Partida Rol por web

Miró de reojo a su siniestro acompañante. Se tratabade alguien bastante singular.

-Vaya, ciertamente es una peculiar historia la que contáis... pero no, me temo que no he oído nada al respecto, al menos no hasta ahora...-dijo con voz pausada y suave-lo cierto es que... sí, me gustaría bastante poder saber más al respecto.

Se giró hacia el elfo, deteniendose frente a la puerta de la taberna y ofreciéndole una amable sonrisa.

-Y tampoco sería nada reprobable tener a un compañero hechicero en el transcurso del viaje, ardo en deseos de saber más sobre sus estudios místicos y dotes arcanas...-dijo teniéndole una mano en señal de colaboración.

Entra por mi ventana el olor a pan, y me despierto, me duele un poco la cabeza por lo que bebí anoche, me pregunto que hora será. Recuerdo que anoche hablé con aquellos dos viajeros que iban en busca de la bruja. Rapidamente, recojo mis cosas y bajo a desayunar, esperando encontrarmelos abajo.

-Será un.......¿placer?....- dice encogiendose de hombros asqueado.Por supuesto que no era un placer, pero se supone que se dicen esas cosas, además para causar buena impresión.Extiende su brazo para juntar sus manos, dejandole ver su pálida mano junto con sus afiladas uñas acabadas en punta.Lo que hay que hacer...... piensa con un suspiro de cansancio tras darle la mano.

-Adelante caballero, usted primero.....- le dice ofreciéndole entrar a la taberna.

Nathan se encontró con la criatura y con Blackheart al bajar las escaleras. Se tocó el ala del sombrero como saludo.

-Buenos dias ¿listos para quemar, atravesar y destripar a paganos creadores de sortilegios oscuros?

Inquirió, muy a su modo.

-Espero que si, en unos instantes partiremos hacia el encuentro con el diablo.

Si, mejor que partamos y vayamos a por ese engendro, antes de que haga mas males. -decia serio Blackheart -

Nathan se detuvo en seco y miro hacia abajo, reflexibo, se masajeó su pronunciado mentón.

-Saldré por la ventana.

Dijo el excentrico personaje, tajante.

Se volvió sobre sus pasos, con total tranquilidad.

-Buenos dias a los dos, ¿cual es el plan para hoy?, ¿compramos provisiones aqui en la taberna o en el mercado?. ¿hace falta comprar algo mas que comida? ¿cuando partimos? ¿hacia donde?

(al verlos mirandolo callados)

- Deacuerdo, lo primero es lo primero, vamos a desayunar y me lo cuentan todo

- ¡Un poco de pan y miel a esta mesa! ¿que quieren ustedes?

Yo pedire un desayuno popular.

Después de que desayunemos, iremos a hacer nuestra misión.

¿Que vas a desayunar Erhin, que desayunaran Nuez y Teja? -decia Blackheart mirando a Erhin y a Ceamus -

Erhin se había quedado tensa e inmóvil mirando fijamente a Blackheart. Cuando éste se giró para preguntarle por el desayuno se dió cuenta de que le estaba taladrando con la mirada. Era raro ver a la dríade tan seria... pero era más raro aún verla furiosa.... y en ese momento se notaba a la lengua que lo estaba.... mucho.... y por alguna extraña razón, la diminuta estatura de la dríade no la hacía menos amedrentadora en ese momento... y es que cualquiera que se preciase de inteligente se percataba en el acto que la ira de esa criaturita debía ser tomada muy en serio...

Clava los ojos en el Señor Hurón y le espeta secamente:

-Lo primero. No sé por quién demonios me tomas Señor Rescatador de Princesas, pero no soy una niña malcriada a la que se pueda ignorar como si no contara o no entendiera las cosas. Lo segundo. Quiero saber inmediatamente qué engendro o diablo es al que pensáis tú y tu "encantador" amigo, del que por cierto no me has dicho una palabra y parece que conoces bien.... pensáis quemar, atravesar y destripar....- la voz de la dríade se hacía más cortante por momentos.... cualquiera diría que sus ojos despedían chispas de rabia- y qué se supone que ha hecho tan horrendo para merecer ese destino.... y por último, me haría terriblemente feliz descubrir.... ¿para qué maldita misión has contado conmigo?¿Acaso es la de destripar a desconocidos que no me han hecho nada? Para tu información, por si lo olvidabas yo soy druida, he dedicado mi vida a cuidar y sanar a los seres vivos, no he sido, soy ni seré una mercenaria que cumple un trabajo sin importarle los motivos o las pruebas...

Toma aire tras la diatriba mientras se da cuenta de que se ha puesto roja de rabia.... Teja y Nuez se han quedado completamente quietas y parecen incluso haber empequeñecido esperando a que pase la tempestad.... Erhin sabe que está siendo muy dura, muy hiriente.... Pero entre ayer noche y esta mañana se han acumulado unas cuantas cosas que no le han gustado lo más mínimo....

Sabe que el Señor Hurón la aprecia profundamente, como ella a él... y sabe que la cuida con ternura paternal.... pero ya le ha tenido que recordar en ocasiones que a pesar de tener un carácter alegre y despreocupado de una criatura, no lo es... es una muchacha más cerca de ser una mujer que una niña, y quiere que se la informe y se la tenga en cuenta en las decisiones serias como estas... maldita sea... es su compañera de viaje, son un equipo, o ¿no?... a veces parece que se le olvida...

Y luego está el tipo ese, el cazador... que le pareció desagradable desde el final del oscuro sombrero hasta la punta de los pies... la forma despreciativa de cómo la miraba, la fijación con cazar a aquel macabro individuo... que por lo que sabía Erhin, aunque no tenía buena pinta, no había hecho aún nada digno de tal odio... y sobre todo la desinformación que estaba sufriendo... Blackheart y él se conocían, y ella no sabía de qué.... ni de qué habían hablado ayer.... pero parecía que ya lo habían decidido todo....

Erhin, un poco más calmada, siguió mirando fijamente a Blackheart, exigiendo con su expresión una explicación...

- ¿Y bien? ¿soy digna de unas migajas de información al menos?...

Abre la puerta, manteniendo su rostro serio.Nada más entrar, aguanta la puerta para que Zalgrym pudiera entrar.

-Pase amigo.....mio- dice algo pensativo, algo en desacuerdo con esas palabras, pero debía mantener las formas por su propio bien.Nada más entrar había visto a algunas personas que recordaba del otro día,algunas metidas en aquella riña que acabó bien al fin y al cabo, y otros que prefirieron no intervenir, aunque le hubiera dado igual....Pero ya era un nuevo día, y las ambiciones.....cambiaban.

Blackheart mira seriamente y con una mirada gélida a Erhin.

Te lo iba a explicar todo en el desayuno, puesto que has hecho mella con tal berrinche, mejor que no desayune y me vaya, ya que no puedo cuidar de los mios y estar preocupado por el bienestar de mi compañera de viajes , dado mis acciones, que has confundido por lo que te trato como una niña.

Algo indignado y enfadado mirando a Erhin, por el berrinche que habia pillado antes de hora, se va con dirección a irse de la posada.

-Decidle a Lyra la posadera que la espero en la plaza para desayunar.

Pidió. Se acercó a la ventana y la abrió suavemente. Miró a ambos lados y luego sacó un pie, luego otro y por último se dejó caer en la teja, se deslizó despacio cual gato y miró hacia abajo, para comprobar que caía sobre algo blando, como un carro de paja.

Se sujetó el sombrero y se dejó caer. Luego salió de allí, limpiándose, y se diriguió a la plaza. Incontables veces había hecho eso para no rendir cuentas a un padre furioso.

- ¡¡Quieto ahí!!

Y la dríade de un salto se planta delante de Blackheart con los brazos en jarras, bloqueándola la entrada.

- Me has incluido en un asunto para el que no me has consultado. Y piensas ir a ponerte en peligro sin darme ni siquiera una buena razón para ello. ¿Qué pasa? ¿Que aquí eres tú el único que puede proteger a sus amigos? ¿Yo no cuento? Pues a mí me interesa también tu seguridad, pero estando totalmente desinformada no puedo hacer nada, y eso me frustra. No puedes dejarme de lado y esperar que me quede tan tranquila. Yo no hago planes sin tenerte en cuenta, ni sin preguntarte antes tu opinón. Y no me gusta que tú no hagas lo mismo. ¿En el desayuno pensabas preguntarme, o tan sólo informarme de una decisión ya tomada?, porque parecía lo segundo...

Y ajustándose la bolsa donde guardaba sus posesiones y haciendo caso omiso del confuso fauno que los observaba sin atreverse a pronunciar palabra, añade.

- Además, si te crees que te pienso dejar solo arriesgando el pellejo por ahí, muy poco me conoces. No amigo mío, ahora no te librarás de mí. Hasta que me informes debidamente, o hasta que este peliagudo tema concluya....

Y cruzandose de brazos espera una respuesta.... cómo le desagrada discutir con el Señor Hurón, dioses... pero que en vez de explicarle la situación para que se calme piense largarse a actuar por su cuenta y riesgo, la irrita mucho más... cómo si ella fuera a dejarle ponerse en peligro sólo por ahí... ¡vaya idea!...

Blackheart coge delicadamente el brazo de su amiga Driade, llevándola a una mesa, tras hacer señas a la posadera para que traiga los desayunos o los apunte.

En primer lugar me dijistes tu misma que estabas segura de que encontraremos a esa  bruja y la detendremos antes de que haga más daño, antes de que se acercara a tu bosque, por eso tuve por sentado que querias hacer esta mision, de ir a por esa bruja antes de que haga mas daño a nadie.

¿ correcto ? - dice Blackheart con tono tranquilo a Erhin -

- No me parece que el cazador estuviera hablando de la bruja... ayer parecía demasiado obcecado en el mago extraño de la posada... ¡que por cierto acaba de entrar!...

Echo un vistazo fugaz sorprendida de ver al mago junto a otro vistoso y colorido individuo.... no pegaban nada... pero allí estaban los dos juntos entrando en la posada...

La dríade habla rápido y en voz baja... ya está mucho más tranquila...

- Entonces... ¿es sobre la bruja todo esto?... ¿no tiene nada que ver con ese individuo de ahí?... ¿ya sabes dónde se esconde esa mujer?... ¿y de qué conoces al cazador?... no me gusta... me desprecia... se le nota en la mirada... en todo....

Y frunce el ceño...

Ceamus comia con mucho gusto el pan que mojaba en la miel, mientras levantaba la cabeza, y seguia con la mirada toda la discusion, como el que ve una obra de teatro.

- El pan está recien hecho, y la miel no es de las mejores pero esta bastante buena con el pan caliente ( dice mirando a los Erhin y Blackheart),  luego se da cuenta de que no le prestan atencion, asi que se encoge de hombros y sigue comiendo)

Aparece en la plaza del pueblo desde una de las calles principales... lleva un vestido menos llamativo en cuanto a color por que el corpiño es del mismo estilo, al igual que el vestido en su totalidad.

Mira a un lado y a otro a ver si ve a Nathan.

-Quién lo iba a decir por su aspecto... -comentó bromista Zalgrym aludiendo a la caballerosidad de su siniestro acompañante-muchas gracias, camarada...

Pasó al interior de la oscura taberna y recorrió con la mirada el lugar. Allí dentro había una considerable multitud, dispersa por las múltiples mesas de tosca madera, al igual que sus respectivos asientos. Su mirada se detuvo sobre la barra, donde una lozana camarera recogía una bandeja con unos boyos con aspecto bastante apetecible...

-Tal vez podamos tomar algo mientras conversamos, si le parece conveniente...-dijo mirando a su acompañante.
Se encaminó hacia un rincón donde un pequeño banco de madera junto a la pared flanqueaba una mesa algo más alargada que el resto. Allí podrían hablar algo apartados del murmullo de las conversaciones agenas.

-Tome asiento, monsieur Eólides-dijo ya junto a la mesa, invitándole con un gesto a sentarse frente a él-aquí estaremos com...

De súbito sus palabras cesaron. Pocas mesas más allá un tipo con vestimenta oscura (vaya, cuanta gente siniestra pululaba por el pueblo esos días...) estaba hablando con una cosita parecida a una niña de piel verduzca y junto a una criatura con aspecto cuasi humano (aunque los cuernos y la parte inferior de carnero evidenciaban su verdadera naturaleza).

-¡No me lo puedo creer!-exclamó sin poder evitarlo. Afortunadamente el griterío de la clientela ahogo bastante sus palabras-hacía décadas que no veía criaturas del bosque... que curioso ver un fauno por estos lares y... ¿y esa criaturita?