Partida Rol por web

Cuando desaparecistes de Konoha, vagaste sin rumbo durante algunas semanas hasta que encontrastes un pequeño y apartado pueblo. Donde decidistes quedarte.
Te marchastes porque ya no podías más, todo te recordaba a Ikazuchi.

Pasaron los meses sin ningún incidente remarcable, trabajabas como criada en una familia adinerada que te trataba muy bien.

Pero casi un año después, en uno de los paseos que solias dar al atardecer, tuvistes un encuentro inesperado.

Frente a ti ves a una mujer, incluso antes de reconocerla por quien es, comprendes que es una ANBU, gracias al tatuaje de su hombro.

-Yakushi, he venido a buscarte.-

Te mira expectante a tu reacción. Comprendes que no sabe como reaccionaras, ya que no saben el motivo de tu marcha.

Cansada de ser siempre vigilada por los Anbu, todo a mi alrededor siempre era oscuro, mis padre, mi equipo... todo lo que consideraba siempre mi familia terminaba mal. era mejor marcharme, irme de la Villa, pues todo hacia que entristeciera " Ika..."

Me parecia vergonzoso trabajar en una casa y dejar el mundo ninja, pero era lo mejor, pasar desapercivida, aunque por las noches seguia escapandome a entrenar...seguia siendo mi camino, mi vida.

Hasta ese momento...

Al ver que no reaccionas, te muestra las manos en señal de que no pretende hacerte nada.

-Solo quiero hablar. No es una misión oficial, como verás no llevo mi mascara.-

Se acerca tentativamente.

-¿Me escucharas?-

La miro  tiernamente al recordar Konoha - Parecce que no se puede escapar de vosotros- media sonrisa se dibuja en mi cara - Claro que te escuchare.

La mira y subo a un tejado del pueblo y me siento "buscarme? Ahora?"

La mujer parece más relajada, te sonríe y sigue al tejado.

-Nunca escapaste sin que lo supiéramos, pero estás en tu derecho de marcharte o de no volver. Verás, he venido a buscarte porque Konoha está en un apuro. Hemos sufrido muchas pérdidas y ataques inexplicables, como el que sufr....- se interrumpe a media frase al darse cuenta de lo que había estado apunto de decir -Y necesitamos de todos los shinobis y kunoichis de que podamos disponer.- corrige apresuradamente- Nadie me ha ordenado nada, pero le pedí permiso al Sandaime para venir a buscarte por si decidías volver, ya que yo era la encargada de tu vigilancia era la única que sabia tu localización. No se si lo sabrás, pero el Niidame murió.

En fin ¿Qué contestas?-

Espera tu respuesta recostada contra la chimenea de la casa.

La miro y abro mucho los ojos -Cuando? ... -Yo misma me silencioa y miro al cielo - no quiero saberlo por ahora - jugueteo con mis manos nerviosa, algo me decia que me quedara pero al la vez tenia ganas de volver a ver Konoha... - etsa bien ire, pero quiero ayudar en el hospital- La miro directamente - por cierto... solo tu? Porque te escogieron a ti?

Sonríe abiertamente.

-Nadie me escogió para venir. Fui voluntaria. Creo realmente que no intentarás matarme. Además después de todo- dice guiñandote un ojo - soy una ANBU, se cuidarme. Nadie cree que puedas matarme, aunque lo intentes.

No vas a poder trabajar en el hospital me temo. Pero si lo que pretendes es ejercer de médico, seguro que tienes oportunidad, no te preocupes.-

Se pone en pié y te mira ahora más seria.

-Sin embargo no serás útil si tus habilidades se han oxidado. Debo comprobarlas en combate.
Mañana al amanecer tras aquellos árboles.-

Esto último lo dice señalando unos árboles tras una fila de casas. Tras ello se despide.

Miro como se aleja co una cara entrañable " aun recuerdo cuando una de mis metas era conseguir una de esas mascaras... donde quedaron esas metas?" Paso la noche intranquila, nerviosa, pues hacia mucho que no tenia un combate, habia seguido entrenando pero... quizas las fueszas interiores serian las que fallaran, mi cuepo responderia pero mi mente...

Al amanecer, cuando llegas al claro al que se refería, ves a Shaiza con las piernas cruzadas en un postura meditativa. Al sentirte se despereza y te mira.

Adopta una postura de combate y dice:

-Cuando quieras.-

Shaiza salta hacia atrás mientras dice:

-¡Kage bunshin no jutsu!-

Aparecen 2 clones a ambos lados de ella, los cuales se separan situándote en el punto exacto entre los tres.

Siempre odie los kague bunshins, es algo que descuadra muchisimo mi ojos, decidi activar al Byakugan para que no me pudiera pillar por sorpresa, apesar de pertenecer a los Hyuugas nunca me especilice en sus tecnicas decombate y preferi seguir el camino de mi padre, cosa que el clan no vio muy bien en su momento.

Concentro mi chakra y e coloco en posicion dejando ver como se acumula en la punta de mis dedos, cualquien ninja de Konoha podia reconocer esa tecnica. Cojo aire y salto hacia la que tengo a la derecha.

Observas como las tres ANBU forman sellos de una forma rápida y apollan las palmas de las manos en el suelo, gritan al unísono:

-Doton: San Kabe-

Tres paredes de piedra surgen del suelo, uniéndose y cerrándose formando un triángulo que te encierra.

Me acerco a una de las paredesy me concentro poniendome en posicion - Hakkeshö kaiten!! - Comienzo hacer el torbellino intentando que la tierra ceda ante la presion.

No entiendes como es posible, pero no te ves capaz de concentrar chakra.

Observas como las tres Shaizas vuelven a formar sellos:

Shaiza grita:

-Doton: Yomi numa no Jutsu-

La tierra bajo tus pies se transforma en arenas movedizas.

Los dos clones exclaman:

-Doton: Kabe Gaia no Kenshi-

Varios pinchos de roca salen de las paredes, dañándote.