Partida Rol por web

Ira miró a vanidad y le sonrió. Muchas veces había trabajado junto a ella, al igual que junto con lujuria ya que ambas demostraban tener una clara tendencia a lograr la ira de los hombre y las mujeres. Con lujuria jugaban como dos niños a crear celos entre los amantes que acababan en grandes estallidos de Ira y, junto con vanidad forjaban la senda de la imperfección en los corazones de los seres humanos. No creerse tan bello o bella también solía generar grandes arrebatos de Ira...

Sonrió al recordar aquellos momentos..

Vanidad tiene razón, aunque sean seres de luz, no sólo representan todo aquello que detestamos sino que además conocen las reglas del juego perfectamente y saben ser tan astutos y combativos como nosotros... Debemos andarnos con cuidado...

No tuvo tiempo de hablar con la muerte cuando esta los envio al Jardin del Eden, donde al parecer se realizaria esta pelea entre el bien y el mal. Aquel lugar no le inquietaba como parecia hacerlo a los otros hermanos, ya que ca habia conseguido uno de sus primeros triunfos junto a unos de sus hermanos. Avaricia y Egoismo controlaron a Eve para que se acercara al arbol, pero fue un serpiente que la tento para que tomar la manzana que marcaria el principio de todo.

Obsservo como una serpiente pasaba por aquellos hermanos en los que pensaba antes de terminar junto a él, subiendo por su cuerpo hasta llegar a envolverlo con cuidado en su cuello. Le sonrio a la serpiente y luego a Locura cuando se le acerco a preguntarle si era culpable.

Lo soy. respondio con una gran sonrisa, que no dejaba ver si habia confesado o solo seguia la broma del loco.

- Vale, esta bien..tengo que confesar...yo...odio este lugar sobre todas las demás cosas... " La perfecta abundancia me provoca nauseas." Masculló con ironia frotandose la Barba descuidada mientras deambulaba por el Eden. Su primera preocupación era sentirse cómodo, eso lo tenía claro.

Por allí donde pasaba pobreza la frondosidad de las flores marchitaban y pronto aquella parte del bonito jardín quedó convertido en un árido parque descuidado donde algo de suciedad se amontonaba en las esquinas. Las aguas del lago se enturviaron pasando a ser una mera charca y la cascada menguo convertida en un simple canalillo de agua.

- Lo segundo que no soporto es a los traidores. Dijo urgándose el interior de su oreja con la larga uña de su dedo meñique mientras cerraba uno de sus ojos y con el otro escrutaba a todos los presentes.

Culpa no pudo contener la risa ante el comentario de sus hermanos.

Reconozco muy bien mi maldición y creedme cuando os digo que el CULPABLE no os lo va a decir en la cara. Tratará de engañar, seducir, mentir o parecer que está loco o indiferente- dijo parandose a mirar a cada una de las maldiciones y pecados según las nombraba-. Quizás el que menos lo parezca será el que nos traiga la ruina.

-¿Ya nos vamos?-Pregunto a muerte cuando abrió el portal y bajo del escenario pero no dejo de cantar. -Bueno ya que nos vamos con la muerte a otro lado amenizare el viaje con una buena canción. Una vez mas aclaro la garganta y caminaba mientras entonaba de nuevo con otra voz.

Cuando llegaron al paraíso, Obsesión no pudo mas que sonreír y maravillarse, hay empezó todo esa obsesión de la serpiente por engañar a la mujer, y la obsesión del propio dios de escarmentar a sus hijos... algunos lo llamaban castigo mas ella sabia que estaba obsesionado con el control y al perderlo puso punto final y se lavo en la pila mas de 200 veces las manos o si... era obsesión de la buena la primogénita y era excitante. Pero había cosas mas importantes entre sus fans había detractores que preferían a otra diva nueva.

-Como pensar que los rumores de Chisme eran ciertos... pero si lo dice Muerte... debe ser cierto. Bueno de todas formas ya hemos ganado antes y lo volveremos ha hacer, no comprendo quien puede querer que termine esta era de felicidad sin limites. Puede que tal vez, ¿Locura o Duda? Pero ya saben por ser... locura y duda. ¿Muy evidente verdad?-No tenia culpables ni como saber empezar a hacerlo, ni siquiera tenia una buena canción para ese momento así que simplemente tatareaba mientras pensaba.

Cuando envidia entró en la sala le embargó la reminiscencia del deseo que provocaba en los mortales - Trae trae trae - Cogió la comida de Gula, tanta como le cabía entre las manos, las últimas palabras de culpa le hicieron soltarla en busca de algo más paradógico - ¿Tienes una maldición? ¿Qué? ¿Porqué? Yo también quiero una, ¿Quien te la ha dado?

No sé qué criterio usaremos para nuestras votaciones... pero el avatar no debe resurgir, quien señalemos no solo estará en peligro de ser votado, también de ser vigilado por el resto, tengamos los ojos abiertos

Sus hermanos y hermanas discutían sobre lo que deberían hacer. El propio Duda no tenía ni idea, pero expresó sus pensamientos en voz alta.

-La putada es que no sabemos nada, solo que hay traidores- sentenció Duda. No es que quisiera a sus hermanos, pero tampoco le atraía la idea de perder aliados frente a las fuerzas del bien- ¿qué debemos tener en cuenta para votar a otros?

Sin pruebas y sin saber nada, ¿quién debía morir? Por lo que a él respectaba, todos tenían las mismas posibilidades de llevar el bien dentro y por tanto había que pensar antes de actuar.

-Matemos a los que nos caigan mal. - propuso Intolerancia ante la pregunta de Duda. Ese tipo siempre estaba con sus preguntas, qué rabia. - Por ejemplo, al tipo sucio este. - señaló a Pobreza. - No soporto su olor. Estará mejor muerto.

  Como siempre, se limitaba a observar todo cuanto le rodeaba, cada gesto, palabra, reflejo que hacían los demás, todo podía ser usado como un entretenimiento para su persona, ver a los humanos tan felices creyendo que eran mejores que nadie cuando realmente no eran mas que patéticos seres que no sabían absolutamente nada del mundo le provocaba un gran regocijo, las ganas de reír a carcajadas lo invadían cada vez que los veía tan confiados y seguros de sí mismo.

  Pero aquel día fue algo especial, jamás podría haber esperado algo mejor que lo que estaba pasando frente a sus ojos, la muerte, la muerte había llegado y se los había llevado al paraíso. - ¿Es que nadie es capaz de ver lo irónico de todo esto? - Decía mientras se llevaba la mano a la cada y se doblaba mirando al cielo. - ¿Nosotros, seres de maldad pura, en el cielo?  Los seres de la luz deben estar revolviéndose de sólo pensarlo. - Las carcajadas iban en aumento mientras estiraba sus brazos en cruz y daba vueltas sobre sí mismo. - ¿Pero sabéis que es lo mejor de todo? Que creen que conseguirán su objetivo, ¡pero vamos! ¿De verdad creen que serán capaces de acabar con nosotros? ¡Los pecados nunca morirán! ¿No es eso lo que deberíais todos estar pensando? ¿o es que de verdad tenéis miedo de esos pobres payasos?

  Dejó de hablar unos instantes a causa de la risa que le entró el ver a todos tan preocupados por un asunto que, claramente, era tan isignificante como la existencia de la humanidad. - Vamos, no me hagáis reír... 

- Los pecados y vicios como tal puede que no desaparezcan, -comenzó, dirigiéndose a Burla.- pero nosotros y nuestros poderes, si.  -Le dio un mordisco a la manzana.- Los humanos son demasiado fáciles de corromper como para permanecer "en la luz", aún sin nadie que les ayude.

Bien, bien. Esta claro que todos tenemos mucho que decir, hermanos. Pero basta de pamplinas. Yo me niego a resignarme a un mundo donde no tenga lugar ninguno de nosotros. Somos lo mejor que le ha podido pasar a esta mísera roca flotante decía impunidad mientras deseaba cosas con las que estar cómodo sin ser necesarias si quiera.

Materializo una sala de estar, y lo hizo en medio de todos sus hermanos, sin importarle el importunarles. Deseó un sillón de cuero con orejeras, y este se hizo, deseó una butaca para los pies, y esta se hizo también. Fue deseando cosas absurdas como una lámpara, un mueble bar, un gramófono. A medida que estas cosas aparecían iba moviendo a los demás de su sitio, pero no le importaba. El resultado fue que se había creado un saloncito en medio del círculo de los pecados y los vicios, y ahora todos parecían estar en torno a él ¡ja! Sé de un par que se estarán jodiendo pensaba en envidia avaricia y soberbia. Pero a Impunidad, en el fondo, no le importaba. Sabía que conseguiría calmarlos y que al final a nadie le importaría que hubiese cogido el mejor sitio, apartando los además de su entorno. Ni que les hubiese molestado; al fin y al cabo, sabía lo que se hacía, sabía librase de las situaciones molestas.

Que tengamos que estar aquí tirados. Y que haya traidores entre nosotros no significa que no podamos estar cómodos dijo mientras abría el mueble bar y se servía un whisky bien cargado con dos piedras de hielo que no se descongelarían. Bien, sirvanse sí quieren, y empecemos a pensar y dejémonos de monerías. se sentó en el sillón que había materializado sabiendo que al invitar a sus hermanos saldría airoso de haber montado el cavaret. Pensemos... Pensemos...¿de quién hemos pensado siempre que era el más débil y moldeable de nosotros? preguntaba casi retóricamente mientras sus ojos se giraban hacia culpa.

Rio un poco mientras dejaba a la serpiente en el piso, para que volviera a sus labores.

Me parece una muy buena idea esta de empezar a señalar a otros... comento mientras se metia en el centro de las creaciones de los demas como si buscara un lugar para él. Voy a decir sin rodeos que pienso votar a Pereza, siempre me parecio alguien que no merecia ningun respeto que le da el resto. No se quien fue el que dijo que es la madre de los pecados siendo yo soy el mas viejo de todos los pecados. le explico al resto sin dejar de sonreir con maldad.

Mirando a unos y otros con los brazos cruzados, Ruina solo esboza una media sonrisa apenas perceptible y que más parecía una mueca que una sonrisa -allá vosotros, yo paso de pensar, eso es para débiles. Lo suyo es actuar. Si algo no te parece bien simplemente tienes que luchar por ello cueste lo que cueste, pasando por encima de quien haya que pasar. Se van a enterar esos dichosos seres de luz. Ellos mismos se han buscado la ruina al traerme aquí, no saben con quién se la están jugando- cruje primero los nudillos de una mano y luego los de la otra, volviendo de nuevo a su posición de brazos cruzados. Demasiado claramente se notaba en su tono de voz que le daba igual a quién tuviese que matar para quedar con vida y darle una lección a esos seres de luz. 

"Mira que ni muerto me dejan descansar en paz..." 

Suposiciones, únicamente suposiciones. Eso es todo lo que tenemos. Y preguntas! Vale, si, preguntas también. Conjeturamos sobre la presencia de uno o más seres de luz y eso nos lleva automáticamente a desconfiar unos de otros. Yo no me fio de ti. Yo de ti tampoco pero ahora escúchame. Calla! Lo que debemos hacer es pensar como nuestra presa. Que haría yo si fuese una Luciérnaga entre un grupo de Oscuros? Lo más probable, empezaría a acusar a otros desviando de mí la atención o me mantendría en silencio para pasar desapercibido. También montarías grandes elucubraciones para crear una cortina de humo. Puede que Engaño nos engañe al acusar a Pereza, que Impunidad acuse impunemente a Culpa aunque Culpa no sea culpable, que el intolerante de Intolerancia acuse por su naturaleza. Creo que el único con razón ahora mismo es Duda, acaso no dudamos todos? Yo si, yo también, y yo, yo mucho, pues yo lo tengo claro, yo no lo sé. SILENCIO!

- Eh tú, suelte ese chuletón!! dijo enfadado al ver que envidia le robaba la comida,- no seas tímido, ven y comparte la mesa conmigo, tengo salsas y cortes de carne de todos los estilos...siéntate y come, eso ayuda a pensar.se llevó un trozo de estofado a la boca.  No dejaba de darle vueltas, -A ver, no es que me importe que empezemos a liqudarnos así como si nada,encerrándonos a todos aquí sólo cabría esperar que alguno acabase muerto...pero, ¿como cojones vamos a saber si nos estamos cargando a los putos seres de luz?

Odio comienza a reir al escuchar la línea de razonamiento de Locura.

Cuando termina la invitación de Gula, pasando una mano por la rodilla de Lujuría:

- Me debe haber afectado algo la visita al paraíso, pues las palabras de Locura me han sonado razonables. Si fuéramos uno de ellos, yo intentaría sembrar la duda- Haciendo un gesto con el dedo a Duda- entre todos. Pero lo realmente curioso es que llevamos aquí un buen rato ya, y aún hay hermanos que a diferencia de cuando estábamos en el local no han dicho ni una palabra, ¿Desesperanza, Enfermedad se os ha comido la lengua el Ávatar?

No sabía si tomarse bien o mal que Locura dijera que él tenía razón aunque le concedió el don de la duda... quizá fuera cierto eso de que los niños y los locos siempre dicen la verdad y se fiara de él. Odio en cambio sí fue directo aunque no le achacó nada porque sabía que él era así.

-No os voy a engañar, me gusta que existan dudas, me encanta... menos cuando las tengo yo. Ahora entiendo como os sentís con mi poder, es un poco frustrante a veces. Pero quizá sea algo necesario, no creo que sea bueno fiarnos de nadie solo por su palabra ni tampoco de sus acusaciones. Necesitamos algo que nos lleve a elegir bien.

Por desgracia, y aunque más de uno ya había empezado a acusar directamente a alguno de sus hermanos y hermanas, eran simples palabras motivadas por sus emociones o porque les caían mal. Aún no había demasiados indicios que señalara a nadie como agente del bien, y eso le sacaba de quicio a Duda. La ironía de la que tanto hablaban los demás volvía a hacer acto de presencia pues la propia esencia de la Duda no sabía qué hacer.

Materializo un inmenso y elegante, pero a la vez amenazante Rotweiler a mi lado y hago que se siente junto a mí mientras acaricio lentamente su nuca al tiempo que su mirada se mueve inquisitiva entre el resto de los presentes.

Escucho con atención los comentarios que poco a poco van surgiendo en referencia a la presencia entre nosotros de ese puto cáncer a erradicar de forma inmediata.

Doy una larga calada mientras, en silencio, asiento a las palabras de muchos de ellos. Efectivamente, la desunión del Mal es lo que más buscan las pérfidas fuerzas de la luz. No lo podemos permitir. Pero tampoco existen indicios claros todavía. No obstante...

No puedo asentir a las palabras de todos pues, como bien ha dicho Odio, algunos siquiera se han pronunciado aún. No puedo evitar que el mastín frunza el ceño y gruña ligeramente cuando posamos nuestra mirada sobre esos que todavía no han hablado.

Sentada al lado de Soberbia, que esta demasiado concentrado en su tonto perro para fijarse en el bonito detalle que le ha hecho, Vanidad va considerando lo que se dice, como a otros las palabras de Locura le hacen sonreir, y asiente a lo que dice Odio

-si, debemos estar algo locos, porque a mi también me parece que Locura tiene razón. Reina la duda entre los malvados, y el engaño entre los seres de luz. Eso si es ironico, y no que nos traigan a luchar al lugar de nacimiento del Pecado Original, querido Burla-

Y siguiendo la lógica de Odio observa a los dos silenciosos que ha mencionado, igual que el perro de Soberbia a sus pies

La conversación empieza a ser cíclica, redundante.... todos empiezan a acusar sin razón alguna, hablan de muerte, de castigar, de acabar rápido...

-Que aburridos sois... Cuándo vamos a hacer algo útil caballeros? Empieza a ser desesperante veros discutir sin finalidad alguna...

Otra botella se ha materializado en la barra, esta vez es Jack Daniels. Relleno mi chupito mientras espero alguna respuesta del resto de presentes.

-No va siendo hora de hacer algo productivo?