Partida Rol por web

¿Ya se había despertado? Eso empezaba a tomar mala pinta... Tenía que conseguir toda la información que pudiese de aquella mujer.

- Vaya, eso no lo sabía... - respondí pensativo - ¿Por primera vez? ¿Contra quién? ¿y quién es el que le espera desde hace eones?

Fue hace mucho tiempo, se usaron para parar a un antiguo que se alzo de la nada para destruirnos, pero fue aniquilado. Antes de morir descubrieron que solo era un peon de alguien mayor y al bloquearle su poder, solo dire que dijo que volveria. Todos los que usaron las espadas no volvieron, desaparecieron, sus esencia formo parte de su arma hasta el fin de los tiempos en que sera liberada.

- ¿Y quién es el que le espera desde hace eones? ¿Anna? - pregunté al ver mi pregunta sin respuesta.

A pesar de que las cosas empezaban ya a tomar forma aún quedaban multitud de interrogantes. ¿De dónde salían los sueños? ¿Qué papel tenía el príncipe en todo ésto? Y...

- ¿Y Irina? ¿Porqué buscan ambas las espadas por caminos diferentes? ¿Su objetivo no es el mismo? ¿O tal vez Irina no sepa toda la historia...?

Tal vez las buscan por separado por que Anna es mas paciente, sabe que tarde o temprano las espadas llegaran a donde deben, tambien sabe que el mundo no dejara de girar un dia para buscarlas. Prefiera hacer lo mas tranquilo y sencillo, esperar cosa que Irina no es capaz de hacer. sonrio mientras me levanto y me aliso el vestido un poco. Anna no es a la que espera, no sabemos si es mujer o hombre, solo que la buscara y destruira todo para que vuelva a su lado.

- Ahm, supongo que forma parte de la visión... - comenté pensativo para mí mismo.

- También es casualidad que se sepa que alguien le espera pero no se sepa quién... En fin.

El gesto de Isabella de levantarse indicaba que daba la conversación, pero ¡A mi aún me quedaban muchas preguntas! A pesar de ello me levanté con ella, aunque aprovecharía hasta el último segundo.

- ¿Y sabe qué papel juega el príncipe en todo ésto? ¿Hasta dónde sabe? ¿Está tomando medidas?

No me podía creer que me estuviera tomando en serio una antigua profecía sobre la... ¿Gehena?

- Por cierto...- una pícara sonrisa tomó forma en mi rostro - ¿Sabe dónde podría encontrar a ese... "ser"?

Cojo un libro de la estanteria mas cercana y le soplo el polvo para dejarlo sobre la mesa cerrado.

Todos hemos estado en la profecia desde el comienzo de los tiempo, desde que fue formulada. Tal vez no sepas que en algunas religiones se cree en la reencarnacion, una rueda cosmica que hace que vuelvas a este mundo y tengas que repetir a veces errores y otras veces los mejores. te miro a los ojos y sonrio El te buscara y te tentara, no sabras que es el hasta que se vuelva a mostrar si le rechazas, si le aceptas tendras todo y mas de lo que te imaginas.
Por cierto si quieres, puedes quedarte a descansar esta noche aqui, el amanecer esta cerca

- Supondré que eso es un "no tengo ni idea" en la versión melodramática-pseudomisteriosa a la que me está acostumbrando ya todo el mundo últimamente...- pensé no sin cierto amargor

- Así que tendré todo lo que me imagino... ¿Cuál es el problema entonces? - respondí acentuando mi media sonrisa.

Su comentario hizo que mirara el reloj de bolsillo egipcio que llevaba siempre, recuerdo de mi estancia allí décadas atrás.

Que se llevara lo que mas aprecias, lo que mas ansias, lo que mas anhelas y que perderas todo rastro de conciencia sonrio mientras abro el libro escrito crees que en sanscrito o puede que copto perder la completa autonomia de tus actos, la verdad a mi no me gustaria para nada, prefiero la libertad de elegir mi propio destino aunque este escrito en algun libro. Por cierto ¿sabes quien eras en el pasado?

La respuesta de Isabella hizo que levantara la vista del reloj. Fuí a decir algo pero decidí callarme. Mejor.

- Si se llevara lo que mas aprecio, lo que mas ansio, lo que mas anhelo y si pierdo todo rastro de conciencia... Entonces no es todo lo que imagino...

La verdad es que tenía curiosidad en saber quién podría haber sido en el pasado, aunque la verdad es que todo aquello de la reencarnación me parecía una invención más entre la multitud de explicaciones que ofrecían las diferentes religiones... Antes de renacer y muchas décadas después era cristiano, como todo el mundo de la época, pero nuestra condición hace siempre plantearse cosas tarde o temprano...

- No... ¿Quién era? - pregunté seriamente

Sonrio mirandote de reojo y levanto un brazo extendiendo un dedo hacia ti

Enoch hijo de Cain, el primero de sus amados, por aquel que creo la ciudad digo con tono solemne aquel del que descienden muchos de nosotros, aquel que murio para apaciguar al padre sangriento

Una siniestra sonrisa se dibujó en mi cara ante aquel dedo acusador. - ¿Enoch? ¡Vaya! Fuí un gran tipo entonces... supongo - pensé divertido.

¿Así que yo soy el alma reencarnada de Enoch? - pregunté ya serio - Y... ¿Cómo lo sabe? ¿Aparece mi nombre en ese libro?

Este libro es una cronica, es una copia del Libro de Nod, en el estan los nombres de miles de vampiros, pero se corta en el momento que Dracul se alzo. En que comenzo a moverse por los lugares mas insospechados. Nadie mas volvio a escribir en el niego mirandolo y poniendo la mano sobre sus amarillentas paginas Hay signos que no son externos pero estan ahi, como el echo de la curiosidad natural.

- Debe ser que somos los únicos vampiros de la historia con curiosidad... - pensé con ironía.

- Habla como si le hubiese conocido - bromeé

Se me había hecho ya muy tarde, así que una vez terminada la conversación tuve que aceptar su oferta. Era demasiado arriesgado volver al hotel ya, pero no había podido permitirme perder toda esa información. Además, al fin y al cabo ella sabía que el futuro de la estirpe dependía de mi. O algo así... Además probablemente sabía de mi condición, así que se lo pensaría dos veces antes de intentar nada...

El letargo me sobrevino mientras escribía una carta al príncipe con mi verdadera identidad. En ella le "solicitaba educadamente" (en nombre del poder concedido a los arcontes, representantes de la ley de la Camarrilla bajo la guía del Consebla bla bla...) que me informara de cualquier asesinato o incidente sospechoso entre la población vampírica de Londres. Tenía que asegurarme de que aquel ser realmente existía, de dónde se escondía y de si representaba una amenaza. Entonces tal vez molestaría a Lucinde...

Duermes, sueñas, te despiertas, te llega el olor a sangre en la mesa del cuarto, una copa con el preciado liquido aun caliente te espera alli junto con una nota.

Cita:

- Pero esta mujer conoce la intimidad? - pensé algo enfadado al leer la nota - En fin, al menos no tendré que molestarme en mandarla...

Pegué un rápido vistazo a la copa de sangre y la rechacé al instante, puesto que, a parte de que conocía las propiedades de la vitae vampírica, en caso de ser humana tampoco podría estar seguro de que satisfaciera mi exquisito apetito ventrue...

Salí del asqueroso refugio nosferatu mientras marcaba el número de Irina. Volvería tal vez para hablar con los nosferatus, pero no ya aquel dia: ya había tenido suficiente inmundicia alrededor por un tiempo...

- Saludos - contesté cuando Irina descolgó - se encuentra ocupada?

Cita:

- Perfecto, gracias. - contesté por teléfono a Irina - Hasta luego entonces.

Colgué algo defraudado. La verdad es que había esperado poder hablar aquella misma noche con Irina y a partir de ahí tener algo con lo que continuar, pero parecía que tendría que hacer tiempo de momento...

Tiempo... tantas décadas interminables... La caza me mantenía ocupado y disfrutaba con ella, pero siempre habían días, semanas, meses... años en los que el tiempo fluía tan lento como la lengua de un glaciar. Había leído, viajado e incluso había aprendido a tocar el piano. Sabía desde temas de seguridad básica hasta algo de política actual. Pero aunque siempre acababa encontrando un nuevo quehacer, a veces el mundo se me quedaba pequeño.

Ese era uno de esos momentos.

Volví al hotel y cogí el libro que llevaba en la maleta. "La torre de la soledad" se llamaba. Una irónica y melancólica sonrisa se dibujó por un momento en mi rostro al sentarme en la cama y empezar a leer.

Para pasar el Tiempo...

Suena el telefono mientras estas leyendo, es un numero que no conoces cuando descuelgas escuchas musica, no es de tu estilo, de fondo y una voz masculina.

Hola, soy el sherrif, mi tia Anna me dijo que le llamara si conseguia cierta informacion que buscaba...Scott por amor de Cain, sacale el ojo si quieres, pero no se lo metas por otro lado

Aquella llamada obligó a mi mente a volver, de los desiertos de arena en los que estaba sumida, de nuevo hasta la habitación de hotel. ¡Qué rápido había vuelto aquel caso a buscarme!

- Buenas noches

- ¿Su tía? ¿Le dijo qué? - pensé extrañado al escucharle

- La información es siempre bienvenida... ¿De qué se trata? - respondí sin mostrar mi pequeño asombro.

Hemos atrapado a un grupo de, bueno creemos Sabbats, pero no estamos seguro, puede que sean solo mercenarios. replico al otro lado del telefono mientras se sigue escuchando musica y golpes Hemos encontrado una de las espadas, es enorme y estaba en su poder. No nos ha querido decir de donde la han sacado, solo han dicho que no sabemos que hacemos al pararlos y que su jefe nos lo hara pagar...Scott, tenia que interrogarle