Partida Rol por web

Más allá de las montañas de la locura

Capítulo 11: de vuelta al mundo de los vivos.

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13/03/2016, 08:49
Alexander Peabody
Sólo para el director

Las palabras de su padre resonaron en su mente durante largo tiempo, de tal modo que se quedó estupefacto durante eternos minutos, contemplando las implicaciones.

Tim no regresará, ¿Sabe? - dijo por fin a un Nils que parecía ignorarle por completo - Ahora es guardian del Oscuro. Han estado a punto de abrirle la puerta, pero aún está cerrada... - sus emociones pasaban con fluidez de la alegría a la tristeza - Están a punto de llegar...

Se asomó a la ventana, como esperando oír en cualquier momento el bramido de los motores que anunciaría el regreso de la expedición.

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13/03/2016, 19:39
Aramiker Menez
Sólo para el director

Muy interesante.- Si le hubiesen dicho antes de partir en la expedición Starkweather-Moore que iba a encontrar algo así no se lo hubiera creído. En toda su vida de periodista de fenómenos paranormales se había topado con muchas falsedades y también contado muchas mentiras. Ahora, ya retirada de esos asuntos, resulta que encontraba algo que, de resultar cierto como le parecía, hubiera supuesto encumbrarla a lo más alto de las Ciencias Esotéricas. ¿Podría publicar aquello? Estaba claro que antes de hacer cualquier cosa tendría que asegurarse de su veracidad. Aún se estremecía al recordar los sueños que había tenido. ¿Eso es lo que Danfoth le había provocado a ella y a  sus compañeros?

 

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13/03/2016, 19:54
Aramiker Menez

- Deje que lleve yo el peso de la organización, guiada eso sí por los médicos y Charlene misma. Ella debe descansar o caerá desmayada.- Se preocupaba Menez por el estado físico de su compañera. Así que sacó su libreta y comenzó a tomar notas de lo dicho por la bióloga.- ¿Necesitarán algún tipo de muestra nuestra? Sangre, orina...heces.-Preguntó más por curiosidad de saber cómo iban a poder saber con certeza si estaban o no infectados. El análisis que hacía Halperin, desnudarlos, no le parecía muy científico.

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13/03/2016, 20:00
(Starkweather-Moore, guía) Nils Sorensen

Cuando, media hora después, claro y nítido, se escuchó el sonido de dos aviones, Nils, con un levísimo gesto, que para él era el sumum de la expresividad, te miró fijamente.

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14/03/2016, 11:54
Dominique Pickwell

Yo llego al campamento mas muerto que vivo, siento que no tengo mucghas fuerzas, la verdad, exhausto y dolorido, poco puedo hacer, solo espero que pueda recuperrame pronto y ser util. ahora mismo soy solo una persona muy herida.

Poco habia visto e piloto salvo aquella sala llena de pelotas y un pcoo el interior de una ciudad de la que salio tan rapido como entro, asi que poco entendia de lo que se comentaba. Mas bien estaba expentante, ya que sus heridas eran mas graves de lo que en un principio se pendo, debido al frio, no notaba los huesoso rotos.

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14/03/2016, 13:46
Chester Field

Más que un campamento científico, aquello parecía un campo de refugiados, repleto de gente con heridas de bala, congelaciones y otras aflicciones físicas... por no hablar de las aflicciones de la mente, desde los que estaban ligeramente alterados hasta los que se les había ido por completo la chaveta, que podían ser tan peligrosos para ellos mismos como para sus convecinos.

Por lo más sagrado, la Antártida  nos ha sacudido pero bien...

No faltaban provisiones, pero la falta de combustible era preocupante. Sin combustible no podrían salir de allí, y sin queroseno no podrían calentarse. Quizás no morirían de hambre, pero podrían morir helados, lo que tampoco era un futuro muy halagüeño.

Chester no sabía muy bien qué hacer, o sea que sacó una de sus cámaras y empezó a tomar fotos del campo, para que el mundo viera el lamentable estado de aquella expedición y con un poco de suerte - y tal y como pedían los papeles de Meyer - nadie más volvería a organizar una misión semejante hasta aquellas heladas tierras.

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14/03/2016, 19:28
Alexander Peabody
Sólo para el director

Sé que es mucho pedir, teniendo en cuenta cómo me he comportado... - empezó a hablar hacia su carcelero - pero me gustaría hablar con ellos, tener noticias de mi amigo, ya que no habrá regresado ¿Podría..., podría transmitirlo, por favor, cuando lo considere oportuno...? - terminó, timidamente.

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14/03/2016, 19:31
(Starkweather-Moore, científico) Charlene Whitston

¿Muestras...? - respodió Charlene, algo ausente, a la pregunta de Menez - Análisis, claro, es una gran idea... Sería lo idóneo. Desconozco el equipo del que disponen los médicos, aunque dudo que tengamos nada tan sofisticado como eso; seguramente tendremos que resignarnos a la observación pura y dura..., pero no lo sabré hasta que establezcamos las medidas concretas - terminó, volviendo a sumirse en un leve sopor concentrado en la tarea más inmediata.

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14/03/2016, 21:47
(Starkweather-Moore, científico) Richard Greene

Aterrizar en medio de vientos de muchos kilómetros por hora fue toda una hazaña. Eso había que reconocérselo a Halperin y a Dominique, los dos pilotos que maniobraban los aviones.

Les recibió una figura solitaria. En el tiempo precedente, habían estado hablando con Hopewell, el radio de Lexington, y se había acordado el protocolo. Ahora se sustanciaba esto.

El doctor Greene tenía a sus pies un voluminoso fardo. Por lo demás, sonrió, abrazó, palmeó espaldas y disimuló su asombro y preocupación ante las ausencias.

Bien, bien, bien, los que estén heridos que no salgan. Hace un frío del carajo, perdonen la expresión. Pickwell, Whitston, usted también, Field, parece algo aturdido ¿verdad?. No, no me cuenten nada. Olviden los problemas, de momento, al menos. ¡Tregua! Deje de hacer fotos, Field, no es el momento. Tengo aquí provisiones, keroseno, mantas y una tienda de repuesto. Sykes, ¿está entero? Me alegro. Tome a dos o tres personas que estén de una pieza y ponganse a montar el campamento.

El viento cortante y fuerte le hacía tener que gritar, pero conseguía transmitir ecuanimidad, calma y hasta buen humor.

Los que no tengan nada que hacer y crean que pueden aguantar la visión de la sangre, que me sigan. Necesitaré asistencia. Porque tenemos un herido de bala, ¿verdad? Tomó su maletín, cuando todo ya parecía estar en marcha, y se dirigió al Belle.

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14/03/2016, 21:57
(Starkweather-Moore, guía) Nils Sorensen

Nils meditó las palabras de Alexander. Tomó de su bolsillo un librillo de notas, arrancó una hoja, tomó un lápiz y lo puso al alcance del mecánico metido a saboteador en sus ratos libres. No dijo más palabras, pero volvió a su lugar y se quedó esperando.

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14/03/2016, 22:00
Guardián de los Arcanos

Dado el tiempo abominable que hacía las cosas fueron como la seda. Se montó una tienda grande donde cabían todos los reducidos a cuarentena, se montó un generador, se hizo sopa (la eterna, omnipresente sopa grasienta) y cacao. Se hizo un montón con las aborrecidas mascarillas de oxígeno: a todo el mundo le habían salido llagas ahí donde se tenían que sujetar las pinzas, y lo menos eran esas pequeñas quemaduras producidas por el frío y la mala circulación. Lo peor eran las manos y los pies de Pickwell, que se habían puesto negros y comenzaban a heder. Rucker había sido operado durante tres largas horas, durante las cuales el doctor Greene exigió, ordenó, tiranizó y tuvo a todo el mundo pendiente. Sykes se hizo cargo de los tratamientos básicos contra la congelación. Tras operar al herido de mayor gravedad, Greene se dedicó a los anteriores, raspando piel necrosada, bañando en agua tibia, haciendo tragar a todos desorbitantes cantidades de líquidos tibios, vendando, cosiendo, cortando, untando pomadas...

Había una pequeña tienda anexa para que todo el mundo pudiera hacer sus necesidades (mucho, mucho líquido) y otra con una pequeña radio de campaña para poder comunicarse con el campamento Lake. De esta última tienda se hicieron los dueños Moore y Acacia en cuanto pudieron.

Pronto todos los que sabían de mecánica y no estaban siendo atendidos estuvieron trabajando con los aviones.

Pero Greene, en cuanto hubo acabado con las curas, se los trajo de nuevo a la tienda cogidos metafóricamente de las orejas. Todo el mundo necesitaba descansar. Pasaban de las 24 horas las que todos llevabais sin dormir.

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14/03/2016, 22:10
(Starkweather-Moore, científico) Richard Greene

¡A dormir! ¡Ahora mismo! Todos necesitan el sueño reparador. El viento agitaba la lona de la tienda con violencia. Mientras estén dentro, varios hombres vendrán a hacer muros de contención. Se espera un tiempo agitado, pero ustedes no se preocupen lo más mínimo en, al menos, ocho horas. Tengo aquí tranquilizantes para el que tenga dificultad. Tranquilo, Douglas, todo está controlado. Halperin había sido el primero en recibir una de las inyecciones de Greene, y ahora parecía más tranquilo, aunque murmuraba para si todo el rato.

¡Chutes! ¡Drogas! ¡Vicio! Vamos, no se han visto en mejor ocasión: tienen la oportunidad de probar sustancias prohibidas, señores, y con plena legalidad, porque yo lo prescribo. ¡Se permite fumar! ¡Tengo tabaco! Y luego: ¡a dormir todo el mundo! ¡Aquí mando yo! Proyectando la voz de forma admirable, se anticipó a Acacia que casi no podía tenerse en pie y ya iba a saltar como un muelle ante el rigor de la autoridad. ¡Mientras haya urgencias médicas el doctor dicta las leyes! Yo velaré su sueño. Les despertaré si hay problemas. Recuerden que está prohibido salir hasta que los muchachos terminen los trabajos si es que deseamos mantener el aislamiento.

Aquello parecía una leprosería: pocos eran los que no tenían toda la cara llena de gasas húmedas. Olía a medicina, a sudor y a cosas peores bajo el aroma dominante. El espacio para tumbarse estaba tasado con rigor, pero había un pasillo libre para ir al baño, y un pequeño espacio con dos sillas de tijera y una mesita donde se había puesto el infiernillo de keroseno que tenía, permanentemente, sopa calentando. Algunos ya se habían derrumbado en su catre y roncaban.

Greene tomó un grueso libro que traía y se sentó, dispuesto a velar.

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15/03/2016, 00:08
Aramiker Menez

Era muy tentador dejarse llevar por las órdenes de Green. Y Menez lo hizo, pero se dejó un pequeño resquicio para resistirse y seguir concentrada en lo que tenía que estar.

- Si yo le sirvo de ayuda, puedo ayudarle.- Contestó al médico cuando pidió voluntarios para la operación de Rucker.- Sólo tengo el pie dañado. Por lo demás me siento bien.- Sopa, cacao y ocho horas de sueño harían de Menez la misma de siempre.

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15/03/2016, 00:10
Aramiker Menez
Sólo para el director

Notas de juego

Si puedo me agencio una gasa con sangre o algo de material corporal de Rucker.

Guardián: nada más fácil. Lo tienes.

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15/03/2016, 15:42
Dominique Pickwell

Dom agradeció las curas y no dejaba de mirar sus extremidades ennegrecidas, asustado.

Tras curas con calor, medicinas y algun que otro pinchazo agudo segun le raspaban, notaba sus pies ey eso era mucho, tras el infierno de frio y nieve.

Apenas en unos segundos, el abatimiento y el cansancio hicieron mella en el, cayendo en un profundo sueño.

 

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15/03/2016, 15:49
Chester Field

No hacía falta que dijera nada más, pues Chester había oído la palabra mágica. ¿Dormir? No. ¿Sopa? ¡Menos! "Tabaco", había dicho el bueno de Green.

Sin dudarlo un instante, Chester se acercó al doctor y le pidió, con ojitos de cordero degollado, si no tendría por casualidad algún paquete suelto; él se encontraba bastante bien físicamente - algo aturullado mentalmente, había que reconocerlo - y no creía que un cigarrillo o dos fueran a dejarle peor de lo que estaba.

Minutos más tarde, con una taza de cacao en una mano y un cigarrillo prendido en la otra, Chester se arrebujó bajo la manta, dispuesto a repasar mentalmente todas las cosas que habían sucedido en aquella esotérica expedición...

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16/03/2016, 17:19
(Starkweather-Moore, científico) Charlene Whitston

Con la tranquilizador imagen de su prometido velando su sueño - o eso pensó, ingenuamente - y todo bajo la apariencia de un cierto control, Charlene pudo por fin descansar; disfrutó, claro, de la sopa y el cacao, pero su necesidad de dormir era tan urgente que dejó apartado cualquier otro pensamiento. Estaban, por fin, a salvo.

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16/03/2016, 17:21
Alexander Peabody
Sólo para el director

A toda la expedición Starkweather-Moore, y en memoria de los ausentes, me veo en la obligación de escribir unas breves lineas, que espero lean sin prejuicio:

Lo hecho no puede desacerse; es inmutable. Con toda sinceridad, he de admitir que hubo parte de enajenación en mis acciones. Pero debo decir también que su objetivo era salvar vidas, las de esta expedición en primer lugar, las de otros muchos que podrían seguirnos, y quizá las de toda la raza humana. No me equivoco, estoy seguro, de que el equipo enviado ha estado cerca, muy cerca, de despertar definitivamente una criatura poderosa y maligna; ellos mismos podrán confirmarlo. Algunos no han vuelto, y de ellos, al menos el Sr. Pooster ha sido destinado a proteger la prisión en que esa criatura fue confinada.

¿Tan terrible ha sido el crimen de tratar de evitarlo, ese riesgo cierto?¿No se estará juzgando, en este caso, el terror que provoca que un hombre, un simple hombre, haya tenido la visión del terrible riesgo y haya tratado de evitarlo?¿No ha sido ese mismo hombre determinante, con sus hechos anteriores y durante muchos meses, para que se llegara con éxito a este destino?.

Les ruego que lo reconsideren; nada deseo más que ayudar, porque estoy seguro de que si analizan bien las circunstancias no pueden dejar de estar de acuerdo conmigo en que no se debe perturbar al Oscuro, ese ser terrible y durmiente. A la luz de los nuevos acontecimientos, les suplico de corazón una nueva oportunidad.

Atentamente suyo, A. Peabody.

Notas de juego

Con gesto serio, se la entrega a Nills, dándole las gracias.

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16/03/2016, 21:13
Guardián de los Arcanos

Tras muchas horas de sueño durante las cuales, caso de haber abierto un ojo, habríais visto a Greene cómodamente instalado en su silla, con una botella de wisky y un vaso y partiéndose de risa (por lo bajini) con una novela de un tal PD Wodehouse, la tienda fue amaneciendo a la vida y (en el caso de los heridos) al dolor.

Desayuno de sopa, pastillas, alguna inyección, curas dolorosas, chocolate, mermelada, carne de foca, más pastillas de colores y así.

Moore estaba leyendo una nota que le había entregado Greene, con semblante preocupado. Reunió a la gente. Los unos con la anestesia fluyendo generosa por sus venas y todos comidos, dormidos, bebidos y otras necesidades inmencionables satisfechas, esperaron a ver qué quería decir.

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16/03/2016, 21:19
(Starkweather-Moore, líder) William Moore

Me ha sido entregada una nota de uno de nuestros saboteadores, Peabody. Dado que muchos de ustedes pudieran ayudar a su esclarecimiento, voy a leerla aquí: no callen nada, por estúpido que pudiera parecer. Estoy seguro de que todo esto no son más que elucubraciones de su mente enferma, pero no puedo dejar ni un gramo de información sin procesar, ya que se plantea la posibilidad de que vayamos al rescate de Meyer y de Sutton. Dice así:

A toda la expedición Starkweather-Moore, y en memoria de los ausentes, me veo en la obligación de escribir unas breves lineas, que espero lean sin prejuicio:

Lo hecho no puede desacerse; es inmutable. Con toda sinceridad, he de admitir que hubo parte de enajenación en mis acciones. Pero debo decir también que su objetivo era salvar vidas, las de esta expedición en primer lugar, las de otros muchos que podrían seguirnos, y quizá las de toda la raza humana. No me equivoco, estoy seguro, de que el equipo enviado ha estado cerca, muy cerca, de despertar definitivamente una criatura poderosa y maligna; ellos mismos podrán confirmarlo. Algunos no han vuelto, y de ellos, al menos el Sr. Pooster ha sido destinado a proteger la prisión en que esa criatura fue confinada.

¿Tan terrible ha sido el crimen de tratar de evitarlo, ese riesgo cierto?¿No se estará juzgando, en este caso, el terror que provoca que un hombre, un simple hombre, haya tenido la visión del terrible riesgo y haya tratado de evitarlo?¿No ha sido ese mismo hombre determinante, con sus hechos anteriores y durante muchos meses, para que se llegara con éxito a este destino?.

Les ruego que lo reconsideren; nada deseo más que ayudar, porque estoy seguro de que si analizan bien las circunstancias no pueden dejar de estar de acuerdo conmigo en que no se debe perturbar al Oscuro, ese ser terrible y durmiente. A la luz de los nuevos acontecimientos, les suplico de corazón una nueva oportunidad.

Atentamente suyo, A. Peabody.

Tanto Moore como Acacia habían consumido buena parte del tiempo gastado en desayunar hablando por la radio, sin duda haciendo inventario de materiales para la posible expedición de rescate.