Partida Rol por web

Sabía que debía una explicación, que los demás tan solo veían a un alma perdida, cabezona e indisciplinada correr por la selva, pero Ivy nunca había tenido que rendir cuentas a nadie y no iba a empezar ahora.

Tan sólo corría, seguía el olor que llegaba hasta su nariz y sentía, porque podía sentirlo, no eran imaginaciones suyas, que pronto los alcanzaría. Arrugaba la nariz a cada bocanada de aire que pegaba porque notaba que éste incluso era más intenso de lo normal. Llegó a la conclusión de que no sólo su olfato podría haber sido desarrollado, sino que también el sentido del gusto podía haber mutado.

Estupendo, pensó, aún amargada, sin dejar de correr y sabiendo que detrás venía toda la caballería. Soy el perrito de todos estos pringados.

Su enfado había alcanzado un límite, pero debía entender que la culpa no era de aquellas personas que la perseguían, sino de la suerte. El suero actuaba de manera aleatoria e Ivy, pese a no creer en el destino, se obligaba a pensar que si había desarrollado ese don su cuerpo era por algo, algún fin tenía el hecho de que ella oliera mejor que nadie.

Puso los ojos en blanco ante esa posibilidad, porque se le antojaba ridícula, pero no la descartó de su mente. Quizá, porque quería aferrarse a ella y dejar de actuar de manera infantil y como una niña envidiosa que ve la bici nueva de la compañera de clase y ella se tiene que conformar con la heredada de su hermana mayor.

-Van por aquí- indicó, sabiendo que el flato llegaría pronto si hablaba, pero, sentía que les debía algo de información-. Están cerca. Los huelo- añadió, sonriendo, a sabiendas de lo ridículo que sonaba aquello.

- ¿Donde carajos vamos? - pienso. No veo nada. Tan sólo espero que no haya ninguna trampa pues caeremos irremediablemente en ella.

Con este pensamiento sigo corriendo en pos de Ivy. Deseando que sea verdad que nos estamos acercando a nuestro objetivo.

- One, Andrey. Intentad cortarles el paso. - susurro por el comunicador. No podemos permitir que lleguen a su base. Daros prisa. - añado.

- Definitivamente cuando acabemos con estos enemigos estos dos me van a oír. - pienso mientras me concentro en seguir el ritmo de Ivy. Esto no va a volver a pasar.

Miro a One tras escuchar a Shara.

Señor One, esta es mi primera vez, así que quizá no pueda seguir su ritmo.

Tras lo dicho, giro el cuello y doy un suspiro, comenzando a volar en la dirección hacia donde corren Ivy y Shara. Mi intención es adelantarlas volando lo suficientemente bajo como para poder ver si están siguiendo a alguien y a quien están siguiendo.

Esto es impresionante Sarah, ojala pudieras sentirlo. A Shara ya la solía tratar de tu, aunque me cuesta bastante llegar a ese punto.

Si logro ver al enemigo, me lanzo sobre el primero de los que huyen para que el resto tenga que detenerse, dejando al resto entre mi posición e Ivy y Shara.

¡Tú concentrate en en el siguiente árbol, uno por uno y todo irá bien, tio!

ONE se lanzó a máxima velocidad, con un estampido supersónico, esquivando árboles como si fueran hojas en el viento. Una nube de polvo se levantaba tras él y las hojas de los helechos se veían arrancadas a su paso.

Shara corre tanto que casi alcanza a Ivy, solo está a medio metro de ella, que no es poca la distancia ni la velocidad, ya que Winter corría como una gacela en dirección a una parte más frondosa del bosque, donde le llevaba el rastro, Andrey logra ejecutar bien su primer vuelo a una velocidad considerable alcanzando pronto la posición de ellas, per a su vez disminuyendo la velocidad, por la dificultad que la vegetación implica, One que ya es algo mas avispado en el terreno del vuelo, sale despedido a una velocidad asombrosa desde la posición donde se encontraba, alcanzando rápidamente a sus compañeros y pasándolos en un abrir y cerrar de ojos, pero a diferencia de Andrey, One no disminuye su velocidad para nada, es algo magistral verlo sortear de esa forma los árboles, con esos giros bruscos y esas piruetas...

Cuando estás mirando como tu compañero hace sus peripecias, ves a lo lejos entre unos arbustos una gorra tirada, alzas un poco la vista y ves a unos 3 o 4 metros de ella, que algunas ramas aun están en movimiento...

Observo como vuela One y no puedo evitar el pensar en hablar con ese chaval y que me enseñe como hacer eso, cuando de repente...

He visto algo a las 12 en punto. Creo que huyen por ahí.

Sin más dilación aterrizo y comienzo a correr hacia donde he visto los arbustos. Iría volando pero no me fío de que pueda controlarlo como es debido y estamos en una "misión".

One si puedes cerrarles el paso les sorprenderé por detrás. No te arriesgues.

Escucho por el comunicador el comentario de Andrey justo cuando veo de lo que habla.

Las palabras de Andrey no hacen sino espolearme mientras intento localizar con la mirada a aquellos que perseguimos.

- One, ten mucho cuidado. - digo. No te arriesgues innecesariamente.

No tengo ninguna intención de dejar que One se enfrente sólo a esos tipos ni un instante más del estrictamente necesario.

- Andrey, Ivy. Es el momento de dar el 100% de nuestras capacidades. - añado acelerando aún más mi ritmo si cabe.

- Ahora veremos de que sois capaces. - pienso.

Ambos veis, cada uno desde su posición, como el follaje se mueve unos metros delante de vosotros, lo que quiere decir que casi los estais alcanzando, los dos estai mirando en direcciones opuestas...

Ivy se detiene un momento y olfatea mientras protesta con cara molesta mirando en dos direcciones, -“¡Mierda!, el rastro se divide aquí, uno para cada lado…”-, dice señalando en las dos direcciones, una con cada brazo, -Perfecto, ahora no solo soy la sabueso sino también la guía exploradora…-, pensó Winter mientras fruncía el ceño y ponía los ojos en blanco por unas decimas de segundo a la espera de la respuesta y decisión del grupo.

One, deslizandose a toda velocidad entre árboles y helechos y localiza un movimiento entre los arbustos algo mas hacia delante y a la izquierda.

-Tengo a uno localizado, Shara! Está echando pa la izquierda! ¿Lo intercepto?

- Afirmativo One. Intercéptalo. - le respondo.

- Andrey. - digo. Ve con One por la izquierda. Ya sabes que hacer.

- Yvy, conmigo a por el otro. - añado girando hacia la derecha en la dirección en la que he visto moverse el follaje. Estamos casi encima de él. Enseguida le daremos alcance.

- Y esta vez no hagais ninguna estupidez. - concluyo mi comunicación. Intentad ser lo más silenciosos posibles en la neutralización de los objetivos. No queremos que nadie más sepa que estamos aquí.

Sin decir nada por el comunicador, comienzo a seguir a One a toda la velocidad que me alcanzan mis piernas, listo para saltar sobre el objetivo cuando lo tenga a "tiro".

Mientras vas corriendo en cabeza por la densa vegetación, con Ivy a tu espalda, justo al contrario que al principio, te percatas de que hay una cuerda tensada a unos 15cm del suelo para que caigáis en ella.

De pronto le perdeis la pista, mirais en todas direcciones y no veis rastro de el...