guardia atravesándole el corazón con la hoja de mi espada corta penetrando entre las junturas del pectoral y el espaldar de su armadura del caos.

El temible Guerrero fue decapitado por Ungrim, que le corto la cabeza como quien corta mantequilla. Agamenon, daño a su enemigo y luego se esforzo en evitar los certeros golpes que le lanzaba el Guerrero. 

Arramus, justo al momento de alcanzar a sus compañeros, sintio el suelo temblar. El combate de Agamenon se detuvo un segundo y Ungrim maldijo por lo bajo en su ancestral idioma. Parecia que algo se habia derrumbado no muy lejos. 

Durgin, Aenur y Jandrus, se levantaron del suelo. El polvo les rodeaba y no comprendian bien que habia pasado. Haciendo un esfuerzo, recordaban que Durgin le lanzo al frente de la carga, le siguio Jandrus con su magia y Aenur, que termino con la vida del Sacerdote, luego todo temblo y les vino la oscuridad y los numerosos golpes... todo a su alrededor era roca y polvo, mucho polvo. 

Ungrim sintió el suelo temblar bajo sus pies y por un momento temió que se vieran de nuevo atrapados en un derrumbamiento, pero parecía que por el momento estaban a salvo, así que volvió su atención al combate.

Tras el temblor, Agamenón y el guerrero habían vuelto a su intercambio de golpes, por lo que a Ungrim no le resultó dificil escabullirse detras del guerrero aprovechando que el yelmo de la armadura del guerrero le bloqueaba una gran parte de su vision periferica.

Una vez a su espalda, lanzó un certero tajo contra la parte más debil de la armadura de su enemigo, seccionándole la espina dorsal

Mientras arrancaba el hacha del cuerpo de su enemigo le dirigió una sonrisa a su compañero

- Parecias necesitar ayuda. Espero que no te importe

Arramus dejó a Ungrim y a Agamenon acabar con otro Guerrero de Caos mientras se acerco a la puerta cerrada del pasillo para escuchar lo que había dentro.

Ungrim da el golpe de gracia al guerrero lo hace me pare a pensar en el temblor de hace un segundo. No tranquilo, no me molesta. Gracias por tu ayuda. Contesto a Ungrim. ¿Qué crees que ha podido ser ese temblor? Pregunto mientras veo como Arramus pasa por detrás de mi y avanza por el pasillo.

Sigo a Arramus, pensando que ha debido ver algo interesante por ahí.

No se, sonaba como si se hubiese producido otro derrumbamiento por ahi - señalando la direccion aproximada - Cualquiera pensaría que la torre de un poderoso mago maligno estaría en mejor estado de conservación. Puede que Morcar tenga menos poder del que pensábamos