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[LS II] Fuego sobre el agua

El viaje [Lobo Solitario]

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13/05/2017, 22:47
Lobo Solitario

Estaba en mi habitación, en aquella posada, con el delicioso plato delante mía y el veneno sobre él.

Disgustado y enojado por ello, salí de la habitación rumbo a la reunión que tenía con mis compañeros de viaje y un asesino. Aprovechó la avería de la diligencia y usó veneno en el plato. Es inteligente... muy inteligente...

Llegué a la mesa con cara de pocos amigos, allí estaban todos esperando mi regreso. Un asesino siempre debe permanecer oculto, a la vista de todos... no llamar la atención.. Pensaba mientras miraba los rostros de cada uno de los presentes, buscando algún indicio de decepción por encontrarme allí con ellos... vivo y sano, sin efectos de veneno en mi cuerpo.

Que no llame la atención... inteligente....

Mis ojos iban y venían entre Halvorc y Viveka.

Notas de juego

Sorry, me he alejado de Umbría demasiado tiempo. Y es que esta escena tambien pudo conmigo, más que nada porque me la he leido unas 20 veces buscando al asesino entre ellos xDD

¿Se puede usar el sexto sentido aquí?

Esta disciplina avisa a un Señor del Kai del inminente peligro. También le revela el verdadero propósito de un extranjero o de un objeto extraño encontrado en su aventura.

Según me digas elijo a quien atacar.

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14/05/2017, 16:19
Director

Notas de juego

Sabes que siempre te doy opciones incluso cuando no existen para otros, porque tus post lo merecen, pero en este caso... No, el sexto sentido, por algún motivo, no te funciona ahora.

Pero te voy a dar una pista. El dato que te permitirá descubrir al culpable está en la imagen, no en el texto. Por orden están colocados Parsion, Halvorc, Dorier, Ganon y Viveka, y uno de ellos tiene algo, en el dibujo, que le delata. Ese algo, además, se ha mencionado ya contra otro enemigo, al principio.

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14/05/2017, 16:28
Lobo Solitario

Continuaba pensando en ello, dándole vueltas... De parte de un amigo... masculino, ELLA queda fuera de esto... Clavé mi mirada en el mercader. Tan servicial.. llevando el mismo la diligencia... Si conocía el camino, es que lo ha recorrido muchas veces ya... Vamos, vamos... Si no eres TU...

Debo centrarme... pasar desapercibido.. ¿qué hace un asesino?.. Matar... mentir... ocultarse... aprovechar el estado de nervios para quitarse el muerto de encima... Enterramos el cuerpo pues él lo pidió... lo normal hubiese sido traerlo para que la familia... Miré de reojo a Parsion. Es él.. sólo puede ser EL.

Sin perder más tiempo ni pensármelo más veces, lancé un ataque sorpresa sobre el sacerdote.

Tan sólo esperaba que esta vez la suerte me acompañase y pudiese darle una muerte rápida, sin que los demás llegasen a detenerme.

Notas de juego

Gracias ^^

No recuerdo el principio de la historia ya, pero ya se quien es el malo ;)

 

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16/05/2017, 21:21
Director

Has sido perspicaz, pero el sacerdote no parece sorprendido por tu ataque y saca una espada negra de debajo de su vestimenta, con la que detiene tu cuchillada en un alarde de control y habilidad. Los demás, alarmados, se apartan de vuestro lado. Las sillas vuelcan ante la huida de algunos de los comensales, los gritos de alarma resuenan por el salón, y pronto también en la calle. Sabes lo que parece, lo que opinarán aquellos que no sepan acerca de los Señores de la Oscuridad y su lucha contra los del Kai, pero tú no puedes perder el tiempo parando a dar explicaciones, no es el momento para las palabras.

Te abalanzas contra él, esquivando por pocos centímetros su acero, e intentas clavar tu puñal en su pecho. Rápido, como una serpiente, desvía tu ataque y, con la misma inercia del movimiento, gira sobre sí mismo clavando su hoja en tu hombro. Sólo tus reflejos acaban de salvarte la vida, y aquello aún no ha acabado. Los golpes se suceden uno tras otro, finas líneas rojas se convierten en sangrantes heridas que manchan los ropajes de ambos.

El ruido de la calle te asegura que las cosas pronto se pondrán peor, una sensación, una intuición que nunca suele fallarte. Debes acabar con el combate, y pronto ves como hacerlo. Usas la fuerza de tu mente, lanzas una oleada de energía, y la mesa sobre la que minutos antes estabais reunidos se mueve apenas unos centímetros, lo suficiente como para que Parsion tropiece, pierda el equilibrio, y caiga indefenso sobre ti. La daga atraviesa limpiamente su corazón, y el asesino cae muerto ante tus pies.

Rápidamente te agachas, en busca de pruebas. Al registrar el cadáver descubres cuanto necesitas para demostrar que era él quien ha intentado acabar contigo. En sus bolsillos encuentras un frasco medio vacío de savia de Gnadurn, el mortal veneno introducido en tu comida. Tiene también un pergamino escrito en giak, en el que se especifican los detalles de tu esperada llegada a Port Bax.

Debe de haberte localizado en Ragadorn y tramado allí su plan. Adviertes, además, que el arma que lleva es una espada forjada con acero negro en los hornos de Helgedad, la ciudad infernal de los Señores de la Oscuridad situada al otro lado de la cordillera Durncrag. En todo el vasto Magnamund sólo allí puede fabricarse acero negro. No es alguien cualquiera. La prueba definitiva de su verdadera identidad es la serpiente tatuada en su muñeca derecha. Los maleantes del puerto que intentaron matarte antes de tu partida de Holmgard llevaban exactamente la misma señal.

Los otros pasajeros te miran horrorizados sin acertar a creer lo que has hecho. Antes de que puedas explicarles lo ocurrido, la puerta delantera se abre con gran estrépito y entran precipitadamente seis soldados provistos de armaduras y conducidos por el posadero. Son la guardia del lugar y el posadero tuerto les grita que te arresten.

  1. Enfréntate a ellos, que no parecen muy dispuestos a conversar.
  2. Escapa por la puerta trasera rápidamente.
- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Combate

Tirada: 3d10

Resultado: 1, 8, 2 (Suma: 11)

Tirada oculta

Motivo: Combate

Tirada: 2d10

Resultado: 5, 10 (Suma: 15)

Notas de juego

El tatuaje, el tatuaje, esa es la clave jaja.

Resistencia: 12/23.

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20/05/2017, 12:40
Lobo Solitario

Lo que pretendía que fuese una muerte limpia y rápida, se convirtió en un combate en toda regla. Nuestros movimientos y ruidos alertaron a todos y enseguida se corrió la voz de alarma. Debía darme prisa en acabar con él... La sangre volaba, tanto la mía como la suya... La herida que me hizo en el hombro no evitó que me detuviese, ataqué con más fiereza.

Arriesgué demasiado, pero logré hundir mi cuchillo en su pecho y darle muerte. En su cuerpo encontré las pruebas que necesitaba, pero la guardia ya esta entrando en el local, debía huir si quería vivir otro día.

Y eso hice, no sin antes llevarme todo lo que me fuese útil de aquel cuerpo, incluida su arma.* No miré atrás mientras abría la puerta trasera y salía al exterior, debía encontrar un lugar donde ocultarme y vendar mis heridas. Aquel asesino me había dejado bastante tocado y sin duda, el rastro de sangre podría indicar a los guardias por donde me había ido.

Notas de juego

*Si le da tiempo a cogerla, claro xD

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21/05/2017, 17:12
Director

Con los ojos fijos en los guardias que empiezan a desplegarse ante ti, coges la bolsa del cadáver de Parsion –que contiene 26 monedas–, y llevas la mano a la negra espada. Apenas la has rozado con la yema de tus dedos, cuando los soldados desenvainan sus aceros, tomando aquello como una amenaza, y tú te ves obligado a salir corriendo sin perder tiempo, antes de que tu vida llegue a su fin por un malentendido. Sin siquiera mirar atrás, sales por la puerta trasera, cubriendo tus heridas.

Aunque se ha hecho de noche, la luna llena arroja una luz resplandeciente sobre el pueblo. Si tu puedes ver bien, ellos también. Debes darte prisa. Detrás de la posada observas una pequeña tienda de carretas. A la puerta hay dos caballos enganchados a un carro cargado de paja.

Por tus conocimientos, sabes que el heno sería capaz de ocultar el sangrado, y tienes la habilidad suficiente para pasar desapercibido. Sin embargo, cada segundo que pasas allí es un riesgo, y si aquellos hombres deciden rebuscar más a fondo, podrían encontrarte. Están a punto de salir, y debes decidir.

  1. Escóndete en el carro de paja usando tu disciplina de Camuflaje.
  2. Monta en uno de los caballos y abandona el pueblo.
  3. Entra en la carretería.
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03/06/2017, 02:23
Lobo Solitario

No me quedaban muchas opciones y debía actuar rápido. Vi aquella carretería frente a mi. El carro lleno de paja y los caballos atados al mismo. Podría ocultarme en el edificio, pero la sangre me delataría casi seguro, por no decir el dueño si aún se encontraba dentro. Mi segunda opción era soltar uno de los caballos y huir de allí cabalgando... y de paso añadir ladrón de caballos a mi curriculum recién adquirido en aquel lugar. La tercera opción era ocultarme en el heno... quizás la que más me gustaba, pero los guardias buscaban a un asesino y no desestirían en su búsqueda.

Corrí todo lo deprisa que pude, tratando de no ser demasiado escandaloso en mi carrera. Acaricié a ambos caballos según llegué a ellos y, dejándome llevar por mi sexto sentido, elegí un caballo, le solté y cabalgué sobre él. Mi habilidad de rastreo me permitiría salir pronto de la ciudad y dejar atrás todo aquello. No ganaba nada escondiéndome allí, salvo perder más tiempo y la misión debía continuar.

Además, seguro que mis enemigos no se esperaban que llegase a dar muerte a su asesino y huir de allí me haría ganar algo de tiempo frente a ellos.. o eso esperaba al menos.

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06/06/2017, 03:50
Director

Espoleas al caballo por la sinuosa calle del pueblo. Después cruzas un puente de madera y subes por un sendero empinado a la cima de una colina. No tardas en perder a cualquier posible perseguidor, y suspiras aliviado. Poco después, a la luz de la luna, vislumbras un indicador que señala el este:

Sonríes, y cabalgas toda la noche sin detenerte a dormir. Al amanecer observas con agrado un sorprendente cambio en el paisaje. El árido desierto ha cedido el lugar a pantanos y páramos anegados. Y una oscura sombra se extiende por todo el horizonte del este hasta donde alcanza la vista. Se trata del bosque de Durenor, la frontera natural del territorio montañoso que bordea el indomable desierto. Es realmente una vista gratificante.

Te separa de Port Bax menos de una jornada a caballo, pero después de cabalgar durante toda la noche estás cansado y sobre todo hambriento, por lo que te desvías para cazar el desayuno; gracias a tu destreza logras atrapar un ratón del páramo, y sigues tu camino. 

Después de seguir cabalgando durante una hora, llegas a una bifurcación donde no hay ninguna señal.

  1. Toma el camino de la izquierda.
  2. Sigue por el sendero de la derecha.
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06/06/2017, 14:46
Lobo Solitario

Al final parecía que había elegido bien y huir fue la mejor decisión que pude tomar. El caballo estaba fresco y eso me permitió cabalgar toda la noche, pero sabía que ese ritmo no podría llevarlo durante mucho tiempo pues acabaría matando a la bestia.

Tras observar el bello paisaje que se alzaba ante mis ojos, me detuve a descansar un poco y darle un descanso también al animal. Cuando me sentí con renovadas fuerzas, continué la marcha, pero esta vez sin forzar al caballo. El tiempo transcurrió al igual que los kilómetros recorridos. El camino se bifurcaba unos metros más adelante.

Me detuve en el medio y miré hacia ambos lados. Mi sexto sentido podría ayudarme a elegir la senda correcta, pero de alguna manera  me tiraba más el camino de la izquierda, así pues ni me lo plantee. Espoleé un poco al caballo, para que reiniciase su marcha y continué viajando por aquel camino, pensando en que quizás debía regresar atrás y fiarme de mi instinto...

Notas de juego

No voy a retrasarlo, puesto que lo sencillo sería preguntarte cual de los dos caminos va hacia el este y tomar este... O bien guiarme por el sol... pero.. iré por las izquierdas, que por la derecha está Rajoy y ese no me mola nada xD

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09/06/2017, 15:58
Director

El camino recorre una alta sierra, cubierta de hierba, a lo largo de muchas millas antes de torcer hacia la costa en dirección norte. Atraviesas un poblado donde las casas se alinean en círculo alrededor de una gran charca de agua estancada. Cuando estás cruzando la aldea, una pandilla de niños Szall corren hacia ti, gritando y tirándote piedras. Suspiras, sabiendo que aquél no es tu mundo, y sigues adelante.

Desciendes a un profundo valle y poco a poco el páramo da paso a una tierra más rica que ha sido despojada de vegetación y labrada. La ladera opuesta está cubierta de arbolado. No te hallas lejos de la costa y puedes ver los altos acantilados con sus rocas multicolores sobresaliendo encima del océano.

En el preciso momento en que cruzas un pequeño seto, oyes a tu derecha gritos que piden ayuda desesperadamente. Indeciso, te quedas un momento inmóvil...

  1. Ayuda al desconocido en apuros.
  2. Ignora la llamada de auxilio y sigue cabalgando por el camino.
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09/06/2017, 16:43
Lobo Solitario

No estaba seguro de donde acabaría llevándome este camino, pero continué por él. Hice algunas paradas para que la bestia descansase y así poder estirar un poco las piernas, pues.. a pesar de que todo el viaje se lo está dando el caballo, montar tambien cansa.

No se que distancia recorrí hasta que vi aquel pequeño poblado y llegué para cruzarlo. Por unos instantes pensé en la hospitalidad de los lugareños y quizás en pasar la noche allí... pero los niños que salieron a mi encuentro, lanzándome piedras, me indicaron que no era bienvenido al lugar. Espoleé mi caballo para salir de allí cuanto antes. No me apetecía que una de esas piedras nos hiriese a mi o a mi montura.

Comienzo a descender por un valle y le doy otro respiro al caballo. Allí la tierra es fértil y puede pastar a sus anchas mientras descanso un poco. Al retomar el camino, alcanzo una extensa zona labrada. La cilivización está cerca... deberé extremar las precaucion..

No me dió tiempo a terminar la frase en mi mente. Unos gritos me alertaron de que algo ocurría y por la forma de pedir ayuda, no era nada bueno. Viendo como me había ido durante el viaje y con las personas que me había cruzado en estas tierras, de las cuales no podía fiarme, quise darme la vuelta y seguir por mi camino.

Pero no podía, no podía ser tan egoista como ellos. Además, era el último de los míos y eso llevaba una responsabilidad y una reputación que salvaguardar. Sopensando que podía ser una trampa para atraerme, me puse alerta mientras indico al caballo el camino que debe tomar, para socorrer al desconocido.

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23/06/2017, 17:22
Director

Espoleas el caballo a través de una maraña de árboles y llegas a un pequeño claro. Seis Szalls están saltando excitados alrededor de un hombre que se retuerce en el suelo. Tiene clavada en el pecho una lanza extrañamente tallada y a su lado yace muerto un Caballero de la Montaña Blanca. Las cobardes criaturas chillan sin que parezca importarles la evidente agonía del hombre, pero se alejan de allí, unos metros, al verte aparecer.

  1. Intenta salvar la vida al herido haciendo uso de tus conocimientos en sanación.
  2. Ataca a los Szalls.
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23/06/2017, 21:32
Lobo Solitario

No tardé en llegar y ver lo que ocurría. Los estúpidos y cobardes Szalls disfrutaban del estado del hombre herido, quien parece tener una lanza clavada en el pecho. Detengo mi montura junto al hombre y veo como aquellos seres se alejan unos metros, acobardados sin duda por mi presencia.

- Huid criaturas del abismo! Les exclamé tratando de hacerlas alejarse de allí. - Si queréis mantener la cabeza unida al cuerpo, largaos ya!

Miré el estado del hombre, la herida era mortal casi seguro, pero por fortuna la magia puede hacer milagros y hoy debe ser el día de suerte de ese hombre. La lanza en si, me llama mucho la atención, al igual que el Caballero muerto tan cerca, pero la prioridad es la de salvar a ese hombre.

- Esto te va a doler, amigo. - Le digo mientras le extraigo la lanza del pecho y mantengo mi mano cerca, para ponerla sobre la herida. Mis dones de sanación harán el resto.

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23/06/2017, 22:29
Director

Las criaturas, impelidas por tus gritos, se alejan un poco más, oportunidad que aprovechas para bajar de tu caballo y acercarte. Arrancas el asta del cuerpo del hombre, que emite un quejido lastimero, y presionas su pecho con tus manos. Parece que va a funcionar, pero entonces notas algo.

Te giras, y ves que los Szalls te tiran de la capa tratando de apartarte de él. Rápidamente, echas mano a la daga que llevas al cinturón, dispuesto a usarla, hasta que te das cuenta de que los sonidos que emiten no son simples gruñidos, sino que buscan decirte algo. Haciendo uso de memoria, recuerdas que en el Santuario tus maestros te enseñaron el lenguaje de aquellos seres como parte de tu entrenamiento, y pronto entiendes lo que quieren advertirte: Es un Helghast, un poderoso servidor de los Señores de la Oscuridad, capaz de cambiar de forma.

  1. Si crees que dicen la verdad, aparta tus manos y registra las pertenencias desparramadas.
  2. Si crees que es parte del malévolo juego de los Szalls, espántales con tu arma y sigue con la curación.
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23/06/2017, 22:46
Lobo Solitario

Estoy preparándome para sanar al hombre y siento como tiran de mi hacia atrás por mi destrozada capa. ¿Los Szalls? ¿pero..? Era extraño, de espaldas como estaba y tratando de salvar la vida de aquel hombre y que no aprovechasen para saltar sobre mi y matarme. Sus gruñidos no son tal y sus palabras cobran vida en mi memoria. 

Me alertan de que el hombre herido no es tal sino que se trata de un cruel servidor de los Señores de la Oscuridad. Miro al Caballero muerto y la lanza que estuvo en el pecho del hombre. Ahora cobraba todo sentido... retiré las manos del hombre y me giré, buscando dejar de dar la espalda a los Szalls.

A pesar de su aviso, no quería que aquello fuese una trampa y me puse a mirar en las pertenencias del hombre. - Seré breve. Si lo que dicen es mentira, te sanaré y ellos moriran. Pero si encuentro una prueba de que dicen la verdad... dije al hombre, procurando no perderle de vista ni un segundo mientras comenzaba a buscar.

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25/06/2017, 17:49
Director

Registras su mochila y te quedas horrorizado al descubrir que contiene un pergamino de piel humana en el que hay un mensaje escrito en extraños caracteres rúnicos. La única palabra que consigues descigrar es «Kai».

A tu alrededor, todo se enmudece.

Sigues buscando.

Encuentras una macabra daga de hoja negra y un bloque de vidrio volcánico. Estos objetos llevan los emblemas del ejército de los Señores de la Oscuridad. Lo notas. Tu Sexto Sentido te advierte de ello. Te acecha un gran peligro. Sueltas rápidamente la mochila como si se tratase de una brasa y te dispones a montar en tu caballo. Te das la vuelta, raudo y...

Para tu consternación compruebas que ha desaparecido; deben de habértelo robado los Szalls, aprovechando tu distracción, así que no te queda más remedio que proseguir el viaje a pie. Aún así, antes, está el problema del caído. Ya está claro que sirve a los Señores de la Oscuridad, y aún no está muerto. Es más, al quitarle la lanza, ha empezado a sanar sus heridas. Debes darte prisa en tomar una decisión.

  1. Ve a por la lanza que has dejado al lado del moribundo.
  2. Vete de allí cuanto antes.
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25/06/2017, 18:06
Lobo Solitario

Me queda realmente claro que aquellos Szalls no me mintieron cuando comencé a encontrar todo aquello en las pertenencias del moribundo. Algo alerta mis sentidos al seguir mirando en la mochila. La suelto a un lado, ya tengo suficiente como para saber quien es mi enemigo, quien por cierto, se está sanando gracias a que le quité la lanza del pecho.

Para colmo mi montura no está, esos Szalls se la debieron llevar como cobro por la información. Es arriesgado pero... he salido de cosas peores. Corro a toda velocidad hacia el "moribundo" para coger la lanza. Con suerte mi velocidad será superior a su curación y podré dejarle atrás y ocultarme con mi disciplina de camuflaje.... Eso iba visualizando cuando mi mano agarró la lanza y...

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25/06/2017, 19:26
Director

La lanza tallada está hecha de metal, pero es tan ligera comosi fuera de madera. Observas que la empuñadura se encuentra cubierta de inscripciones rúnicas y emblemas mágicos. En el mismo momento en que la coges, el hombre suspira de alivio. Demasiado tarde. Le miras, y sientes un dolor punzante en la cabeza, tan fuerte y penoso que te desplomas en el suelo. Arrodillado, miras hacia tu enemigo.

Te sorprende ver que el hombre se pone en pie de un salto y te horroriza el terrible cambio que se produce en él. La piel de su rostro parece retorcerse y mudar de color, volviéndose más oscura y encogiendo hasta desprenderse de los huesos. Sus ojos resplandecen con un fulgor candente y de su mandíbula inferior salen unos largos colmillos. El miedo te corta la respiración al comprobar que es efectivamente un Helghast, una criatura de pesadilla, agente de los Señores de la Oscuridad.

Te está atacando con su poderosa fuerza mental (pierdes 2 puntos de Resistencia cada asalto). Las armas normales no le hacen ningún daño y es inmune a los ataques psíquicos. Por suerte, tienes algo capaz de herirle.


Helghast: Destreza en el Combate 22; Resistencia 30.
No puedes eludir el combate. La lanza es como una lanza normal, solo que mágica, y no cuenta como "arma" para el límite, sino como objeto especial.

¡A luchar!

Cargando editor
25/06/2017, 19:47
Lobo Solitario

Agarré la lanza y me di cuenta de mi error cuando sentí aquel golpe. Caí al suelo y miré horrorizado como se transformaba ante mis ojos. - Moriré, ¡pero sera luchando!

Agarré con fuerza la lanza y lancé mi primer ataque, el cual ni se esperaba. Empecé bien, dándole una enorme estocada. Pero el daño que me hacía sin tocarme me hizo resentirme enseguida y recibí unos buenos golpes por su parte. Podía sentir como no sólo mi cuerpo físico se iba rompiendo, sino que además dañaba mi alma...

Tiré de lo que me quedaba de fuerzas y pude hundirle nuevamente la lanza en el pecho. No estaba muerto, pero con suerte nadie más nos encontraría allí tendidos. Clavé mis rodillas en el suelo de golpe mientras sentía como mi vida se iba. Cuando mi cuerpo golpeó el suelo yo ya había dejado de vivir.

* F I N *

Sentí como le atravesaba con la lanza de lado a lado. Esta vez moriría, eso seguro. El Helghast cambió de forma, convirtiéndose en una bella dama, que me suplicaba clemencia. Eso me enfureció aún más y le llevé al suelo con la lanza ensartada en su cuerpo. Una vez tumbado bocarriba, la restorcí con rabia hasta que dejó de moverse... de quejar.. gruñir... respirar. Di dos pasos hacia atrás, y caí de culo en el suelo. Benditos dioses que me protegen cuando más lo necesito.

Besé el sello que llevaba en mi mano y me dejé caer hacia atrás sobre la hierba. Necesitaba un respiro antes de continuar...

- Tiradas (5)

Motivo: Morir!!!!!

Tirada: 1d10

Resultado: 9

Motivo: Morir!!!!!

Tirada: 1d10

Resultado: 4

Motivo: Morir!!!!!

Tirada: 1d10

Resultado: 1

Motivo: Morir!!!!!

Tirada: 1d10

Resultado: 8

Motivo: Morir!!!!!

Tirada: 1d10

Resultado: 10

Notas de juego

Lobo Solitario. Destreza en el combate (DC): 16 Resistencia 23

Helghast: Destreza en el Combate 22; Resistencia 30.

Resultado -6

LS: 23 -0(-2) = 21 -5(-2) = 14 -6(-2) = 6 -2(-2) = 2 -0 (-2) = MUERTO

E: 30 -8 = 22 -3 = 19 -0 = 19 -7 = 12 -9 = 3



Casi me lo crujo!!! xDD

Ese '1' te ha destrozado. ¡Lástima! Pero, si quieres, tienes una segunda vida. Todos la teníais en esta, así que, tú decides. Solo tienes que editar, vencer narrativamente (te quedarás a 1 punto de Resistencia) y continuar. 

Si la tomas, edita, si no, aquí mueres, aunque con honor!

Cargando editor
28/06/2017, 03:16
Director

Tomas ese respiro, con tranquilidad, con calma, hasta que tu respiración vuelve a ser normal y tu corazón deja de bombear adrenalina. Tus heridas, gracias a la energía curativa que tu propio cuerpo mantiene y que tantas veces te ha salvado, dejan de sangrar e incluso comienzan, muy lentamente, a cerrarse. Estás maltrecho, solo quieres descansar un rato más, pero sabes que no puedes. Ya has perdido mucho tiempo, y tu misión aún aguarda. Aunque sabes que muerto no llegarás a ningún sitio, si llegas demasiado tarde haberlo hecho tampoco servirá de nada. No sabes cuanto ha pasado, pero te pones en pie, cuelgas la lanza mágica –y no cabe duda de que lo es– a tu espalda, y prosigues tu viaje a pie.

*****

Después de andar durante casi dos horas llegas a la cumbre de una colina y ves el bosque de Durenor que se extiende ante tus ojos. El camino se dirige hacia el este y se interna entre los árboles por un lugar en el que ha sido construida una gran atalaya de troncos. Sobre ella divisas la silueta de un soldado haciendo guardia.

  1. Camina hacia la atalaya.
  2. Da un rodeo y penetra en el bosque para evitar al soldado.

Notas de juego

Resistencia: 5/23.

Te he anotado yo la Lanza Mágica ya ;)