Partida Rol por web

Mil balas sobre Avalon Hill.

Cap. 5. El pueblo a la sombra de Avalon Hill.

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25/05/2009, 20:40
Thomas Lewis

Lewis imitó el pedido de Buckner pidiendo dos whiskys, bebiéndose uno de un trago con un sonoro resoplido posterior y quedándose después con el otro pequeño vaso.

-Así que a la tienda de Broken...- no disimuló en absoluto una sonrisa pícara, pero no hizo ningún comentario al respecto. Ya era hora de que los mozuelos espavilaran y empezaran a intimar un poco -Bien, divertíos... intentad que no se os pase la hora, yo estaré por aquí- le da unas palmaditas de ánimo amigables al joven y se despide de la vaquera con un gesto de cabeza, llevándose el whisky hasta la mesa del tipo que les había invitado a jugar hace unos instantes.

-No soy un experto en el juego y acostumbra a ser más divertido con más gente... ¡pero qué diablos! Desplúmeme- ríe por lo bajo más que dispuesto a divertirse y abtraerse por un rato, dejando el sombrero a un lado y acomodándose en la silla hasta que empiezan a repatirse las cartas.

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25/05/2009, 22:35
Sarah Hudson-Parker

Ella y los tres hombres bebieron algo, Sarah optó por un solo whisky y lo bebió apresuradamente, cómo si en ello se le fuera la vida y luego, cuando estaba por pedir otro, el saludo de Bonito a modo de despedida le sorprendió en el intento y dejó la idea para otro momento. Le hizo una mueca de fastidio al vaquero que iba a por lo suyo y se volvió a la barra y nuevamente volvieron a interrumpirla, evidentemente no lo pediría.

-¡Vaya!

Se volvió sorprendida a Buckner, enarcó una ceja y se encogió de hombros viendo como Lewis se iba a jugar con el hombre aquel; no recordaba aquel plan pero no estaba mal, después de todo era mejor que intentar pedir un whisky y que todo el mundo la interrumpiera, además, no le sentaba bien. Solía marearse incluso con uno, lo cual le provocó recelos respecto al vaso que ya había dejado en la barra de madera.

-No se nos pasará y no pierdas todo el dinero, Lewis.

Dijo Sarah algo más suelta que de costumbre, luego sujetó a Buckner de la mano con fuerza y tiró de él sin soltarle para nada, se paró en la mesa de los que les habían invitado a jugar, al menos a los muchachos y con una sonrisa sincera les dijo:

-Jugaría contra ustedes pero no quiero mandarlos a casa sin dinero, chicos.

Sin lugar a más, haló de Buckner puertas afuera con una sonrisa y salió del bar con rapidez sin soltar aquella mano, apresada con fuerza; una vez afuera se volvió a él.

-¿Vamos a lo de Broken?

Sarah soltó una carcajada y sólo entonces se percató de que lo tenía presa de su mano y enrojecida lo soltó de inmediato, pero de pronto era como si tuviera 7 u 8 años de nuevo.

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25/05/2009, 23:13
Lee Miles

Le estreché la mano con fuerza - Heredia. Cuánto tiempo, pensaba que no volvería a ver esas espuelas nunca más.

A pesar de la simpatía que me provocaba aquel encuentro mantuve mi rostro adusto y serio. Las huellas imborrables del pasado seguían marcándome, y aquel vaquero era parte del mismo.

¿qué tal si hablamos de cómo te va junto a una botella de whisky? - le invité, no sólo por saber en qué había pasado su tiempo, también por alejarnos de la joven Wales. Mi pasado, es mío y de nadie más. - pensé. No quería que nadie más se involucrara con él.

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26/05/2009, 01:32
Josephine "Josie" Wales

Josie devolvió el saludo con un leve movimiento de cabeza. Se había mantenido silenciosa prácticamente la hora entera, sin embargo confiaba, mas bien sabía, que eso a Miles no le incomodaba. La conocía desde hace mucho y de un modo u otro tenía una actitud paternal hacia ella. Tal vez nunca se lo había dicho y quizás nunca se lo dijera, pero le estaba agradecida. El, en ocasiones tanto o más cerrado que ella a la hora de hablar de sí o de su pasado, le inspiraba respeto y eso era algo de los que muy pocos hombres podían hacer gala.

Los vió alejarse, pero ella continuó allí un tiempo más. Tenía ganas de beber un trago, pero también tenía cosas en las que pensar y aprovechó el momento a solas para continuar haciéndolo. Quince minutos después, cansada de estar mirando un punto incierto en el horizonte, se dijo que en realidad nada tenia que hacer vigilando lo que se hiciera con el ganado, ya no era de su propiedad, el negocio estaba cerrado y lo que pasara de ahí en adelante era harina de otro costal.

Se ajustó el sombrero, y cogiendo las riendas de Zaina, se encaminó con ésta hacia el bar.

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27/05/2009, 09:49
Zacharias Buckner

Casi a tirones salió el hombretón del salón, la imagen tenía algo de cómico, pues ver como la delgada Sarah arrastraba a Zach iba de alguna manera en contra de las leyes de la física. De todas formas, no parecía muy descontento este último con la situación, incluso se le dibujó una sonrisa en su rostro cuando se despidió de los jugadores, era evidente que él iba a estar en mejor compañía.

Tan decidida como cuando eras una niña rió también el vaquero, simulando como que no se había dado cuenta del azoramiento de la joven, se llevó la mano detrás de la nuca, bajo el sombrero que se había colocado apresuradamente mientras salía. Ahora, la idea de la tienda de Broken se le antojaba mucho peor que cuando la pronunció en el bar, allí tampoco podría conversar con tranquilidad, tal vez alguien lo reconociera, y le echara en cara quien era, su padre no había hecho “demasiado” por la gente del pueblo.

¿Qué tal si vamos a la panadería a por algo de comer y luego cabalgamos hacia algún lugar agradable y menos concurrido? no tardó Buckner en reaccionar a sus propias palabras, y habló de nuevo, de forma mucho más atropellada Bu…bueno, ya sa…sabes, la gente del pueblo, si te apetece, o nos quedamos donde tú quieras, o a la tienda, se dio cuenta de que las manos le sudaban, y las enlazó delante de su estómago, hace calor aquí, por eso decía, bueno, si tu quieres, ir a otro lugar más fresco ahora mismo se sentía entre los primeros en estupidez de todo el oeste, bueno, más bien de todo el continente. No se explicaba cómo estaba tan nervioso, sólo era Sarah, trató de imaginársela como cuando era una niña…

Pero al mirarla de arriba abajo, le resultó imposible hacerlo, obviar las curvas que se adivinaban bajó la ropa fue misión imposible, y el calor se hizo aún más intenso. Se quitó el sombrero con un gesto brusco, sacudiendo el polvo que lo cubría, buscando distraer la atención de las imágenes que acudía a su mente.

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27/05/2009, 17:45
Sarah Hudson-Parker

Todo era sí, todo era no. Sarah estaba parada allí frente a aquel armario, mirándolo con aire confundido, en realidad si parecía una pequeña. El cabello suelto para que el sombrero pudiera permanecer en su sitio, ni siquiera intentó removerlo de su lugar aunque se vio tentada hacerlo al ver como Buckner jugaba con el suyo. Todo era sí, todo era no y en realidad ella no sabía exactamente por qué le era tan dificultoso responderle a su amigo de la infancia. Si querían hacer algo, lo hacían y ya, nunca había sido tan complicado. Entrecerró los ojos y sonrió, se mentía si pensaba que ella no estaba un poco nerviosa también.

-Es verdad, hace calor...- miró a su alrededor. -Vayamos a por algo de comer, es una buena..., parece una buena... Bueno, es una idea, Zack.

Lo llamó Zack y no Zackie o pequeño Buckner y es que por más que Sarah quisiera convencerse, ya no eran unos niños y eso se podía ver fácilmente. Se paró a su lado, indecisa sobre ir por su caballo o ir hasta la panadería, comprar y volver entonces por los caballos; se veía menuda al lado de el 1.90 de Buckner y sólo entonces sonrió ampliamente, se volvió a él y entendió algunas cosas. El pasado de ambos era de ambos pero el pasado de cada uno, cuando ya no estuvieron cerca, había sido duro, al menos el de ella y nada indicaba que el de él no hubiera sido igual o peor.

-¿De verdad tienes ganas encontrarnos con alguien desagradable? Porque yo no y conozco a mucha gente desagradable por aquí. ¡Venga!

Sarah le tocó la nariz dando pasos ligeros hasta su caballo, puso el pie en el estribo y montó al animal que se vio sorprendido, luego la vaquera volvió a mirar a su amigo de la infancia.

-¡Te apuesto lo que quieras que te gano a llegar al río!

Hizo girar el caballo alrededor del vaquero y le sonrió mostrándose segura de sí misma y esperando que él aceptara.

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28/05/2009, 21:21
Director

-Por Cristo Rey, sigues tan madrugador, amigo –repuso el mexicano con una gran sonrisa. –Creo que queda un poco de café en la caseta, detrás de la oficina. Si te apetece, puedo tomarme un descanso.

Josie había rehusado el ofrecimiento de Heredia, y ambos cowboys se habían puesto en camino hacia el lugar.

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28/05/2009, 21:22
Director

El mexicano sirvió sendas tazas de una olla y las aderezó con un buen chorreón de whisky de malta. Se sentaron sobre unos barriles, en el andén, observando el humano ajetreo e intercambiando impresiones.

-Llevo medio año trabajando para Seth Doherty –había comenzado Heredia. - Paga bien y el trabajo es sencillo, pero si te digo la verdad, echo de menos la amplitud de las praderas. He oído que El Acerado, un rancho en el valle del Pecos, está preparando una remesa de mil quinientos longhorns para conducirla la próxima primavera a Abilene. Estoy pensándomelo… -El hombre dio un sorbo intenso y entonces observó con cautela a Miles. De repente parecía reservado, algo inquieto. -¿Y tú, qué me dices? ¿Piensas envejecer en ese rancho (el Ithaca, creo que se llama)?

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28/05/2009, 21:34
Director

-No se preocupe, amigo. Es más que nada por echar el rato y entablar conversación. Trabajo de noche, exclusivamente –replica el jugador guiñándole un ojo a Lewis y abriendo las cartas en abanico sobre la mesa. Ya bien barajadas, reparte con la habilidad de un prestidigitador. –¿Qué le parece si nos apostamos una copa?

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29/05/2009, 02:38
Lee Miles
Sólo para el director

Le dio un trago, dejando la mitad en la taza - Es tan bueno como de costumbre - dijo tras limpiarse la boca con la manga. - No sabía cuánto echaba de menos esto... - agregó con un deje de nostalgia en la voz.

El Ithaca es un buen rancho, amplio -con un vasto territorio- con buen ganado... suficientes vaqueros, habiles y tranquilos. Y jóvenes. - miró a Heredia un momento y pudo ver en su tez curtida que el tiempo había pasado para ambos, y no en balde.

Tras aquello estuve vagando de un lado a otro, alquilando mi lazo, mis revólveres y mi experiencia. - El veterano vaquero, se permitió bajar la guardia y dejar que los recuerdos afluyeran a él. Pocas veces tenía ocasión de hablar en compañía de un viejo amigo - Cuatro meses desde el este de Texas hasta Denver (en Colorado)... durante esos viajes se apaciguó mi espíritu y estuve pensando. - Sus ojos permanecían vidriosos, quizá recordaba algo de aquellos días en los que tan sólo vivía el día a día sin pensar en nada más. 

La mayor parte de mis sueños se perdieron. - No explica nada más, Heredia sabe bien lo que pasó - Lo único que me resta es ayudar a otros a conseguir los suyos. Y si es posible tener una vida tranquila. - se terminó la taza y esperó a que Heredia le sirviera otra.

La vida en un rancho... es algo que apenas recordaba como era. - se quedó en silencio recordando el pasado - El trayecto desde Pecos a Abilene, usando el viejo camino Chisolm... ¡qué tiempos! - suspiró - me gustaría volver a hacerlo, pero ya no soy un chaval, y todo lo que necesito está en ese rancho... el Ithaca. - por un momento le brillaron los ojos. - Envejecer... sería demasiado bueno, si acabaran así mis días...

 

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29/05/2009, 21:03
Director

Heredia dejó traslucir un mohín de disgusto. Se contuvo de decir alguna cosa y, tomando la taza de aquel hombre taciturno, volvió adentro por unos instantes. Finalmente, regresó con brebaje y no tardó en comentar:

-Así que quieres echar raíces, Miles. No tengo nada en contra de eso, pero... ¿Por qué aquí? –Negó con la cabeza y adoptó un tono enigmático: -Este no es un buen pueblo, amigo. ¿No la notas en tu nuca? La montaña de los muertos, así la llamaban los comanches. Ellos la temían, sabían que esas vetas de oro en sus entrañas no son más que parásitos en las heces del diablo. La sombra de esa roca convierte a los hombres en perros rabiosos y lame los pies de los de peor ralea. Créeme, sé de lo que hablo.

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31/05/2009, 11:53
Thomas Lewis
Sólo para el director

-¿Exclusivamente?, ¿qué tipo de trabajo es ese...?- preguntó Lewis con curiosidad mientras empezaba a recibir las cartas y las colocaba en abanico entre una de sus manos, mirándolas inquisitivamente pero sin expresión alguna. O al menos eso intentaba.

-Por supuesto, ¿qué sería del juego sin una apuesta? por pequeña que sea- rió por lo bajo, nada dispuesto a hablar de su propio trabajo a menos que el tipo se mostrara interesado en ello sencillamente por entablar conversación. Después empezó la jugada con tranquilidad. De momento le resultaba de lo más indiferente ganar o perder, así podía mantenerse mucho más relajado.

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02/06/2009, 18:48
Director

-Amigo –repuso el adversario con una sonrisa pícara-, soy un jugador profesional, esto es, me dedico a ir de ciudad en ciudad tratando de aportar un poco de luz a las maneras zafias de los ilusos que piensan que juegan al póquer. –Se palmeó ligeramente la frente, como si hubiese olvidado algo importante, y se adelantó para tenderle la mano a Lewis por encima de la mesa, explicando: -Por cierto, no me he presentado. Mi nombre es Thomas Norton, de Boston, Massachussets. ¿Es nativo de Little Troy? Tal vez le suene mi apellido…

Mientras hablaba, Norton hacía sus movimientos.

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02/06/2009, 18:55
Director

Apenas comenzaba a caminar, cuando distinguió una figura conocida caminando en su dirección. Era el sheriff.

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02/06/2009, 18:55
Gabriel "Buentino" Garrison.

Venía masticando tabaco y mostraba unas profundas ojeras, si bien la visión de Josephine parecía haberle avivado las pupilas. Se plantó ante la cowgirl con pose desvergonzada y escupió a un lado. Sonrío lentamente y dijo:

-Sí, señor, la mañana mejora por momentos. ¿Qué hace aquí tan solita, señorita Wales?

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02/06/2009, 19:25
Director

Mientras que Sarah hacía caracolear su caballo alrededor del embarazado Buckner, unas carcajadas llamaron su atención.

No eran sino los dos ayudantes del sheriff, Richmond y Taylor, quienes se reían de forma malévola, parados junto al carro de Andy Broken. El joven se giraba justo entonces, para descubrir a los dos empleados de la viuda Wales, y a pesar de encontrarse casi a la altura del banco, de camino a la tienda, ambos percibieron sin dificultades que su rostro componía de inmediato una expresión miscelánea de desengaño e indignación.

En un arrebato, Andy hizo girar al tiro y puso rumbo hacia ellos. Las sombras de Zach y Sarah, disparadas sobre la tierra, lo recibieron antes que ellos.

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02/06/2009, 19:28
Andy Broken

-¡Sarah –exclamó en cuanto estuvo a unos metros-, vengo del rancho! ¡Te llevaba un regalo!

Por más que procuraba contenerse, su garganta se quebraba como estrías de exigencia. A su vera, sobre el pescante, había un voluminoso paquete atado con cuerda de esparto.

-Es un regalo para una señorita, pero tú… -Lanza un dedo acusador a su espalda, donde los dos ayudantes siguen carcajeándose - ¡Ellos me han dicho que estuviste en el saloon! Eso no está bien, Sarah. Te estás dejando influir por la gente menos indicada–la alusión era obvia. Se cruzó de brazos aguardando una explicación.

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03/06/2009, 11:36
Josephine "Josie" Wales

Encontrarse con el sheriff produjo en Josie muchas cosas, pero ninguna de ellas fue agradable. No le gustaba ese hombre ni mucho menos le gustaba el modo en que la miraba, siempre parecía que se la devoraba viva por como lo hacía y aquello le resultaba repulsivo en especial porque él tenía la edad suficiente, o al menos así dejaba ver su aspecto, para ser su padre.

-No estoy sola, sheriff -le respondió porque no le quedaba de otra-, tengo una excelente compañía, la mejor de todas y la única que deseo tener -se llevó la mano al cinto y tanteó su arma, estaba claro que se refería a la pistola-... Además mis hombres me esperan en el bar.

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04/06/2009, 01:10
Sarah Hudson-Parker

Las palabras de Andy la tomaron totalmente por sorpresa, la sonrisa que tenía tras azuzar a Buckner con su caballo se le había borrado casi instantaneamente tras escuchar a Broken dirigirse a ella de esa manera. Hizo una mueca de incredulidad y se quitó el sombrero, de modo que sus ojos quedaron claros y fijos al hijo del tendero. Respiró profundo, intentando no perder la cabeza pero poco conseguiría la pobre Sarah.

-¡Haz el favor de cuidar lo que dices, Andy Broken!

Su caballo se movía nervioso pero más que nada era porque ella lo estaba, sentía un nudo en la garganta y estaba a punto de gritar de verdad. Hacía mucho tiempo que había dejado de ser una niña, casi el mismo tiempo que había dejado que alguien le levantara la voz de esa manera y la señalara como a una cualquiera. El caballo dio un paso atrás.

-¡Que yo sepa mi padre murió hace años! No te he pedido nada y creo que serías la última persona a la que se lo pediría si me tratas así. No doy explicaciones a nadie, por eso no me caso ni me enamoro, así que haz el favor de hacerte a un lado y no dirigirme la palabra nunca más en tu vida.

Pero la joven reaccionó.

-No te dejes malaconsejar tú, Broken. Y no te quites, iré por otro lado.

Hizo girar al caballo, echó una última mirada a Buckner y apretó las espuelas suavemente en las ancas del animal para que comenzara a andar. Ya le habían arruinado el día.

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04/06/2009, 20:28
Andy Broken

Andy se había quedado tan absolutamente atónito ante el desplante de Sarah que en un principio sólo pudo balbucear a sus espaldas:

-Sa… Sarah, no… no puedes dejarme así, con la palabra en la boca. –Y con más decisión: -¡Vas por mal camino, señorita Hudson-Parker! Estás todo el santo día rodeada de vaqueros y de este… de este… -terminó señalando a Buckner directamente- de este que no es más que el hijo de un bandido. ¿No sabías eso, eh? Es el hijo de un criminal. Eso se lleva en la sangre, Sarah, se aprovechará de ti, ¿lo sabes, verdad? Y luego te dejará. ¡Serás una arrastrada de por vida!