Partida Rol por web

Todo lo que escriban como pensamientos tus compañeros tu lo escucharas ahora ;P

Andrey empieza a aplaudir, -"¡Guau colega!, a eso lo llamo yo un buen contraataque jejeje"-, dice mientras se acerca al mareado narco, le hace una llave de artes marciales inmovilizándolo, poniendo sus brazos atrás bien agarrados y obligándolo caminar como malamente podía, luego te miró y te dijo, -"One, vamos a llevar a este tipejo con Shara, quizás así se le pase el enfado jejeje, por cierto... mejor que cojas su arma para analizarla, me parece demasiada tecnología para unos simples narcotraficantes..."-

El Narco sonríe maliciosamente cuando le miráis, al mismo tiempo que saca la mano que no sujeta la pistola del bolsillo, en ella porta una especie de granada muy rara, que lanza muy hábilmente luego de pulsar un botoncito que hay en ella, esta vuela hacia ustedes con una luz roja que parpadea mientras emite un sonido, -"¡pip pip pip!"-, inevitablemente, el artilugio llega hasta la altura de vuestras cabezas, quedándose en medio de las dos...

One agarra el extraño fusil y lo examina admirado.

-Yeee-ha! Nunca habia visto una fusca asi! Parece sacao de las Trek Wars esas!

One apunta a una roca y aprieta el gatillo.

-Veamos que es exactamente lo que dispara!

La pistola se le va para arriba a One al disparar y no logra impactar en la roca, una especie de rayo laser bastante grueso sale del cañón disparado a una gran velocidad, y de repente, desaparece ante vuestros ojos uso metros más adelante y lo más raro es que veis como si una especie de campo holográfico que simulara la continuación de la vegetación se desvaneciera por un segundo dejando ver una imagen tras el…

En cuanto veo la Granada venir hacia nosotras me lanzo rápidamente hacia Ivy para intentar apartarla de la trayectoria de la granada mientras grito:

- ¡Cuidado Ivy!

- Estos bastardos me la van a pagar. - pienso mientras vuelo hacia Ivy. Juro que no saldrán vivos de aquí.

Ivy se quedó paralizada al cruzar la mirada con aquel tipo. Su corazón latía de forma atronadora y no sabía si era por los nervios, por saber que lo tenía delante de ella o porque temía hacer el ridículo ante Shara, una completa desconocida, pero que, sin saber muy bien por qué, quería demostrarle que ella valía para algo.

Sus ojos se dirigieron hacia la granada que tenía en la mano y fue en ese momento cuando Ivy aguantó la respiración, preguntándose qué demonios estaba pensando aquel tipo en ese momento.

Emitió un grito ahogado y frunció el ceño, pensando que aquellos segundos eran los últimos de su vida, que allí acababa toda la broma pesada que había supuesto la vida de Ivy hasta ese momento.

A la mierda todo, pensó, arañándose el pulgar con la uña del dedo índice y haciendo una mueca de auténtica repugnancia mirando a aquel tipo. Sin inmutarse, sin apartarse, como queriendo dar a entender que una simple granada no era capaz de hacer que se echara al suelo y llorara como una cría.

-Hijo de puta- masculló con odio.

Todo fluía como si estuvieseis a cámara lenta, de pronto la luz roja que parpadeaba, dejó de hacerlo para quedar permanentemente encendida hasta la que explosionara, pero no antes de que Shara reaccionará lo suficientemente rápido para lograr saltar llevándose con ella a la paralizada Ivy, ambas cayeron al suelo, amortiguando con la hierba, cuando una explosión quedó tras ellas dejándoles un gran pitido en los oídos y el corazón acelerado a mil por hora, abrís al mismo tiempo los ojos tras la explosión y ves el suelo pagado a vuestra cara, sin saber que hay a vuestras espaldas tras la granada…

En esas fracciones de segundo os parece ver tras esa barrera una especie de base inmensa... pero para vuestra sorpresa, el sonido de una explosión que proviene de donde se encuentran vuestras compañeras, os llama la atención...

Tras evitar que volemos en pedazos incorporo la cabeza para comprobar el estado en que se encuentra Ivy.

Los oidos me zumban que da gusto así que supongo que a Ivy le pasará lo mismo.

Al ver que está bien levanto dos dedos y me los llevo a los ojos para a continuación moverlos a nuestro alrededor.

Después me llevo los mismos dedos a la nariz.

- Espero que me haya entendido. - pienso.

En estos momentos echo de menos a Mark pues no necesitamos hablarnos. Nos basta con una mirada para saber que es lo que piensa el otro. Espero llegar a alcanzar la misma complicidad con cada uno de los miembros del equipo.

En cuanto acabo de hacerle las señas me doy la vuelta rápidamente apuntando con el arma, presta a ser disparada si hubiera algún enemigo a la vista.