Partida Rol por web

A pesar de estar intentando atender a Ava lo mejor que sabía, que era más bien nada, porque jamás se me había dado nada bien eso de prestar atenciones a nadie, escuché los gritos de Ryan en mitad de la pelea y durante unos instantes la piel se me puso de gallina imaginando cosas que podrían haber pasado entre ellos dos, pero al juntarme con más o menos una decena de posibilidades negué con la cabeza, pues lo mío no era tratar de averiguar aquello, pues parecía más bien un ajuste de cuentas entre ambos y era cosa suya, aunque esperaba que eso no nos salpicara al resto de ninguna manera.

El combate no se podía denominar como tal, pues prácticamente era Ryan el único que golpeaba y al menos, me quedé más tranquila sabiendo que él ganaría, que al menos él tendría la posibilidad de salir vivo de allí.

Miré de reojo a Ava y luego de nuevo a los que peleaban.

- Siguen llevándonos ventaja aunque ganemos este combate y nuestra única esperanza será Ryan.

Era difícil seguir con la moral alta en una situación así, pero me dije a mí misma lo que le había repetido a mi padre y a Chad hacía un rato, que saldría de ahí pudiendo andar por mis propios medios.

Anatoly recibió aquel brutal golpe en la espalda que le hizo doblarse de forma inhumana, algo decía al público que el ruso tenía una lesión grave.

El ojeador tenía pinta de desear salir de aquel lugar, no tenía ganas de ver aquella matanza entre luchadores, pero, quizá por profesionalidad, no se movió del asiento.

Ryan bajó del Ring y varios tipos fueron a por Anatoly que estaba K.O, trataron de estabilizarlo y de no moverlo mucho, así que lo sacaron en camilla.

El showman subió al ring y se limpió la frente con un pañuelo, los goteones de sudor eran como islotes en pleno mar.

El siguiente combate enfrentará a....

Brenda vs Leroy

El tal Leroy era un negro bastante alto y musculoso, un tipo que iba a ser dificil de tumbar. El negro subió al tatami y practicó, estrellando sus puños contra un enemigo invisible.

Cuando Ryan bajo del ring me acerqué a él y coloqué una mano en su hombro mientras sonreía.

- Bien hecho.. - Pero no quise añadir nada más porque después de lo que había escuchado, seguro que el horno no estaba para muchos bollos y yo, era una especialista en meter la pata.

Al escuchar mi nombre levanté la cabeza y miré al tal " Leroy " que para mi sorpresa no era otro ruso, sino un hermano que peleaba con ellos.

- Venga no me jodas.. un puto vendido..

Observé unos instantes, en silencio, como estudiando su anatomía y después sonreí como si no pasara nada. A fin de cuentas, la procesión siempre va por dentro.

- Deseadme suerte!

Dichas esas palabras me subí al cuadrilátero aún con la chaqueta puesta y como siempre hacía, me acerqué al que sería mi contrincante y le ofreci la mano. Era como un ritual o una forma de tantearlo, como cualquier otra.

Ryan agradeció el gesto de Brenda con una media sonrisa y fue caminando hasta donde estaba Ava.

En el medio del recorrido, se giró para mirar a Boris, el ruso.

El jefe de todos ellos y ahora si fue cuando sonrió.

- El siguiente eres tú, malnacido. - Dijo señalándolo con el dedo mientras se sentaba a un lado de Ava para ver como estaba su compañera.

Tras echarle un vistazo rápido, posó su mirada en Brenda y asintió.

- ¡Machácalo, morena! -

Leroy miró a Brenda cuando se acercó a él, era bastante más pequeña que él (claro que la mayoría también lo era) al ver que no se acercaba a malas, le estrechó la mano.

-En serio, no quiero hacerle daño a una hermana, pegame un par de veces, para hacer el paripé y a continuación te daré yo, luego déjate caer. Si tu te pones dura, yo me pongo duro aunque no quiera ¿sabes por donde voy?

Le dijo, inclinándose hacia ella, no tenía ninguna sonrisa y aquel vozarrón que tenía, no invitaba a pensar que dijera muchas bromas.

El ruso miraba el combate con mala cara, hasta que Ryan le dedicó esas palabras, el ruso escupió literalmente hacia Ryan (aunque estaba demasiado lejos para darle) y luego sonrió, un gesto de desprecio, sin duda.

-Tu estás muerto, vayas a donde vayas, estás muerto.

Le dijo Boris, en ruso.

Yo sí sonreí y lo hice agradecida por aquellas palabras, al menos por el gesto de darme la opción a poder rendirme, aunque no pensaba hacerlo ni mucho menos.

- He venido a pelear y así será. Que gane el mejor.. !

Lo dije en el mismo tono que había usado él al ofrecerme la rendición y luego me fui a mi correspondiente esquina, comenzando a calentar con pequeños y precisos movimientos durante unos instantes.

Levanté la vista hacie mi oponente y asentí cuando estuve preparada, quitándome la chaqueta y estirando el cuello como último movimiento antes de tirarla fuera del ring.

Leroy hizo un gesto con la cabeza de "no hay problema" golpeó los puños contra los de ella y se puso el protector bucal. Cuando sonó la campana, no se andó con bromas, como ella pedía, con las manos levantadas casi a la altura de la cara para defenderla, palmas mostrándolas al rival, Leroy buscó la pierna de Brenda, a fin de mostrarle su poder fisico, en plena rodilla, para "asustarla"

Agradeció que la ayudaran a bajar y que la curaran, se sentía a parte de dolorida, muy avergonzada, había perdido, había fallado al equipo.

Observó la pelea de Ryan, era realmente bueno y muy fuerte, como había conseguido doblar al grandullón ese. Pero ahora era el turno de la chica.

- Mucha suerte Brenda

Miró a Ryan y sonrió levemente, volviendo la vista al suelo.

- Siento el haber perdido.. he sido muy torpe.

su primer golpe fue directo a mi rodilla y no fui capaz de esquivarlo con la suficiente rapidez, así que a pesar de no fue lo suficientemente fuerte como para hacerme un daño excesivo, fue todo un aviso y solté una queja en alto antes de tratar de devolverle el golpe con uno de mis puños, quizás tanteando como se defendía, pero mi golpe fue demasiado pobre y lo paró sin ninguna dificultad.

- Así vamos mal Brenda, tienes que encontrarle el punto o te va a destrozar..

Aún acabábamos de empezar y quedaba mucha fiesta. El próximo golpe que diera sería más certero, seguro. Al menos, eso me decía a mí misma.

Leroy apartó el puño de Brenda con la palma de la mano, la miró como diciendole "Ya está, ríndete" pero pudo ver que aquella chica no se iba a dar por vencida, así que la cosa se iba a poner muy seria.

Volvió a golpearme de nuevo y aunque de nuevo el daño no había sido demasiado doloroso, si seguía dándome pequeños golpes al final acabaría haciéndomelo pasar lo suficientemente mal como para no poder moverme.

Pero en aquella ocasión me fijé más en que al haber usado los brazos dejaba la pierna al descubierto, así que ni corta ni perezosa levanté la pierna doblando la rodilla, como si quisiera subir por unas escaleras y descargué un golpe, quizás no con todas mis ganas, pero sí como para avisar que de vez en cuando yo también pegaba.

- Espectáculo, recuérdalo.. llevas saltando dos semanas.. !!

Leroy volvió a impactar en la chica, esta vez, castigó las costillas de Brenda con un puñetazo, pero la chica logró aliviar un poco el golpe con el codo del brazo, al protegerse. Sin embargo, Brenda vio una brecha en la defensa de Leroy que aprovechó.

Leroy dio un paso atrás, doblado de dolor, aunque su cara no reflejaba ese hecho, pero los dos luchadores lo sabían: aquel golpe le había dolido.

El luchador negro apretó bien los puños y se cuadró, flexionando las rodillas, ahora iba a ir a tope.

Quería acabar el combate cuanto antes, ya que era fuerte, pero la chica también, y no quería imaginar un nuevo golpe de ella en alguna zona peligrosa, como el vientre o el pecho.

Leroy cargó contra Brenda, se impulsó con las piernas hacia adelante, dando un pequeño salto, y dejó el puño atrás, para luego, deslizarlo contra ella, dejándolo caer contra su cara, cual maza. No se andó con virguerías de artes marciales: quiera acabar el combate ya.

Aquella vez le vi venir y casi sonreí al verlo porque aprobeché para hacer lo que debía hacer si quería ganarme a la gente como bien había dicho Chad que debía hacer e incluso mi padre..

Me desplacé hacia la derecha para esquivar su golpe, y como esta vez yo había sido más rápida, aprobeché la inercia del movimiento para girarme y quedarme mirando su espalda mientas cogía impulso para elevarme en el aire y así golpear con toda la fuerza que pude con mi pie en la parte alta de su espalda, intentando mandarlo de morros contra el suelo del ring.

Aquel golpe fue brutal. No solo por la fuerza que Brenda le propinó, sino por lo "chulo" que quedó aquel movimiento casi felino. Leroy recibió el golpe, y antes de estrellarse en el suelo, lo hizo contra la reja. Leroy estaba consciente, pero muy dañado, negó con la cabeza y tocó el ring tres veces con la mano, reconociendo su derrota.

El negro se puso en pie despacio, agarrándose contra los hierros y tomó la muñeca de Brenda para levantarla como ganadora.

2 victorias ellos contra 3 derrotas los rusos. No pintaba mal.

Tenía la respiración bastante agitada debido al esfuerzo físico que suponía todo aquello, pero al fin había conseguido una victoria desde que comenzó todo esto de las luchas " no deportivas " y tenía una sonrisa que no me entraba ni en la cara de lo grande que era.

Además, el gesto de mi contrincante fue muy de agradecer y asentí cuando cogió mi mano y la alzó, dándole las gracias por ello, pues aunque a la gente no le significara nada, para mí era el final de una pelea justa, aunque suponía que las siguientes no lo serían tanto, pues viendo los matones con los que contaban seguramente tendría que intentar esquivar golpes que podrían dejarme incluso en coma el resto de mi vida.

Mi vista se fue hasta mis compañeros y ya sin poder contenerme, di un pequeño salto de alegría.

- Buena pelea Leroy. - Le dije antes de disponerme a abandonar el ring.