Sin demasiada dificultad podeis ver un objeto en el suelo. A la altura de la puerta que da acceso al hall de salida y que se cerro antes con un sonoro portazo.
Es pequeño e inmóvil. Si hubiera estado allí antes lo habríais visto.
O se le ha caído a alguien, o lo han puesto alli...
¡Ahí en el suelo! en mitad del pasillo, ¿que es eso?
Jimmy señala en la oscuridad el objeto extraño del pasillo, mientras la mano izquierda sigue aferrada al marco de la puerta.
Un nuevo hallazgo. Y ahora que...
Desde donde estais no podeis distinguir el objeto. Algunos de hecho aun no han podido verlo por no estar en el dintel de la puerta. Pero algo si es común a todos; los latidos de vuestros corazones vuelven a acelerarse...
¿Qué ocurre? ¿Qué veis?
Al viejo Marcos se le inflama la papada mientras trata de incorporarse de su asiento. Aun así sigue sentado, se le nota cansado e incapaz de levantarse.
Apunto el haz de luz hacia el objeto que hay en el suelo, y me acerco para observar lo que pueda ser y de dónde ha aparecido..
- No entiendo por qué estoy nervioso no paro de repetirme poniendo un poco de cerebro y sentido común sobre la situación.
Rubí... Rub... yo... vámonos.
El atleta no se esfuerza en vislumbrar lo que hay en el pasillo, sus manos tiemblan visiblemente mientras las posa en las paredes como para apoyarse. Su mirada pasa de Rubí a Marcos y de estos al fondo de la habitación, el extremo opuesto al pasillo.
En los balbuceos o susurros para él mismo que siguen, se distingue varias veces la palabra "monja".
En el momento de confusion me acerco al pollo y cojo uno de los cuchillos, por si acaso...
Pasa un buen rato hasta que Rubi hace su aparicion pero cuando lo hace trata no matener para nada la calma
-¿Se puede saber que es lo que estais viendo? ¡Rick espabila de una vez! ¡Vamonos de aqui todos ya!-
Y comienzo a andar hacia el pasillo del que todos estan tan asustados y arrastro a mi novio de paso
-Vamos a ir con los demas y ninguna monja me lo va a impedir..-
¿Llevas el cuchillo a la vista o lo pillas y lo llevas escondido?
Rubí es la última en acercarse al dintel de la puerta. Cuando llega es la primera en tomar la iniciativa y ponerse a la altura de Mark Spinner en el avance por el pasillo. El único que ha quedado de nuevo en la cocina, solo, es Marcos Saenz, que hace auténticos esfuerzos por levantarse y no quedarse a solas de nuevo. Como siempre, nadie parece acordarse del octogenario. Al igual que nadie parece hacer caso a los balbuceos de Rick. Los dos únicos miembros afectados por esta casa, son ignorados en sus inconexas explicaciones, y el grupo se mueve de nuevo sin un fin concreto...
En principio lo llevo pegado al cuerpo o algo asi por que por secuencia d tiempo n podria esconderlo, pero lo hare..
Por favor. No puedo moverme.
La lastimera voz del anciano es totalmente sincera. En los últimos minutos alguien ha tratado de asfixiarle y ha estado sometido a mucha más tensión de la que ha vivido en cuarenta años de servicio bibliotecario. Marcos está viviendo unos momentos tan intensos en su vida que es incapaz de moverse.
Necesito ayuda. Por favor. Por favor.
No me dejéis solo aquí.
Y su voz temblorosa revela que ahora la casa no le atrae tanto como al principio.
... Pero de momento nadie hace caso a los ruegos de Marcos Saenz.
El grupo de jóvenes, encabezado por Spinner que porta la linterna y por Rubí, avanza por el pasillo. Rick se mueve pegaso a la pared, con los ojos como platos, escudriñando la oscuridad en busca de aquello que hace unos minutos casi le hiela la sangre...
Por favor, líbranos del mal... Una plegaria silenciosa propia de los más sensibles al espíritu de la casa fluye sin aflorar a los labios. Solo Skilton parece estar divirtiéndose mínimamente con lo ocurrido.
Tranquilo abuelo, tu descansa. Ahora te ayudo a caminar, en cuanto veamos una cosa.
Argumenta Jimmy mientras avanza con el resto por el pasillo.
A lo mejor esa cosa del pasillo es un zurullo de Rick, creo que se a cagado de miedo cuando venía corriendo. Tened cuidado que podría resbalar, jejejeje.
Elo joven habla con voz de sorna tratando de animar el percal, que dicho sea de paso no es nada bueno.
-Alumbra mas arriba..- Cojo la mano de Spinner y la subo mas arriba y hacia el centro que es donde se supone que estaba eso tan extraño de las narices que ha acojonado a todos y tambien el final del pasillo y nuestra salida....
Paso ampliamente de los ruegos del viejo, si se quiere mover que le ayuden otros, y mientras tiro del indolente Spinner hacia alante enfoco mi mirada en cada paso que va descubriendo la luz tratando de ver que podria ser eso que repta
-Venga vamos!-
Jaleo a los demas...
La boca de Rick permanece abierta, interrumpida en alguna extraña explicación hasta que se revele lo que la linterna de Mark trata de iluminar. El atleta ha dejado de balbucear y sólo mantiene la vista fija en el pasillo, ignorando el comentario del bromista Jimmy que en otras circunstancias le habría costado la nariz rota como si no lo hubiera oido.
El fornido deportista avanza lentamente, siempre un paso por detrás de Rubi.
El grupo se encuentra a mitad del pasillo. El viejo bibliotecario sigue quejándose lastimero desde la cocina, pero nadie le presta atención. Aun no es identificable el objeto desde donde estais. Demasiado oscuro... Avanzais unos pegados a otros cuando desde el exterior...
¿Chicos? ¿Qué ocurre? ¡Abrid la puerta!
Parece la voz del mayor de los Skilton que clama desde el exterior... ¿Abrid la puerta? ¿No estaba abierta? Para llegar a la puerta hay que ir al hall de entrada, y para eso hay que pasar por encima del objeto inanimado que yace en el pasillo...
La voz proveniente del exterior ayuda a desvanecer en parte el hechizo de la situación. Avanzamos Rubi y yo por el pasillo, en dirección al objeto que queremos identificar. Al tiempo que nos acercamos, contesto a la voz que nos llama
- Se habrá atrancado de nuevo. Ya sabéis cómo se abre.. les chillo esperando que vuelvan a abrir la puerta cargando contra ella.
Mantengo los destinatarios de nuestra escena. Supongo que te encargas tú de "pasárselo" a los de fuera.
Los cuatro jóvenes avanzan por el pasillo, casi unidos físicamente como una piña por un nexo común: la inquietud, el desasosiego, el temor, el miedo...
Las voces de Spinner suenan absolutamente artificiales en el pasillo de la planta baja del caserón. Resuenan secas y planas. Estridentes y... ... molestas. Molestas para la casa, que a cada minuto que pasa parece más viva y terrorífica.
La linterna en manos del intelectual tilila dubitativa en el avance, enfocando erráticamente las paredes, los cuadros de las santas, las puertas a la izquierda y las ventanas a la derecha. Las puertas... Esas puertas atrancadas que esconden habitaciones oscuras y de contenido desconocido, y que en la imaginación de algunos de los integrantes de esta expedición aparecen terroríficas y llenas de pesadillas.
La puerta que da al hall de entrada aparece cerrada. La luz de la linterna se refleja en el cristal opaco y amarillento... Esa puerta que dejamos abierta y que se cerró de repente... Y delante de esa puerta, el objeto, inanimado pero tan lleno de vida... tan lleno de muerte a la vez. A medida que os acercais lo vais distinguiendo... Parece un trapo. No. No es un trapo. Una especie de peluche, de... ... de ... ... muñeca! Es una muñeca... Una muñeca horrible!!!
La visión es aterradora. En la oscuridad, iluminada solo por la luz tétrica de la linterna, las facciones del grotesco objeto se acentúan. Un nudo se os forma en el estómago y una arcada de miedo amenaza con ascender desde lo más profundo de vuestras tripas. El pasillo empieza a dar vueltas, y el corazón parece salirse del pecho, bombeando desbocado en vuestros tímpanos. El color rojo que tiñe parte de la faz de la muñeca destaca en las tinieblas en las que estais... Varias preguntas aparecen en vuestras mentes. Preguntas salvajes cuyas respuestas tal vez no querais conocer... Esa sangre... ¿será de verdad? Y esos dientes Dios! Los dientes!!!
Tirad todos Voluntad!
Tirada: 2d6(+2)
Motivo: voluntad
Dificultad: 12+
Resultado: 8(+2)=10 (Fracaso)
juel. Nota mental... la voluntad es importante en una casa encantada.