Partida Rol por web

Posiblemente Kyrie hubiera sido más profesional y discreta con respecto al tema, pero Erundur era demasiado confiado, y soltó lo siguiente al párroco sin pensarlo demasiado antes:

—Entonces el señor Rewilh Bydale le habrá comunicado qué somos miembros de la Orden de la Rosacruz de la Verdad, y que venimos a exterminar el mal que atenaza a este pueblo. Bien.— Ni corto ni perezoso, continuó: 

—Ahora, necesitamos que nos haga un resumen de  lo que sepa sobre esas muertes, y de por qué piensan ustedes que hay una intervención infernal en ello.—

Ya era demasiado tarde. Le hubiera confesado o no Bydale al padre Lucius la razón de la venida de aquellos dos extraños, ahora el párroco lo sabía.

Con suerte, Lucius sería un hombre de confianza de Rewith Bydale. Si Bydale había intentado llevar esto con discreción, en cambio, ahora el pobre párroco posiblemente estaría aterrorizado.

- Hace un mes y medio la Sacerdotisa de Ehlona encontró un cadaver en los bosques, investigamos el asunto con ella y llegamos a la conclusión que no habia sido obra de las bestias salvajes, ya que las heridas eran mas propias de una espada o un hacha que de las garras de un oso lechuza, tambien descartamos el ataque de orcos dado que estos tienen la costumbre de saquear los cadaveres y ese en cambio llevaba sus pertenencias encima.

El Padre Lucius toma una pausa antes de continuar.

- Ese fue el primero de los seis que se producirian en ese medio mes, entonces, hace un mes llegó al pueblo aquel mago, Einar, o el Purificador, como se hace llamar él. Él nos dijo que seguia la pista a un culto llamado Ojo de Redanna y nos explico el oscuro proposito del culto, de revivir a un poderoso demonio conocido como Radament. Desde entonces los asesinatos se han ido disparando, seis en la semana siguiente, nueve en la que la sigue, diez en la proxima y en esta ultima ya contamos nueve... y tan solo llevamos tres días de esta.

Habiendo Áran tomado viaje de esa forma, Kyrie no pudo mas que seguirle en cuanto a charla. A veces se preguntaba si esa ingenuidad era una prueba de la deidad que compartían. Suspiró, y reconoció para si que dentro de todo la respuesta obtenida era bastante informativa. Arrugó el ceño ante el número desorbitado de víctimas en tan corto tiempo, que parecían irse agravando hasta el punto actual, bastante crítico y mas aún en un pueblo pequeño. Ya había trazado al menos dos procederes distintos para algo así, pero datos adicionales le vendrían bien, por lo cual habló.

-Si recuerda algún patrón en concreto, podría sernos de ayuda para tratar de mitigar esta situación cuanto antes. ¿Las muertes se concentran en algún área concreta? ¿Tienen alguna predilección especial de género o edad? ¿Los cortes o heridas son sistemáticos?

-Al principio las muertes eran cercanas al bosque, luego empezaron a extenderse dentro de la ciudad, esporadicamente. Cuando llego el mago, recomendo a la gente se refugiarse en sus casas durante la noche, no sirvio de mucho y se produjeron mas muertes, no todo el mundo le hizo caso. Encontramos los cadaveres de aquellos que, haciendo caso omiso de las advertencias salieron y... desgraciadamente algunos fueron asesinados en sus propias casas, incluso a algunos vecinos que acudieron en ayuda de esas familias. Unos que me llamarón la atención fueron los cuatro que se reunieron en el almacen abandonado... todos muertos por heridas de un arma de asta, quizas una guja, pues eran cortes, no punzadas de lanza.

El Padre Lucius se lleva los dedos al mentón.

- Sobre como era los cortes... por desgracia hemos dado sepultura a los muertos y no me fije en ese detalle. Aun asi el mago parece observador, quizas deberias preguntarle, se encuentra en el templo de Pelor la mayor parte del tiempo, si bien acude a la taberna a comer.

Áran intentó prestar toda la atención posible a las palabras del Padre Lucius, y no perder detalle. Cualquier cosa que recordase podría ser importante y constituir la clave para descubrir a los criminales si se producía la ocasión.

Erundur indicó con su pulgar hacia la puerta exterior del templo por la que habían entrado no hace mucho. —Padre. Hemos visto en la plaza de la fuente a un individuo. Tuerto. Aparentemente un guerrero. Y sin embargo, parecía tener ciertos conocimientos prácticos de magia.— 

Hizo una pausa antes de preguntarle: —¿Es ese el mago, el tal Einar, o es alguien del pueblo...?—

Tenía cierta curiosidad sobre el individuo. Y... por qué negarlo;, aunque no lo sabía a ciencia cierta, Áran sospechaba que de una modo u otro, invocar a un demonio debería de requerir algún tipo de conocimiento sobre el poder arcano o el divino.

No se imaginaba a un simple campesino desentrañando los secretos que permitían abrir una puerta a los infiernos o traer un fragmento viviente del mismo a este mundo.

- Ah, imagino que hablas de Ragnar del Ojo Negro, es un viajero más, llego mas o menos al mismo tiempo que el mago. No se si hay relación entre ellos. Es un hombre callado, es un misterio porque está aqui, pero al mismo tiempo es un hombre facilmente localizable, pues siempre ronda los mismos sitios. Parece que mas que hacer algo se dedique a observar, como si esperase que pasase algo.

-Bien -miró al exterior- Aún nos queda bastante luz de día que aprovechar. Revisaremos lo que el mago tenga que decir y quizá volvamos cerca de que se ponga el sol para ver si Bydale ha vuelto de sus asuntos. Hasta entonces. Que esté a resguardo, Padre Lucius.

Anotó mentalmente el tema del hombre aparentemente tuerto, no negaba en absoluto que la naturaleza curiosa y habladora de Áran arrojara datos útiles, aunque seguía poniéndole un tanto de nervios.

Áran no añadió nada más a lo ya dicho. Hincó la rodilla frente al altar. Un breve ruego con unas pocas reverentes palabras susurradas. Y al incorporarse de nuevo, un ademán de despedida con la cabeza al padre. 

Luego siguió los pasos de Kyrie de cerca, en cuanto ella estuvo en disposición de salir del templo. Las botas resonaron sobre el entarimado.

Hora 12:12

Os despedis del Padre Lucius y dais inicio a la investigación, Ragnar sigue fuera aunque ya no os presta atención.

Cuando salis del templo de St Cuthbert y os encaminais hacia el templo de Pelor veis salir un joven de pelo negro recogido en una coleta y un extraño tatuaje en la frente. Suponeis que es el mago del que os hablabla el Padre Lucius. Es bastante alto y le saca casi una cabeza a Kyrie.

Kyrie se movió, pensativa sobre lo recabado, tratando de revisar sus propios conocimientos.

Ojo de Redanna...Radament...

No cuestionaba el tema de la invocación. Por una u otra razón, había personas lo suficientemente locas, desesperadas, o sedientas de poder como para considerar una excelente idea el tratar de ganarse el favor de esa clase de seres dándoles entrada a este plano. Con sus pasos mientras esto, llegaron a donde debían, y allí estaba el sujeto descrito. Túnicas marca arcana que trató de identificar al instante, tomo de magia, un mago hecho y derecho aparentemente. Y que probablemente se haya sentido, cuanto menos, incómodo con la mirada recibida. No fue descortés, grosera o ceñuda siquiera, simplemente...estremecedora, y un tanto extraña. Parecía que conforme se acercaba, estaba con la vista fija en el cuello. No era algo particular contra él, sino que en general sucedía cada vez que se aproximaba a un mago. Sin embargo, su voz sonaba formal y educada al hablar, como siempre.

-Buenas tardes. ¿Su nombre es Einar? Mi nombre es Kyrie, y él es Áran. Arribamos hace poco al pueblo para tratar de mitigar la situación actual de Piedra del Lobo, el Padre Lucius nos ha dicho que asuntos similares le mueven.

Hora 12:12

Kyrie mira la marca, la cual identifica como un objeto mágico un tanto particular, la parecer lo utiliza como substitutito de algo que iria sobre su cabeza, quizas le moleste llevar sombreros,diademas u otros objetos similares.

- Si, mi nombre es Einar Ledrake, cazademonios profesional -dice ofreciendo su mano, pero se detiene al mirar a Kyrie- Por cierto, mis ojos estan aqui arriba, ni siquiera llevo un escote para que usted me lo babee, asi que le agradeceria que me los mirase cuando me habla.

Dicho esto rie por su propio chiste y continua.

- Ahora mismo me dirigia a la "Moza sin par" a comer algo... si quereis compartimos mesa y charlamos del tema tranquilamente.

Tardó unos momentos en apartar su costumbre predatoria, pero fueron breves. La palabra "cazademonios" hizo el truco, aparentemente y de buenas primeras, perseguían un objetivo común de forma real. Le miró (ahora, si, normalmente) un un dejo bastante mas suave y acorde a su apariencia.

-Mis disculpas, estaba distraída. Sería agradable compartir mesa mientras se tratan estos asuntos delicados, aunque quizá deberíamos tratar de tener algo de discreción y hablar con suavidad y atentos al entorno...por lo que tengo entendido, la situación es bastante grave y alguien con culpa podría estar escuchando.

Sugirió esto de forma casual, pero con firmeza, era un hecho que al menos ella estaría atenta. Dicho esto, ahora fue ella la que extendió la mano para un saludo mas formal.

Hora 12:12

El Purificador sonrie amablemente y mira al templo de Pelor.

- Quizas tengas razón -dice sin apartar la vista del templo- Podria comer mas tarde, seguis invitados para una charla informal, pero creo que deberiamos tratar este asunto dentro del templo de Pelor. El clérigo August es un buen amigo mio y no hay lugar mas seguro para hablar del tema en todo el reino, el sabra encargarse de que nadie nos molesta.

Se encamina al templo.

- Por favor, seguidme.

Asintió, bastante mas conforme de poder hablar entre los muros de un seguidor de Pelor. Naturalmente era la clase de sitios que le parecían correctos y respetables, pues este dios era visto con buenos ojos por Cuthbert, y por lo tanto por ella también. De camino al sitio indicado por el mago, observó en busca de algún establo donde poder dejar a su montura, transportarlo de un lado a otro dejaba de ser llevadero a esas alturas y prefería dejar que descansara y fuese alimentada correctamente.

-No te quedes atrás, Áran.

El templo de Pelor es muy distinto al de St Cuthbert, esta lleno de tonos amarillos y la luz entra por centenares de vidriera, por si fuera poca luz hay cuatro antorchas encendidas alrededor del altar. Has entrado con el caballo, pues no has logrado encontrar ningun establo al estar un templo justo en frente del otro. Alli hay un hombre joven  en armadura pesada que sonrie al ver a Einar.

- Vaya -dice August- Veo que traes compañia ¿Son compañeros tuyos de alguna aventura?

- No, son... nuevos amigos por asi decirlo - dice Einar devolviendo la sonrisa- Iremos a las salas de reflexión, si no te importa, me gustaria que nadie me molestase.

- Por supuesto Einar -dice el clerigo- Sabes que puedes contar con nosotros siempre que lo necesites.

-Buenas tardes -saludó con una leve inclinación de cabeza y voz suave al clérigo de esa capilla. Se mantuvo a un lado del mago mientras hablaba, y se presentó de forma breve y educada.

-Mi nombre es Kyrie, y él es Áran. Con su permiso.

Puso las manos dentro de las mangas con gesto pasivo. En un templo de uno de los dioses respetables, ella se veía como parte del entorno realmente, y de hecho se notaba con un aire bastante mas suelto ella misma. Los templos eran un refugio si estaban limpios por dentro, después de todo.

Despidientose del clérigo el grupo baja al sotano, alli hay varias capillas iluminadas con cristaleras que transmiten la luz solar, es increible pensar en la ingenieria que ha necesitado ese edificio para ser construido de esa forma.

Einar os lleva a ambos a la capilla mas alejada y se sienta en un pequeño banco.

- En fin - dice el mago- Ya estamos solos y podemos discutir de estos temas con tranquilidad. Decidme ¿Que quereis saber?

Conforme avanzaba, Kyrie meditaba sobre la buena construcción de ese templo en un pueblo tan pequeño y aparentemente pobre. Quizá había visto mejores épocas que esa, y los cimientos quedaban como prueba.

-Primeramente, cualquier pista que tengas al respecto sería de ayuda. Sospechosos, donde parece ser mas frecuente el tema de ataques... -fue precisa en la petición de dados, no perdía tiempo en absoluto con rodeos. Caminaba de forma lenta por los bordes de la estancia, contemplando aparentemente los cristales, mientras su voz llegaba sin dificultad debido al silencio del entorno- imagino que las horas nocturnas es cuando se llevan a cabo. Luego, me gustaría saber mas sobre la entidad sobre la cual gira esta serie de matanzas, y si las muertes son de alguna forma identificables como sacrificios rituales. Me refiero a patrones específicos de cortes, marcas en el lugar, o en los cadáveres.

- Sospecho que los crimenes son puramente laicos en ese aspecto -menciona el mago tambien caminando de un lado a otro, parece que asi ordena sus ideas- No son rituales, simplemente una forma que tiene el culto de eliminar aquellos que les estorban por algo. Respecto a los sospechosos, tengo una lista de gente que se del cierto que estan vinculados al culto, y probablemente alguien más tambien los haya identificados como tales, ya que estan entre las "victimas", el problema es que es preciso cortar la proberbial cabeza del culto, si actuo contra los miembros del culto pondre sobre alerta a la cabeza.

Se para antes de continuar

- En cuanto a Redanna, sospecho que es un nombre en clave de alguna clase de demonio, he luchado contra los cultos de Danenra, y Rendana... sospecho que es una misma entidad con gusto por los anagramas. Finalmente esta Radament, es un demonio mayor, mis fuentes no son muy completas al respecto.
 

-Pero, ¿no es la cantidad de personas muertas exageradas entonces? Si incluso gente en sus casas ha sido atacada, quizá toda la gente del pueblo les molesta en si. O quizá sean casas con locaciones estratégicas o algo en común.

Se paró frente al altar mirándole de lado.

-¿Hay algo mas que sepas? Por supuesto, solo soy una simple sacerdotisa del Señor, pero mi intención es ayudar a resolver la situación lo antes posible. Cada noche que pasa, parece que el número de afectados va aumentando. Con la pequeñez del pueblo, incluso sería de temer que terminen eliminando a todo lo viviente aquí si el crecimiento de atrocidades continúa aumentando al ritmo que lleva. No me he topado con ese nombre aún, lamentablemente, pero como fuere, ha de ser detenido.