Partida Rol por web

Segunda historia contada en la corte de Ludovico.

- Estimado Lord Glom, creo que usted ha oido hablar ya de nuestro aprteciado compañero Mario Rumialdo. Si es así, ¿recuerda en especial alguna anécdota que su señoría, el duque de Holanda, nos pueda contar?

Antes de sentarse en aquel trono, hace una pequeña reverencia al señor Ludovico y añade unas palabras.

-Con sumo y grato gusto, os contare cualquier de mis insteresantes, entretenidas, peligrosas y fascinantes historias de las cuales he vivido a lo largo de mi humilde vida.Ahora espero la petición de nuestro noblísimo lord Glom para así dar paso a mi historia pues- dice acomodándose en aquel sillón. 

mientras se sentava en uno de los comodos lugares de la sala

Ante tan directa pregunta todas las armaduras, estatuas, gárgolas y tapices giran la cara hacia el duque que se dispone a subir a la tarima para contar su historia.

-Gran elección amigo, muy buena alección- dice con cara de satisfecho-.Ahora daré comienzo a la historia sin más demora.La historia comenzó hace ya uno 20 años.En esos tiempos, yo era joven, tenía la piel menos arrugada y aún me sentía en forma para arriesgarme a vivir peligrosas aventuras.Iba con mi fiel compañero Richards Jonhson.Discutimos a lo largo de una mañana cual sería nuestra próxima aventura, cuando de pronto, mientras estabamos tomando un delocioso té sobre mi vajillas te tiempos arcaicos se podría decir, comenzó a caerse a pedazos encima de nuestras manos.Como no, nuestra reaccion fue de asombro.

-Mario Rumialdo......amigo mio.Desde cuando tienes esta ya desaparecida vajilla....- le pregunta su amigo.

-Querido amigo.......ni los propios Dioses podrían responderte a esa pregunta.Si no recuerdo mal me la regaló un viejo amigo hindú, como regalo por capturarle 500 serpientes del diablo ( se caracterizaban por tener una gran mancha negra en su vientre y una lengua de 1 metros de color rojo carmesí), las más venenosas del mundo sin duda, o eso me dijo mi viejo amigo, orgulloso de todo lo que formaba su patria.Parece que la vajilla que me regaló, parecía tener muchos más años de lo que aparentaban.Quizás la hizó un viejo enano en las famosas minas indias Warkapur, famosa por fabricar grandes y delicadas piezas de porcelana.Por supuesto, el último enano murió hace ya más de mil años, así que imagínese por todo lo que han pasado esta aunque ya desaparecida vajilla.....

-Pues, ya que conozco sus mejores y refinados gustos y su afán por la aventura, que le parece conseguir su próxima vajilla, no en la tienda Joe's Gallery, esta de la esquina, sino en la otra punta dle mundo......en el Amazonas- le dice su compañero con mirada triunfante.

-Viejo amigo, nose donde encontraria a tal especimen en toda la tierra que tenga tus alocadas ideas.Está bien, acepto tu peligrosa aunque emocionante petición.Mañana partiremos a primera hora.Sin más demora, vaya a prepararse querido amigo, porque presiento que esta historia se recordara a lo largo de toda nuestra vida- le ofrece la puerta de su casa para que se marchara y se prepara.Ya al día siguiente, a las siete en punto de la madrugada, ambos ya estaban en un taxi camino al aeropuerto de Londres.Una vez el texi les dejó, cogieron sus maletas.Su amirgo Richard llevaba almenos tres o cuatro maletas.

-Ahahahha, pero a donde se cree usted que va con tan semejante cantidad de maletas, tenga en cuenta que esto no es un viaje de placer- dice mientras saca su maleta que no era más grande que un maletín.

-Anda, y usted a donde piensa ir con tal pequeñez......- le dice algo indignado y sorprendido.

-Querido amigo, si mi vieja memoria no me falla, esta historia se la conté hace ya un mes.No recuerda, ese increible viaje a la cima más alta del munddo, que se encontraba en el pico Grobadonis, que rozaba la atmósfera más alta con la parte más alta de su ser.Fue allí donde encontré a un viejo sabio que me dijo:

-Señor Mario, con esta maleta le sobrará para portar todo lo que quiera, porque le aseguro que aquí cabe hasta todo el agua de los océanos.....

-Así pues, las apariencias engañan querido Richard.Le puedo asegurar que llevo el triple de maletas que usted, metidas en esta increible pero le aseguro que mejor maleta que pueda encontrar usted en toda la faz de la tierra........- le vuelve a contar otra de sus maravillosas historias.

-Muy bien,muy bien.Le creo, por eso no le voy a pedir que la abra.Partamos pues a nuestro avión....- le dice encaminándose hacia la pista donde se encontraban todos los aparatos aéreos.

-Mmmmm.......Señor Richards, parece que no le he informado como es debido.Permítame decirle, que nuestro medio de transporte no es un avión ni mucho menos, tardaríamos horas con esta anticuada tecnología para llegar a nuestro destino.Montarémos en un precioso carruaje dorado, llevado por fascinantes libelutriones, si ya sabes, esos magníficos seres, mitad libélula y mitad tritón, los seres más rápidos de la Tierra.Llegaremos si mis cálculos son correctos, en unos cinco minutos.....Ya sabes, siempre es aconsejable tomar medidas, por si las alas fallan, esté la posibilidad de que nos lleven a nado ehehehe- le explica a su pobre amigo, que parecía poseer pocos conocimientos sobre estos temas.

-¡Está usted loco! señor Mario- le dice alarmado haciendo grandes movimientos, incluso exagerados con sus brazos.

-Espere y verá.El tiempo es la mejor medicina, y en este caso parece ser que su cabeza esta algo necesitada de esta.Sígame por favor....- se dirige a la pista de aterrizaje  despegue propiamente dicha, y entre todos los aviones, había un artefacto que se dinstinguía de todos.Era una magnífica carroza de dos personas, de color blanco.Poseía una grandes ruedas doradas.En su parte delantera estaban los libelutriones, descansando de sus otros largos trayectos.Detrás de ellos estaba el sñor y dueño del carruaje, encargado de que sus clientes lleguen sanos y salvos a sus destinos manejando con gran maestría a sus animales.Observa como se acercan dos hombres vestidos con ropas hechas para aventuras.

-Hooooooola amigos, me llamo Leon Martuas, bienvenidos seais al mundo de la fantasía, donde el tiempo no existe y donde por unos instantes podreis oler el dulce aroma de la juventud eterna.Pasen por favor, pasen...- coge dos de las tres maletas que portaba Richards.Las coloca en la parte trasera del carromato, atándolas bien fuertes con hilo de hada, el único capaz en el mundo de resistir tal velocidad-.Por favor, suban y pónganse cómodos- dice con un acentro francés.Parecía que aquel tipo era originario de Francia-.¿Están listos amigos?

-Si- dicen ambos.

-Pues adelante queridos animales celestiales, volaaaaaaaaaad volaaaaaad y sumergiros en el mar de las nubes....- estos comienzan a batir las alas con extrema velocidad.Practicamente eran invisibles al ojo humano.En milésimas de segundo, el carromato despegó dejando tras de si un bonito rastro de polvos mágicos.

-Es increible o no es increible amigo mio- le dice a Richards sujetándose el sombrero.

-No see que decirle- dice gritando-.Aquí sirven cacahuetes ¿no?- dice con tono irónico.

-Amigo, todo lo que desee durante la corta travesía se hará realidad....- le explica el señor.Richards se queda con una cara, "venga va estás de coña".

-Muy bien pues.Quiero una bolsa de cacahuetes- de pronto, un poco de polvo que soltaba el carromato, se reune en la palma del hombre y se crea una bonita bolsa llena de delociosos cacahuetes.

-¡Virgen Santa!- dice abriéndole y tomándose uno-.¡Son los mejores que probé en mi vida!- dice comiendo uno detrás de otro.

-No lo dude, todo lo que pruebe en el mundo de la fantasía, será lo mejor que habrá probado en toda su vida- le dice el hombre mirando levemente hacia atrás mientras el viento hacia que su pobre melena se moviera desordenadamente hacia todos los lados-.Ya hemos llegado pues- de pronto el carromato comienza a bajar descontroladamente hasta aterrizar en un bonito campo de árboles amazónicos.

-Muchas gracias señor Martuas.Ha sido un agradable viaje y díficil de superar.¿Cuanto le debo?- le dice palpando su chaqueta en busca de su cartera.

-Señor por favor, con vuestra inmensa satisfacción me sobra.Fue un placer llevaros, y recordad, nunca se sabe donde te puede estar esperando un carromato de libelotriones ahahaaaaaaaaaa- dice agarrándose a las riendas de aquellos magníficos seres y desapareciendo en cuestión de milésimas de segundos.

-Muy bien Richards, aquí comienza realmente nuestra aventura.Pimero iremos rio arriba.Uno de mis más grandiosos amigos, me comentó una vez, que en el Amazonas, no había vajilla igual de resistente y a la vez hermosa en todo aque lugar en el que había estado.Por eso ahora sigo su consejo, y debemos ir rio arriba- le explica a su amigo Richards y comienza a andar por la orilla de este, esquivando cada árbol y cada planta mientras observaba maravillado todo el paisaje.Las gotas de sudor comenzaban a brotar por su piel, y peor aún, comenzó a llover.

-¡¡Richard, corra hacia el exterior!!, el rio que ve ahora tranquilo y sumiso, en cuestión de minutos inundará todos estos lares que está viendo en estos momentos- corrieron como puedieron, pero el agua avanzaba más rápido que ellos.Se podían ver las horribles criaturas que yacían bajo el agua.Con grandes colmillos y grandes aletas.Incluso algunas tenían patas y podrían seguirles si quisieran corriendo.

-¡Este mundo es increible Richards!, nunca he visto criaturas iguales.Siga corriendo siga- dice mientras abre su pequeña maleta y mete el brazo entero como si estuviera buscando algo que necesitaba en esos instantes.Al fin lo encuentra, y saca todo el brazo de golpe con una bonita cámara.Apunta hacia atrás mientras corre y comienza a hacer fotos, que salían instantáneas al segundo por la parte de abajo de la cámara y caían dentro de la maleta.

-¡Fascinante, fascinante!- dice mientras corre a toda prisa.Lamentablemente, al rio le faltaban pocos metros para atrapar a los dos grandes aventureros, pero de pronto, unos seres que procedían de los árboles, se abalanzaban sobre ellos con lianas.Los agarraron justoa  tiempo cuando el agua arrasó toa la zona.Estos comenzaron a ascender maravillados por los aires hasta llegar a las ramas más altas de aquellos frondosos árboles.Una vez ya acostumbrados a esas altura y una vez pasado el peligro, se perataron del curioso aspecto que poseían aquellas criaturas.No sabía si eran hombres o extrañas criaturas porcedentes del espacio, ya que sobresalían de sus cabezas dos grandes antenas.Mario, fascinado por las extrañas apariencias de aquellos seres, llenos de pelo, no sabía que decir, nunca había visto espécimen igual.Aún con la boca abierta, eleva poco a poco la camara y hace una foto.Finalmente la guarda en su maleta y se dedica a investigar más a fondo a esos seres.

-Richards.......¿sabe exactamente tal descubrimiento que acabamos de hallar?Esto podría ser un importante avance científico y natural.

-Avance científico y natural......- salían de las "bocas" de aquellos seres.

-¿Has oido eso Richards.....?- era increible.Eran capaces de hablar y más aún de recordar e imitar.

-Si si.....pero no estoy muy cómodo que digamos....- dice algo nervioso.La verdad es que estaban completamente rodeados en aquellas alturas por aquellos extraños seres peludos y con antenas.

-¿Cree que entenderan nuestro idioma?- le dijo con la esperanza de que le guiaran rio arriba.

-No lose,¿por que no se lo pregunta?- le dice sin dejar de mirar a aquellos seres.

-Muy bien......- trató de explicárselo palabra a palabra, incluyendo gestos, sonidos y todo lo que le pasaba por la cabeza para que lo entendieran fácilmente.Finalmente, parecía que no entendían nada, pero uno de ellos, que se caracterizaba por un pelaje amarillo oscuro( cinco ojos y una boca con dientes de hipopotamo, normal en todos) se dirigía a ellos.

-Yo si que os entiendo...- dice de pronto.Ambos hombres se quedaron sin palabras.

-¿Como puede ser que tu hables y ellos no puedan......?- pregunta Mario intrigado.

-Claro que si amigo, hay una respuesta clara a esta pregunta.Yo soy el líder de esta raza que para vuestros ojos y para lo de todas las demás personas somos únicos e increibles.Pero no os confundais, no somos ninguna raza de vuestro planeta.Es más, pocedemos de otro a millones y millones de años luz del vuestro.Nuestra raza se llama Manúfidos, y como podeis ver nos caracterizamos por estos grandes pelajes, nuestros ojos y nuestra boca, aparte de las antenas.Llegamos aquí hace mucho tiempo, antes de que todo esto se formara.Hemos ido adaptándonos a toda transformación, sobreviviendo.Te preguntarás, como puedo hablar vuestro idioma, la respuesta está en mis antenas.Una vez que perciben una lengua no conocida, la graban en nuestros sistemas memoriales y nos dan la capacidad de hablar cualquier lengua.También te preguntarás porque el resto no puede, es sencillo.Todo va acorde con el color de mi pelaje.A lo largo de todas nuestras generaciones, siempre ha existido un Manúfido que poseía este color, y increiblemente tenía habilidades y capacidades que el resto no podían.Finalmente, la raza llegó a un acuerdo, y siempre que existiera tal invidividuo entre sus gentes, sería el líder o como querais llamarle aquí en la Tierra.Esa es nuestra historia.Por circunstancias X, nuestro planeta fue perdiendo vida poco a poco, hasta acabar destrozado.Tuvimos suerte y gran parte de la población pudimos escapar en nuestras naves y llegar a vuestro planeta, que era el que tenía las características más parecidas al del nuestro.La naves se desintegraron al atravesar vuestra atmósfera y caimos en esta zona.Eso es todo- le explica el ser.Los dos hombre no sbaáin que decir, estaban realmente maravillados.

-Excelente historia querido amigoooo.....- se queda pensativo, no sabía si aquellos seres poseían nombre.

-Aaa...bueno...me llamo Jilikuki.....- dice presentándose.

-Amigo Jilikuki.No dudeis de que me quedaría más tiempo escuchando sus increibles historias y anécdotas, pero tengo prisa y debo ir rio arriba para encontrar una famosas pirámides- le explica al Jilikuki.

-Aaaaa......se refiere a aquellos edificios de forma triangular que parecen ser bastante arcaicos.....- dice mirando hacia la dirección correcta-.Les llevaré hasta ese lugar si es vuestro deseo- dice amable.Tras esto habla en un idioma totalmente desconocido, y dos de aquellas criaturas, les agarran y les llevan volando de diana en diana.Al pasar unos cuantos minutos finalmente llegan a aquellas pirámides.

-Muchas gracias líder Jilikuki.Pídame lo que quiera y se lo daré con gusto......-  dice cortés.

-Emmmmm...... ¿que tal si viene de nuevo y nos cuenta algo más sobre su planeta más tranquilamente?- le propone el ser.

-Será un gran placer señor Jilikuki.Aquí se acaba nuestra compañía pues.Fue un placer conocerle a uste y a todos sus compañeros- dice Mario

-Si.....lo mismo digo- dice Richards siguiendo a Mario.Aún no se había acostumbrado a aquellas criaturas, así que era normal que se comportara de esa manera.Asi pues, fue como legamos a las grandes pirámides, atravesando el rio arriba por los árboles acompañados de esas admirables criaturas.Aquellas pirámides, echas con piedras gigantescas, se alzaban sobre nosotros masjestuosas.Poseían magníficos adornos dorados a la vez que la naturaleza comía poco a poco la fachada de estas.Seguramente que en su interior poseían grandes riquezas que no cabrían ni en su maleta.Se adentran poco a poco en el interior de aquellas gigantescas pirámides que parecían tener aspecto azteca, pero no eran para nada como aquellas.Todo estaba echo a mano, con sudor y sangre.Era único e increible.Un pasillo que se extendía kilómetros hacia abajo, donde ocultaban grandes maravillas que seguramente , nunca habían sido descubiertas a lo largo de toda su existencia.Conseguimos seguir, esquivando cualquier trama y superando toda quiestión que se nos presentaba en nuestro camino.Lleno de murcífrogos planeando sobre nuestras cabezas (parecidos a los murciélagos pero eston se alimentan de los cerébros de las personas inyectando la aguja que poseen en su trasero por el agujero auditivo), trampas que arrojaban lanzas con veneno de triaconda en sus puntas ( bambas negras de dos metros de largo con tres cabezas con colmillos de medio metro).Aquella aventura se decantaba entre la vida y la muerte de nuestras cabezas.Con suma astucia, logramos descubrir pasadizos ocultas que nos llevaron a la verdadera cámara oculta, donde estaba el gran tesoro, que se extendía kilómetros hacia todos los lados.

Comenzamos a avanzar entre aquellas montañas doradas y brillantes.Aquello parecía otro mundo, lleno de fantasías.Todos los seres de allí, eran de oro macizo, incluido los hombres que nos encontramos en aquellos páramos.Poseían pedruscos incrustados en su piel y sus ojos eran grandes diamantes.

-¿Que quereis mortales?- nos dijo uno de ellos, que parecía ser el jefe, por su estatura y por todo lo que le componía.

-Hola grandísimo señor.Venimos porque en toda la tierra se  hablan de que sus vajillas de procelana son las mejoras que existen en el universo.¿Es verdad tal rumor?- pergunté audaz y humilde ante tal poder y grandeza.

-¡No lo dudes mortal!- contestó con aires poderosos.De pronto, lanzó su gigantesca mano hacia una de la montañas doradas, rompiéndola en mil pedazos.De pronto comenzó a sacar de lo más profundo una presiosa vajilla de porcelana, con toques de marfil y oro.Era realmente espectacular.Más tarde me la acercó para que la viera por mis propios ojos.

-¿Podría aceptar algo a cambio de esta excelente vajilla?- le pregunta agarrando sus sombrero con mabas manos frente a su pecho mientras se valanceaba hacia adelante y hacia atrás.

-No creo que haya nada en tu mundo que tenga tan magnífico valor como el de esta vajilla, pero hasta que no me muestres todas las alternativas no diré "no"- dice volviendo dejando la vajilla sobre un pedestal dorado.

-Ummmm.......dejemé ver un momento sino le molesta- abre de nuevo su maleta y busca ahora metiendo incluso su cabeza hasta la cintura.Parecía que iba a caerse dentro.Finalmente sale de la maleta sin encontrar nada que pueda cambiar.Parecía que aquel ser, aparte de ser gigante poseía una gran inteligencia y sabiduría.

-Es verdad, puede que no haya nada comparabale a aquella vajilla, ¿pero que le parece si a cambio de que me de la vajilla, difunda por todo el mundo su gran riqueza y su gran talento para hacer la mejor vajilla que ha existido en todo el universo......?- le pregunta al gigante.

-Mmmmm eres sabio, mortal.Esta bien, aceptaré tu propuesta.Que todo mortal sepa de mi existencia y de esta insuperable vajilla, la cual echa por mis excelentes manos de Dios- le dice a Mario.Richards estaba todo el rato tra él, algo espantado por el tamaño de aquel gigante.De pronto al vajilla desaparece del pedestal y aparece sobre las manos de lord Mario en una bandeja también dorada.

-Muchas gracias gran señor.Sino le importa y no le he smucha indiscreción, ¿me podría decir su nombre?- le pregunta de nuevo metiendo la vajilla con cuidado en su maleta.

-Como no, humano.Cuando mi nombre suena, la tierra tiembla originando aquello que vosotros llamais terremotos.Cuando mi nombre suena, la superificie oceánica tiembla originando aquello que llamais tsnamis.Cuando mi nombre es pronunciado vuestro Dios se arrodilla ante mi, porque yo soy el ser supremo de toda la galaxia- dice grandioso mientras su planeta temblaba por la intenidad de su voz, que resonaba por todos los lares de aquel lugar.

-No lo dude señor, ¿ahora nos podría hacer un último favor?........¿Nos podría llevar de vuelta a nuestras tierras?- le pregunta aprovechando.

-Si..........¿por que no?Subid en mi mano...- les dice cediéndoles su mano-.¿Estais listos?- preguntamirándoles fijamente.

-Si- dicen ambos a la vez.

-Muy bién mortales.Todo esto es la fantasía que un humano puede llegar a imaginar......- dice lanzándolos al espacio.Estos vuelan incluso a más velocidad de lo que volaban los libelutriones.Cierran los ojos por un actoreflejo y cuando los abren se encuentran en la entrada del aeropuerto de Londres.

-Has visto Richards, nunca olvides esto.Pero el hombre puede llegar mas hayá de los límites existentes.....

-Sin duda lord Mario, sin duda.....

Así acaba una de las fantásticas e intrepidantes historias de mi vida.¿Que os ha parecido señora y caballeros?

De nuevo desde el fondo de la sala resonó una estridente y maliciosa carcajada...

"jajajaja... ¿que qué nos parece?.. jaaajajaj... ¡qué valor si señor!... desde luego hay que tener valor para contar todo ese cúmulo de fanfarronadas y pretender que personajes experimentados como las eminencias aquí presentes nos creamos una palabra... ¿ cómo pretende usted qué creamos nada de lo que dice si afirma que el viejo Martuas les regaló el viaje en su carromato?... ¡por la memoria de mi venerable marido muerto! ¡si todo el mundo sabe que ese viejo nunca en su vida ha regalado nada y que además por un viaje de esas caracteríticas como mínimo cobraría el precio de una o dos almas cándidas e inocentes! -Moviendo la cabeza con cierta indignación de un lado a otro- Por favor... explíquese mejor o reconozca el fraude..."

-Baronesa Úrsula, nose lo codiciosa que podrá usted ser, pero le aseguro que en cualquier persona hay un mínimo de bondad y a veces aflora.Nose si usted le conocerá en persona ni se si habrá viajado en su carromato, pero yo he estado en persona y le aseguro que aquel bondadoso hombre no nos cobró ningún viaje, es más lo hizo a placer.El dinero no lo es todo en esta vida Baronesa.....- dice sin perder la compostura.

"Queridísimo duque, estoy de acuerdo con usted en que el amor y la bondad puede aflorar en determinados momentos en cualquier ser humano y buena prueba de ello la forman las narraciones recogidas en las sagradas escrituras... -Llegada a este punto la baronesa hizó una pausa y prosiguió con gesto que aún pareciendo serio escondía el atisbo de una sonrisa- A menos... claro está... ¡que la persona en cuestión esté condenada de por vida por el poderoso brujo Crepóstoles del agujero terrenal del Amazonas a llevar en sus venas de forma inexcusable el elixir sagrado de la mezquindad y el egoismo! Y estará usted de acuerdo conmigo en que todos los aquí presentes sabemos de muy buena mano que esa es la condena que sufrió el viejo Martuas en castigo a sus indiscreciones de alcoba... ¿o acaso puede usted desmentir estos hechos?"

-Baronesa Úrsula, lamento informarle que sus palabras son totalmente erróneas.El señor Mastuas no fue condenado por el poderoso brujo Crepóstoles- se cambia de postura para acomodarse-.Más bien.... aquel señor francés, no llevaba ninguna condenada encima, sino una bendición.Se podía apreciar en su amigable sonrisa, en que aquel hombre había sido bendecido por el Dios de los cielos Nubedormun, por los maravillosos y bondadosos actos que había realizado en su corta vida por medio de su maravilloso transporte.Y por último y no menos importante, tal Dios no existe en el Amazonas, pues el Dios de Oro era el único que reinaba sobre esas tierras- le expica a la Baronesa y a todos sus acompañantes allí acomodados en la sala.

El ujier, que estaba algo atareado moderando el centenar de querubines que salían de los tapices, de repente se dio cuenta de las polémica discusión que se estaba llevando a cabo en la sala. Se saca el sombrero habilmente y empieza a recoger las monedas de los respectivos envites.

- Modérense sus señorías, modérense.

"jajaja, mi estimado duque... dudo de si nos está tomando el pelo o de si afecto de un ataque de ingenuidad realmente cree en esas necedades que está usted contando... ¿Pero cómo no va a existir el brujo Crepóstoles si es el representante directo del Dios de Oro en el Amazonas? -En este momento frunció el ceño, aspiro una larga calada de su puro cubano y adoptó una postura y disposición de seriedad severa- ¿acaso no fue él quién firmó la autorización oficial para que pudierais sacar la vajilla del territorio? Si usted nos contesta a esto negativamente... no es que dejemos de tenerle en estima pero... ¿cómo podría ser eso si todo el mundo sabe que sin dicha autorización las vajillas se hacen añicos instantáneamente en cuánto se las sitúa a más de un metro y un centrímetro de sus fronteras? Y para terminar... ¿pretende usted negar cómo el viejo Martuas sedujo a la decimocuarta mujer del brujo Crepóstoles y cómo fué maldito por ello? ¡Como osa usted charlatán poner en duda este hecho del cual mi propio marido muerto fué testigo! ¿Acaso pretende usted insultar a un difunto?"

-Hummmmm.Baronesa, sun información es incorrecta.Como ustedes bien conocen, el Dios de oro es único, y no necesita ningún represetante, pues el solo se sobra.Conociéndolo en persona y bien me motró su carácter, nunca dejaría que ningún otro ser le representara, ya que no podría igualar tales niveles celestiales y que el Dios del oro es el único que exite en esas tierras y nunca permitiría que ningún otro surgiera y mucho menos le representara sin su permiso.Con el tema de la vajilla, lamentablemente no existe dicha autorización oficial, pues para el Dios de oro lo único que es importante es la confianza que posa en sus visitantes y en la confianza que les da en que cumplan sus promesas.Como bien he dicho antes, cumplí a la perfección la promesa que le realicé.Y ahora toda persona que conozco sabe de la increible vajilla que conseguí gracias al Dios de oro- dice terminándole de corregir todo intento de estropearle su fantástica historia.Sabía que era cierta y lo demostraria hasta el final.

El ujier anda como loco las monedas que se lanzan Mario Rumialdo y doña Úrsula. Aprovechando un momendo de pausa cuenta el número de monedas que hay y con aspecto pensativo parece que cuente el número de monedas (y de increpaciones) que podrán aguantar los contendientes.

Ante la obstinada actitud del duque Rumialdo y sopesando los posibles resultados de las sucesivas apuestas la baronesa decidió poner fin a los envites a regañadientes...

"Está bien duque, oyendo esta última explicación reconozco que puede que me haya equivocado con las historias del viejo Amazonas africano, en cuyo caso todo lo que dije era cierto... Pero sólo ahora después de mucho escucharle y reflexionar me doy cuenta de que usted habla del otro continente... Queda pués por mi parte zanjada la afrenta"

-Mmmm....me alegro y celebro pues su inteligente recapacitación.Espero que haya disfrutado con mi entretenida historia.Fue un placer entablar opiniones con usted Baronesa....- le dice cordial. 

"yo, sin embargo, creo que hubo otro equívoco en su historia, también referente a su forma de viajar, pues según tengo entendido el carro del Señor Martuas no está tirado por Libelutrones, criatura de la que se ha demostrado su no existencia, sino por delfines del indico, tambien veloces criaturas pero en absoluto capaces de volar. Y no es polvo de hadas con forma de cacahuete lo que ofrece este hombre, sino otro tipo de polvo, procedente de la planta llamada adormidera, que puede haber confundido vuestro recuerdo de lo acontecido y que el relato que contais pertenezca efectivamente al reino de la fantasía y no al de la realidad."

Justo cuando el ujier entregaba las monedas a doña Úrsula, en la sala ha resonado fuertemente la voz de Lord Galvan, el hombre son rostro, que hasta el momento había pasado completamente desapercibido.

Ahora tras felicitar a la Baronesa dirige su mirada al señor Lord Galvan

-Primero y ante todo, espero que haya disfrutado con mi historia.Ahora resolveremos cualquier problema que haya.Refiriéndonos a los libelutriones señor Galvan, su información es completamente erronea.Debo decirle que los delfines del índico son incapaces de volar, en este argumento coincido con usted, pero posiblemente se le habrá olvidado que se estinguieron hace ya siglos.Cuando las centrales de carcobinto, lanzaban sus desechos al mar, probocando fuerte enfermedades a aquellas maravillosas criaturas, hasta que finalmente morían.Por otra parte y si aún existieran, no podrían llegar a tierra si son incapaces de volar, ya que nada más salir del agua, su delicada piel se secaba en cuestión de segundos por la diferencia de temperatura que existe en el interior de aquellas aguas y el exterior, acabrían por derretirse señor Galvan.

Ahora con el argumento de aquel increible polvo, creo que lo entendió usted mal.Por supuesto que aquel polvo no tenía forma de cacahuete ni muchos menos.Un parte de aquel polvo de hadas, se concentró en la mano del señor Richards, formándose así poco a poco una pequeña bolsa de deliciosos cacahuetes.Refiriéndonos a la planta adormiedra, sus polvos fueron prohibidos hace ya siglos, ya que sus efectos como bien dice eran mucho más catastróficos, es más, llegaban a hacer que el individuo que los oliera olvidara todo aspecto de su vida.Espero haberle aclarado todo- le dice asintiendo con su cabeza satisfecho.

-Sorprendido me ha, Sr. Rumialdo. Había olvidado contarnos que viene usted de otro lugar, ya sea el futuro o el reino de la fantasía. -dirigiendose a los demás- yo me inclino más por lo segundo. - volviendose de nuevo a D. Mario- Casualmente, la semana pasada, estuve en Bangkock, donde se está construyendo la primera central de carcobinto y vi que están instalando también una gran cantidad de equipos para tratar sus desechos, de forma que los vertidos no afecten a tan delicados animales, que andaban por allí dando saltos y cabriolas para regocijo de todo aquél que paseaba por la playa.

Respecto al uso de polvos de opio, no he mencionado en ningún momento si los mismos son legales o ilegales. Ni siquiera he mencionado que usted supiese que los tomaba. No quiero dudar de la veracidad de su recuerdos. Pero es bien sabido que no se debe aceptar un presente de quien dice regalarte polvo de hada, pues es una sustancia peligrosa y adictiva, y es más, es bien sabido que el señor Martuas suele dispensar ese tipo de regalos. Puede que el hecho de que lo aceptasen fuese más lucrativo para dicho individuo que cobrarles el viaje.

Además, los efectos de dicho polvo son los que, probablemente, impidiesen a su señoría percatarse que ascendiesen hacia el interior del amazonas por el gran río que allí se encuentra y que tiene el mismo nombre, pues a los delfines del índico no les supone diferencia nadar en agua dulce o salada.