-Pasemos primero por la granja de la viuda, no quiero pasearme con el pueblo con las gallinas, luego podemos ir al alguacil.
- Conforme. Aunque a la tuerta esa podríamos entregarla muerta -
-Aprecio tu sentido de la poesía, pero no es el momento... tendrías que hacer algo con tus problemas de carácter.
La granjera se alegra mucho de veros, bueno, se alegra de ver parte de sus gallinas recuperadas y tras meterlas en la granja ya reformada de los destrozos os suplica que acepteis un buen pastel que estaba cocinando en el horno.
- No tengo mucho dinero para daros por vuestra valentía. Los pocos ahorros que tenía los gasté en los destrozos que hicieron esos malnacidos. ¿Ogros decís que fueron? que miedo, hace años que no veo alguno tan cerca de Lomallana.
Aceptad de buen grado el pastel, por favor, un humilde detalle por mi parte.
Tras multitud de agradecimientos os despide con el pastel en vuestras manos, calentito y con muy buen olor.
Adiós señora, gracias por la tarta. Una vez en camino, cojo un pedazo de tarta y lo empiezo a devorar. Comed chicos, no se como aguantáis despues de el día de caminito que hemos hecho sin probar bocado...Aaaah! que bién me ha sentado -digo notablemente más relajado-cogeré otro poco, bueno..nom nom...vamos...nom nom...al alguaci..cough..al alguacil?
- No creo que puedas prescindir del dinero - digo con calma - no creo que yo lo necesite, puede que el paladín lo quiera para su orden -
Acepto la tarta en silencio
La apetitosa torta mojaba de deseo la boca del clerigo que sin pensarlo dos veces arrebata de las manos un gran pedazo de aquella esquicites.
Venga hombre que el camino a sido soberbio !!! ...... ñom ñom ñom ñom !!! .....!!
Pero que torta màs rica !! .... deberia casarme con la viudita jejejejejejeje !!
Luego de un par de mordiscos descomunales el humano siguiò a sus dos compañeros encaminados a la recompensa prometida.