Partida Rol por web

No abandonéis el sendero

Capítulo 3: El largo camino

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12/04/2020, 18:48
Director

El largo camino

Tras el descanso en las bodegas del Rey Elfo, que sin lugar a dudas no fue como se habían esperado, el grupo reemprendió la marcha acompañados por Lindar y un pequeño grupo de elfos que les llevarían en sus peculiares y resistentes botes hasta el lugar donde el arroyo Encantado se cruzaba con el sendero Elfo. El viaje en las embarcaciones fue igual de tranquilo que el anterior, los elfos manejaban las largas pértigas con gran habilidad y desplazaban las almadías sin apenas levantar salpicaduras. Los botes tocaron tierra junto a la orilla del río, y los elfos dirigieron a los ponis hasta el camino y ayudaron al grupo a cargarlos de nuevo. El camino que se abría ahora ante ellos mantenía por largo trecho la paz y la belleza de la que habían sido testigos con anterioridad. Los elfos acompañaron al grupo durante un tramo más, a través del sendero.

Aquella parte del bosque, que los elfos cuidaban y gobernaban, no era tan opresiva como solía serlo el resto del bosque Negro, el sendero estaba bordeado de hayas, y la luz del sol se filtraba a través de los árboles tiñéndolo todo con una luz dorada en algunos puntos y verdosa en otros. Aquella región conservaba la belleza y la paz del antiguo Bosqueverde el Grande, que era como se conocía al bosque Negro antes de que la Sombra lo acabara infestando de trasgos, arañas y otras alimañas semejantes. El camino fue bastante apacible, aunque tanta calma podía ser engañosa, los peligros que ocultaba el bosque eran numerosos, y no tardarían en comprobar que la bella zona del bosque que regentaban los elfos iba a dejar paso a una zona oscura donde los árboles crecían retorcidos y siniestros.

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12/04/2020, 19:06
Lindar

Los elfos les acompañaron hasta que pudieron sentir que el sol estaba en lo más alto. Entonces Lindar avisó a los suyos de que debían dar la vuelta y se despidió del grupo deseándoles un buen viaje, pero no sin antes añadir una advertencia.

-No abandonéis el sendero. Pronto estaréis en regiones más peligrosas. La mayor parte del sendero está exenta de problemas, pero no se puede decir lo mismo del bosque que hay más allá. - Les advirtió con un tono de voz grave. - Y bajo ningún concepto bebáis agua del arroyo Encantado.

Después con tono más alegre se despidió de todos y cada uno pronunciando sus nombres, y asegurándoles que esperaba que en la próxima ocasión que se encontraran pudieran hacerlo con mejores cortesías.

-¡Buena suerte! - Dijo antes de desvanecerse junto a los otros elfos entre las sombras de los árboles. La compañía ahora se encontraba sola y con un duro y largo camino aguardándoles frente a ellos. El autentico viaje comenzaba entonces.

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13/04/2020, 11:47
Droul

Después de su regañina, nadie salvo el pequeño mediano se pronunció, así que el enano entendió que estaban de acuerdo con sus palabras. Eso le permitió respirar tranquilo, pues aunque no sabía lo testarudos que podían ser los beórnidas, sí que sabía de primera mano lo mucho que podían extenderse discusiones entre enanos. 

Los dos días que sucedieron a su particular encierro los dedicó a poner al día su mapa, fumar en pipa, comer, beber y dormir hasta hartarse. Si era sincero consigo mismo, había estado en sitios peores: no les faltaba alimento, estaban cómodos y a salvo. Por no hablar que el río estaba lo suficientemente accesible para cuando tuvieran que vaciar la vejiga. También aprovechó para conocer un poco mejor al grupo, incluso propició una ronda de relatos breves la primera noche, de forma que cada miembro de aquella comunidad pudiera compartir algo de su propia cosecha.

Cuando Baldor regresó para ponerse en marcha, Droul ya se había guardado un pequeño recuerdo de los Salones del Rey Elfo: el tapón de cristal de una de las botellas que les habían llevado durante el encierro. No era mucho, pero aún conservaba el aroma y le traería recuerdos durante años de aquella aventura.

Y dime, muchacho —el enano se había aproximado a Belgo cuando tocó caminar por aquellos caminos flanqueados por hayas y le dedicó una leve sonrisa—. ¿Cómo son esos Salones del Rey? Seguro que has visto maravillas para contar por toda una vida.

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14/04/2020, 02:29
Mungo Bolguer

No abandonar el sendero, fácil —contestó Mungo, echando un trago a un poco de vino élfico que había guardado a escondidas en uno de sus odres.

Hacía tiempo que se había terminado el brandy que había guardado antes del viaje y consideró que aquella era una ocasión propicia para reabastecer su alijo. Además, había agradecido dormir otra vez bajo techo y no tener que volver a montarse en bote en lo que quedaba de viaje.

Si bien dormir en una bodega no era el tipo de hazaña que esperaba poder contar a su regreso a La Comarca, tenía la sensación de que la aventura no había hecho más que comenzar. No todo el mundo puede afirmar que ha cruzado el Bosque Negro.

¡Eso, Belgo, cuéntanos!—insistió—¿Es cierto que tiene candelabros están hechos de plata que brillan como las estrellas?

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15/04/2020, 12:49
Kurdrim

Y pasaron los días, que parecían interminables allí enclaustrados sin nada mejor que hacer que dormir, comer y beber lo que aquellos orejas picudas tenían a bien llevar, mientras el humor de Kurdrim se agriaba por momentos, en especial por no querer reconocer que, pese a todo, no se estaba tan mal en aquellas endiabladas bodegas

Para pasar el rato, propuso al dicharachero Belak practicar con las armas, ya que no las tenía todas con él de que supiera desenvolverse en un combate, tras lo cual hizo extensible el ofrecimiento a cualquiera de los presentes... la cuestión era mantener el cuerpo en movimiento durante aquel tedio, y sin duda las historias que empezaban a contarse no ayudarían a ello; pese a todo, el guerrero contribuyó con una propia, donde con gran pesar narró como se perdió la batalla de los cinco ejércitos por estar herido en un pierna tras una cacería de orcos en las Colinas de Hierro, contribuyendo a su manera a mantener aquel aire de camaradería que parecía reinar en aquella peculiar compañía

...

Dejando atrás el reino de Thranduil, Kurdrim notó como si le quitaran una losa de encima empezando a caminar con un porte menos encorvado e, incluso, más dicharachero y amistoso, escapándose de tanto en tanto alguna tonada a media voz para amenizar su avance que pronto se extinguió cuando la oscuridad del Bosque Negro tomó los alrededores, creando una sensación de constante amenaza

- Será mejor abrir los ojos ahora que esos besa flores estirados no están cerca... por mucho que me moleste decirlo una cosa esta clara, saben mantener su parte del bosque libre de peligros y de esta atmósfera opresiva- gruñó con fastidio mientras, por inercia, se descolgaba el hacha y empezaba a caminar con ella entre ambas manos, mirando en todo momento a lado y lado

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Notas de juego

Hago tirada de saber (sin rangos) y una de explorar mientras avanzamos (2 rangos) ... creo que está bien hecho, pero sigo sin pillar el sistema... menudo ceporro >_<'

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16/04/2020, 10:28
Belak

Belak se entretuvo lo suficiente durante la estancia en las bodegas como para olvidarse de que no estaba festejando en los Salones del Rey. Aunque quizás no era del todo cierto, en algunos momentos su imaginación le traicionaba y le hacía crearse expectativas de lo que seguramente se estaba perdiendo. Pero entonces encontraba algo que le llamaba lo suficiente la atención para alejarlo de sus lamentos por aquello que no podía ver. Que a lo mejor resultaban ser recipientes de alimentos de lo más mundanos, pero hasta la factura de algunos resultaba cuanto menos curiosa. Tampoco desaprovechaba la ocasión para charlar con Droul o Iwgar. En esta ocasión decidió dejar algo de espacio a Kurdrim. Incluso Belak se daba cuenta de que no estaba el horno para bollos. 

Y una vez pasada la jornada, era momento de ponerse nuevamente en marcha. Los elfos los guiaron nuevamente por el río y también un trecho por el bosque. Belak se sorprendió tanto del color y de la atmósfera que allí se respiraba. El bosque al que él estaba acostumbrado era mucho más oscuro y con un ambiente opresor. Era a la vez su sustento y algo de lo que cuidarse. Pero en este trozo de naturaleza parecía que la raíz del mal no había logrado hacerse fuerte. Incluso llegó a echar de menos su hogar y a pensar que si algún día el Bosque Negro recuperaba su vitalidad sería un lugar estupendo en el que quedarse a vivir. Tampoco se quería perder las impresiones del joven Belgo cuando Droul y Mungo se interesaron por sus vivencias durante el banquete. -Eso. Cuenta, cuenta. ¿Pudiste hablar con algún elfo durante la fiesta?- Le preguntó curioso. 

Pero pronto se terminaría el paseo agradable que estaban teniendo. Los elfos dejaron que siguieran su camino advirtiéndoles de los peligros que les esperaban más adelante. Belak asintió y se despidió con la misma educación, un poco de pena por dejar a los elfos atrás y cierto entusiasmo por la experiencia vivida. Todo un crisol de emociones. Incluso Kurdrim parecía haberse relajado en cuanto a su parecer sobre los elfos. -¿Ves como no es tan difícil hablar bien de alguien de vez en cuando?- Le dijo divertido al ver cómo incluso los cumplidos del enano no iban exentos de una buena dosis de bilis. -Y esta vez solo has dicho 'comeflores' una vez.- Recalcó como para evidenciar la mejoría en sus formas, pues resultaba todo un logro después del encontronazo que tuvo con Lindar y toda suerte de improperios que le dedicó a él y a toda su estirpe... Sin duda toda una exhibición de vocabulario y elocuencia. Por ahora tenían un largo camino por delante hasta su destino y un trabajo con el que cumplir. 

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16/04/2020, 13:19
Iwgar "El terco"

A diferencia de algunos de sus compañeros de grupo, quiénes parecían conformes con el trato recibido y se sentían medianamente cómodos y alegres dentro de las bodegas del Rey Elfo, Iwgar lució bastante más contrariado y decepcionado por ser relegados a un segundo plano, mientras  Baldor y Belgo disfrutaban de un trato más distinguido y privilegiado, gozando de mejores atenciones y disfrutando de las que se decía eran unas vistas increíbles, los salones del rey Thranduil del Bosque Verde.

La terquedad de Iwgar no tenía límites, no habiendo sido apodado con aquel sobrenombre por los de su raza sin razón alguna, y aunque los elfos se afanaron en tratarles bien y con cortesía dentro de las bodegas, a diferencia del resto, el beórnida no bebió de sus caldos ni disfrutó de sus manjares, limitándose a comer frugalmente y a dejar el pago correspondiente por lo obtenido. No iba a aceptar de su generosidad, ni ningún elfo podría decir a posteriori que habían invitado a un Beórnida. Simplemente de un viajero más que estaba de paso, realizando su cometido al escoltar a un mercader y su hijo, y recordaría la afrenta de no haber sido recibido ni tratado como bien merecían. Esperaba hablar con Béorn y su padre, para que el agravio repercutiese negativamente, haciendo más costosa la tasa cuando éstos cruzasen el Vado Alto y La Carroca.

Ya cuando volvieron a ponerse en marcha, Iwgar agradeció alejarse de aquel lugar, disfrutando eso sí de las vistas del bosque verde, el cual se mostraba apacible y cálido por aquellos lares, en aquella época primaveral.

- Maese Belak, muy poco se puede hablar favorablemente de aquellos que desconfían de los hijos de Béorn. Poco se recuerda que fue gracias a mi señor Béorn el Cambiaformas que el transcurso de la Batalla de los Cinco Ejércitos cambió su curso tras su llegada, tornando lo que ya era una derrota casi segura en una necesaria y vital victoria. - sentenció el beórnida todavía contrariado tras varios días, aunque mejorando su estado de ánimo a medida que se alejaban de los dominios del Rey Elfo. Como sea, los consejos y advertencias que nos han dado creo son sinceros, siendo conveniente no abandonar el sendero, ni beber del río. 

Pese a su terquedad y testarudez, si que se acercó lo suficiente para escuchar las palabras de Belgo acerca de cómo eran los salones de los elfos. Podía estar todavía molesto, pero su curiosidad siempre había sido mayúscula. ¿Puede que si hubiese sido más amable en el trato, habría recibido un trato más favorable? Las dudas le atormentaban, pero Iwgar no era de los que daban su brazo a torcer...

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16/04/2020, 13:52
Droul

Droul no estaba nada contento con la actitud del beórnida, pero lo que acababa de decir fue la gota que colmó el vaso —¿QUÉ?

Detuvo la agradable conversación que Mulgo y él estaban teniendo con el joven Belgo, se volvió y avanzó a grandes zancadas hasta Iwgar, poniéndose delante con el ceño fruncido, los puños apretados en torno al mango de su piqueta y la piel de su frente poniéndose más y más enrojecida.

¿Una derrota casi segura? ¿Acaso sabes de qué estás hablando? —su tono iba aumentando más y más hasta volverse un rugido furibundo—. Puedo callarme ante tu comportamiento, más animal que ser civilizado. Puedo callarme ante tus chaladuras propias de alguien que no ha visto más mundo que la pechera de su chaqueta. ¡Pero no me quedaré de brazos cruzados cuando osas decir que la gloriosa batalla a las puertas de Érebor estaba perdida si no fuera por tu señor! ¿Qué sabes tú, criatura? ¡Algunos de nosotros estuvimos ahí! ¡Algunos sangramos y luchamos codo con codo con humanos, elfos y hermanos enanos! ¡Cuida tus modales si no quieres encontrarte con un problema mayor que tener que dormir en el suelo un par de días!

Droul era un enano juicioso que prefería las palabras a la violencia, pero había cosas que tenían un límite.

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16/04/2020, 14:38
Belgo

Belgo caminaba alegremente por el camino flanqueado de hayas que bañaban de luz dorada y verdosa el suelo que la compañía pisaba en los dominios del Rey Elfo. Poco sabía el muchacho que más adelante el bosque se iba a volver tan oscuro y opresivo como el resto esperaban. Para el niño, lo que había visto hasta entonces del bosque Negro le hacía creer que era un lugar excepcional, pero no a la manera que los demás conocían, sino por la belleza y la magia que desprendía la zona atendida por los elfos. Las preguntas de Droul, Mungo y Belak le hicieron rememorar los maravillosos momentos que había vivido durante aquellos dos días en los Salones del Rey y contó de manera atropellada y emocionada todo lo que había vivido, aunque en ocasiones dejaba un tema que le fascinaba a mitad para hablar de otro que le había fascinado todavía más.

-Fue maravilloso, maese Droul, no os lo podéis imaginar. Yo pensaba que sería una sucia cueva, pero ¡que va! Era hermosa, las paredes eran lisas y estaban decoradas de maneras hermosas. Y... y había columnas enormes talladas en la roca que llegaban hasta lo más alto del techo que... que era, el techo era alto y ¡sí, señor Bolguer! Los candelabros brillaban como si fueran de plata... como... como si la luz de la luna llena brillara en el techo de los salones. ¡Oh, era tan hermoso! Había muchos salones, pero el del Rey era el más grande. Y sí, hablé con muchos elfos y me contaron historias y cuentos muy bonitos. Y la música, la música era hermosa. Tocaron arpas, flautas, y... y... ese instrumento que tiene cuerdas... ¡Y la comida! Estaba deliciosa. ¡La mejor comida que he probado! ¡Tenían de todo y los postres estaban riquísimos!

Solo la malhumorada intervención de Iwgar, que bramó todavía enfadado y decepcionado contra los elfos logró que el muchacho se callara. Y la inesperada y repentina reacción de Droul provocó que se asustara ante lo que parecía una inminente pelea entre ambos.

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16/04/2020, 14:52
Baldor

Baldor avanzaba guiando a uno de los ponis con una sonrisa en el rostro mientras escuchaba a su entusiasmado hijo describir todo lo que había vivido en los Salones del Rey. Le molestaba que no hubieran permitido la entrada a la compañía tanto como al que más, pero por otro lado, se alegraba de que su hijo si hubiera podido vivirlo y contemplar las maravillas de la ciudad subterránea de los elfos en el bosque Negro.

El tono de la compañía era muy cordial y había nacido cierta fraternidad entre sus miembros, especialmente para el joven Belgo, a quien habían acogido de manera muy positiva. Lo que alegraba mucho a su padre. Baldor escuchó las quejas mantenidas con terquedad por Iwgar durante todo el camino y consideró no darles importancia, como habían hecho todos hasta entonces, pero de pronto dijo algo sobre la batalla de los Cinco Ejércitos y su señor Beorn y Droul estalló malhumorado como no lo había visto hasta entonces. Él, que parecía el más cabal y sosegado de los enanos del grupo, se volvió una furia iracunda que plantó cara al enorme beórnida con intención de luchar contra él si fuera preciso, a pesar incluso de que Iwgar le sacaba un buen número de cabezas en cuestión de altura.

-¡Por el amor de Yavanna! -Exclamó el mercader corriendo a interponerse entre ambos antes de que corriera la sangre. ¡Controlaros, maese Droul! Que haya calma. Estoy seguro de que la ayuda de Beorn en la batalla fue tan importante como la de los enanos de las Colinas de Hierro que llegaron para ayudar, como la de tantos otros que participaron aquel día para vencer a los enemigos. ¡No podemos olvidar que todos lucharon juntos!

Notas de juego

PD: hice las tiradas de Saber por todos los que os habéis olvidado, pero recordadlo para la próxima ¡que os pueden dar muchos beneficios!

Kurdrim, la tirada está perfecta.

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16/04/2020, 17:01
Lain

A Lain le causó gracia el comentario del Kurdrim, más que alabar la capacidad de los elfos de protegerse, criticaba más el egoísmo de preocuparse sólo por el territorio de ellos mismos y no por los demás. Su compañero enano tenía razón, era distinto el aire que se respiraba dentro del reino élfico que el que ahora respiraban ya próximos a emprender el viaje, seguramente algún tipo de magia sería la responsable. Al cartógrafo no le molestó que no hayan gozado de la hospitalidad de los elfos, pero lo hubiera deseado más por curiosidad que por comodidad, había escuchado historias del reino del bosque pero quería corroborarlas él mismo.

Mientras comenzaban la marcha y charlaban como debía ser el viaje, Lain aportó a la charla que se dió sobre la Batalla de los Cinco Ejércitos: -Ja ja ja, por más fuerte que sea el señor Beorn, él sólo no inclinó la balanza. Yo creo que el Rey Dáin fue imprescindible para la victoria, él llevó a los guerreros más fuertes de las Colinas de Hierro. Y el Rey Thorin fue quien obtuvo Erebor, punto estratégico para la ventaja en la batalla.

- Tiradas (1)
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17/04/2020, 20:40
Mungo Bolguer

Mungo escuchaba embobado el relato de Belgo, al margen de la discusión que se había avivado a su espalda. Sentía cierta envidia por no haber podido contemplar todos aquellos tesoros con sus propios ojos. 

Ah, me parece que te refieres al laúd, amigo mío. Pero qué maravilla. Creía que tu padre te había llevado más veces, ¡qué suerte poder presenciar algo que los elfos guardan con tanto celo!

Y entonces Igwar bramó, provocando que el muchacho dejase de hablar y que Mungo diese un respingo.

Ejem. Os recuerdo que de no ser por maese Bolson, los enanos habrían formado parte de la dieta de las arañas o todavía estarían criando moho en las celdas de los elfos del bosque. 

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17/04/2020, 21:31
Belgo

La intervención calmada de Lain animó al pequeño Belgo a participar de la discusión con su pequeño aporte conciliador. Tras lo vivido con la anterior escolta de su padre, a Belgo no le gustaban aquellos enfrentamientos ni la violencia que de ellos emanaba. Pero si Lain recordaba a Dain, y Mungo al señor Bolsón, él quiso hacer un aporte que no merecía ser olvidado en aquella conversación, que gracias a ellos dos y a su padre parecía calmarse.

-¡Y las águilas! - Dijo de pronto. -Sin las águilas no hubiera sido posible la victoria.

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18/04/2020, 17:07
Iwgar "El terco"

Las palabras del enano Droul fueron mucho más duras de lo esperado, quedando Iwgar extrañadamente sorprendido ante aquella reacción visceral y desproporcionada por parte del que hasta entonces parecía el más cabal y sosegado del grupo de enanos. Las palabras del beórnida no pretendían afrentar ni poner en duda las acciones de los de su raza, que claramente habían sido fieros y distros guerreros en la batalla y que sin su presencia, al igual que muchos otros, no se hubiese alcanzado la victoria contra los ejércitos de orcos y wargos. No obstante, Iwgar no iba a permitir que le tratase como a una criatura que no había visto el fragor de la batalla y que le tomasen por un embustero cuando mencionó que Béorn había cambiado el curso de la batalla.

Iwgar se alzó imperial, haciendo valer su colosal envergadura y fuerza, levantando su hacha hasta depositarla en su hombro aunque no de forma amenazante que indicase que fuese a hendirla en el cráneo de Erosión, pero si forzando al enano a mirarle hacia arriba y prestarle atención.

- Podré ser muchas cosas, Maese enano, y no me molesta que considere "animal" mi comportamiento, cuando los de mi raza verdaderamente estamos fuertemente vinculados con los osos, gozando la posibilidad de cambiar de forma llegado el momento del fragor de la batalla... - y al expresar aquellas contundentes palabras, algunos rasgos faciales y el abundante pelo que poblaba la piel del beórnida parecieron asemejarse por momentos a los de un oso. Me molesta bastante que pongan en duda mis habilidades y experiencia en combate, y se me tilde de "criaturita" con ese tonito de desprecio, siendo que aunque no participé directamente en la Batalla de los Cinco Ejércitos a los pies de Erebor, si lo hice cerca de los lindes de las Montañas Nubladas frente al avispero de trasgos que Thorin y su compañía hicieron salir tras destripar al Rey Trasgo, peleando duramente al lado de mi padre Beran "De las Montañas", cuando todavía si quiera había alcanzado la mayoría de edad. Pero lo que si me molesta es que se ponga en duda el desempeño de mi señor Béorn, el cual SI CAMBIÓ EL CURSO DE LA BATALLA al aplastar y destrozar al líder orco Bolgo y dispersar su guardia personal, ahí donde Fili, Kili y el rey bajo la montaña Thorin perdieron la vida y hubieron fracasado, y por supuesto la inestimable llegada de las Águilas en ese mismo instante, lo que hubiese supuesto un más que probable DERROTA si dichos acontecimientos no hubiesen sucedido. Sin su aparición y fiereza en combate, discrepo mucho que todo hubiesen sido las celebraciones y gran victoria que Maese enano casi pretende atribuir solo al ejército de Dain Pie de Hierro, del cual no he pretendido desmerecer y al que tanto mi señor Beórn, mi padre y yo mismo respetamos, y que fueron capaces de contener y luchar hasta la llegada de mi señor y las águilas. Todos fueron imprescindibles y necesarios a su manera, cada cual en su momento y en el lugar o ubicación que correspondía...

Iwgar no pretendía iniciar un enfrentamiento y llegar a las armas, por lo que tras dejar claro su punto e intención cuando habló, dejó por zanjado aquel asunto y no le dio mayor importancia. Él nunca había afirmado que su señor Béorn hubiese sido el único que pelease allí y fuese imprescindible, y si se habían malentendido sus palabras no había sido esa su intención. Incluso los elfos, aunque le habían tratado peor de lo esperado según su punto de vista, fueron imprescindibles en la batalla, según le había relatado y contado Béorn alrededor de la hoguera. 

 

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18/04/2020, 20:36
Director

La discusión entre Iwgar y Droul sobre las actuaciones de los diferentes personajes ilustres de la Batalla de los Cinco Ejércitos había marcado el comienzo del viaje. Aunque tras la discusión, Baldor que quería dar por finalizado aquel pequeño rifirrafe apuró a su pequeño para que continuara el relato vivido durante su estancia en los salones del Rey Elfo. Animándole a que recordara y cantara allí mismo algunas de las canciones que los elfos les habían enseñado. Belgo, que se había asustado con la disputa, se había llevado la mano a un amuleto que lucía en el cuello esperando su protección o que pudiera pedirle que no se repitiera una situación como la vivida antes de conocer al grupo que ahora les escoltaban. Sin embargo, recuperó el humor cuando su padre le hizo cantar las canciones de los elfos, y las interpretó de la mejor manera en que pudo hacerlo mientras Baldor sonreía satisfecho. Saltaba a la vista que Belgo era el orgullo de su padre.

Conforme avanzaban por el camino y la protección del Rey Elfo sobre sus dominios quedaba atrás, el ambiente del bosque iba volviéndose cada vez más opresivo y agobiante. Los árboles se encaramaban unos con otros y sus ramas crecían sobre el camino hasta que llegó un momento en que lograron tapar la luz del sol que apenas se lograba colar entre las hojas asemejando a la escasa iluminación de un día nublado. Así y todo, daba la sensación de que algún tipo de sortilegio todavía pesaba sobre el sendero Elfo, como si la magia del Rey pudiera expandirse a lo largo de aquel camino, y la prueba de ello era que a pesar de inundar cada pulgada del bosque, la vegetación respetaba el sendero Elfo y lo mantenía intacto. ¿Sería aquella la razón por la que Lindar les había aconsejado no abandonar el sendero?

Pero si el día era oscuro, la noche lo fue todavía más. Tras largas horas de camino, avanzando en paralelo junto a las aguas del arroyo Encantado, que Lindar les había aconsejado no probar, Baldor decidió que ya habían avanzado lo suficiente por aquella jornada. Especialmente cansado estaba el pequeño Belgo, que había recorrido las últimas dos horas dormitando sobre el lomo de uno de los ponis. Kurdrim, que se había adelantado un poco para explorar el camino les advirtió de un lugar donde el camino se ensanchaba ligeramente y donde podrían montar un campamento para pasar la noche y así preparar algo de cena y descansar.

Notas de juego

Lain, consigues un dado extra para cualquier tirada que tengas que realizar durante el viaje. Tú mismo podrás elegir el momento donde usarlo, aunque tienen que ser tiradas relacionadas con el viaje, no podrás usarlo para un combate o un encuentro.

Realizar todos una tirada de Corrupción, con dificultad 12. Para las tiradas de Corrupción debéis utilizar la puntuación de Sabiduría de vuestro personaje (que será de 1 ó 2) como si fueran los rangos de una habilidad. Fallar significará que el agobiante ambiente del bosque os está afectando y os supondrá un punto de Sombra.

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20/04/2020, 10:29
Kurdrim

El bosque seguía oprimiendo el mundo entorno al sendero de los elfos más, por el momento, parecía que moverse de esa guisa permitiría eludir las sombras de alrededor, con lo que con aquel pensamiento animado en mente Kurdrim se adelantó al grupo buscando un punto donde acampar, logrando escuchar a lo lejos como Iwgar y Droul se enfrascaban en una discusión por discernir quien había tenido más relevancia en la Batalla de los Cinco Ejércitos... el guerrero alzó los ojos al cielo casi oculto por el ramaje, deseando que aquello no añadiera más dificultades a un viaje que no había empezado de la mejor forma

Más toda atención en la lejana discusión quedó relegada a un segundo plano al encontrar un pequeño ensanchamiento donde bien podrían montar un campamento sin necesidad de acercarse a los amenazadores árboles y sus sombras; el enano inspeccionó el lugar a consciencia y, tras quedar satisfecho, regresó a buen paso solo para toparse con que Iwgar y Droul habían acabado de discutir aunque ambos con caras ceñudas... y que el chico de Baldor había empezado a cantar canciones élficas

- ¿Pero qué demonios...acaso quieres que me arranque las orejas? - gruñí al llegar junto a ellos - Canta una buena canción de viaje, chico, no esas malditas y endulzadas tonadas de frágil damisela- añadió dando un pequeño trago a su odre - Sea como sea, he encontrado un lugar donde podríamos acampar sin salir del sendero; no está lejos y nos permitirá pasar la noche sin tener que soportar la mirada preñada de malas intenciones del interior del bosque. Vamos, es un buen lugar para acampar, fumar en pipa y beber algo- concluí con más ánimos - Ahí te podré enseñar alguna buena canción de enanos, chico, si en verdad quieres animar el viaje jaja

- Tiradas (1)
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20/04/2020, 10:46
Droul

Su crítica fue inmediatamente secundada por varios miembros del grupo, cada uno añadiendo más y más piezas indispensables para la victoria en la Batalla de los Cinco Ejércitos, lo que puso una sonrisa en los labios del enano. Sonrisa que desapareció cuando Iwgar, imponente, se irguió ante el enano y empezó a soltarle un discurso que parecía preparado de antemano. Así que así funcionaba el beórnida: en vez de reconocer su error, señalaba a los demás como los errados. Sin duda alguna, no era más que una criatura.

Gracias, muchacho —dijo, palmeando suavemente el hombro de Belgo. —Tienes razón, la visión de las grandes águilas fue algo que nos robó el aliento a muchos. —y siguió narrándole al muchacho cómo fue verlas en plena batalla. Cuando lo tenían todo perdido, que de repente se cubriera el sol y ver descender esas bestias gigantes con sus garras de acero, destrozando de golpe varios batallones de orcos era algo que no podría olvidar jamás. Así continuó hasta que notó que el hijo de Baldor empezaba a dar cabezadas y dejó que descansara en paz.

¿Señor Bolguer? —se adelantó y comenzó a caminar a la par que el hobbit. —Habéis mencionado al señor Bolsón y debo decir que las historias que he oído de ese mediano son increíbles. ¿Pertenece a algún clan famoso entre los vuestros? Apenas si había escuchado hablar de vuestro pueblo hasta ahora y quisiera saber más de los hobbits.

- Tiradas (1)
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20/04/2020, 22:51
Belak

La discusión entre Droul e Igwar estaba caldeando el ambiente. Tanto que Belak decidió pasar por alto la mención que le hizo el beórnida y prefirió dedicar su atención a los relatos del joven Belgo. En otra situación quizás hubiese dicho algo por picar un poco a sus contertulios y divertirse un poco sacando de quicio a alguien. Pero todavía tenía fresco el recuerdo de Igwar derribando un árbol de un único hachazo. Y ya se jugaba el pellejo de vez en cuando con Kurdrim como para hacerlo con alguien tres veces más grande y con más posibilidades de atraparlo en una carrera. 

De cualquier modo, el viaje continuaba y el cambio en el paisaje resultaba más notorio. Parecía que el mal genio acumulado por la discusión se había filtrado a su alrededor. El bosque resultaba cada vez mucho más agobiante, casi opresor. Belak estaba acostumbrado a moverse por el bosque y a vivir en sus lindes; pero esto era diferente. El camino que Lindar les había indicado se mantenía impoluto y despejado, pero era como una única llama en medio de una oscuridad absoluta que amenazaba con devorarla al menor descuido. Toda esta atmósfera mantenía al joven hombre del bosque atento y en cierto modo preocupado, pues una sensación de angustia comenzaba a hacerse hueco en su mente. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Hay algún logro por inaugurar el marcador de puntos de sombra? XD

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21/04/2020, 22:09
Iwgar "El terco"

El beórnida estaba de mal humor por la acalorada discusión con el enano Droul, y de no ser por qué zanjaron ahí el asunto y se distanciaron, no sabía cómo habría terminado todo aquello. Le molestaba que la mayoria hubiese secundado y apoyado al fornido enano, cuando él se mantenía firme y terco en su opinión de que su señor Beórn realmente fue imprescindible y necesario para cambiar el rumbo de la batalla. ¿A caso no le profesaban máximo respeto, casi hasta adoración al rey Dain, alabando sus proezas y heroicidades por combatir y acabar con el caudillo orco Azog? ¿Por qué no respetaban y admitían que Béorn fue igual de relevante al acabar con el sucesor de Azog, el caudillo orco Bolgo? ¿A caso no eran capaces de reconocer que allí donde Fili, Kili y hasta el rey bajo la montaña perdieron la vida, su señor Béorn había logrado lo imposible?

Iwgar masculló contrariado y se alejó, quizá buscando un momento de soledad para templar sus ánimos. Decidió que sería buena idea cazar algo por las inmediaciones, cuando Kurdrim dio aviso de que había encontrado un buen lugar para acampar al borde del camino. No le importaba donde terminasen acampando, siempre y cuando el mercader estuviese de acuerdo, y como nadie pareció negarse, Iwgar se limitó a susurrarle a Baldor por lo bajo que intentaría cazar algo si la suerte le era propicia.

No obstante, por más que lo intentó, la negra sombra que les rodeaba empezó a influir en él, sintiendo mayor malestar e incomodidad, impacientándose y cometiendo errores que de normal no cometería, que ahuyentaron las posibles presas. Probablemente su estado de ánimo inicial, había motivado que la densa sombra del bosque negro le corrompiese lentamente y minase su natural armonía con el bosque.

Maldita sea... No logro cazar nada y está densa oscuridad resulta agobiante... Encima ese enano me ha sacado de quicio y se ha creído que tenía razón... ¿Qué más puede salir mal?

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21/04/2020, 22:57
Lain

-Tiene razón, señor Iwgar, si no fuera por cada uno que estuvo allí, no se habría logrado la victoria. Es algo de lo que aprender- le contestó al beórnida que parecía querer poner paños fríos a la discusión.

El bosque se veía diferente a la zona anterior en la que estuvieron, como más sofocante, como si algo estuviera sobre ellos, acosándolos y buscando asfixiarlos. Lain trató de no pensar mucho en la opresión del bosque y distraer su mente charlando con sus compañeros, que aunque no era bueno volver al tema de la Batalla de los Cinco Ejércitos tal vez otro tema podía ayudar, y con eso en mente siguió la línea de Droul.

-Debo reconocer que la presencia en los sucesos de hace cinco años de alguien como el señor Bilbo fue una sorpresa para mi también. ¿Son todos los hobbits de igual manera allí en sus tierras?

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