Partida Rol por web

–Buscando? Si, flores para decorar el despacho de mi padre pero por aquí no hay muchas, lo que ten cuidado..Tienes botas altas? Hay víboras por aquí y te pueden morder, hay que ir espantándolas. Mi guardaespaldas siempre me reprende - contesta la joven

-Y tu quien eres, qué haces aquí? Preguntó, arrancando una brizna de hierba.

- Umh... descuida, tengo unas botas de cuero. No es que sean muy buenas, pero me protegerán. Pero tienes razón, hay muchas víboras por aquí... solo que no todas son serpientes. - dijo el hombre, con una sonrisa. Miró a la chica de arriba a abajo todo lo disimuladamente que pudo y volvió su atención a las flores. - ¿Y no crees que sería mejor buscar las flores fuera de la ciudad que aquí dentro?

-Que dices..la joven le miro atenta para luego devolverle la sonrisa- eres curioso.  Al parecer totalmente confundida a la primera respuesta del joven para luego encogerse de hombros restándole importancia a los comentarios de un loco pueblerino.
-Las flores depende donde crezcan. Bueno yo me voy, aquí no hay ninguna interesante. Tomo delicadamente la falda de su vestido y comenzó a caminar para alejarse.

-Maldición este sabe algo, estoy totalmente segura de que me vio lanzar la piedra. Además evito mi pregunta, quiere decir que está protegiendo su identidad.  Siempre puedo gritar y alertar a los soldados. Quien sabe desde hace cuando me venían observando, quizás desde que hablaba con los soldados. Definitivamente están interesados en el asunto del cazador aprendido. Pero quienes son, que rayos está sucediendo aquí. Maldito perro pueblerino, asi que te cuidas de víboras, eh?. Debe suponer que soy fiel a Cail y coopero con los soldados, usare eso a mi favor.

Azure totalmente convencida que la aparición de este hombre se debía mas a un plan calculado que no a una fortuita casualidad decidió actuar. Los pensamientos iban y venían con la velocidad de un relámpago, pero en el exterior la chica se mantenía serena y jugaba sus cartas, total ignorancia del asunto y desentendimiento.

Con toda seguridad dio algunos pasos alejándose.

Aquí es donde comenzaría su ofensiva dependiendo de la reacción de este. Y para Azure solo quedaba un camino sacarlo del suyo, a pedradas otra vez o alertando a los soldados.

Mientras la joven se aleja, te percatas de que entre los arbustos se encuentra un joven inconsciente. Al parecer le han golpeado con una piedra en la cabeza.

¿Sería posible que esa atractiva joven...?

Magnus echó un vistazo a donde segundos antes la chica había estado recogiendo flores como si nada... frunce el ceño un momento y vuelve a mirar a Azure, alzando las cejas con sorpresa.

- ¡¡Eh!! - dijo, chistando a la mujer pero intentando que el hombretón de la tienda no se fijara. Al final no tuvo más remedio que seguirla e intentar ponerse a su altura. - ¡Loca, que has hecho! Ahí... ahí detrás... has zurrado a ese tipo, ¿verdad?

Ante la perspectiva de aquellas palabras que la acusaban la joven  detiene sus pasos, quedándose quieta aun de espaldas pestañeo algunas veces mientras soltaba la falda del vestido.
Volteándose hasta casi encarar al joven desconocido su primer instinto fue el de levantar la diestra para estamparla en sonora cachetada en la mejilla ajena, sin embargo algo la contuvo y una extraña sonrisa se comenzaba a dibujar en sus labios.
-Dasan.!!! Escuchas esto? Que joven tan grosero, necesita algunos modales
Negó un poco mientras esperaba el resultado de sus palabras, ella misma se mantuvo serena con una mano en la cintura muy cerca del bolsito que colgaba de su cinturón por precaución.

Al escuchar lo que Azure decía el lanzacuchillos puso cara de perro, 'ofendido' ante las palabras. - ¡Anda ya con la niña pija! Vale... "Mi estimada jóven de encomiable y exótica belleza, de perfumados pechos y dudosa honradez. ¿Podría esclarecer las dudas que asolan mi corazón tras vislumbrar como un indefenso hombre caía presa de sus encantos... y de la piedra que portaba en su mano?" ¿Mejor así? - dijo Magnus con sorna, mirando entonces a Dasan. El hombre levantó las manos, negando con la cabeza. - A mi no me mires, tipo duro, yo no le he hecho nada.

De pronto, sin que nadie lo espere un certero puñetazo deja inconsciente a Dassan. A la vez que el hombreton se desploma inconsciente contra el suelo, ante vosotros aparece una joven.

Vaya, le ataqué porque supuse que era el mas fuerte de los tres, pero no resultó ser gran cosa...

Mi jefe me ha ordenado que buscara a dos tipos raros en este pueblo, no dijo nada de tres... Y no encajais muy bien con la descripción...

Pero son estas coordenadas y no hay nadie mas por aquí... En fin, sois lo único que tengo, así que vais a venir conmigo. ¿Algo que decirme? ¿Pretendéis escapar o algo así? Si es así decirmelo y os dejo como a vuestro amigo. Rápido, efectivo y nos ahorramos complicaciones.

Magnus alzó una ceja cuando vió al grandullón caer al suelo como si una maza le hubiera impactado en toda la cara, pero 'sólo' era una chica que... ¿¡QUE LE HABÍA DEJADO KO DE UN GOLPE!?

- Eh... jeje... bueno... - miró de arriba a abajo a la recién llegada. Si el grandote había caído con esa falicidad no quería ni imaginarse qué le pasaría a él si esa tipa le diera una simple bofetada... - Yo voy contigo a donde tú quieras, guapa... -

Joderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoderjoder...

Mirando hacia Azure con gesto desafiante.

¿Algo que decir, bonita?

-Dasan..
Pronuncio entre labios frunciendo el entrecejo un poco preocupada por el bienestar del hombre, pero acostumbrada como estaba a los giros inesperados suspiro resignada acoplándose a la nueva situación y recuperando la compostura.
Ante toda respuesta extendió la diestra señalando con el índice adonde el inconsciente dormitaba.
-Supongo que ese es uno de los tipos raros que buscas, a mi también me resulto extraño y más cuando espiaba como los soldados se llevaban al segundo, no me quedo de otra que lanzarle una piedra para espantarlo con tan mala suerte que le pego y ahí esta dormitando en los arbustos, creo…
Recapacito recordando la embestida de la roca.
-El otro como dije, ya debe haber pasado a mejor vida tras el recibimiento de los soldados.
Una pensamiento revoloteo en su mente al recapitular los eventos que habían desencadenado en todo este circo.“habrá logrado escapar?”, pero el fugaz destello desapareció y la misma frialdad y distanciamiento de siempre se anido en su rostro.
-Si tu jefe te dio la descripción échale un vistazo al bello durmiente y salimos de dudas.
Concluyo respondió al gesto desafiante de la recién llegada en el mismo tono.
 

Mira con atención entre los arbustos y saca de allí al muchacho del que hablaba Azure.

Es posible que este sea uno de ellos. Iré a comprobar lo que me dices del otro, he visto hacia donde se dirigían los soldados.

Antes de irse os observa un instante.

Por cierto, me gustaría haceros una oferta que no creo que podáis rechazar. Se trata de un "trabajito". Hacerlo para mi y obtendréis mas dinero del que jamas podríais imaginar y poder, mucho poder. Tanto, que hasta los reyes se arrodillarían a vuestros pies - os dijo con una pícara sonrisa en los labios.

¿Que os parece? ¿Haréis ese trabajillo para mi? Practicamente, tan solo tenéis que entregar un paquete. Una buena recompensa por entregar un paquete ¿Que me decís?