Partida Rol por web

Los secretos de "El Roblón"

¡¡Nos vamos de excursión!!

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27/01/2014, 22:43
Lucía

Lucía siguió dándole vueltas a las palabras de Castillo. Primero decía que aquellas plantas podían ser venenosas, y eso para Lucía significaba que eran malas, pero también decía que podían curar. Desde luego no entendía nada, si una cosa era mala era mala y punto, ¿Cómo podía ser mala y buena a la vez?

Aún seguía pensando en ello cuando pararon a descansar, pero otra cosa llamó su atención consiguiendo que se olvidara de las plantas. Castillo había mencionado la cueva de los ladrones. ¡Jo! Aquello sí que era emocionante, aunque por unos instantes el miedo hizo que temblara al oír a Alicia hablar de brujas.

- ¿Y esta cueva es como la de Alí Babá y los 40 ladrones? ¿Habrá un tesoro?

Lucía miró el interior de la cueva esperanzada.

- Espero que haya un tesoro y no brujas.

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28/01/2014, 12:48
Guillermo

- ¿La cueva de los ladrones? Este tío se está flipando mucho... pensó Guillermo sin abrir la boca.

Guillermo había estado silencioso todo el camino, más bien por guardar el resuello que por otro motivo, hacía tiempo que no se pegaba una caminata así. Cuando vio las maniobras del monitor con la hierba recordó las palabras que su padre un día le hiciera. Le había aleccionado bien contra los yonquis y las drogas y se puso bastante nervioso cuando comprendió que Castillo era un hippie en toda la extensión de la palabra. Palideció y se colocó lo más lejos que pudo de él. Tenía claro que, en cuanto pudiera, iba a pedir cambio de monitor.

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28/01/2014, 13:19
Castillo

Es tabaco. De liar —dijo mientras pasaba la lengua por el papel para terminar de hacerse su particular "cigarro". Una vez terminó de liarlo comenzó a liarse otro tras colocarlo en la oreja. No Luci. A ver. La llaman así porque durante la posguerra, había un grupo de gitanos que robaban a los del pueblo. Cuando les descubrieron, tuvieron que salir por patas sin llevarse las cosas que habían robado que resulta, las habían guardado en esta cueva.—concluyó mientras terminaba de liarse el segundo "cigarrillo".

La cueva, podía verse casi al completo desde fuera, y no era más que un gran agujero escavado en la pared, muy útil para refugiarse de la lluvia pero poco más interesante.

 

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28/01/2014, 20:21
Lucía

Lucía se sintió algo decepcionada al oír la explicación de Castillo, por unos instantes había pensado que quizás sería buena idea entrar en la cueva y mirar si quedaba algún tesoro, pero seguro que los del pueblo ya habrían marchado con todo. Sacó el bocadillo de la mochila mientras observaba al monitor liándose el cigarro, aquello le recordó a su abuelo que siempre hacía lo mismo, aunque Castillo era más joven que su abuelo.

- Me hubiera gustado encontrar un tesoro. -Le dio un buen mordisco al bocadillo antes de seguir hablando.- Y ¿qué es eso de lo que hablaba Alicia? Man... ¿Mandagona?

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29/01/2014, 13:14
Guillermo

Viendo que Lucía sacaba su bocata, Guillermo no quiso ser menos y saco el suyo raudo y veloz. Sin embargo una duda le paralizó y tuvo que hacer de tripas corazón y preguntar al yonqui:

- ¿Cuánto queda de excursión?¿va a haber más paradas?

La posibilidad de quedarse sin comida le atenazaba, así que a pesar de la escasa confianza que le transmitía el hippie le preguntó. Interiormente se lamentó por no haber sido elegido para el grupo de las guapas monitoras, seguro que olían mejor que el bicho este.

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29/01/2014, 13:49
Lucio "Uzo"

Uzo se sento con sus compañero, pensando en lo que dijo Lucía, acerca del tesoro.

Tesoro o no -dijo el chaval-, quizá aquí si haya murciélagos..., o mejor... ¡quizá haya murciélagos que guardan un tesoro! -desde luego, la imaginación del chico no tenía resortes, y tan pronto era imaginaba cosas de lo más razonables como inverosímiles-. Oye Castillo -dijo Uzo con el trozo de bocata masticado bajo uno de los carrillos, oyéndosele con dificultad-, luego... cuando acabemos de comer... ¿podemos inspeccionar un poquitín la cueva? ¡Por favor! ¡déjanos! ¡Llevamos linternas, nada puede pasarnos! Además, tu puedes seguir haciéndote esos chupachups de hojas... o lo que sea eso... Aunque mi padre dice que no son buenos, tu verás...

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29/01/2014, 14:59
Castillo

Si..si...claro— contestó Castillo indiferente ante la posibilidad de que los niños se perdiesen en las profundidades de aquella cueva que son duda llegaba hasta el mismísimo centro de la tierra. ¿Paradas? Pues en principio ahora descansaremos media hora o una horita, os coméis uno de los bocatas y en un par de horas llegaremos al nacimiento del río Nansa. Un descansito más para que descanséis y juguéis un rato y después camino arriba para el punto donde nos hemos reunido al pasar la noche.

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30/01/2014, 18:40
José Sánchez "Panes"

Panes sacó su bocata de la mochila y empezó a quitarle el papel de albal que lo envolvía con mucho cuidado, porque si por error se rompía la bola que pensaba hacer perdería parte de su consistencia.

Pues vaya, tanto rollo por tabaco de liar.- José tenía claro que su madre era una exagerada, la de veces que le había repetido que no se acercara a casa del Sepia cuando lo único que fumaba aquel era tabaco de liar, exactamente igual que Castillo y el tío Garracepo. Que el Sepia tuviese una dentadura amarilla a la que le faltaban varias piezas y estuviese realmente flaco debían deberse a que su madre, con la que aún vivía, no le prepararía la merienda ni le obligaría a lavarse los diente después de cada comida, razonó el chico a continuación.

¿Podemos jugar a futbol en lugar de descansar?- Preguntó al monitor cuando se acabó su bocata.- He hecho una pelota.

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31/01/2014, 15:16
Alicia

Joooo que aburrimiento, ¿no podemos explorar la cueva? Seguro que nos divertiríamos. La niña trato de probar suerte de nuevo, después la negación de Castrillo a Lucio. No nos perderíamos y si encontramos un tesoro…… podrías quedarte con la mitad Castrillo. Venga seguro que es emociónate. La verdad es que Alica prefería perderse en una cuba con murciélagos que juagar al futbol con una pelota improvisada, nunca le había gustado mucho el deporte y mucho menos el futbol.

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31/01/2014, 18:03
Lucio "Uzo"

Notaba que las palabras de Alicia, cargadas de mi misma vana petición para el monitor, le entraban a éste por uno oído y le salían por el otro. Uzo no sabía si era porque aquello sería, según siempre decían los mayores, "muy peligroso para niños tan pequeños", o si tan sólo estaba pasando de ellos, queriéndose liar aquella "lapiz de cicuta" que bien lo acercaba a los labios para "rechupetearlo" a veces, como si con ello consiguiera pegar sus extremos y hacer el canuto... Incluso uso empezaba a comprender a Guillermo cuando, a veces y por "lo bajini", le había oído llamarle eso de "Jipi" o "Jippy" o "hippie" o como fuera...

Alicia... -le dijo el chico nada más acabar de hablar ella-. ¿Tu crees que habrá un tesoro ahi dentros? Y el pequeño Uzo miró a su mochila, pues tenía una linterna y dos paquetes de pila, por lo que pudiera suceder descubrir.

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02/02/2014, 18:51
Castillo

Joer...me ha tocado la sorda...o la boba...

Que siiiiii Alicia, que os he dicho antes que podéis ir a la cueva, jugar o lo que queráis mientras estéis cerca. Aunque yo aprovecharía para descansar, que vamos a caminar bastante—dijo mirando a Guillermo. Pero os da tiempo a todo, tranquilos.

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03/02/2014, 02:54
Guillermo

Guillermo no pensaba gastar muchas fuerzas en explorar cuevas de chichinabo, así que hincó con fuerza el diente al bocata y se preparó para relajarse hasta la siguiente etapa de la excursión. No pudo menos que notar la mirada del hippie sobre él, con un claro significado: no confíaba en que sus grandes y fuertes piernas pudieran aguantar la caminata. Este pensamiento le enervó y si no hubiera sido porque estaba en medio de una comida se hubiera levantado de un salto y hubiera vuelto a buscar a alguna de las buenas monitoras.

Decidió seguir comiendo y esperar al reencuentro, es muy posible que Laura acabara enterándose de lo de la droga y quería estar allí para verlo. Quizá hasta se llevara un beso de recompensa...

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03/02/2014, 11:13
Lucio "Uzo"

Cogió su bocadillo, sacándolo de la mochila, y a su vez sacó su linterna, colocándola junto a sus pies. A medida que iba comiendo (no tan al ritmo apresurado como el de Guillermo, cuyo apetito parecía insaciable), Uzo miraba la linterna pensando qué podrían encontrar allí dentro (incluso se giraba a veces mirando la entrada de la cueva, con el mordisco en la boca, esperando encontrar algunos de los tesoros que los antiguos gitanos escondían allí).

Mientras comía, miraba a Alicia, y le hacía gestos con los ojos apelando a la linterna que había sacado, como dándole a entender que estaba preparado para iniciar la búsqueda de lo que fuera alli dentro en cuanto acabasen.

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04/02/2014, 02:01
Lucía

Fútbol... menudo rollo. Darle patadas a un balón, bueno... más bien a un trozo de papel hecho una bola, ¿qué le ven de divertido a eso?

Lucía bufó por lo bajo cuando José hizo la propuesta, ella prefería algo más emocionante, como la cueva que tenían delante, convencida que parte del tesoro escondido por los gitanos aún tenía que estar allí. Pero prefirió esperar a que fuera otro el que propusiera explorarla, mientras tanto siguió masticando despacio su bocadillo mirando a unos y a otros por si alguien estaba dispuesto a investigar dentro de la cueva.

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04/02/2014, 16:28
Alicia

Álica comenzó a comer el bocata con ganas mientras lanzaba miradas de complicidad a sus compañeros, pensando en quienes les iban a seguir en la mini aventura. Cuando llevaba medio bocata ya estaba llena o puede que fueran las ganas de empezar la aventura, envolvió lo que quedaba del bocata de nuevo en el papel, espero a que el resto acabara el suyo, y se puso de pie para dirigirse a la cueva. Seguro que hay algún tesoro….

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05/02/2014, 00:40
Guillermo

Guillermo no dejó de dar mordiscos al bocata hasta que desapareció entre sus fauces. Cuando se lo acabó pensó en sacar uno de los bollycaos de postre pero pronto desechó la idea, había demasiados testigos que podían pedirle un trozo y además no quería gastarlos tan pronto. Con un monitor tan dejado es posible que los necesitara en caso de apuro.

Así que recogió todo y se dispuso a descansar, cuando vio a Alicia levantarse a explorar la minicueva lo pensó mejor y le acompañó; quería estar con el grupo un poco alejado de los oídos del hippie.

- Venga, vamos a ver qué se han dejado los gitanos en la cueva.

Jamás oyó de un gitano que se dejara nada atrás pero parecía una buena excusa para alejarse del hippie.

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05/02/2014, 00:48
Director

José comenzó a dar patadas al balón mientras el resto de los niños se alejaban a la cueva. Castillo, aprovechando que estaba mas o menos solo encendió uno de los "cigarrillos" especiales y comenzó a fumarlo tranquilamente. Efectivamente: olía igual que la casa del Sepia. Un olor dulzón que recordaba vagamente al olor del tabaco en pipa. Castillo si que sabía encontrar tabaco de liar de buena calidad, porque en teoría, y como decía el abuelo de Panes, el tabaco en pipa era el mejor.

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05/02/2014, 00:51
Director

Poquito a poco los niños fueron entrando en la cueva. Por mucho que Uzo iluminaba al techo en busca de murciélagos no logró dar con ellos. Además la linterna no era necesaria. La cueva era poco profunda y la luz bañaba toda la estancia, que tendría unos diez metros de profundidad. ¿Toda? No, había una esquina que permanecía oscura, por estar en un recoveco. Cuando Uzo iluminó aquella pequeña parte oculta, dos pequeñas lunas comenzaron a brillar, a unos veinte centímetros del suelo. La linterna no era lo bastante potente para llegar allí por lo que si querían saber algo más tendrían que acercarse...

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05/02/2014, 13:13
Alicia

Miro la esquina oscura con curiosidad, achinando los ojos para tratar de ver mejor. ¿Qué será eso?, se agacho para coger una piedra y tirarla, pero enseguida desecho la idea. En una película que habían visto sus padres unos niños estúpidos despertaban un monstruo al tirar un par de piedras a un lago y el monstruo en su mal despertar casi los mata. Hola, dijo en voz alta, ¿hay alguien ahí? Espero unos minutos haber si alguien contestaba.

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05/02/2014, 23:26
Guillermo

Guillermo se asomó a la oquedad con tranquilidad, aquello no era cueva ni era nada. Recordó con claridad cuando en su visita al Cañón del Rio Lobos se adentró en la cueva de los templarios, eso sí que era una cueva y no esto. Al menos se alejaban del hippie y sus drogas, ójala se encontraran pronto con las otras monitoras, se iba a enterar el tal Castillo.

Las palabras de Alicia le sacaron de sus pensamientos, había algún tipo de animalillo al fondo de la cueva, así que habría que andarse con ojo no sea que les mordiera o algo.

- Cuidado no sea que se asuste lo del fondo y nos muerda... susurró a sus compañeros.