Partida Rol por web

-Estupendo, tus deseos son órdenes esta noche, mi niña- te tiende el brazo y una vez estás sujeta empieza a andar por la calle seguro de sí mismo mientras te explica algunas de sus recientes "promesas" literarias que pueden proporcionarle un buen pellizco, aunque él insiste en que éso no es lo importante si no la buena literatura que pueden crear.
Volvéis a hablar con algo más de detalle sobre el "incidente" sucedido en caso de Patrizia y para entonces ya llegáis a tu piso al cuál te acompaña.
Seguís hablando un rato más antes de entregaros mutuamente algo de pasión en forma de vitae intercambiada de cuerpos....

Cuando despiertas a la noche siguiente semi desnuda en tu cama, Henry parece que ya se ha marchado aunque te avisó de que estaría algo ocupado ésa noche... En realidad casi siempre dice lo mismo.
Por suerte todavía son apenas las 19 y si te das algo de prisa encontrarás alguna de las tiendas abiertas, incluyendo Harrods

Las conversaciones con Henry siempre son tan centradas en lo mismo, pero me gustan solo por que hacen que piense menos en lo que soy realmente. Besos, caricias, intercambio de vitae es el fin del dia y el sopor me lleva a quedarme dormida entre sus brazos. Cuando despierto ya no esta, sonrio desperezandome Henry siempre tan ocupado, siempre con mucho que hacer hasta para tu pobre niña me levanto y miro el reloj, me doy una ducha rapida y me visto, vaqueros, un jersey, las botas y mi abrigo por los hombros. Miro el bolso y compruebo que llevo dinero como las tarjetas de credito Bueno a por el vestido si no me equivoco Harrod's aun esta abierto y puede que encuentre algo que me valga para la fiesta salgo del piso cerrando la puerta y caminando para coger un taxi y me lleve a la tienda. Miro al bajar del taxi y entro si no recuerdo mal esta en la segunda planta subo las escaleras mecanicas para llegar a mi destino y comprarme un bonito vestido que le pegue a ese collar Creo que algo sin hombros para que se pueda apreciar y el pelo tendre que recogerlo

Tras buscar con detenimiento encuentras un par de vestidos que te gustan bastante, por suerte para ti la talla no es demasiado problema, sin embargo no puede decirse lo mismo del precio que parece salirse un poco del presupuesto, así que deberás pedir un préstamo, prescindir de ropa tan "lujosa" o simplemente alquilar el vestido en cuestión...
El caso es que después de decidirte debes marcharte al "Blue Iguana" cómo cada noche, además después de faltar hace un par de noches no puedes permitirte volver a llegar tarde.

Por suerte llegas sin retrasos y te vas directa al camerino para escoger "ropa" para ésa noche. Peter te saluda por el pasillo tranquilamente mientras se dirige a las salas privadas, dónde suele estar más a menudo por los posibles "incidentes".

Son preciosos, pero carisimos, al final decido irme tras pensarlo mucho Tener que pedir un adelanto y a saber si luego puedo pagar el piso,, alquilar uno o ir con algo mas normal. Creo que tenia un vestido en el armario que Morris me compro que casi no me he puesto puede que valga, pero aun asi no le hara justicia al collar Llego al local y saludo a Peter mientras camino al camerino a cambiarme, me miro al espejo mientras me arreglo un poco en ropa interior Bueno, tambien podria probar en alguna tienda mas asequible, no sera de alta costura pero seguro que da el pego, pero esas solo abren por las mañanas y yo no puedo salir de casa Me termino de cambiar y me calzo con los zapatos de tacon para esperar que comience mi numero Bueno, creo que tengo aun tiempo pero aun asi tendre que decidirme.

Mientras sigues pensando en la trivialidad de qué vestido escoger y dónde conseguirlo, te llaman para que salgas al escenario así que decides ir a hacer tu trabajo y de paso distraerte un rato.
El público es el habitual, hombres callados que no os quitan el ojo de encima pero que se sientan un poco más alejados de la tarima cómo si quisieran pasar desapercibidos, mirones que no tienen ningún tipo de pudor en colocarse en primera fila con expresión bobalicona y otros más escandalosos, generalmente en grupo, que piensan que así conseguirán llamar la atención de alguna...

Después de un par de horas sobre el escenario y entre las barras de acero, te dejan un rato de pseudo-descanso, eso es dejar de bailar y bajar pero sin embargo debes encargarte de agasajar a los clientes para agradarles e intentar que se sientan lo suficientemente a gusto para que consuman más.
Cuando empiezas a andar mirando alrededor y adaptando la vista a la oscuridad de las mesas y butacas de ésa zona, distingues a alguien que te llama la atención porque te suena muchísimo, manteniéndose algo distante cómo si estuviera ahí por pura casualidad o error.
Tras unos instantes identificas que se trata de Alexander, el muchacho motorista, que esta vez luce algo más... formal, sin llegar a serlo del todo.

Tras un par de bailes, bajo de la tarima y camino entre las mesas hablando con los que conozco, sonriendoles y haciendo que se sientan mas comodos, a algunos los conozco de antes de mi transformacion y se cosas de sus vidas que me contaron entre copas, les doy dos besos, disimulo fingiendo que tomo alguna copa con ellos . Guiño algun ojo a alguno como se que les gusta y mi atencion se centra en alguien, es nuevo tras un rato veo que es mi buen samaritano, niego para mi y camino hacia el.

Hola, veo que has aceptado mi invitacion digo desde donde estoy mirandole a los ojos No pareces tu, aunque no sabia si siempre ibas de motero.

-Parece evidente que no, y que las apariencias engañan- afirma arqueando un poco la ceja mientras echa otro vistazo alrededor antes de inclinarse un poco hacia delante mirándote, lo cuál le lleva a dibujar una sonrisa enigmática.
-La verdad es que no esperaba que fuera un sitio así, ni mucho menos, aunque tampoco esperaba verte encima de ése escenario precisamente...- apoya las manos en las rodillas y se impulsa un poco para levantarse mientras se coloca la chaqueta de cuero marrón.

-Me parece que estás trabajando, será mejor que me marche- comenta en un claro síntoma de incomodidad respecto al lugar en sí.

Nadie se espera cual es mi trabajo pero hay que pagar las facturas digo sonriendo y niego al ver que se levanta no es mi descanso, asi que te quedas y me siento a tu lado, te prometi que te invitaria a algo despues de que me rescataras de esa carretera y me trajeras a la city pongo morritos agarrandome de su brazo Pero si esperas solo me queda una hora y te acompaño a donde quieras a tomar algo le miro a los ojos mientras espero respuesta Ademas podemos hablar, aqui poco puedo hablar, soy un bicho raro para algunas

-No creo que rescatar sea la palabra adecuada, seguro que hubieras llegado de todas formas...- se encoge un poco de hombros, metiendo las manos en sus bolsillos y mirándote inquisitivamente mientras le coges del brazo aunque tampoco se opone.
-Entonces será mejor que nos veamos cuando acabes de trabajar, tampoco me gusta demasiado éste.....ambiente- concluye tras una pequeña pausa con una sonrisa burlona que enseguida borra.

-Te esperaré en Piccadilly Circus, junto a la boca de metro. No tardes mucho, tengo ganas de hablar contigo- te guiña un ojo cómplicamente y sin más abandona el local.
El sitio en sí en una zona con pantallas luminosas de publicidad (las únicas de todo Londres) junto a la cuáles se encuentra una estatua representando a Eros o Cúpido y por ésa calle céntrica pasa una de las muchas bocacalles del metro. Quizá su intención sea ir a otro lugar pero ése lugar queda relativamente cerca del Blue Iguana.

LE sonrio asientiendo NOs vemos alli, no tardare mucho le despido con la mano viendo como se marcha quiere hablar conmigo que extraño pero me gusta vuelvo a mis quehaceres saludando a mas clientes y vuelvo a un ultimo pase tras lo que me marcho al camerino, cambiandome, me desmaquillo y me cepillo el pelo con cuidado. Me calzo y me abrocho el abrigo mientras sonrio mas que otras veces. Salgo despidiendome de todas y con el bolso al hombro. Camino tranquila aunque con pasos rapidos hacia el lugar de la cita, es extraño todo pero me gusta, a mi mente viene como conoci a Morris pero ya no soy humana.

Acabas el turno incluso algo emocionada o quizá ilusionada, en fin, el chico hay que admitir que transmite cierta atracción que no sabrías describir del todo, y además es todo un misterio, no cómo los típicos que quieren engatusarte hablando de sus trabajos, negocios y pretensiones generales.
Cuando llegas ya no hay demasiada actividad por la zona debido a la hora de la noche, sin embargo sigue habiendo gente andando de un lado a otro, algunos turistas y grupos junto a la estatua de Eros, es una zona que casi nunca está vacía a menos que sean altas horas de la madrugada.

Te diriges a la boca del metro, de la cuál va entrando y saliendo gente a ráfagas constantes, y Alexander ya está apoyado en la barandilla que rodea el hueco esperándote con una sonrisa.
-Buenas noches de nuevo... ¿no estás cansada?- pregunta riendo mientras se dispone a bajar las escaleras.

Miro a todos los que pasan sin muchas ganas en otra ocasion puede que me hubiera recreado pero no ahora. Sonrio al verle alli apoyado y me acerco
Hola otra vez me pongo a su lado y le sigo en la bajada no, no estoy cansada, es pronto para mi aun. Tenia que haberte advertido en que trabajaba, pero sino no hubieras venido me rio negando y me meto las manos en los bolsillos del abrigo, dudando si volver a cogerme de su brazo como en el local, bueno aqui no voy con la ropa de trabajo y pasariamos por una pareja pero no es lo que quiero ya tuve bastante una vez. Es guapo, simpatico pero....Graziela te estas ilusionando demasiado y la caida sera peor

-También podrías haberme indicado otra dirección que no fuera la del local, pero da igual, ya no importa- niega con la cabeza quitándole hierro al asunto con una sonrisa casi perfecta y encantadora mientras os mezcláis con los demás pasajeros, pasando por las pequeñas puertas metálicas que os dan acceso a las diferentes vías a pesar de que todavía no sabes dónde pretende llevarte pero se dirige a la linea 4.

Se queda de pie junto a la larga fila de bancos pegada a la pared y mira un momento uno de los muchos relojes indicando la hora antes de girarse hacia ti.
-Dijiste que estabas visitando a una amiga allí, ¿verdad? Es extraño porque apenas hay casas en ésa zona...- pregunta con presunta inocencia mientras mueve ligeramente uno de sus pies enfundando en una bamba blanca y marrón que da un toque más informal a su ropa.

Lo se, pero es que paso mas tiempo en el local que en mi casa, si tanto te interesa puedo darte mi direccion pero solo me verias cuando salgo a trabajar y cuando vuelvo del trabajo sonrio mirandole y siguiendole sentandome en uno de los bancos dejandole sitio a mi lado por si quiere sentarse Realmente es una conocida, a la que espero no tener que volver a visitar, es un tanto excentrica pero todos somos un poco excentricos no crees? le miro y luego al reloj seguro que soy como te esperabas la noche que me conociste pero puede que te equivoques, a veces se tienen que hacer cosas por sobrevivir

-¿De verdad te sale a cuenta ése trabajo? Todavía no he oído que me digas nada positivo sobre él, apuesto a que podrías conseguir algo mejor si te lo propusieras de verdad- cuando haces mención al excentricismo sonríe de forma enigmática y se dirige a uno de los vagones de metro semi-vacíos que acaban de llegar.
De nuevo se mantiene de pie, sujetándose a una de las barras superiores horizontales y quedándose junto a algún asiento por si prefieres estar algo más cómoda.

-Todos tenemos secretos, manías, miedos y excentricidades, sólo que algunos se empeñan más que otros en disimularlos para aparentar normalidad... Aunque en realidad ése sea uno de los pocos motivos que nos hace únicos y diferentes los unos de los otros- alza la vista y mira el mapa de las diferentes rutas y paradas de la línea de metro antes de volver a mirarte.
-¿A dónde crees que vamos? Me estás siguiendo sin más- comenta con una pequeña risotada.

Podria intentarlo pero me gusta la noche y no creo que haya muchos trabajos nocturnos digo entrando en el vagon y sentandome en un sitio si hay libre, sino me quedo de pie frente a el y me rio a mi me gusta la opera y suelo escuchar algun fragmento cuando estoy en casa pero creo que molesta a los vecinos aunque nunca se han venido a quejar. Ves, soy rara

Cita:

Me quedo pensativa y levanto un poco la mirada para ver el plano Veamos, linea marron, creo que esto va hacia Oxford Circus y luego sigue llegando a Wembley Park en ese recorrido pueden haber muchos sitios. vuelvo a mirarle y me levanto quedandome un poco pegada a el No se donde me llevas, pero hasta ahora te has comportado como un caballero asi que espero que siga asi Alexander

-Te gusta la ópera... bueno éso no es tan raro aunque es cierto que sorprende después de haberte visto bailando en una barra metálica...- reprime una sonrisa al mencionar ésto y después se mantiene en el mismo lugar mientras tú te acercas.
-Caballero... Me temo que no debes haber conocido a demasiados hombres entonces, porque no estoy seguro de merecer ése adjetivo- tras pocos minutos el vagón se detiene y él se dispone a salir, comprobando que le sigues hacia Oxford Circus hasta que salís y sentís nuevamente el aire nocturno en vuestros rostros.

-Me encanta la iluminación nocturna- afirma con un extraño brillo en los ojos mientras se queda observando la fachada del Museo de Historia ya cerrado a ésas horas -¿Qué es lo más emocionante que has hecho en tu vida?- pregunta mirándote interesado.

Algun dia te invitare a mi casa para que escuches opera conmigo en una cena sigo mirandole a los ojos Y en cuanto a los caballeros que he conocido en mi vida, uno me dejo lleno de deudas y por eso trabajo en la barra bailando siempre se me ha dado muy bien el baile mi padre se ocupo de que asi fuera El tren se para y se abren las puertas saliendo, el museo de Historia Pues no se, creo que nada. No ir a las clases engañar a mi padre pero nada mas. Creo que soy demasiado aburrida vuelvo a mirar la fachada y luego a Alexander creo que te gusta la noche como a mi y es extraño a pocos nos gusta y nos atrapa

-El concepto de caballero parece haber cambiado mucho a cómo yo lo tenía entendido...- comenta en tono de burla mientras revisa su reloj, bastante grande y aparentemente de buena calidad.
-La oscuridad de la noche te brinda ventajas y misterios que pocos conocen- te mira un momento y entonces se pone en marcha, cruzando la calle instransitada a ésas altas horas hasta llegar a las puertas dobles de cristal blindado del museo.

Sonríe de forma traviesa mientras mira la fachada y entonces coge los tiradores de la puerta zarandeándolos.
Te quedas extrañada, sin saber qué pretende, por suerte alrededor de momento no parece haber nadie observando.
Vuelve a zarandear las puertas y éstas acaban cediendo ante su insistencia aunque enseguida empieza a sonar un leve pitido en uno de los laterales, se acerca a un pequeño panel con botones que controlan la alarma y lo arranca de cuajo dejando tan sólo unos pocos cables deshilachados y chispeantes a los que preferirías no acercarte.

-¿Quién hablaba de excéntricos?- pregunta de forma retórica mientras te observa esperando ver cómo reacciones ante lo que acaba de hacer.

Le miro como anda hacia la puerta mientras me habla tal vez no fuera un caballero solo alguien interesado por otras cosas Le miro asombrada y cuando termina ¿Eres un ladron? pregunto asombrada y miro a la calle Estas loco, va a venir la policia y nos pueden llevar a la comisaria mas cercana me rio acercandome mas Espero que no esperes que entre ahi dentro al menos no sola

Estas loca Graziela si entras ahi dentro y mas con completo desconocido

Niego volviendo a mirar si viene algun coche patrulla Bueno estoy esperando señor ladron