Partida Rol por web

Sin embargo en ese momento ocurre algo que no esperabas. Los hombres que están al lado se levantan y sacan dos escopetas. ESTO ES UN ASALTO... NOS DAN TODO LO QUE TIENEN O SERAN HISTORIA!

Emmi...

De repente uno de los hombres que acababan de llegar comienza a gritar sacándome de mi obnuvilación. ¿un atraco?, ¿dónde coño me he metido?

Me ruborizo por el nerviosismo, en un primer momento tengo el impulso de actuar de forma física contra el matón, pero entonces recuerdo la nefasta lección de las campanillas en casa de Thoman. Será mejor que te quedes quieto y no hagas ninguna tontería.

Pero entonces recuerdo alguna otra lección, tengo la capacidad de influir en la gente, quizá pueda convencerles de que se larguen y nos dejen en paz.

-"Disculpe." Digo dirigiendome al matón que ha gritado. -"¿Puede ayudarle en algo?"

¿he?.. dice el hombre un poco extrañado. Esto es un atraco señor.

-"Claro, soy consciente de que esto es un atraco, pero no veo la necesidad de utilizar eso."

Digo señalando su arma.

-"Alguien podría lastimarse."

Lentamente me acerco al hombre que me ha hablado sin dejar de mirarle a los ojos y sin dejar de sonreir continúo hablando con una voz pausada y tranuilizadora.

-"¿Cómo has dicho que te llamas?"

Soy el Chino. El hombre te miram confundido. Disculpe ya nos vámos.

Y sale tranquilamente del lugar.

Te sientes raro, y la gente, te mira más extrañada aún.

Algo te dice que la fascinación solo funciona con tu presencia, cuando los hombres te pierdan de vista, el efecto se habra ido.

-"Emmi, espérame aquí un momento, que he olvidado decirles algo a esos dos."

Me ajusto la corbata y camino lentamente tras ellos.

Resultaría muy incómodo que nada más salir del local decidieran volver a entrar, será mejor que les dé un motivo para no regresar.

Salgo tras los atracadores fuera del local y cuando sus pasos les han llevado a una distancia prudencial, alejada de las miradas de la gente de la puerta, me dirijo a ellos.

-"Chino, no está bien que vayas por ahí molestando a la gente, nunca sabes cuando el cazador se puede convertir en presa."

Entonces por primera vez en mi vida vampírica, y de forma instintiva, mis colmillos se alargan a través de mis encías y mi rostro se contrae en una horrible mueca.

-"¡SSSSHHHHHSSSHHHHH!"

“El Chino” te mira con total terror, los otros hombres también, y sin chistar palabra pero notablemente muertos del miedo corren en dirección norte al bar. Nadie puede imaginar, por qué un hombre con su hermosa sonrisa lo ha ahuyentado.

Mientras observas como esos hombres corren algo de ti toma conciencia de que has adquirido poderes que te hacen superior...

Pero ¿a qué costo?...

Eres consciente que eres peligroso para todos aquellos a los que amas. ¿volverás a ver a tu hermano?, y si lo haces, ¿qué tendrás que hacer para no matarlo?

Los meses después de esto demostraron que tus miedos podían hacerse realidad. Seguías trabajando para tu sire, pero sentías que te faltaba algo,  tu inspiración ya no era la misma de cuando estabas vivo, esa chispa había muerto con tu abrazo.

El dinero y fama que ganaste posteriormente  a eso te satisfacía, pero, no parecía ser suficiente.

 A veces cuando te quedabas sólo sentías como tu alma se cuarteaba por dentro. No eras del todo feliz, y el vivir tu existencia eterna  de esa manera a veces te dolía.

La música era lo único que te mantenía en pie pero, tu vida se había  convertido en una canción  triste,  en una balada recordando eso que perdiste.

Deseabas muchas cosas, y por ambición ganaste la eternidad pero pusiste tu alma en juego.

Eres simplemente  la música de un alma partida...

FIN