Partida Rol por web

Querido héroe! El anciando mago que ejercía de maestro de ceremonias hablaba desde una burbuja mágica. La única luz en aquel espacio totalmente oscuro (de una oscuridad mágica que nadie podía evitar).

Bienvenido a la primera prueba de este torneo. En este caso las normas son muy sencillas, entrarás a una sala donde espera tu muerte, haz lo que quieras para sobrevivir el máximo posible. No temas, porque tu cuerpo no morirá, ni recibirá ninguna herida que no será curada por el gran Archimago cuando acabe el desafío. Aunque sí que sufrirás el dolor y la incapacidad, mientras te encuentres en esta sala.  

No estarás solo, sin embargo. Sino te acompañará un compañero cuyo destino se ha atado al tuyo a través de las fuerzas del azar y del caos. Será la supervivencia del último de vosotros la que apuntaré en mi registro.  Para esta prueba, se te permitirá llevar todo tu equipo, aunque puedes dejar aquí algo si quieres, que será devuelto a tu habitación.

Cuando estés listo, pasa por una de estas puertas, la que quieras y llegarás a la sala del desafío. Al decir eso, cuatro paredes de luz azulada aparecen, de diez pies de ancho y altura aparentemente infinita. 

Makau mira la burbuja mágica con cara de hastío, es la segunda vez que ve a ese tipo y aún no le ha dicho dónde está el retrete.

Cuando el viejo deja de hablar, el semiorco se acerca a una esquina y alivia sus necesidades soltando un suspiro.

…Creía que iba a reventar…

Cuando termina, se acuclilla para calentar un poco sus rodillas y se estira, contorsionándose como un felino, agarra su lanza y escoge la puerta más cercana.

-A ver…-

Me acerco al maestro de ceremonias, no sabia que hacia ahi, solo recordaba que estaba a punto de entrar en un poblado, y ahora le hablaban de que tenia una habitación, "eso es algo que solo la comida (humanos) utiliza, luego la buscare, preferiría un corral con hermosas yeguas, también hablo de una batalla, a eso no le digo que no, voy a dejar lo que no me sirva, algo me dice que sera mejor no matar comida o no saldré de este sitio vivo"entonces dejo su trofeo de caza (animal), su mapa, la armadura de cuero "nunca me habría servido, pero siempre se debe guardar el primer trofeo de caza" , miro al maestro y dijo "La munición de la flechas, ¿las recuperare al salir las flechas que he disparado? y otra ¿en caso de que no pueda, donde conseguiría mas, saqueando o comprando?" y despues me callo a esperar la respuesta antes de dirigirme a la cuarta puerta, escogería esa nada mas, "solo espero que no haya un troll al otro lado, seguramente mi compañero sera más comida, pero sera mejor que no lo mate, tal vez lo necesite para salir vivo, aunque vaya en contra de mis leyes"

Otro pj con pseudo-guja? Me suena, si hace falta lo tomaré de tu descripción larga, pero mejor si me proporcionas una descripción de dos lineas para tu compañero (de lo que se ve)

tiene la cabeza de un doberman, con un par de cuernos de cabra saliendo, las patas son patas de perro, los brazos y torsos son humanos, tiene pelaje marrón por todo el cuerpo, no tiene cola, en vez de nariz tiene un hocico de pastor aleman.

Al cruzar las puertas mágicas, los competidores se encontrarón en una habitación cuadrada, construida con enormes bloques de piedra. Era una habitación cuadrada, prácticamente vacía, en la que destacaba una fuente colocada en el centro. Del centro del agua de la fuente, salía el pomo de una espada y, posado en ella, había un águila sanguinaria.

En los cuatro lados de la sala, había sendos pasillos de unos diez pies de ancho, que se interrumpían a los cinco pies por una oscuridad que se notaba que no era natural. De esta oscuridad surgieron los héroes que se enfrentaban a la prueba. Por una de las salidas, indistinguibles, salió un semi-orco pelirrojo y pálido con rasgos bastante humanizados, de 1.91 metros de altura y bastante esbelto para su brutal ascendencia. De la salida que estaba a su izquierda salía al mismo tiempo otra criatura de aspecto extraño. Tenía la cabeza de un doberman, con un par de cuernos de cabra saliendo de ella, patas de perro y patas de perro por piernas. Los brazos y torsos eran casi humanos, pero cubiertos por un pelaje marrón.

En una burbuja que flotaba en el espacio, semitransparente, el rostro del maestro de ceremonías miraba atentamente.

Que empiece el show. No os durmais, que no hay tiempo.

A ver, es el equipo con el que empezó la partida, pero en este caso era más por trasfondo que por otra cosa. Ahora mismo va con dos cimitarras en la partida, ya que la idea es simbolizar los dientes del tigre con dos hojas iguales.

Como no se puede coger dos armas iguales que no sean las dos hachas, copipastee el equipo inicial de la otra partida.

Lo que quiero decir es que cambiaré en cuanto sea posible, ya que este no es como Huma que si va a tirar por ahí.

De hecho, ahora queblo dices si me permites voy a cambiar, y en lugar de Guja y daga me quedaría con dos hachas de mano y una espada larga, si no te importa. Lo cambio en la ficha si me das el visto bueno.

nada mas aparecer veo el águila, nunca había visto nada parecido, pero no me acobardo, preparo mi arco "Tengo un arco, si también tienes armamento a distancia te recomendaría sacarlo", observo al semi-orco, nunca había visto a nadie así, pero seguro que era de ayuda.

apunto con mi arco al águila de sangre, apunto, y me preparo para disparar, intento mirar a mi compañero, pero no puedo permitirme fallar.

disparo al águila, veo la flecha ensartarse, rapidamente empiezo a preparar otro disparo.

Al recibir el flechazo del hombre-bestia el águila se desplomó sobre el agua estancada en la fuente, tiñéndola de rojo.

Aquel sueño era realmente extraño...

Makau sale de la oscuridad, espada en mano, y ve una horrenda criatura que le habla y ensarta un águila con un certero flechazo.

La criatura le ha hablado y al parecer aquella extraña prueba aún no ha terminado. Deduce pues, que el astado ser debe ser su compañero.

Al ver la fuente con el pomo de la espada en el centro, se dirige hacia ella sin perder tiempo.

-Buen disparo. Soy Makau... -

Y sin mediar más palabra el bárbaro tira de la espada para liberarla de su mojada prisión.

Makau sacó la espada del agua sin ningún problema. El agua estaba enrojecida por la sangre del pájaro, que flotaba inerte hasta que, de repente, se desintegró formando un haz de luz, que voló hasta desaparecer en el cielo (o el techo o lo que fuera aquella luz indefinida que había en lo alto).

La espada que tenía el semiorco era una espada larga, de aspecto bastante normal, pero mojada. El nivel del agua empezo a bajar muy poco a poco, formando un pequeño vórtice.

saludo a mi compañero, entonces señalo hacia la puerta que tengo enfrente "hola, mi nombre es skref, de la tribu de los asaltadores, no se que camino coger, pero vamos hacia delante" mientras me encamino, guardo mi arco y cojo una de las dos hachas y el escudo, y al llegar a la salida espero a mi compañero, que saca una espada del agua, "no te preocupes si esta oxidada, así podrá hacer mas daño"