Partida Rol por web

Aquel jueguecito aunque me estaba debilitando me hacía soñar en como me cogería a aquella criatura, aunque estaba perdiendo claramente el combate, creía que podía remontar si le daba con algo más de suerte. No cedí en mi intento de quitarle ropa con mi látigo a la vez que trataba de debilitarla, era realmente fuerte, igual había errado al intentar luchar contra ella, pero era bastante tozuda, así que seguiría intentándolo hasta mi último aliento.

-No eres la única que le gusta resistirse, aunque al final del día, me suplicarás que siga sodomizándote, ya lo verás.- dije mientras reía, aunque empezaba a estar bastante debilitada por el combate.

Una vez mas el látigo vuelve a cruzar la piel de la kyubi, esta vez arrebatando lo que le quedaba de obi. Deja al aire sus pechos, grandes y firmes, sin broncear de un tono blanco al igual que el resto de su cuerpo. Las colas se acercan a su vientre para intentar tapar un gran miembro que amenazaba con ponerse erecto cerca de su entrepierna. Sin estar preparado llegaba cerca del ombligo, no podrías imaginar que tamaño tendría al estar listo. La kyubi te sonríe y vuelve a atacar con su mano drenadora. -Deberías ser mas dulce querida, no coger todo por la fuerza.

No daba crédito a lo que mis ojos veían, se formó en mis labios una sonrisa pues estaba segura que disfrutaría de aquello, sin embargo prefería que fuera bajo mis órdenes:

-Vaya, vaya, creo que disfrutaré enormemente de tí- dije de forma entrecortada, pues el combate me estaba pasando factura, veía mi fin cerca, cumpliría mi promesa de ser así, pero no dejaría de darlo todo, pues quería llevarla con Morgana para ser recompensada, eso sí, antes abusaría de ella.

Con el ultimo latigazo notaste algo extraño en el movimiento de sus colas. Estaba ocultando su propio cansancio?
-Vamos, cuanta energía crees tener? Quiero que tengas las suficientes, aun no te he visto gemir. Responde risueña la kyubi lanzándote una vez mas su ataque.

Parecía ser que ella estaba tan dañada como yo, solo que no quería demostrarlo, su conversación me había distraido de lo que realmente importaba que era someterla, y había empleado mucha menos fuerza de lo habitual:

-Eso mismo me estaba preguntando yo- respondí dando un último latigazo- Espero que cumplas tu palabra y te sometas a mí cuando te haga morder el polvo, aunque igual te hago morder algo más mientras disfruto de tu cuerpo como mereces.

Un ultimo latigazo golpea esta vez cerca de su cuello, enrollando el cuero en el y obligando a la kyubi a arrodillarse levemente. Parecía agotada y parte de las luciérnagas se habían apagado a su alrededor. La kyubi te mira divertida sin sentir temor alguno y relamiéndose te sonríe.
-Tu ganas elfa, iré contigo. Soy una kyubi de palabra.

Estaba exhausta, el combate había sido brutal, no habíamos tenido piedad ninguna de las dos, pero finalmente y por muy poco me había alzado con la victoria, con una sonrisa caigo al suelo:

-Estuviste realmente cerca- ahora mismo estaba tan cansada que no quería si quiera abusar de ella, igual era un error pero me fiaría de su palabra- Sabes, me gustaría saber el nombre de la chica de la que voy a abusar- dije mientras me reía mientras me mordía el labio inferior y relamía le superio.

La kyubi se incorpora levemente haciendo notar sus pechos y su miembro que cada vez asomaba mas. -Mi nombre es Ahri, soy una kyubi del bosque. Una zorra de nueve colas por así decirlo aunque... Deja escapar una risita al mover sus colas y acariciarse el miembro con ella. -Se podría decir que tengo diez. Pero no uso las otras nueve para lo mismo. Por como eres diría que eres una elfa oscura. Me vas a llevar a la ciudadela tal vez? Solo he estado una vez allí y no me pareció un gran sitio como para que alguien tan dulce como yo se paseara.

Sonreí a aquella kyubi, me estaba cayendo bien, pero tenía bien claro lo que haría con ella, solo que quería disfrutar de mi victoria:

-Te explico, vengo a buscar un hada de los bosques, tengo que llevarme presa a una y que esté de buen ver. No vayas a pensar que por eso no te sodomizaré, además me resulta increíble que tu culito respingón sea virgen- dije mientras le azotaba ligeramente- Sin embargo puedo proponerte un pequeño trato, de mi sexo no te libras eso por supuesto, pero si me ayudas a capturar dos hadas, y llevarla ante mi ama, te dejaré libre de tus ataduras a tí, aunque puedes acompañarme con tu libertad si así lo deseas, te aseguro que no te aburrirás- dije entre risas- ¿Qué opinas?

La kyubi da un respingo al sentir su nalgada y ríe divertida. -De diversión no quería librarme pero....capturar hadas? Esa es una tarea muy peligrosa querida. No te la recomiendo. Adentrarse en el bosque interior es peligroso, extrañas criaturas acechan en la oscuridad de los arboles. Ahri pone un tono lúgubre pero enseguida se hecha a reír. -Básicamente que si no te he comido porque no quería ellos si que lo harán. Me has caído bien... Los ojos de Ahri brillan en un tono azulado. -Tania. Asi que te seguiré, quiero mucha diversión y me estaba empezando a aburrir de tanto diablillo. Te ayudare a capturarlo si quieres y te puedo enseñar el camino al bosque interior. Pero no se si en tu condición seria lo mas adecuado. Te he tocado bastante cariño.

Noto la visible excitación del Ahri y con una sonrisa la miro para añadir:

-Tienes razón creo que deberíamos descansar, el combate nos ha pasado factura a ambas. Tú que conoces mejor el lugar que yo, ¿Dónde podríamos quedarnos para pasar desapercibidas en este bosque?- dije mientras cariñosamente empecé a lamer su cuello dando pequeños mordisquitos a todo lo largo de este, para demostrarle lo bien que nos lo pasaríamos en algún refugio. No volvería a caer en lo que nos sucedió con la driada y sucumbir a la lujuria en mitad del bosque.

Ahri levanta su cuello dejándote hacer mientras parte de las colas rozan tu espalda con cariño, como si te atrayeran a su cuerpo. -Tengo...un pequeño refugio....pero es pequeñito.... Va diciendo Ahri suspirando con las mejillas encendidas. -En el bosque no hay lugar seguro del todo, si te vale ese...Tambien podemos ir a un lugar que te sea mas comodo...me adapto a todo. Saca la lengua y la pasa por tu cabello como si te estuviera peinando con ella, después de todo tenia parte de animal.

Cuando comenzó a lamer mi pelo le sonreí, aquella criatura era realmente rara, pero más disfrutaría de ella, me lo había puesto difícil pero no me había dejado marca alguna:

-No quiero irme sin un hada al menos, y creo que puedes ayudarme a ello, aunque se que no será fácil. Iremos hasta reponernos a tu pequeño refugio y cuando lo hagamos iremos a por ese hada, no te preocupes, te recompensaré con creces- dije mientras dejaba crecer mi miembro pues al igual que Ahri yo también tenía uno y no se me daba nada mal usarlo. 

Mientras iba de camino me entretenía de vez en cuando con sus labios, saboreándolos y degustándolos, mezclaba mi saliva con la suya a cada intento, pues podía sentir la pureza de aquel ser, y tenía unas ganas de pervertirla increíbles, aunque algo me decía que ya era bastante pervertida per se. 

-Bueno....todo se puede intentar querida.... Va diciendo Ahri conforme degusta tus labios junto a los suyos y alguna que otra cola va acariandote el miembro con deseo, era extraño ya que era suave y cálido a la vez. -Te llevare junto a las hadas, pero ya es cosa tuya capturar una.

Ahri te va guiando por el bosque continuando con sus insinuaciones y tentándote como puede ya que sus mejillas se encuentran sonrojadas por tus atenciones y tu mirada. Era curioso, mas que lujuriosa parecía juguetona, no era un ser corrupto. No al menos aun. El refugio de Ahri no eran mas que una pequeña cueva en un árbol bastante grande. Al meterse en su interior, parecía realmente un animal ya que se escurrió como si un zorro entrara en su madriguera dejándote ver su sexo y miembro con claridad antes de ser tapados por una avalancha blanca de colas. El interior era cálido y cómodo ya que el suelo estaba forrado de ramitas y hojas que hacían las veces de colchón y aislador térmico. Ahri se tumbo unos instantes moviendo sus orejitas y cola y luego te miro divertida. -Bienvenida a mi hogar.

Me relamí los labios sabiendo del delicioso plato que iba a probar, mis intenciones con Ahri era inundarla de corrupción, que sintiera realmente lo que era la corrupción, y que dejara de ser neutral en todo esto. Cierto es que la ciudad quedaba lejos pero ya la llevaría tras esta aventura. Con una sonrisa y un gesto rápido me deshice de todo me equipo y ropa quedándome completamente desnuda ante ella.

-Te dije que te sodomizaría antes de acabar el día, y siempre cumplo mis promesas, pero como te has portado bien, lo haré poco a poco. Aún así para antes de que acabe la noche acabarás con mi miembro en tu interior o si veo que dilatas suficiente, puede que algo mayor- dije mientras mostraba mi puño y esgrimía una sádica sonrisa- Trataremos de que no te duela lo más mínimo.

Aunque parecía que podía hacer frio, el cuerpo ardiente de Ahri me mantenía en calor, no tardé en deshacerme de su ropa si es que aún la llevaba y sin dudarlo tras chupar mis dedos los dirigí a sus bordes anales, no quería ser brusca así que para relajarla la tumbe en el suelo y apoyándome encima de ella fue lamiendo su miembro muy poco a poco y tocándola con la otra mano, a un ritmo lento pero constante, mientras iba haciendo presión sobre su virginal culo, primeramente con un dedo.

Las orejitas de Ahri se movían nerviosas al verte desnuda mientras su lengua se relamía los labios por aquella visión. Cuanto mas te acercabas , sus colas mas se cerraban a tu espalda como si te estuvieran abrazando para que no salieras de su abrazo. En el momento en que tu mano se poso en su culito, Ahri dio un pequeño respingo mientras separaba débilmente las piernas.
-Ñ...Ñaaaaa...no me...metas el...puño.... Va diciendo Ahri sonrojada, gimiendo levemente por la caricia de tu lengua en su miembro que crecía exponencialmente, casi hasta llegar a los pechos de la kyubi. Era una criatura mágica, no era tan extraño tener un miembro descomunal, pero no dejaba de ser algo extraordinario. -No...no toques ahí.....se siente raro... El culito de Ahri no cedía casi nada aun con la presión que ejercías. Al parecer era cierto que era virgen.

No tenía prisa alguna con aquello, sabía que me llevaría bastante tiempo llevar a cabo mi plan de sodomizarla sin hacerle daño. Así pues no me molestó, todo lo contrario me excitó aún más. Viendo la enormidad de su miembro dejé de presionar en su culo por momentos y emplee las dos manos y mi boca para hacerlo aun más completo, jamás había visto algo parecido y estaba disfrutando de lo lindo:

-Me encanta tu sorpresa, que bien escondidita que te la tenías- sonreía mientras trataba de tragar todo su lubricante y mi saliva.

Tras estar así durante un buen rato, disfrutando de aquello, embadurne mi mano con la mezcla afrodisíaca que se habái formado entre mi saliva y su lubricante para volver de nuevo a la carga con su trasero.

Ahri gemía mas por la atención que le proporcionabas a su miembro que por el contacto de tu mano en su culito.
-Ñaaaa....s...soy una kyubi....nuestras...colas son largas. Te responde sensualmente a la vez que saca un poco la lengua y arquea la espalda ya que tu dedo finalmente consigue romper parte de la resistencia de la kyubi y se adentra en su entrañas. Las colas de Ahri tapan un poco su cuerpo y te mira sonrojada, parecía que te estaba haciendo enternecer a propósito ya que su sonrisa era traviesa. -No me hagas mucho daño....que estoy cerradita... Va diciéndote con parte de la lengua sacada.-También...quiero probarte.... Extiende los brazos. -Ven....

Con una ligera sonrisa acepté su proposición y decidí cambiar de posición, aprovechando que estaba sobre ella no me costó lo más mínimo situar mi humedo sexo sobre su boca, sin dejar de lamer apasionadamente su miembro, era enorme, no quería ni imaginar lo que disfrutaría con él, así pues sin sacar el dedo que tanto trabajo me había costado introducir en su estrecho ano, no dejo de subir y bajar por su largo miembro con mi lengua, la cual no deja ni un solo lugar sin saborear y sentir:

-Espero ñññ.... que seas muy limpitaaaa..... y me lo dejes como nuevo......- dije mientras hacía pequeños esfuerzos por no asfixiarme con su miembro en mi boca. Poco a poco incrementé el ritmo, subía y bajaba con más intensidad, y con mi mano libre no dejaba de moverla a todo lo largo y ancho de él- Ni se te ocurra correrte fuera- dije mientras le sonreía- Lo quiero dentro de mí.

Las colas de Ahri se acercaron a los labios húmedos de tu sexo separandolos suavemente para dejar caer el néctar que guardaban. Con voracidad, la lengua de la kyubi se adentro en tu sexo como si fuera una serpiente, degustando tus paredes interiores antes de sacarla y lamerte por fuera como si fuera un cachorrito limpiándose la pata.
-ñaaaaa...soy muy limpia...te dejare bien limpita aquí antes de ponerte bien blanca.... Gime suavemente Ahri volviendo a su tarea de lamerte el sexo, pasando fugazmente por tu miembro, el cual estaba siendo acariciado por las delicadas manos de la kyubi. Aunque habías conseguido introducir el dedo en su culito, Ahri movía inquieta su cintura, como si aun se estuviera acostumbrando. Pero se iba aflojando poco a poco, ya casi podias moverte con tranquilidad.
-Te gusta mi miembro? Pregunta traviesa soltando un largo gemido en tu sexo, dejándote sentir su cálido aliento antes de su lengua. -Si lo quieres es tuyo...pero te podrías romper si te lo comes todo....