-¿que sientes? ¿que te gustaría hacer?- te digo mirandote a los ojos...
-¿Qué es lo que quiero hacer?-pregunté algo sorprendida.-En este momento lo único que tengo deseos de hacer es de irme muy lejos en tu compañía y no volver la vista a atrás...
Era verdad, eso era lo que tenía deseos de hacer, aunque sabía que no era prudente y mucho menos un buen comportamiento. Te estaba diciendo que sería capaz de dejarlo todo por ti, alguien a quien no conocía.
-Hagamoslo,esta noche,ahora,con lo puesto.- me levanto y te cojo de la mano con firmeza pero dulcemente.
-Pero..., ¿estás seguro? ¿Es lo que tú quieres? Yo no sé lo que dejas detrás pero yo dejo a un padre muy enojado... Y nos buscará, no se quedará así.
Me levanto ayudadad por ti y acaricio tu mejilla, sabes que te seguiré al fin el mundo.
-dejo recuerdos y experiencias que no quiero recordar ni volver a experimentar,soy tú profesor,y tengo que enseñar a mi alumna que el sentimiento puede con cualquier vanalidad material y terrenal.- luego te cojo de la cintura y te beso pasionalmente,buscando tú lengua con la mia recorriendo jugando tu boca.
Tus palabras me sorprenden pero me gustan, de hecho las disfruto enormemente. No me resisto a ese beso tan distinto al primero y dejo a tu boca comerse a la mía, la imito y mi lengua también.
-Entonces no perdamos tiempo..., maestro.
-Vamonos de aqui raudos.- digo al tiempo que veo unas antorchas aproximarse por el fondo de la playa....-sigueme.-
No lo dudé más y tomé tu mano dispuesta a seguirte, lo que sucediera de ahora en adelante podría ser bueno o malo pero era mi decisión y la llevaría hasta sus últimas consecuencias. Sin duda debieron haberme estado buscando todo el día y ahora con la noche, las cosas en palacio debían estar peor. Me daba un poco de pena dejar a mi padre pero algún día volvería y le explicaría todo.
Estaba emocionada, con las mejillas encendidas pero sujeta de tu mano, el mundo podía venirse abajo, al menos eso sentía.
A lo lejos,veis acercarse un grupo de unos seis,con antorchas vestidos de la guardia real
con tú mano cojida,corro buscando un lugar donde escondernos-no me puedo enfrentar a ellos,me matarían.- pienso.
-vamos,princesa de mi corazón.- mientras nos alejamos,solo iluminados por la luna.
En la cala,vemos una barca....Josu te mira...
Tomo tu mano y corro contigo, sé que si nos quedamos no tendremos oportunidad alguna con esos guardias. Corro junto a ti, hacia la pequeña barca. Con el corazón retumbando con una fuerza nunca antes sentida por mí.
-Vamonos, Josu... A donde sea...
Te alzo y te subo a la barca,luego la empujo y me monto a la carrera-agachaté Mel.- digo mientras me pongo a remar con fuerza alejandome de la orilla.
Me agacho como me indicas para evitar que me vean y siento como la barca empieza a moverse, la noche es más espesa cada vez, apenas iluminados por la luz de la luna y las estrellas; una vez pasado un tiempo prudente, me levanto y te miro a los ojos.
-Te arriesgas demasiado, Josu... Pones tu vida en peligro por mí. Gracias.
-Si no tuviera nada por lo que desear morir,no tendría nada por lo que merecer vivir.- luego te beso con pasión.
Siento mi cuerpo estremecerse por completo, no sólo por ese beso, sino por tus palabras. Nunca imaginé que todo sucediera tan repentinamente y sin embargo no me importaba porque prefería mil veces intentar una historia contigo que terminar en el lecho de un hombre al que temiera. Te beso de la misma manera y te abrazo para saber que es cierto, que estamos allí y no yo sola en mi cama soñando.
En medio de ninguna parte,echo el ancla.Asi,mientras la marea nos mece,te abrazo con pasión y vehemencia mientras nos recuesto en la barca mirando las estrellas.
-Mel,¿crees en el amor a primera vista?....yo sí.- te cojo la mano y la poso en mi pecho.Notas los latidos fuertes y acelerados.
-Es por ti.- te miro con una sonrisa sincera.
Te miro con mis grandes ojos expresivos, expectantes y sonrío mientras te siento acercarte a mí, mientras voy sintiendo los latidos de tu corazón, no creo que el corazón pueda mentir.
-No sabía ni siquiera lo que era el amor hasta hace unas horas, ahora creo que lo sé...
Te beso larga y apasionadamente, sintiéndote muy cerca de mí.
Acaricio tú cuerpo sintiendo tu piel descubierta e imaginando la tapada....intuyendo tus formas...te beso apasionadamente mirandote a los ojos,donde se refleja el cielo estrellado....
Siento tus manos recorrerme por encima del vestido y una nueva sensación se enciende en mí: es el deseo. Me abrazo fuerte a ti, inconsciente de lo fuerte que se ha vuelto aquello, tiemblo ligeramente y eres capaz de notarlo pero sabes que no desearía estar en otro lugar en ese momento, sino siendo arropada por tus brazos, por tu cuerpo. Continúo besándote, aunque cada vez con más intensidad.