Partida Rol por web

Los Monjes de la Nada

9 - Cuando la oscuridad acecha

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03/03/2008, 20:18
Melegat Ansey

Los hombres de armas discutían entre sí el plan a seguir, y como portavoz de la gente llana, Illianna exponía su teoría sobre los monjes encontrados anteriormente, lo que devolvió a Mélegat a la lucha en el mesón contra aquél ser.

Cada cual tenía su tésis sobre la forma de actuar del ejército que aguardaba en mitad del camino, pero ninguna de ellas tranquilizaba al buen minero, excepto la idea de hayar refugio tras las seguras empalizadas de Conira...ya no se trataba de salvar a las gentes que se encontrasen en su interior, sino unirse a ellas para no permanecer ni un minuto más en los bosques, a merced de cualquiera de esos engendros que pululaban por la tierra con toda la naturalidad del mundo.

Cuando Deron comenzó a avanzar hacia el Cerro del Águila, Mélegat no pudo hacer nada sino seguirle, a él y a Ayron Derkbal, con el fin de contemplar desde allí arriba la situación del poblado y decidir si era conveniente acercarse a él...o por el contrario...habría que darlo por perdido...

Si esto último sucediese, ya sólo quedaría ascender a los Montes Perdidos, donde parecía encontrarse el orígen del mal que ahora avanzaba serpenteante. Sin duda ese era el objetivo más adecuado si se pensaba con la mente en frío...subir allí, al centro de todo...ya que era más que seguro que ir a Conira solo sirviese para retrasar aún más la marcha...pero en estos momentos, con la lluvia empapándolo todo, la noche a punto de caer sobre ellos, y la sensación de que en cualquier momento miles de criaturas diabólicas podían salir de cualquier parte y darles muerte...lo más sensato era buscar refugio en Conira.

Mélegat encaminó su montura hacia el sendero por el que comenzaban a subir los dos guerreros.

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03/03/2008, 20:29
Illianna Sondrent

Illianna se quedó a la espera, y dejó que los más experimentados tomaran las decisiones. Su destino estaba unido al del grupo, y en él, al de su hermanastro. Brúnil. De modo que dejó que él, que entendía tanto el punto de vista de los soldados como el de ella, se pronunciara por los dos.

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04/03/2008, 00:26
Deron Nisha

Notas de juego

Pues adelante, master; nada que añadir, dado que Deron ya partió.

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05/03/2008, 09:03
Director

Con el recién llegado Deron Nisha a la cabeza el grupo comenzó el ascenso al Cerro del Águila bajo un fuerte aguacero que no daba ni pedía tregua alguna. A pesar de la cobertura parcial que ofrecían los árboles el agua no dejaba en ningún momento de acosarles, tanto desde arriba como desde abajo, pues con la acumulación de fango y la pendiente de la subida los caballos trastabillaban continuamente, salpicando de barro a quien venía detrás.

El capitán DeValin se quedó rezagado esperando a los tres jinetes y comenzaron la subida poco después que el grupo principal.
Calculaban que no les llevaría demasiado tiempo llegar hasta la cima, aunque los instantes pasarían lentos, como un tiempo de convalecencia, hasta que pudieran ver desde la atalaya la situación real que les aguardaba.

El sendero se fue aumentando su pendiente y el suelo bajo ellos se hizo cada vez más pedregoso, no obstante no fue necesario descender de las monturas para poder alcanzar su destino. Tras un tramo especialmente complicado desembocaron en un claro al fondo del cual se divisaba ya el refugio en forma de modesta cabaña. Ante ella se encontraban claramente visibles los restos de aquellos hombres que habían atacado a Deron y a Ayron, ahora desparramados por la tierra y mutilados en su mayoría.

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05/03/2008, 10:46
Illianna Sondrent

A medida que iba ascendiendo por la pendiente embarrada y resbaladiza, el frío en su piel y la lluvia calando la ropa, Illianna iba sintiendo como el cansancio iba haciendo mella. También su caballo lo notaba, aunque orgulloso y de casta no bajaba la cabeza, su andar se hizo más inseguro, y al entrar en el terreno rocoso alguna piedra suelta le cambió el paso.

Cuando llegó a la cima, por tanto, no fué extraño que el alma de la muchacha se llenara de tristeza y angustia, a pesar de que ya era la segunda de las escenas parecidas que en pocas horas presenciaba. La matanza había sido brutal, los cuerpos destrozados se encontraban esparcidos en una sangrienta mezcla, pavorosa.

En silencio observó a los dos hombres que habían luchado contra ellos, que probablemente habían visto la muerte de cerca, y que ahora iban en cabeza, intentando olvidar el dolor.

En su mente por un segundo revivió su propia muerte, la que había sufrido en manos del Monje. Se volvió a sentir sumida en la horrible nada, vió su propia sangre esparcerse por el suelo, teñir las piedras. Se estremeció. Rozó con la punta de los dedos la cicatriz plateada de su cuello, y la rosa.

Y siguió adelante.

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05/03/2008, 13:50
Melegat Ansey

Superadas las dificultades del empinado camino,comienzan a llegar a la cima los primeros miembros del grupo.

Mélegat no disimula su satisfacción por haber dejado atrás el abrupto sendero, pero la visión de los cuerpos cercenados de varios hombres le hace abandonar cualquier mueca de felicidad.

Desmontando del caballo y hundiendo sus botas en el barro, el hombretón se apresura a encontrar una posición privilegiada desde la que poder observar desde las alturas sin ser visto...

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05/03/2008, 20:44
Dammeryn

Dammeryn pasó la mirada por ellos y los compadeció. Muchos fueron buenos hombres con un final indigno. Pero así eran las cosas.

Ahora no quedaba más que una misión, un destino en el camino. Hurtó la vista de los muertos y la volvió a los vivos, a Conira, y luego al ejército de enloquecidos que esperaba comandado por seres imposibles. Tenía en la cabeza la misma idea...engañar al enemigo para atraerle hacia una trampa.

- Si dentro de esta cabaña hubiera algo que prender podríamos pensar un plan. Una empalizada natural, una trinchera, un lugar donde hacerles caer y luego quemarlos...pero no hay mucho tiempo.

El soldado pasó la vista aquí y allí. Tenía que saber de qué disponía para que su mente ideara algo factible.

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05/03/2008, 21:25
Nhadia Demialt

Aunque hubiese deseado irse ante las palabras del Capitán la muchacha permaneció con el grupo, no era capaz de quitarse sus palabras de la cabeza, a pesar de la intensa lluvia y del peligro del camino, continuaba hacia arriba mirando de vez en cuando tras de si, para tener a De Valin bien vigilado…

Quien sabe si se da la opción de acabar con tu vida, miserable, no dudaré en empujarte colina abajo y reirme a carcajada limpia. Seré como tu sombra…

Se había olvidado de los extraños monjes, ella también se había cruzado con uno… aquellos ojos… y al que corto el cuello… extraño, parecía que aún muerto volvía a la vida. Algo raro sucedía, aunque de momento no parecia llamar la atención de Nhadia, no mientras su pensamiento estuviese lleno de ira, y sus manos buscasen sangre

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05/03/2008, 23:32
Ayron Derkbal

Los cuerpos mutilados seguían en el mismo sitio donde los había visto por última vez, pero mis ojos se alzaron para buscar el lugar por el que había desaparecido la criatura voladora que había provocado esos estragos...casi temí verla aparecer para continuar la matanza, y esta vez ellos serían el objetivo.

Pero no apareció, sólo podía vislumbrar las nubes negras que seguían descargando con furia su contenido sobre ellos y todos los terrenos circundantes...eso al menos les daría una pequeña ventaja si tenían que contenter una carga, pues la embestida es menor si no se puede avanzar con celeridad. Aún así, tanto el número de componentes de aquel ejército, como la locura que embargaba a lo que sin duda enviarían a atacar Conira, les ponía las cosas inclusos más oscuras que el techo que ahora mismo les cubría.

Al llegar junto a la cabaña desmonté, y me dirigí agazapado hasta el lugar que me permitiese observar detenidamente a las fuerzas con las que deberíamos enfrentarnos....cuando estaba a punto de llegar a mi destino frené mis pasos....me agaché, y recogiendo grandes puñados de aquella tierra anegada, la utilicé para cubrir mi armadura...lo que menos nos convendría era delatar mi presencia por un simple reflejo en el bruñido metal.
Cuando me encontré satisfecho, avancé nuevamente y pude observar lo que me rodeaba.

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06/03/2008, 04:30
Deron Nisha

Cuando el resto alcanzó lo alto del cerro el experimentado explorador ya había llegado y esperaba impaciente, tratando de cortar la tormenta con su mirada y destilar preciosa información a pesar del endemoniado clima.

Con ojos acostumbrados a mirar en la distancia, Deron volvió a observar el terreno circundante, atento a cualquier variación en la estampa que lúgubre se desarrollaba en el valle. Su yegua piafaba y se ladeaba inquieta, claro reflejo del desasosiego de su jinete, que vadeaba entre el impulso de cargar sin sentido contra el ejército abrumador que bien sabía que imaginaba arrasando Conira y asesinando a sus vecinos, y la paciencia del oficial experimentado que bien sabe la diferencia entre unos segundos de estudio y una valoración estratégica a ciegas.

Los cascos de la montura evitaban inconscientemente los cuerpos desmembrados que su guía trataba de evitar con la mirada. Había caras conocidas allí... caras que Deron no quería grabar en sus retinas en aquel lamentable estado. Demasiadas almas se habían escurrido entre sus manos temblorosas en el campo de batalla; no necesitaba añadir más retratos a su galería de pesadillas.

Notas de juego

No sigo hablando, por si algo ha cambiado abajo en el valle: no quiero meter la zanca, que el master no lo ha descrito.

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06/03/2008, 09:23
Director

Los cuerpos de los caídos fueron mudos testigos de su avance por el claro que conducía al refugio. Una vez allí desmontaron y se dispersaron para otear los valles y comprobar el estado de la situación. Temían haber llegado demasiado tarde, temían por las vidas de familiares y amigos que, protegidos únicamente por una empalizada de troncos y unos pocos soldados, poco podían hacer frente a un ejército agresor como aquel, si bien no demasiado ingente en cuanto a su número, si que era temible por su hálito de corrupción.

Sin embargo, cuando finalmente pudieron observar la escena que se mostraba a sus pies, el alivio invadió sus corazones como un torrente al que nada puede detener. Obtuvieron un consuelo inestimable para sus almas castigadas al comprobar que la empalizada seguía en pie, que el pueblo no se encontraba sumido en el caos y el saqueo, que sus casas no ardían y que sus seres queridos no habían sufrido daño alguno.

Resultaba evidente aún desde la distancia que no podía decirse que en pueblo reinara la normalidad y la calma, pues las puertas permanecían cerradas y habían sido reforzadas en su cara interior. Varias patrullas de vigilancia recorrían su perímetro, formadas por parejas en las que se mezclaban un habitante de Conira y un soldado del rey. No había actividad en las calles, de ningún tipo. Pese a la tardía hora lo normal habría sido que algún carro transportara las mercancías del campo obtenidas aquel día, que algún rebaño regresara a su cerca, que los hombres volvieran a sus casas y de las chimeneas de éstas ascendieran hasta fundirse con las nubes el humo del hogar y los aromas de la cena. No era así. La quietud y la soledad lo envolvían todo con un manto de pesimismo, pero estaban bien, estaban vivos. Eso era lo que importaba.

De los dos grupos de hombres armados que habían divisado hasta el momento no quedaba rastro alguno. No se les veía por ninguna parte.

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06/03/2008, 14:12
Melegat Ansey

-¿Dónde demonios está ese ejército del que habláis?.

Mélegat susurraba intentando suavizar su vozarrón mientras se dirigía hacia Ayron Derkbal, que yacía agazapado como una lagartija embarrada junto a él.

Su atención había ido cambiando en varios puntos, primero se centró en Conira, pero al ver que no ardia en llamas y los portones estaban cerrados a cal y canto, intentó divisar al ejército del camino, pero no había ni rastro de él, lo cual sumado al inquietante acoso de la lluvia no hacía sino ponerle más nervioso aún.

Con una rodilla hincada en el barro y su cabezón pelirrojo husmeando entre unas rocas situadas al final del claro, Mélegat aguardaba la respuesta del caballero.

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06/03/2008, 16:55
Illianna Sondrent

-¡Gracias a los Dioses!

Se había acercado al margen del rocoso borde que daba a Conira, y sus ojos estaban recorriendo con rápidos barridos de un lado a otro todo el pueblo. Así que lo primero de lo que pudo darse cuenta fué de que todo parecía en calma. Y más que eso, no era la calma de la muerte, o de la destrucción. Había espera, cierto, y miedo. Pero todo estaba aún íntegro.

La empalizada estaba en pie, y las puertas firmes, y cerradas. Las calles no tenían el aire habitual, pero tampoco parecía que ocurriera nada malo, nada de lo que ella temía ver.

Suspiró, su alma agradecida. Localizó los tejados de piedra, madera y paja de familias que conocía, el molino, el taller del herrero, y, aunque ningún hilo de humo salía de él, también el embudo del horno del panadero... Todo estaba intacto.

Se giró gozosa hacia los demás, y vió entonces a Melegat arrodillado junto a Ayron, ambos mirando hacia abajo, donde probablemente debería encontrarse el ejército que debía estar esperando el mejor momento para atacar.

No tenía ella perspectiva desde donde estaba, así que se acercó a ellos, con cuidado para no asomarse y ser vista, puesto que ellos habían tomado tal precaución. Pero, antes incluso de llegar, la voz de Melegat, gruesa a pesar de estar susurrando, le disipó las dudas...

-¡Qué dices! ¿No están esos hombres ya ahí abajo...?

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06/03/2008, 23:53
Deron Nisha

-No lo comprendo... - comenzó Deron sin entender, mientras descendía de Nocturna apresuradamente, para corretear de un lado a otro observando -¿Una celada? No tiene sentido; su superioridad es abrumadora... ¿O la calma que precede a la tormenta? Quizá las gentes de la aldea puedan explicárnoslo cuando descendamos.- sugiere Deron regresando hacia su montura -Voy a descender. Necesitamos información directa sobre lo que ha ocurrido y aquí no la conseguiremos. Si ese batallón que observamos se ha ido, el rastro será claro a pesar de la lluvia. Veré hacia dónde se dirigían y luego decidiremos. ¿Qué diantres pasa en esta región últimamente?- pregunta a la lóbrega luna teñida de humedad el explorador, mientras monta de nuevo.

Deron se gira hacia Ayron y le indica, tocando su cuerno:

-Será mejor que permanezcáis aquí, por si fuera una trampa. Si es seguro, tocaré a reagrupamiento. Si nio lo es, será retirada.- decide el jinete, antes de encararse al camino de descenso del otro lado de la ladera.

Notas de juego

Si no hay más que decir, me voy a ver qué hay.

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07/03/2008, 10:32
Niklos Vénesit

-¡Gracias a los Siete Dioses que todo está bien! Tras todo lo ocurrido, al menos parece que no morirá nadie más hoy.

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07/03/2008, 10:34
Brúnil Sondrent

Brúnil miró a su hermana con un evidente gesto de alivio en su expresión. En Conira vivían muchos conocidos, amigos, compañeros... el golpe habría sido durísimo.

El peligro no había pasado pero parecía que se les concedía una tregua.

-En cuanto nos aseguremos de que todo está bien en el pueblo quiero ir a por los muchachos. No me gusta la idea de que estén más tiempo sólos en la propiedad y no me perdonaría que les ocurriese algo estando nosotros fuera.

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07/03/2008, 21:14
Illianna Sondrent

-Claro, Brúnil. ¿Temes que...? Oh, no, espero que no...! Debemos averiguarlo en seguida, aunque no sé qué es más seguro, quizá traerlos a Conira sea arriesgado, quizá una granja solitaria pasa más desapercibida, y la dejarán en paz...

Illianna conduce a su caballo de las riendas hasta donde está su hermano, y señala el pueblo, tras la empalizada.

-¿Esperamos pues a DeValin, antes de seguir a Deron? No creo, por lo que se ve, que haya más peligro allí que aquí mismo. Y tengo ansia de dar un abrazo a unos cuantos allá abajo. Entonces decides si seguimos al Rancho Sondrent...

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07/03/2008, 21:31
Ayron Derkbal

No sé donde pueden estar - respondí a la pregunta de Melegat observando con asombro el último punto donde ví el grueso de aquel improvisado ejército.

Sobre mí caían las gotas de lluvia arrastrando con ellas el barro que luchaba por permanecer en mi armadura...una lucha vana que antes o después acabaría perdiendo, pero ya no importaba que pudiese delatarme algún reflejo, pues no había nadie para detectarlo....¿dónde habrían ido?

No, mi señora - negué levemente con la cabeza volviendo mi rostro hacia Illianna - y eso me preocupa sobre manera, porque han desaparecido en muy poco tiempo....no es sencillo movilizar un ejército, aunque este sea de pocas dimensiones como el que vimos.

Deron habla, y no puedo más que asentir mostrando mi aceptación a sus palabras...pero no puede ir solo, y mucho menos cuando, pese a la actuación de la muchacha sobre su herida, aún no se encontraría en buen estado por completo.

Es mejor que nadie marche solo por estas tierras. - le indiqué - Iré contigo, pues aquí hay suficientes guerreros - y al decir esto miré a Melegat que se encontraba a mi lado y a Dammeryn unos pasos más allá - como para enfrentarse a una pequeña fuerza.

Sin duda si el ataque se producía por un número considerable de atacantes, poco podría variar el que yo me encontrara allí o no.
Caminé hacia Deron, cruzando un instante mi mirada con la de Illianna...en sus ojos la expresión se dividía entre el alivio por no haberse encontrado con el desastre y la preocupación por, como confirmaron las palabras de Brúnil, alguien que habían dejado atrás.

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10/03/2008, 02:40
Deron Nisha

Con una leve reticencia, pero un amplio sentido común, Deron asiente al guerrero tras su ofrecimiento, no sin antes añadir:

-De acuerdo, pero irás detrás de mí. No podemos malograr ningún rastro y las huellas se borran rápido con esta lluvia. En marcha.- termina sin dedicar un minuto más a palabras sobrantes.

El explorador demuestra una practicidad muy militar y una preocupación casi paranoica, mientras comienza a descender con actitud desconfiada hacia el valle. Bien sabe que los ejércitos no desaparecen así como así, y menos aún cuando tienen las de ganar. Lo que sea que los ha llevado lejos de este lugar tiene que ser muy importante, o quizá aún más preocupante que dos centenas de enajenados homicidas. Sea como fuere, salta a la vista que la situación no le gusta.

Notas de juego

Pos creo que deberíais de quitarnos de los posts siguientes, hasta nueva orden del master.

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10/03/2008, 02:44
Deron Nisha
Sólo para el director

Notas de juego

Master, tiradillas de otear y de rastrear para Deron. Son habilidades que me marcaste como "especiales", por lo que no sé muy bien cómo van... entre otras cosas, porque no tienen característica asignada.