Partida Rol por web

Agarro las monedas Celeste y Naranja y se las paso a Lalaith, mientras, observo mejor la que ya tenía en la mano (azul marino) tratando de reconocer algún indicio sobre qué es

-Dejadme hecharles un vistazo

Por mucho que me concentro no consigo averiguar nada ni del texto ni de los medallones.

-Vaya, tenemos la cosa dificil, esto está demasiado encriptado, a ver si los demás pueden ayudar.

continuo mirando absorto la poción de invisibilidad hasta oigo mi nombre pronunciado por Alexander aunque no se de que hablaba. Me acerco curioso a ver como fuerza el cofre. Va a cobrar por un trabajo que no ha realizado? pienso al verle guardar con parsimonia las monedas del mago.

 Kraull se levanta y se inclina levemente par aluego dirigirse donde las prostitutas y la madame. Y se apoya en la pared junto a la celda de Natalie.

-Hola preciosa, se está bien ahi dentro?

Se cruza de brazos, apoyandose con el hombro en la pared y mirando al interior, su voz dulce ahora era fria y afilada como dagas. Podria dañarla y no lo pensaria dos veces antes de hacerlo.

-Parece que hoy hará frio.

 Sin terciar palabra Natalie te escupe en la cara y Elise te increpa con insultos que para ti son más un halago que otra cosa. La madame se pone delante de las chicas con mirada asesina, todas tienen ese brillo de furia contenida en sus ojos. Acabarás pagando por esto maldito bastardo! 

Los insultos de las rameras se entremezclan con llantos y caras de impotencia. Se sienten traicionadas, especialmente madame Sirula a la que habías seducido con tus encantos.

Uno de los hombres de Earm se acerca a la celda. Guardar silencio sucias perras! Dentro de un rato comenzará la diversión dice el hombre con una sonrisa y aires de superioridad. Estaba claro que las prostitutas no se lo iban a pasar bien...

 Kraull alza una mano para que el otro hombre calle y mira a Sirula que se pone entre las chicas y él, y mete el gran brazo, sin previo aviso por entre las rejas y coge la pechera de la mujer, acercandola hacia él y levnatandola del suelo, apretandola contra lo barrotes.

-Mas respeto, Mujer, a no ser que quieras ver mi espada empalando a tus muchachas. Acercame a Natalie, o yo mismo entraré.

La voz del Paladin se hizo grutural, sus claros ojos casi se volvieron negros como la mismisima noche, un halo de oscuridad y maldad lo rodeaban, y se sabia que no habia juegos aquel ia, estaba dispuesto a derramar la sangre. y con un placer que jamas hubiera sentido.

 Otra...otra vez Natalie?? la madame tartamudea y, horrorizada, mira hacia atrás, hacia Natalie. Hace acopio de fuerza para hablar contigo y mantenerte la mirada Qué... qué quieres de ella? Por qué tan...tanta obsesión con Na...Natalie? La madame se querda muy extrañada, ya es la segunda vez en ese día que requieres la presencia de su camarera aunque esta vez no ha sido una petición tan pacífica como la de esta mañana. Ante tu evidente sed de sangre Natalie se acerca a los barrotes. Por favor no le hagas daño a ninguna. Si me quieres aquí me tienes.

 Kraull sonrie macabramente ante la respuesta de la Madame y luego por el acercamiento de Natalie.

-Dame tu medallon

Dice sin soltar a Sirula, ahogandola levemente al tenerla aun con los pies fuera del suelo. Apretada contra los barrotes.

...O ella atravesará los barrotes sin tener que abrir la puerta.

Imagino la imagen de Sirul quebrando sus huesos ante la fuerza del paladin...¿Seria capaz de hacerlo? Quizas no lo consiguiera pero solo la idea le gustaba.

-Damelo...ahora!

Sus palabras no vacilaban, eran lentas y concisas. Pesadas cono rocas sobre Natalie.

Tratáis de descifrar los símbolos que ponen en el documento pero ninguno lo consigue. En cuanto a las supuestas monedas tampoco conseguís adivinar nada que sea relevante. ¿Qué hacéis a continuación?

Natalie saca rápidamente el medallón y te lo da. Aquí lo tienes, por favor, no nos hagas daño

 Kraull suelta a Sirula y coge el medallon.

-Gracias Naty

Se acerca a los hombres que custodiaban alas chicas.

-¿Que planes ahi para con ellas?

Dijo mirando hacia atras con una sonrisa macabra, y una mirada intimidatoria.

 Uno de ellos mira el medallón y después te mira a ti. La idea era toturarlas hasta que alguna confesara quién es Natalie y luego hacer lo mismo para que la chica soltara eso. Dice señalando al medallón. Pero ahora todo depende de lo que el jefe nos ordene hacer con ellas. Eso si, está claro que nos divertirmos un poco si sabes a qué me refiero te dice guiñandote un ojo. Otro de los hombres lo interrumpe. Ya que has hecho buena parte del trabajo llevale ese medallón a Earm. Te dice señalando la puerta que da acceso a su despacho.

 Krauñll asiente y sonrie.

-Disfrutad de ellas. Pero no la strateis bien, no se lo merecen

Dicho esto, guiña un ojo a la chicas y se dirige a la puerta en busca de Earm. Con el medallon en sus manos, y una sonrisa en sus labios.

Este no era mi día, un poco frustrado me enfrasco en mis pensamientos, rebuscando en lo más profundo, por si se me había escapado algún detalle que nos ayudase.

¡¡¡Un momento, Si que conozco estos medallones!!!! hace muchísimo tiempo, por eso me ha costado tanto.

 Al entrar de nuevo en el despacho de Earm ves que el elfo se sorprende al verte. No te esperaba tan pronto... enseguida repara en el medallón que llevas en las manos y se le ilumina la cara. Parece que le has ahorrado tiempo a mis muchachos con una velocidad pasmosa coge el medallón y deja caer encima de la mesa unas monedas por valor de 250 de oro. No debería dartelas pero...cojelas y vete, todavía tienes trabajo que hacer, aun falta un medallón... y no vuelvas sin tener información de lo que esos forasteros pretenden hacer. se gira para observar el medallón y con un movimiento de mano te invita a que te marches del lugar.

 Kraull coge la smonedas y se va del lugar por donde vino para salir a la calle y dirigirse donde sus compañeros, si habia tardado demasiado, ahora deberian estar en casa de Nestor, por lo que si dirige al acasa del mago muerto, pensando en como quitarl el medallon a Lalaith, no seria difiil, sus palabras y su bifida lengua harian todo el trabajo.

-Preparate elfa, te daré lo que ningun elfo puede darte...pasion

 Lacross vuelve a centrarse en la lectura del documento cifrado y por más que lee e intenta identificar los extraños símbolos, no consigue distinguir nada. Luego se pone con las monedas, le cuesta bastante reconocer los emblemas, pero al final lo consigue. Se trata de los emblemas de las principales deidades elementales. No sabe exactamente a quién pertenece cada símbolo pero tiene claro que el de la diosa de la tierra, Atenas, no está entre ellos. Para qué sirven esas monedas o con qué propósito las guardara Nestor es algo que desconocéis.

El enano, ve la actitud del elfo, no cree que sea lo justo quedarse con esas monedas, pero prefirio no decir nada, no queria ocasionar mas disputas que las que ya existian en el grupo. Por lo que centro su atencion en los otros objetos que habian dentro del cofre.

 Mauricio, siente curiosidad y aunque no tenga demasiado conocimiento sobre simbolos, pide que le presten las monedas. Al verlas comprueba sus sospechas, no se le ocurria ni en lo mas minimo sobre que podrian ser. Luego de devolver las monedas a Lacross, decide investigar el mapa, pero tiene muy pocas esperanzas de poder saber lo que dice, y para su decepción sus sospechas se vuelven a confirmar. -No se que significa nada de estos simbolos - dice con su habitual gruñido - Pero creo que debemos actuar lo antes posible.

 Te diriges sin perder más tiempo hacia casa de Nestor. Al llegar te encuentras la zona bastante tranquila, no como el agetreo que había por la mañana. Te acercas a la casa y ves la puerta abierta. Dentro están los demás...

 Mientras estáis centrados en vuestros quehaceres veis que Kraull asoma por la puerta...