Partida Rol por web

Ato fuertemente la cuerda a los caballos y los asusto con brío para que salgan al galope.

Wulwaif azuza a los caballos y estos comienza a tirar con fuerza. Pro unos instantes no parece suceder nada pero pronto se empieza a escuchar como la madera de la casa cruje y los bandidos del interior comienzan a gritar con fuerza asustados. De repente con un fuerte estruendo las paredes de la casa se tuercen y el techo se derrumba provocando una fuerte polvareda

Cuando el polvo se despeja un poco podeis ver como dos de los bandidos se intentan levantar quitandose trozos de madera de encima mientras el otro sigue tumbado en el suelo muerto o inconsciente.

Entro corriendo en los escombros de la casa y golpeo con el pomo de la espada en la cabeza a uno de los bandidos desarmados que se están incorporando para dejarlo inconsciente.

Whilhem prefería dejarlos inconscientes para atarles las manos y cuando despertaran les interrogaría pero pocas excusas pueden defender los si mis compañeros les cogieron infringiendo un acto tan malévolo y vil contra esa niña y las propiedades ajenas. Por eso Whilhem imito el gesto de Wulwaif acercando se al otro bandido y le golpeo con el mango de la espada en la cabeza. Whilhem pregunto a Baelrick "¿qué tal esta la niña?".

Tristan observa la escena y ríe, "se lo tienen bien merecido" y luego se dedica a observar la zona por si se acercase algún otro peligro o si puede descubrir alguna cosa más.

Al oir como la casa comenzaba a crujir, knavar se alejó dando un par de grandes y rápidas zancadas y girarse jsto a tiempo para ver como la estructura de la casa se colapsaba y se venía abajo. Cuando la polvareda se levantó, el explorador vió a dos figuras tratar de levantarse, pero Whilhem y Wulewaif se adentraron para inmovilizar a los dos supervivientes que quedaban, en principio dado que en el suelo se encontraba la figura de otro de los bandidos. Con paso firme Knavar se acercó a éste tratando de determinar se estaba vivo o muerto, pero sin bajar la guardia, asi que se acercó a él y le pinchó suavemente con su acero para luego tratar de tomarle el pulso.

Baelrick asistía a toda la escena más como espectador que como actor. Por un lado estaba herido pero por otro era imperativo conseguir un tratamiento para la niña.

¿Alguien se viene de vuelta conmigo para llevar a esta niña? No sé si durará mucho.

Rapidamente y propinando sendos golpes en la cabeza a los bandidos los dejais inconscientes y a continuación mirais si el estruendo ha atraido a alguien mas que pudiera encontrarse en los alrededores. Pero por lo que parece el lugar sigue en calma.

El problema es que nos sabes a que se debe el envenenamiento asi que no eres capaz de averiguar cual puede ser el antidoto o como tratarla. La muchacha parece bastante grave y pro ahora lo unico que se te ocurre es que deberia de tomar algun liquido ya que parece bastante desidratada. En cuanto al tiempo de vida que le queda no puedes saberlo pero en su estado actual no le das mas que un par de dias.

Después de que Wilhem y Knavar me ayudarán a dejar fuera de combate a los Bandidos sobreviene una gran calma. Sólo se oye la acelerada respiración del malherido Clérigo que tiene en los brazos a la chica. Funcionó... Me siento extrañamente orgulloso de mí mismo mientras repaso mentalmente lo que ha ocurrido, hasta que la situación me devuelve a la realidad.

Hecho un último vistazo a los Bandidos para asegurarme que no molestarán en las próximas horas y me encamino hacia Baelrick para ayudarle con la chica.

- Tristán cúbrenos. Si se acerca alguien... dale la bienvenida. - Le digo al arquero mientras me arrodillo junto al clérigo y la chica.

Debemos averiguar qué le ha envenenado. Sin eso no puedo adivinar ningún tipo de antídoto.

Baelrick se mostraba completamente ajeno a la situación con los bandidos o incluso a su propia condición de herido.

Tenemos que darle agua, los humores del cuerpo deben mantenerse estables. Si los animales fueron también envenenados probablemente el veneno esté en el agua. Hay que buscar los lugares de donde bebían.

El clérigo agitó delicadamente a la niña para ver si conseguía hacerle hablar.

Niña, ¿dónde está el pozo o la fuente de agua?

- Baelrick, ¿tú estás bien? Pareces mal herido... - Pregunto al Clérigo. - Yo no se nada de venenos ni de... ¿humores? Esto es lo tuyo... ¿qué hacemos? - Digo mientras le ofrezco mi cantimplora.

Menuda pérdida de tiempo -  pienso en mi fuero interno, sin furia, pero con algo parecido al resentimiento que sin embargo solo lo demuestro con un largo suspiro. Mientras todo sucedía, no paro de mirar a la niña e intento comprender que ocurre con ella y los animales. Para ello, deberíamos cazar alguno de los animales contaminados... como el que vimos antes - respondo a Baelrick volviendo rápidamente a mis pensamientos.

Whilhem dijo en voz alta "atar a los bandidos yo tengo que curar a Baelrick". Enfundo la espada y se fue corriendo hacia Baelrick, cuando llego a él le pregunto "¿qué tal te encuentras?" "voy a intentar curarte". Whilhem le pone las manos en la herida a Baelrick para curarle.

Al venir Wilhem como un tornado a curar a Baelrick me aparto para dejarle trabajar. Envaino la espada y me arrodillo junto a la chica, no llego a tocarla para no alarmarla después del incidente ocurrido. No creo que quiera mucho contacto con hombres en estos momentos.

- Hola pequeña. Ya estás a salvo. - Le digo con voz amable y una sonrisa. - Estás personas van a intentar curarte ¿de acuerdo? Yo me llamo Wulwaif, aunque puedes llamarme Wulf. ¿Tú cómo te llamas?

- Irina, Irina... ¿Mis padres, mi familia? - murmura la muchacha casi sin fuerzas mientras bebe un poco de agua de la cantimplora de Wulwaif. Mientras Whilhem pone su mano sobre Baelrick e implorando a su Dios intenta que sus heridas se cierren.

Examinas a la muchacha que esta palida casi amarillenta, muy delgada, varios mechones de pelo le han caido de la cabeza y presenta varias llagas de feo aspecto en su piel. No sabes que le sucedee exactamente pero los sintomas son parecidos a los de los animales pero ¿que puede haber afectado apor igual a la gente del pueblo y del bosque? ¿Quizas esos sacerdotes que estan en el pueblo sepan algo mas?

- Tienes un nombre muy bonito Irina. - Le dedico una amable sonrisa. - No te preocupes pequeña, seguro que tu familia está bien. ¿Podrías decirme que ha pasado aquí? ¿Dónde está todo el mundo?

Justo después de que le pregunte Wulwaif, sigo yo: No te preocupes pequeña, los encontraremos - digo con una sonrisa plácida pero rara para mis compañeros que no suelen verme sonreir - pero ahora necesitamos saber que ha ocurrido en el pueblo y que te ha ocurrido a tí - le digo señalando, sin tocar, unas llagas con mal aspecto que hay en su brazo y por todo su cuerpo; mientras que le toco su mustio pelo que parece caerse al mínimo roce. ¿Podrías decirnos de dónde obtiene el pueblo agua? ¿De un lago tal vez?

- Si padre, ire a buscar el agua al pozo - responde la niña con la vista medio desencajada - pero dejame descansar un poco que ahora no me encuentrobien. Creo que tengo un poco de fiebre, llama a madre por favor y dile que venga -