Con el rifle sobre el hombro me sitúo al otro lado de Clostermann para ofrecerle cobertura mientras desactiva la bomba. Procuro situarme de tal manera que mi espalda esté cubierta por la pared.
-Tranquilo tío. Tú a lo tuyo. Te tenemos cubierto -le susurro al artificiero.
El silencio es casi antinatural; no es posible que una factoría esté tan silenciosa. Solo se ve interrumpido por el parpadeo de las luces, hasta que una voz, en parte humana y en parte metálica, resuena en toda la sala de máquinas
- ¿¡Que creeis que estais haciendo!?
Abro los ojos de par en par, incrédulo y sobrecogido ante la voz. Después aprieto la mandíbula en un intento de no dejarme llevar por el miedo.
-Vamos a enviarte de vuelta al infierno -le digo
Trago saliba y le hago gestos a Mark mientras aguardo en completo silencio desde mi posicion apuntando con mi arma con la esperanza de que la criatura o ser o lo que fuera no se percatara de mi presencia, aguardo en silencio completo a la espera del disparo perfecto. Esperando a que los explosivos sean colocados para salir de aquel infierno, pues esta claro que las cosas no serian tan faciles, la voz de la experiencia me ha hablado muchas veces.
Se escuchan una serie de ruidos metálicos y de maquinaria mientras "algo" parece ascender de las profundidades de la sala de máquinas, trepando, o mas bien reptando, por las paredes. Una maraña de cables, pistones y metal aparece ante vosotros, una masa irreconicible y sin sentido alguno, sin ninguna semejanza con ninguna máquina que conozcais. El olor a aceite de maquinaria usado se hace casi insoportable, y las piezas y cables comienzan a retirarse para revelar algo en el interior de aquella "cosa". Del centro de aquella masa informe de piezas tecnológicas, surge lo que parece la mitad superior de un cuerpo humano. Cables y trozos de acero se clavan en su carne pálida y consumida, y su rostro deformado y calvo os observa con unos ojos que parecen manómetros. Abre la boca, y su voz suena como un chirrido metálico con algo que parece remotamente humano.
- ¡Os advertí de que os alejarais! ¡Estais interrumpiendo mi trabajo!
Podéis "conversar" con el amable recién llegado, o tirar Iniciativas para pasar al combate
Thawne comienza de repente a sangrar por la nariz, y se arrodilla en el suelo, presa de un terrible dolor de cabeza
-¿Qué trabajo? -pregunto atónito y casi sin pensar mientras doy unos pasos hacia atrás. Más que satisfacer mi curiosidad busco ganar algo de tiempo y observar el cuerpo de la criatura, buscando alguna explicación y si lo que veo es lo que realmente sucede y no estoy loco... buscando algún punto débil.
¿Que cojo....nes? Restrocedo rapidamente, rifle en mano sorprendido por lo que estoy viendo en estos momentos, presa del panico durante unos instantes intentando comprender que es lo que realmente ocurre e intentando comprender que lo que esta ante nosotros es real y no una ilusion.
Preparo el rifle y con la mano derecha le quito el seguro mientras lo levanto sobre el hombro y me preparo a disparar en cuanto esa criatura se mueva o realice algun movimiento extraño que pueda suponer algun problema para el grupo.
¿Alguna idea? - Pregunto apresurado ante la posibilidad de que esa criatura pueda acabar con todos nosotros, despues de todo ha acabado con todos los trabajadores y con Dog... Esto no esta nada claro.
Concentrado en mi trabajo trato de ignorar lo que se nos viene encima, le echo un vistazo pero me obligo a no mirar. Mis compañeros responderan tan bien como podría yo. Mientras me apresuro montando el artifício que tengo entre manos la maraña de cables se despliega y asoman lo que parecen los restos de un humano. ¿Pero qué...? Durante unos instantes me quedo detenido sin darme cuenta, después continúo con mi trabajo a la espera de que el engendro responda a la pregunta de Mark.
Qué guapa la canción xD
- ¡ESTE trabajo! -grita la criatura, alzando los brazos y refiriéndose a todo lo que os rodea- ¡Ser parte de la sagrada maquinaria! Los ángeles de metal me han hablado, y ha llegado el momento del resurgimiento. ¡Lo que se alzó puede caer! ¡Lo que cayó puede alzarse de nuevo!
A Clostermann aún le quedan un par de minutos para terminar de preparar los explosivos
Thawne, apenas capaz de levantar la vista, murmura algo
- Hagan... hagan que siga hablando
Como si estuviera en uno de los terroríficos relato a los que soy aficionado decido hablar a la criatura en sus propios términos. Con actitud reverencial me arrodillo ante ella y agacho la cabeza, esperando así ganar algo de tiempo.
-Salve a la Sagrada Maquinaria. Ahora somos tus súbditos. Háblanos de tu gran retorno.
La criatura se queda en silencio un momento, quizás sorprendida por las palabras de Mark, pero al cabo de unos instantes se rie con una enervante risa metálica
- No trateis de engañarme; puedo ver claramente vuestras intenciones. Además, no estais capacitados para comprender la verdad; a lo máximo que llegaríais es a ser peones, como aquellos idiotas que también quisieron unirse a la sagrada maquinaria por salvaguardar sus miserables vidas y sus imperfectas carcasas de carne. Los habeís visto antes; acabasteis con su miseria hace unos minutos, pero para el Dios-Máquina no era más que peones prescindibles, pues su miedo los hacía indignos. Yo no me uní por miedo; los ángeles me hablaron, y me uní por voluntad propia. Y por mi fe me encomendaron mi sagrada misión.
Un poco más para que Clostermann termine con los explosivos
Mirando de reojo a Clostermann continúo
-Perdónanos. Queremos comprender
- Lo único que teneis que comprender es que el mundo va a cambiar. Cuando el taladro rompa la sagrada bóveda y el arcángel sea liberado, la Humanidad conocerá de primera mano la gloria del Dios-Máquina, que nos llevará a una nueva era de perfección. ¡Estais contemplando el siguiente paso de la evolución humana!
Clostermann ya puede actuar
¿La sagrada bóbeda es el suelo? ¿El Dios-Máquina está en el fondo del planeta? ¿Y el taladro es esta plataforma? ¿Qué se alzó? ¿Quienes son los ángeles de metal? Ya he acabado, chicos. -Susurro rápido al más cercano, y continúo como si nada. - Creo que tú también eres un peón después de todo. Mírate, estás deformado. ¿La evolución de la raza humana no se reproducirá?
- Haces demasiadas preguntas; preguntas cuya respuesta no puedes comprender. Pero no os preocupeis; yo os ayudaré a comprender.
Una estridente risa metálica resuena por toda la sala de máquinas, mientras los aparatos vuelven a ponerse en marcha y cables de acero empiezan a caer del techo
Ahora si, iniciativas :P
puedo reventar los explosivos cuando quiera? Puedo programarlo como quiera? En plan, si le doy al click, en 5 minutos explotan, si le doy dos veces explotan, si no le doy ninguna explotan en 15 min (?)
Director: son control remoto; explotan cuando le des al botón
Motivo: Inicitativa
Tirada: 1d10
Dificultad: 1+
Resultado: 7(+6)=13 (Exito)
Motivo: iniciativa
Tirada: 1d10
Resultado: 2(+6)=8